Tres generaciones II: Mi mama

Después de la función que nos había proporcionado la abuela, fuimos a comer bueno casi a cenar era tardísimo, caminamos un rato y posteriormente regresábamos al hotel, mi abuela parecía no inmutarse, mi mama casi no hablaba, entonces llegamos a la habitación, mi abuela tomó su cama y se recostó diciéndonos que estaba agotada de este magnífico día.

Por el silencio que guardaba mi mama, lo que hice fue prender la televisión y creo que si verla porque todo el tiempo recordaba y me humedecía, de vez en cuando volteaba a ver a mi mama y la veía leyendo y me tocaba, tenía unas ganas de masturbarme espantosas; después de un rato, mi mamá rompió el silencio, y me preguntó que cómo me había parecido lo que habíamos visto hacer a la abuela, antes que me respondiera, yo le conteste que ella lo hizo por que lo deseaba y la verdad era su fantasía hecha realidad y que todos tenemos fantasías de todo tipo;

Me confesó mi mama que ella también tiene muchas fantasías, de momento ella sonrió y me dijo, me ayudarías a cumplir una, yo le dije que si.

Entonces me dijo que su fantasía en ese momento era practicar la llamada lluvia dorada, entonces me dijo que lo hiciera para ella, me tomó de la mano fuimos al baño, se desnudó, se metió a la tina de baño, y se recostó, por mi parte me desnude y puse mis pies sobre los bordos de la tina y me agache hasta dirigir mi vagina a su cara, al principio no podía, pero empecé a orinar, los chorros que salían iban a dar directamente en su boca y en su cara, y escurrían por todo su cuerpo, termine de orinar, ella me indico que me bajara, y como contorsionista echó su cuerpo sobre de ella quedando con las piernas arriba y su cabeza casi entre sus piernas, entonces e abrió de piernas y ella misma se orinó.

Al terminar de hacerlo se enderezo, me vio que yo estaba involuntariamente con mi dedo sobre mi clítoris, entonces me dijo acércate, me sentó en la orilla de la bañera, abrió lentamente mis piernas y con sus dedos separó delicadamente mis labios vaginales, y empezó a chuparme, la verdad lo necesitaba fue delicioso, nunca nadie me había chupado de esa manera tan rica, y tuve mi orgasmo; nos bañamos juntas, y no metimos las dos desnudas en la misma cama, mi abuela ni cuenta se había dado, y nos quedamos dormidas.

En la mañana temprano, nos levantamos y le dijo mi abuela a mi mama, ahora es tu turno y le paso la revista, mi mamá se sentó a hojear y entonces se puso de pie, se fue a llamar por teléfono, después de una larga conversación regreso y nos dijo ya está vamos.

Tomamos un taxi que nos llevó hacia una parte al sur de la ciudad, llegamos a un tipo de departamentos, mi mama tocó la puerta, nos abrió una muchacha muy joven y muy bonita, y nos dirigió hacia una estancia donde solo había una cama y un sofá, después de invitarnos a sentarnos a mi abuela y a mí, se llevo a mi mama.

Entonces de repente entro mi mama a la habitación, solo con una bata, entonces se la quitó y quedó completamente desnuda, ella empezaba a masturbarse, y de repente entraron dos tipos negros como de casi 2 metros de altura y solo portaban batas, eran enormes, entonces ellos solo veían que mi mama se estaba masturbando, de momento uno de ellos se le acerco, si quito la bata y no lo pude creer tenia un pene como de 30 cm, y súper ancho, mi mama lo tomo con su mama se acerco, su boca no era nada con ese pene, yo pensé que no iba a podérselo comer, pero ella empezó a pasarle la lengua por toda esa monumental tranca y de repente abrió la boca y ya estaba adentro.

Ella lo tomó con sus dos manos no podía creer pareciera que tocaba una gran trompeta, mi mama estaba súper excitada y cada vez más profundo se lo metía en la boca.

Después se recostó ella, el se puso a lamerle su vagina, entonces el otro negro se acercó y se quitó la bata, tenía un pene grandísimo igual que el otro y mi mamá sin decir nada se lo metió a la boca, hasta el fondo de su garganta, parecía un acto de circo de aquel que como espadas.

Después de un rato, uno de ellos se acostó, tenía esa tranca paradísima, mi mama se monto sobre de él, dándole las espaldas, tomó aquella masa de carne y la dirigió a la entrada de su vagina y de un solo golpe se sentó, desapareciendo toda totalmente dentro de mi madre, el otro se acercó y mi mama lo siguió mamando por largo tiempo, de repente al que le estaba mamando la verga mi mama, se puso de frente a ella, y empezó a empujar, quería metérsela en la vagina, pero como si ya tenía una enorme verga dentro de ella; entonces con mucho esfuerzo lo logro, mi mama puso una cara de dolor, sus venas se le saltaban de su cuello, y después de largo tiempo ambas trancas estaban dentro de ella, y ella se empezó a mover disfrutando todo ese tiempo.

Después de un rato, le sacaron los penes, y la pusieron en cuatro, uno la sujeto fuertemente, y el otro se puso atrás de ella, de un solo golpe se la introdujo en el ano, esta vez mi mamá pegó un grito tremendo, pero cuando pidió que despacio ya era tarde por que la tenia toda dentro de ella, parecía que sus nalgas iban a reventar en ese momento, su hoyito tan pequeño estaba dilatada al máximo, entonces después de un rato, se la saco y el otro tomó posición y la penetro analmente, esta vez solo hizo mi mama una cara de satisfacción.

Posteriormente uno se acostó mi mama lo monto, y el otro tomo su posición detrás de ella, y se la introdujo en el ano, la estaban haciendo una doble penetración.

Entonces entró la joven que nos había recibido ya desnuda y puso su vagina totalmente depilada en la boca de mi mama, la mamaba tremendamente, entonces el que estaba en el ano de mi mama, dijo que iba a eyacular, la muchachita se acerco a la espalda de mi mama, y en su boca recibió una descarga de semen impresionante, entonces tomaron a mi mama y la acostaron boca arriba, la joven se dirigió hacia mi mama, tenia todo el semen en su boca, le abrió la boca a mi mama y le dejo caer todo el semen dentro de la boca de mi mamá se comió todo lo que le escupía la chica en la boca de mi mama.

Entonces el otro negro empezaba a eyacular, y la joven nuevamente pero ahora acostada se preparó para recibir su eyaculación, abrió las piernas y el tipo de vino regando toda su vagina, el otro tomo a mi mamá e hizo que limpiara a la chica con su lengua, mi mama como aspiradora limpio perfectamente a la joven no dejando rastro alguno de semen, en ese momento mi mama se recostó de espaldas exhausta.

Mi mama tomo una ducha, la esperamos y salimos del lugar, al ponerme de pie me percate que estaba súper húmeda de haber visto todo eso; por su parte mi abuela nuevamente salió sonriente.