Capítulo 15

Alex día siguiente, me envió el mensaje de costumbre y lo llamé al cabo de unos minutos

  • Yo: hola mi amor
  • Alex: hola mi amor
  • Yo: ¿cómo fue?

Alex, me relato con todo lujo de detalles su salida con Patricia, aunque reconozco, que tuve un poco de celos, no me quedó más remedio que felicitarlo, después de su relato, pues estuvo fantástico

  • Yo: es increíble el poder de convicción y control que ejerces, me has puesto a cien
  • Alex: de eso se trataba, estoy pensando en ponerla a zorrear hoy, pero todavía no lo tengo claro como lo haré. Ya nos queda casi nada; pero el problema será tenerte tan cerca y no poder abrazarte y besarte
  • Yo: me alegro, ahora verás lo qué es sufrir, bobo. Te amo mi cielo
  • Alex: yo también te amo

En la noche, Alex me llamó, para contarme el día con esa puta a la qué tanto odio:

Alex: llamé a Patricia, ya eran las nueve de la mañana y supuse que el cornudo de su marido, ya habría salido a su día de golf

  • Alex: buenos días viciosilla mía
  • Patricia: buenos días mi dueño, he dormido super bien, como una bebé y todo gracias a ti
  • Alex: venga alístate que tenemos un día por delante, lleno de experiencias, me recoges en Bonanova
  • Patricia: estaba acabando de arreglarme y esperarme por si me llamabas

Cojonudo pensé, seguro que ya está mojada, la guapetona esta, a ver como viene vestida. Cuando llegó, estaba deslumbrante y elegante como era habitual en ella, me subí al coche, le pegué un morreo y arrancó. ¿has desayunado?, no, respondió, vamos hacia Barceloneta y a la Cova Fumada, dale

De camino, íbamos hablando y yo iba acariciando sus piernas, calentándola, más de lo que estaba ya, lo cual era mucho.

Cuando llegamos aparcamos en el subterráneo de la Plaza San Miguel y nos fuimos a la Cova, a pesar de que era temprano, siempre está lleno y nos pusieron en una mesa seis, en la que ya habían otras cuatro personas, dos en una punta y dos en otra, Patricia y yo nos sentamos uno frente al otro, pedimos unas bombas picantes, unos pulpitos plancha y una jarra de vino de la casa (que es muy peleón), mientras comimos, la pareja qué estaba a nuestro lado había terminado y se marchó, los dos hombres que quedaron, eran mayores y sin duda habían sido. Estibadores del puerto en su día.

Comenzamos a comer y en un momento determinado, alargué mi mano y le bajé la cremallera de la blusa a Patricia, metiendo mi mano en su teta; los dos tipos, nos miraron con cara de sorpresa y les dije: si queréis serviros vosotros mismos; dicho y hecho, el de mi lado se levantó y se pasó al lado de Patricia y ambos comenzaron a meterle mano con disimulo, para que nadie se diera cuenta, la manosearon de tal forma, que se corrió casi el instante, ahogando su orgasmo y apretando mi mano tanto, para no gritar, que me clavó hasta las uñas, coño me dolía la mano, pero mereció la pena. Terminamos de comer y le dije: paga y vamos; los hombres dijeron: de ninguna manera, hoy invitamos nosotros y salimos

  • Patricia: madre mía Alex ¿Cómo lo haces? Me has dejado sin habla, no lo esperaba.
  • De eso se trata en parte de la sorpresa y de lo inesperado, que nos pone la vida delante, para que lo aprovechemos. Baja al parking, que te espero en la salida, mientras pagas y sales voy a por tabaco.

Subí y salimos.

  • Mi niño, que miedo y vergüenza si me hubieran visto, que ansiedad, me ha entrado.
  • Pero ¿has disfrutado no?
  • Si, mucho ha sido algo Kafkiano, tremendo.
  • Eso es lo que cuenta a fin de todo, disfrutarlo, perrita mía. Ahora, tira hacia Sitges qué vamos a ver unos colegas, que te llevaran a la puerta del cielo y si quieres seguiremos adelante por senderos que no has explorado

De camino, llamé al gasolinero que se tiró a Irene, preguntándole si estaban trabajando, me respondió que sí.

  • Mira: os voy a traer la mejor jaca que habéis visto, en un rato llegamos

Durante el camino, me ocupé de que no le bajara el líbido en ningún momento; cuando llegamos le dije que aparcara y me esperara, me bajé y me fui al encuentro de ellos

  • Alex: hola colegas, mirar, estoy entrenando a una amiga de la del otro día, que le va la marcha, tanto o más que a la otra. ¿tenéis algún sitio donde os la podáis follar tranquilamente?
  • Gasolinero1: coño en el almacén
  • Alex: pues ir pasando y poneros en pelotas que os la traigo
  • Gasolinero2: darme un minuto, que pongo el cartel de cerrado por avería

Me fui al coche y entré

  • Mira Patricia, vamos a entrar, yo contigo y te presentaré a tres colegas, que son los encargados de llevarte a la puerta del cielo, puedes hacer con ellos, lo que te dé la gana y ellos contigo, jamás en tu puta vida, habrás gozado tanto

Patricia cerró el coche y nos fuimos al almacén, donde mis colegas estaban con su pollas de buen tamaño, en posición de presenten armas

  • ¡hala colegas, toda vuestra! Se acercó a ellos totalmente encendida, el que se había tirado a Irene, se fue directo a su blusa y de un tirón le rompió la cremallera, mientras otro hacía lo mismo con la falda.
  • Madre mía ¡qué cuerpazo! Ven aquí guapa que lo pasarás rebien.

Yo mientras encendí la cámara del móvil y me puse a grabar sin perder detalle

Le echaron encima de unas cajas rotas y ella chupaba alternativamente sus pollas, en algún momento tenía dos dentro de su boca, ellos le arreaban de lo lindo en el culo, pechos y pezones, tirándole del cabello y provocándole un orgasmo de la leche

Mientras uno se la metió en el coño y la bombeaba duro, otro se la endiñó por el culo, dando ella un grito colosal y se la chupaba al tercero.

  • Rómpeme madre mía, que gusto, dame más fuerte, soy vuestra, folladme cabrones, me encanta, decía con la boca llena de polla.
  • Cuando noté qué los tíos iban a correrse, le dije al de la boca, hacerle un triple, una polla en el culo y dos en el coño, que se entere bien de lo que es una buena follada, esta perra, ni por asomo puede imaginarlo.

Se acomodaron bien y metió su polla, junto la de su colega dentro del coño de Patricia, no hacía sino jadear de tal forma, que pensé que le daría un “yuyu” tuvo varios orgasmos seguidos.

  • Ellos le decían de todo, ¿a qué te gustan nuestras pollas, puta? Cuando quieras más, le dices a nuestro colega que te traiga y nos tendrás a punto para ti, puta fina. Se corrieron dentro de ella y Patricia, alcanzó el mejor orgasmo de su vida.
  • Se levantaron y le dijeron: si quieres ahí tienes una ducha, vas pringada con toda nuestra leche; ella mientras estaba intentando recuperarse de las maravillas que le habían hecho, durante más de una hora
  • Dale, voy a buscarte jabón, pasta de dientes y elixir bucal, ve dándote un agua mientras; dame pasta para pagarles a los colegas.
  • Coge mi bolso, no tengo fuerzas madre mía, qué gustazo; tomé el bolso, salí y vi qué llevaba un montón de pasta, pero un montón, tomé tres mil pavos para los colegas y otros tres mil para mí, por gastos de entrenamiento y gestión
  • Tíos habéis estado geniales, tomad os lo habéis ganado. Joder tío que pasada de tía, nunca habíamos visto nada igual, aparte de buenísima, es como una leona, se come todo lo que le den. Tráela de nuevo cuando quieras
  • Ya veremos, porque ando muy ocupado entrenando a esta y tengo dos más en lista de espera, dejar que me organice y os digo; por cierto, darme gel, pasta de dientes y elixir bucal, que no tengo ganas de morrearla, con sabor a vuestras pollas.
  • Jajaja, rieron, toma invita la casa.
  • Regresé y le di todo a Patricia, para que se arreglara como pudiera. Te espero en el coche.

Salió al rato, más o menos impecable, pero caminando como una señora, a pesar que tenía la falda y la blusa rotas; saludo a los colegas de lejos lanzando un beso al aire y nos marchamos.

De camino solo hacía que decirme: nunca, nunca hubiera imaginado tal gusto y placer; me dió las gracias, hasta veinte veces, mientras yo le metía mano de nuevo, en un semáforo a la entrada de Barcelona, paró y me dio un gran morreo diciendo:

  • Mi niño, soy tuya, para siempre, haré todo lo que quieras y hazme lo que quieras, soy tu puta para siempre. Tengo que ir a casa a cambiarme, tengo una comida en el Club, pero no puedo ir así (dijo recuperando el sentido común), vamos, el servicio hoy y mañana tiene fiesta, no habrá nadie.
  • Llegamos a un enorme casoplón de la zona de Pedralbes, entramos y mientras yo miraba y me tomaba una cerveza que me puso, ella fue a cambiarse. Momentos después, entró un bellezón de los que paran el corazón.
  • Hola, soy Almudena ¿y tú? Cuando iba a responder apareció Patricia, diciendo:
  • Es Alex, el hijo de unos amigos del Polo, nos hemos encontrado cuando yo venía a casa a cambiarme, le he dicho que se viniera y que al salir lo dejaba en Bonanova, cerca de su casa
  • Almudena: genial mamá, así me dejas también a mí en Mandri

Vi a Patricia por primera vez insegura, creo que tenía la sensación de que iba a abordar a su hija, cosa que jamás se me pasó por la cabeza.

Ya en el coche cedí la plaza del acompañante y Almudena y yo me senté detrás de Patricia para ir charlando tranquilamente, durante el trayecto Almudena comentó que iba a ingresar en la Universidad de Deusto para estudiar ciencias económicas yo le respondí: que casualidad, yo ingreso también en Deusto para hacer el doble grado de derecho y economía. Almudena se rió con mucha gracia; mientras hablábamos yo le metía mano a Patricia, por el lado de su puerta, de forma qué su hija no podía darse cuenta y la verdad es que se me puso dura de hacerlo. Yo le comenté que mis padres se habían empeñado en que me alojará en un colegio mayor al menos durante los dos primeros años para qué tuviera una rutina de disciplina en mis horarios.

Almudena también me dijo lo mismo que sus padres habían decidido que estuviera en un colegio mayor con lo cual era un latazo, pero es lo que había.

Intervino Patricia diciendo, que era lo lógico puesto que éramos muy jóvenes y teníamos que aprender a tener una rutina y una disciplina sobre todo horaria si no estábamos en casa.

Llegamos a Mandri esquina Bonanova y Almudena se bajó, nos despedimos y yo continué con Patricia en el coche hasta Ganduxer.

  • Patricia: me has puesto nerviosísima eres un verdadero demonio, por un momento pensé que Almudena se daría cuenta de que me estabas metiendo mano.
  • Alex: no se ha dado cuenta para nada, pero estoy seguro que te has puesto de un cachondo tremendo, mira le dije metiendo las manos bajo su falda y metiendo los dedos en su coño. Chupa perra y disfruta de tus jugos. Es lo que intento enseñarte: vas a aprender en cualquier situación, por inesperada que sea, que puedes disfrutar

Me bajé del auto no sin antes darle un soberbio morreo y un apretujón a sus pechos, diciéndole:

  1. Miro a ver si nos podemos ver esta noche, porque mañana me voy a Cadaqués, luego te llamo chao zorra. Chao mi cielo te quiero

Después de comer Alex, me envió nuestro sms y le llamé

  • Yo: hola mi amor ¿Cómo estás? Supongo que agotado ¿no? Jajaja
  • Alex: hola mi vida (el hecho que el me llamara mi vida y yo a él, mi amor, reafirmaba mis sentimientos hacia Alex), sí, la verdad que sí, porque tengo que hacer un esfuerzo mental considerable, con el asunto de Patricia, al principio, parecía muy señorona, pero tardó en desenmascararse cinco minutos, madre mía ¡qué loba!, esta debía de las más reprimidas de las monjas, pero es una verdadera ninfómana. ¿has visto las imágenes? Después de verlas bórralas
  • Yo: por supuesto las he borrado ya. Es cierto lo que dices, había que ver como se los devoraba a los tres a la vez, si en lugar de mujer, yo hubiese sido uno de ellos, me hubiera echado a temblar, parecía caníbal, como se los comía, alucinante. Parece mentira que el ser humano tenga escondidas esas actuaciones.
  • Alex: si, indudablemente toda una devoradora, debe tener la testosterona por las nubes, menos mal que se hizo ligadura de trompas, que, si no, esta se queda preñada seguro, me dijo que se la hizo sin saberlo el marido, ¡que golfa!
  • Yo: ya te dije, que era la peor de todas y además me fastidiaba porque iba de santa y misa diaria, aunque nunca contaba sus amoríos con detalle, siempre insinuaba que los tenía, vamos lo que se dice: una media virtud
  • Alex: si, es de armas tomar, luego al acompañarme a casa con su hija, le he estado metiendo mano desde el asiento de atrás en el coche y casi se corre, brutal
  • Yo: ¿luego la vas a ver?
  • Alex: no sé, puede, depende de si mis padres, me dejan salir, para despedirme de mis amigos o no, pero ya me lo montaré. Además, te confirmo, que nos ha pagado una cena a nosotros
  • Yo: ¿Cómo qué nos ha pagado una cena? ¿no habrás…?
  • Alex: para nada tranquila mi amor, les ha pagado a los gasolineros mil eurazos a cada uno y a mi tres mil, por la ayuda. IMAGÍNATE
  • Yo: madre mía, la tienes totalmente dominada ¡qué maravilla, como me gusta!, bueno cielo, ya estoy esperando. Mañana con ansias, no sé si podré reprimirme cuando te vea
  • Alex: ni yo, te amo mucho mi cielo, mañana te cuento cuando nos veamos

Alex, esa tarde, habló con sus padres, para salir y despedirse de sus amigos, pues no los vería en todo el verano, debido que saldrían hacia Cadaqués, sobre las diez de la mañana, le dieron permiso

Este granuja, lo que no me dijo, es que mantenía al corriente a los dos demonios de Andrés y Manuel (me enteré después), menudo trío de cuidado y de armas tomar.

Alex, llamó a Patricia sobre las cuatro y media y le dijo:

  • Alex: ¿Cómo va mi zorra preferida?
  • Patricia: muy bien cariño, muy relajada, sin tensiones, ni nervios ¿te paso a buscar?
  • Alex: no, ¿Dónde estás?
  • Patricia: saliendo del club ¿por qué?
  • Alex: ahora te digo. Cuelga que te llamo en diez minutos

El muy granuja, llamó a Paco y Jaime, los dos guardias de seguridad del Club

  • Alex: epa, Paco, ¿Cómo estáis? ¿por casualidad no estaréis en el Club?
  • Paco: hombre Alex, ¿en qué te podemos ayudar amigo?
  • Alex: Si estás con Jaime y estáis solos pon el manos libres, que os explico
  • Paco: si estamos solos y te escuchamos los dos
  • Alex: os lo voy a explicar bien, atentos: una de las pijas del Club, puede que el mejor pibón que hay ahí y quizás la tía más buena que habéis visto en vuestra vida
  • (me interrumpió Jaime); no jodas ¿qué es la del Maserati?
  • Esa misma, resulta qué es amiga de la que os follásteis el otro día y con que las tías son tan bocazas, Irene se lo contó a esta y a resultas la estoy educando también, así que os diré lo que tenéis qué hacer, sobre todo no os la folléis hoy, eso lo guardamos para otro día, que solo os haga unas buenas mamadas.
  • Tío Alex (los dos a la vez), eres la reostia, un día nos tienes que enseñar como lo haces. Trato hecho, respondió Alex.
  • Hacerlo de improvisto, como algo natural, que no os vea venir, cuando vaya a abrir su coche ayudarla abriéndole la puerta y en cuando se siente, el que sea de los dos, con una mano le mete mano en las tetas y con la otra le gira la cabeza y le planta un morreo, después de ello me juego el cuello a que os mete una mamada espectacular, darle duro en los pechos que le encanta, es una perra de cuidado, os va a dejar más secos que unas uvas pasas.
  • No nos jodas tío ¿en serio?
  • Totalmente en serio, además cuando acabes os soltará quinientos pavos a cada uno por la mamada; ya veréis. Yo ahora os la preparo, pero no le diré nada de nada qué hemos hablado, ni qué sabéis nada, sobre todo discreción, luego me llamáis y me contáis.
  • Seguro, cuenta con nosotros
  • Acto seguido, llamó a Patricia de nuevo: perdona, es que llamó mi padre, disculpa, ya estoy contigo.
  • No importa mi niño, estaba pendiente de tu re llamada.
  • Hay algo que se me olvidó, si alguna vez alguien te acosa, te dice algo, te mete mano, no lo rechaces, aprovecha, pero con la obligación de contármelo luego, si no me lo cuentas te arrepentirás, ya sabes qué desde el primer momento, hablamos de sinceridad ¿correcto?
  • Si mi amor, es correcto, haré lo que tú dices, te lo contaré.
  • Pero como todas las putas y zorras, que eso es lo que eres ¿a qué estas mojada ya?
  • Madre mía como me conoces, mejor que mi marido y que nadie.
  • Deja al cornudo, que juegue golf, atenta: te decía que, como todas las putas, tienes que tener una tarifa, una polla chupada quinientos euros, dos: mil euros, follar coño o culo mil euros ¿te queda claro? A quien sea le pagas por su esfuerzo, pues eres tú al fin y al cabo la que necesita rabo.
  • ¿Claro? Si, claro mi niño.
  • Está bien, pero solo puedes hacer eso sola, siempre y cuando yo no esté y te dé permiso antes, solo para ese día. ¿Ok, zorra?
  • Si, mi amor.
  • Luego me llamas y me cuentas, sobre las siete y si puedo salimos al cine ¿quieres venirte al cine conmigo?
  • Claro que sí, me hace mucha ilusión ir al cine contigo. Además, no tengo prisa en regresar a casa, mi marido se ha quedado en el Golf del Ampurdán, en el hotel y no vendrá hasta mañana por la tarde, porque se ha clasificado con su pareja de equipo, para la final y Almudena, se queda en casa de una amiga.
  • Ok dale zorra, espabila, y pórtate bien que te dejo sola porque tengo confianza en ti

Los guardias Jaime y Paco, más tarde le contaron a Alex:

Cuando la vimos que salía hacia el coche, estábamos esperando ya por el parking, pues tenía el coche en la zona de los árboles, como haciendo la ronda Paco, se adelantó y le dijo:

  • Paco: permítame señora que la ayude
  • Patricia: ¡ay! Muchas gracias, que amable
  • Paco: en el momento, en que se sentó y antes de que cerrara la puerta: perdone señora puedo preguntarle algo: sí, claro por supuesto, contesto con cordialidad. ¿Cómo es qué está usted tan buena? Mientras le metía la mano en la teta y la besaba. Por qué está usted muy buena ¿lo sabe?
  • Patricia: cuidado, no nos vaya a ver nadie
  • Jaime, había entrado por la otra puerta, no te preocupes bombón que no viene nadie, tu tranquila, mientras le metía la mano debajo de la falda y los dedos dentro de su coño, ya empapado
  • Mientras Paco le decía, tienes una carita de chupapollas increíble, nos has estado calentando con tus meneos y justo es que nos des una compensación, dijo esto, mientras se sacaba su polla, frente a la boca de Patricia, quien sin añadir nada, comenzó a chupársela con frenesí, mientras Jaime la acababa de desabrochar y le había subido la falda metiéndole cuatro dedos dentro de su coño y la azotaba mientras le decía: te va la marcha, guarra, un día de estos te follamos
  • Folladme ahora, cabrones romperme el culo ahora.
  • De eso nada, a una señora, hay que follarla y culearla en la cama bien follada le decía Paco mientras se estaba corriendo en su boca, ¿verdad puta? Contesta ¿verdad?
  • Si, verdad.

Cambió de posición y girándose hacia el asiento del acompañante, donde estaba Jaime, tomó la polla de Jaime con la misma pasión que la de Paco, per Jaime le agarró la cabeza y le folló la boca, provocándole hasta arcadas, quq fueron superadas, mientras Paco le trabajaba el culo a base de bien, cuando Jaime notó que él se iba a correr, sacó su polla de la boca de Patricia y se corrió en su cara, pecho y ropa, dejándola totalmente pringosa, ella había tenido varios orgasmos brutales (decididamente es multiorgásmica, aparte de ninfómana) se subieron los pantalones y Patricia, recordando mis instrucciones les dijo:

  • Esperar chicos, tomad por las molestias y muchas gracias.
  • Gracias a usted señora, respondieron, no olvide que nos debe una follada en la cama.
  • No, no lo olvidaré, me encantará. Arrancó el coche y salió hacia su casa, a esperar la llamada de Alex

Sobre las siete de la tarde la llamó Alex y le dijo que no le dejaban salir sus padres (la verdad es que se marchó con sus amigos a despedirse de ellos)

  • Patricia: ¿así no nos veremos?
  • Alex: no, yo, al igual que tú también tengo vida social, no, no puedo
  • Patricia: bueno, no te enfades, perdona, que me había hecho ilusiones, de que estuviéramos juntos esta noche.
  • Alex: para nada, he quedado con los amigos, otro día será, no te preocupes, si yo no puedo bajar desde Cadaqués, te aviso con tiempo y te subes tú. ¿te parece?
  • Patricia: por supuesto, me encantaría. Un beso ni niño
  • Alex: un beso y un lengüetazo en cada teta, zorra mía

Alex, se cambió y se dispuso a salir, hasta Cinesa Diagonal, donde había quedado con sus amigos, qué es una zona donde los jóvenes suelen reunirse, para salir de farra; estuvo tomando unas cervezas en la llamada ruta de la cerveza, que parte desde ahí, hacia Mestre Nicolau, sube por Santaló y desde ahí van a rematar a los bares de Mandri hasta al Bar-Bero, donde cuando llegan, ya van finos. Alex, no suele beber mucho, pues he visto que el muy granuja, aunque pide siempre cerveza, solo da dos o tres sorbos y luego la tira (será demonio). Después de recorrer la ruta, acabaron en el Bar-Bero, donde por casualidades de la vida se encontró con Almudena, un poco pasada de copas, quien cuando vio a Alex lo llamó:

  • Almudena: Alex, mi compa de «uni”, ¿Qué haces por aquí? Y le dió dos besos a Alex
  • Alex: ya ves, echando unas birras con los colegas, a modo de despedida, ya os dije que mañana me voy a Cadaqués a currar todo el verano, antes de la “uni”
  • Almudena: ojalá, me pudiera ir yo a currar en algo, porque me imagino el rollo de verano como cada año, con mis padres y mis abuelos en Begur
  • Alex: pues estamos cerca ¿no? Podremos vernos algún día, sería genial (lo de genial, me confirmó Alex después que lo dijo sinceramente, la verdad es qué, la chica es un bellezón, que bien guiada y educada, sería la esposa perfecta para Alex, en el futuro, eso sí, siempre él será mío, mío, aunque se case)
  • Almudena: si, sería una forma de librarme de mis padres y disfrutar un poco (iba tan bebida, que no se dio cuenta que se le había abierto un botón de la blusa y se le veía el sujetador, que escondía unos pechos no muy grandes, pero seguramente muy firmes

Mientras conversábamos, se acercó, un idiota de la cuadrilla de Almudena, diciéndole:

  • venga tía, que nos vamos a un bar de Muntaner, Almudena le respondió que no tenía ganas y además estaba hablando conmigo, el idiota, siguió insistiendo y la agarró del brazo: venga vamos
  • Alex y dos de sus amigos que estaban con él intervinieron: te ha dicho que no o es que no entiendes, que cuando una mujer dice no es no ¿o es qué quieres tener problemas con la policía? Y arruinarte la vida. Imbécil.

El idiota, respondió con chulería diciendo: anda y que te den pija de mierda y se marchó

  • Almudena le dió las gracias a Alex y este le dijo: Has tomado un poco de más ¿Por qué no te vas a casa? Si quieres, para que no te vayas sola te acompaño en un taxi y luego me regreso yo con el mismo taxi.
  • Vale respondió Almudena, más alegre de la cuenta, por lo que había tomado

En el taxi, recostó su cabeza sobre el hombro de Alex y mientras este le acariciaba el cabello

  • Almudena le dijo: que suerte, que estés también en Deusto, ya verás, estudiaremos y encima nos lo pasaremos bien y besó a Alex tierna y vergonzosamente, a lo que Alex le respondió con dulzura y delicadeza, metiéndole la mano y sacándole un pecho, comenzó a jugar con él, mientras la besaba; se le notaba la inexperiencia, pues no sabía besar muy bien, solo repetía con su lengua lo que Alex le hacía, yo creo que si llega a llevar falda, Alex le hubiera metido la mano, seguro. Llegando a su casa, le dijo que se abrochara y le dio un tierno beso en los labios. Bajó y llamó al timbre.
  • Patricia respondió: ¿Quién es?
  • Soy yo Alex, me he encontrado con Almudena y la he acompañado, para que no viniera sola.
  • Patricia abrió rápidamente ¿Qué ha pasado?
  • Nada tranquila, me la acabo de encontrar en Mandri y sus amigos la querían obligar a irse con ellos a beber y ella no ha querido y unos amigos y yo nos hemos metido, para que la dejaran en paz y la he acompañado, nada más eso, te lo aseguro, palabra de honor. La palabra “palabra de honor” convenció a Patricia, de que no había hecho nada con su hija.
  • Alex, dijo Patricia: entra que pago el taxi y yo te llevo en cuanto se acueste Almudena (a esta perra de Patricia, se la jugaba el subconsciente, no estaba dispuesta a dejarme marchar solo, aunque su hija iba bastante bebida, increíble). Pagó el taxi y entramos; acompañó a Almudena a su habitación y esta al alejarse, se dio la vuelta gritando
  • “viva mi salvador, olé” “grandeee”

Al cabo de unos momentos salió Patricia, con los ojos llorosos.

  • Ese, es el miedo que tenemos, que, en Bilbao, le dé por beber, no estudiar y se pierda. Te pido por favor, dime la verdad: ¿has hecho algo con Almudena?
  • ¡Estás loca, imbécil, te he dado mi palabra y para mí, mi palabra es ley, no te lo repetiré nunca más, tu hija es demasiado inocente y cándida, que hacerle algo le jodería la vida, es más si alguien le hace algo, solo que la mire mal, se las verá conmigo!
  • Amor mío, no sabes lo que me tranquiliza, que estés en Deusto con ella, es lo más hermoso de mi vida, cuídamela por favor, no me importa nada, ni siquiera mi marido, solo me importa ni niña, es mi razón de vivir, me decía llorando.
  • No te preocupes, estaré pendiente de ella siempre, no tendrá ningún problema, garantizado, siempre y en todo momento la cuidaré.
  • Amor, si estos días te he dicho que haría lo que tú me digas, pues me estás enseñando los placeres más ocultos, (Alex mientras me abrazaba y me besaba tiernamente, mientras le desabrochaba la bata que llevaba puesta) ahora te juro que soy tuya, totalmente tuya, que hagas conmigo lo que quieras y yo haré todo lo que tú quieras amor mío. Alex la recostó en el suelo y para que ella notara la diferencia con el sexo duro de vicio, la acarició dulcemente, le ordenó:
  • No te muevas, ni me toques, no puedes tocarme si me tocas me voy. Comenzó a lamer su imponente cuerpazo, comenzando por el cuello y fue bajando hacia los pezones, dándoles suaves pero contundentes mordiscos, sus ingles y por fin, metiendo su lengua, hasta el fondo de su vagina, mordisqueándole el clítoris; tal era el grado de excitación de Patricia, que sujetó a una mesa para no tocar a Alex, cuando tuvo un profundo orgasmo, que casi la hace levitar de placer. Alex comenzó a jugar, acercando y alejando su polla de la boca de Patricia, quien intentaba alcanzarla, para que se quedara en su boca; solo la lengua puta, solo la punta de la lengua; le pasaba la punta de la lengua por la punta de la polla de Alex o de cualquier parte de este que estuviera a su alcance; Alex, le puso su culo al alcance de su lengua y lo mismo, le pasaba por el ojete del culo la lengua a Alex, provocando que este, la animara a meterla dentro y chupar y así lo hizo; cuando Alex se dio cuenta que iba ella correrse, la hacía parar diciéndole: todavía no, espera yo te aviso y así la tuvo más de una hora implorando que la dejara tocarle y correrse; hasta qué, llegó el momento en que Alex notó, que era él, quien se iba a correr, fue cuando la liberó, se dió la vuelta y apuntándole a la cara le dijo: ahora puedes correrte cuanto quieras perra, Patricia se corrió de forma impresionante, por primera vez en su vida, sin haber sido penetrada, ni chupando ninguna polla, lo cual hizo que fuera un orgasmo más que sensacional, un nuevo descubrimiento para ella, sería difícil que alguien más la complaciera tanto como Alex. Alex, se corrió, procurando que ni una sola gota de semen acabara dentro de la boca de Patricia, si no esparcido en su cara y su cuerpo, lo que, en su desesperación de ella, por conseguir tomar la leche de Alex, le provocó un nuevo orgasmo, tan bueno como el anterior

Alex, le pidió dónde estaba el baño de visitas y se marchó a lavarse, cuando regresó, todavía Patricia estaba en el suelo frotándose el cuerpo, la cara y metiéndose en la boca el semen de Alex.

  • Venga levanta y llévame a casa zorra, que acabas de recibir una clase magistral; ella, se levantó y dijo:
  • voy a vestirme.
  • No, no te vistas, ponte la bata solamente y vamos;
  • voy mi amor. Se puso la bata, fue a sacar el coche del garaje y cuando subió Alex, ella le dijo: mi vida, no quiero que te lo tomes a mal, por favor, te vas a Cadaqués a trabajar ni niño y seguro que tus padres no te darán mucho dinero, para qué no salgas, toma, para cuando salgas, te diviertas; (Alex luego en casa lo contó, seis mil euros) si necesitas más, dímelo y te lo subo yo, así de paso podremos estar juntos, no me hace ninguna gracia, tener que estar sin verte, necesito verte, necesito tus cariños, abrazos y besos. se subieron al coche y salieron dirección a casa de Alex.

Cuando llegaron al portal de Alex, fue a darle un beso y este la detuvo:

  • No aquí no.
  • Perdona, dijo ella, es cierto estamos en el portal de tu casa. Alex le respondió:
  • te he dicho aquí no, refiriéndome a dentro del coche, sal del coche y acompáñame a la puerta, desnuda sin la bata, solo con los zapatos y te quiero ver hacerlo, muy digna y señora.
  • Madre mía Alex, me estoy excitando otra vez, no sé cómo lo consigues ni niño, es terrible, me encanta. Dicho y hecho, abrió su puerta y salió totalmente desnuda caminando como lo que es, una modelo fantástica; Alex por primera vez en esa noche, le dejó que lo tocara, la besó y con fuerza le mordió la lengua, provocando un grito de dolor en Patricia, diciendo:
  • Este mordisco, es por hablar de más, dudando de mi palabra al respecto de Almudena, yo a tu hija la respeto y la respetaré, aprende y haz caso siempre de lo que yo te diga.
  • Perdona mi amor, perdona, con lágrimas en los ojos del dolor, siempre te haré caso en todo, te lo juro; Alex la besó de nuevo, esta vez tiernamente y le dijo, vete a casa, pero no te pongas la bata, conduce desnuda y si alguien te ve o te dice algo, solo por esta noche, repito solo por esta noche, te dejo que te lo folles, con la condición de que me lo explicaras y dirás toda la verdad. ¡ah! y me llamas cuando llegues, para saber qué has llegado bien y me cuentas como se encuentra Almudena, iba bastante bebida y no es bueno que beba tanto, pues le puede pasar cualquier cosa mala.
  • Te quiero mucho mi niño, te llamo en cuanto llegue a casa, te prometo que lo haré, se metió en el coche nuevamente excitada. Sobre las dos de la madrugada, me envió un mensaje: “ya estoy en casa”, ¿te puedo llamar?
  • Alex: yo te llamo, dime zorrita
  • Patricia: ya te echo de menos
  • Tanto qué has tardado, más de una hora en llegar a casa, ¿Qué te ha pasado?
  • Iba conduciendo desnuda, como me has ordenado y al llegar al semáforo de la esquina con Vía Augusta, se ha puesto en rojo y se han parado a mi lado dos chicos con una moto pequeña, que aparte de guapa y tía buena, me decían de todo y más: ¿dónde vas mamacita? te ayudamos en lo que haga falta zorra y si necesitas dos pollas jóvenes, aquí estamos nosotros; el que iba detrás sentado, se bajó y se acercó a la ventanilla y la bajé, no ha tardado ni un segundo en meterme mano en los pechos y besarme. Me ha dicho: abre la otra puerta, ha dado la vuelta y ha entrado diciéndome: arranca y nos vamos con mi amigo a hacerte compañía, mientras le decía a su amigo: síguenos. No sabía dónde ir, he seguido recto hacia Can Caralleu; para aquí mismo, en una zona con poca luz, mientras me metía mano y besaba y comía la boca, como si estuviera hambriento
  • Su compañero ha bajado de la moto, ha abierto la puerta de mi lado, me ha cogido la mano y me ha hecho salir del coche; a partir de ese momento, han comenzado a tocarme y besarme, yo me he excitado muchísimo, me han metido sus manos por todas partes y dado cachetes en mis pechos y la cara, pellizcado los pechos; chupa mamaíta, come. Me he acostado en el suelo y uno me ha penetrado mientras se la chupaba al otro. Madre mía mi niño, que delicia, creo, que me he vuelto una adicta al sexo.
  • Alex le respondió: eso es lo mejor, el sexo imprevisto, de cualquier tipo, porque, el meterla y sacarla solo no contiene alicientes, es aburrido, si, tienes un orgasmo, pero nada más, no te llena y esto sí, no es cuestión de adicción, es que estás descubriendo poco a poco un mundo que también existe y que la pijería posturera, ni tiene noticia de ello. Sigue.
  • Me he corrido varias veces, no sé cuántas, ahora mismo me estoy masturbando mientras te lo digo.
  • Para y no lo hagas, le dijo Alex, lo haces después cuando acabes de hablar conmigo. Sigue.
  • Al otro, me he dado la vuelta y le he incitado que me la metiera por el culo, que vigor y potencia tenía ese chico, me ha llenado toda, he sentido la leche caliente de los dos dentro de mí, ha sido fantástico, maravilloso.
  • ¿Lo ves? Cuando te digo, que tienes que aprovechar ahora y no, cuando seas vieja y decrépita, tienes un cuerpazo y una cara, que poquísimas mujeres tienen, coño aprovecha.
  • Tienes razón mi niño, no sé cómo no me había dado cuenta de que existía este mundo, gracias mi niño. Te amo muchísimo, te amo muchísimo.
  • Anda zorra, hazte una paja y vete a dormir. ¿por cierto? ¿tienes algún vibrador en casa?
  • Si, tengo uno pequeño ¿Por qué? Cógelo y te lo metes bien adentro por detrás y desde hoy duermes con él puesto.
  • Ya me dirás. Yo también te quiero zorra mía.
  • Así lo haré, ahora lo busco y lo hago. Cuídate en Cadaqués y cualquier cosa me llamas. Te quiero mucho