Capítulo 13
El primer día, me marché a Viadurini, a encargar un cambio completo de mi habitación de matrimonio, elegí colores y tipo de mobiliario, con cama King Size, para ello les llevé los planos de la habitación y me dijeron que me avisarían para pasar por casa a ratificar medidas, seguramente el miércoles por la tarde.
Le avisé a Alex cuando me dijeron y esperamos que vinieran a tomar medidas; lo presenté como mi hijo (Alex alucinaba, por lo que me iba a gastar) cuando se fueron, hicimos el amor maravillosa y dulcemente, sin estridencias.
Esos días estuve yendo a la oficina a ponerme al día, tan solo mi secretaria (que la recuperé, pues es de plena confianza para mí, se atrevió a hablarme claro)
- Secretaria: no te voy a decir, sino tan solo una cosa: ya era hora, que tomaras esa decisión y punto
- Yo: gracias Marta, así es, más vale tarde que nunca
El jueves, me avisó mi padre, si podría acompañarle esa noche al Club a la cena de entrada del verano, por supuesto le dije que sí.
Hablé luego con Alex y me dijo qué ellos iban a asistir también (no comprendí, que ese “ellos” contenía algo misterioso), pues creí que se refería a sus padres y hermana, luego me enteré, desde luego: los mataré a los tres, lo dicho, los mataré.
Dado que Alex, me dijo que asistiría, me puse uno de mis mejores vestidos, muy elegante, sin ninguna extravagancia, pero al mismo tiempo, para mi gusto algo extremado.
Y sorpresa, cuando llegamos con mi padre, ahí en primera fila, estaban los agentes y sicarios de Satán, Andrés y Manuel (nombres ficticios), esperándome como buitres. Mi padre los saludo efusivamente, dándoles las gracias por su inestimable ayuda y yo les di un abrazo fuerte, murmurándoles al oído: “os vais a cagar sanguijuelas” jajaja
Cenamos y después de la cena, la consabida salida a los jardines, para tomar las copas; me di cuenta qué, las dos sanguijuelas, estaban hablando divertidamente con mi padre y otros señores, entre ellos estaba el padre de Alex y me temí lo peor, pero por compostura me mantuve con el grupo de ratas que tenía por amigas, como de costumbre, procurando estar cerca para ver si me enteraba de algo de lo que hablaban
En un momento determinado, el padre de Alex, lo llamó e incorporaron a Alex a sus conversaciones; algo se tramaba y no sabía el qué. Estuvieron hablando largo rato y parecía que discutían, pero algo no cuadraba, pues conozco de sobras a esos dos demonios y el que estuviera Alex con ellos, no podía ser buen augurio.
Mi padre me llamó: hija ¿tienes un momento por favor?
- Yo: dime papá
- Pa: mira, tú que tienes confianza con José y con su esposa María (los padres de Alex), (María se había incorporado antes que yo a la conversación), estábamos hablando de la juventud de hoy en día con José, me ha comentado que su hijo, va a ingresar en Deusto (Alex, ponía cara de circunstancias, desde luego se ganaría el Oscar al mejor actor) a estudiar la Centenaria, resulta que a Andrés y Manuel, se les ha ocurrido proponerle a Alex un trabajo de verano en una de sus empresas de alquiler de lanchas; primero para que vea como es la estructura de funcionamiento de una empresa y luego para que se gane un dinerito, para cuando ingrese en Deusto, ¿qué te parece?, se quedaría en nuestra casa, (hay sitio de sobras), así no interfiere en la vida cotidiana de Andrés y Manuel y aprendería. ¿te parece bien?
- Yo: (vaya contubernio que se han montado los tres y ahora convencen a mi padre, que pobre acaba de proponer meter al lobo a cuidar las gallinas); claro que si, por supuesto, será una experiencia fantástica de poner en práctica conocimientos (la intención en que lo dije, no les pasó inadvertida a ninguno de los tres), será muy provechoso ¿Qué problema hay?
- Padre Alex: que Alex, dice qué se le fastidian las vacaciones, pero todos le estamos diciendo, que es una muy buena oportunidad de comenzar a volar solo
- Yo: (sonriendo) Alex, conozco a tus padres, desde antes que nacierais tú y tu hermana y somos amigos, te aseguro, que no te arrepentirás, trabajarás, aprenderás y disfrutarás, ¡tres en uno como el spray! Jajaja, rieron todos
- Alex: bueno vale (dijo con cara de resignación) de acuerdo.
- Padre Alex: sabia decisión hijo mío, anda ve que luego hablamos
- Alex: ruego me disculpen, por favor
- Pa: tus hijos, dan gusto lo educados que son, habéis hecho un gran trabajo de padres, felicidades.
En el transcurso de la noche, en un momento dado, aprovechamos para quedarnos los cuatro un poco apartados de los demás y comencé yo la bronca:
- Yo: sois de lo qué no hay, esto lo habéis preparado a conciencia, vosotros dos demonios y encima con la colaboración de este cara de niño, que parece no haya roto un plato, si no es más diablo que vosotros es como mínimo igual, este es descendiente directo de Maquiavelo, pero Dios mío, como sabéis hacerme feliz. Gracias
- Todos: nos reíamos tanto, que casi todo el mundo nos miraba
- Andrés y Manuel: mira guapita de cara, ya te dijimos que pensaríamos en algo; además, nos da la nariz, qué este puede ser el mejor verano de nuestras vidas, primero: por verte feliz, segundo, por qué hacemos un buen equipo los cuatro, con lo cual, la marcha está garantizada y tercero: pero no, por último, porqué bien podría ser el primero, porqué vosotros dos habéis conseguido traer la felicidad a este par de viejos decrépitos, así que hemos tramado esto por qué estamos seguros que, estáis hechos uno para el otro.
- Andrés: vamos a hacer las cosas bien, hemos quedado con tu padre, que mañana por la mañana, nos enviarás copia de tu d.n.i., para hacerte el contrato (aquí somos muy legales en todo), se partían de la risa y que el fin de semana te subirías con el papá de xxx y con ella, además tu papá (mi padre), nos ha pedido que te convenzamos, para incorporarte al despacho, después del verano, que te hagamos entrar en razón, ya que así tu madre no se queda sola; así que ya sabes guapa, el viernes te largas a Cadaqués hasta el final del verano, ¿te enteras? Menudas fiestas nos vamos a correr
- Yo: sois un atajo de cabritos, manipuláis a la gente como os da la gana, hasta el santo varón que es mi padre, granujas, demonios
- Yo: ¿y tú, Alex te ha comido la lengua el gato?
- Alex: ¿Qué voy a decir? Qué alucino con Andrés y Manuel y que con semejantes maestros, hago el doctorado, antes de acabar la universidad, seguro, jodo que elementos estáis hechos. Por otro lado, me encanta la idea, pero tal y como lo habíamos planeado, tenía que ser reticente a aceptar y ha salido muy bien
- Todos: Seguíamos riendo, (supongo, que el padre de Alex y mi padre, deberían comentar, que estábamos convenciendo a Alex, si lo supieran)
- Manuel: coño (todos: prendaaaa), no nos habíamos dado cuenta, mirar quien está allí: la ninfómana, folladora de gasolineros; anda caliéntala en la distancia, que sufra
Nos pusimos de forma que Alex, quedara frente a ella, pero que tuviéramos al mismo tiempo una buena visión
Alex, comenzó a tocarse el paquete y a guiñarle el ojo, sacando la lengua alrededor de sus labios; a Irene comenzó a notársele el incremento de la respiración; Alex, le indicó con disimulo que le mostrara el pecho, dado que llevaba un escote generoso, lo que hizo rápidamente, cumpliendo el deseo de Alex, este continuó calentándola y cuando me di cuenta, que estaba a punto le dije a Alex:
- Yo: la odio, vamos a cortarle el rollo, te la vas a llevar a la zona de las cuadras, ahí no hay nadie, la pones en pelotas y déjale que te la chupe un poco y arréale con una fusta si hay alguna a mano, nosotros te daremos un tiempo y apareceremos como borrachos los tres, ya verás qué sorpresa se lleva (todos: jajaja)
- Alex: hecho, voy, ¿queréis que la grave. lo que le digo y me dice?
- Todos: siiiii
Alex, le hizo una señal disimuladamente, para que lo siguiera y ella asintió con la cabeza. Se dirigieron tal y como quedamos, hacia la zona de cuadras, (mientras nosotros qué no queríamos perder detalle, fuimos por el otro lado y nos pusimos a observar). Alex, busco una cuadra vacía y entró en ella, cuando Irene pasó buscándolo, salió de dentro y la entró, plantándole un morreo que la dejo sin aire casi, ni que decir hay que Irene le correspondió apasionadamente a ese beso; Alex, la acariciaba suavemente, con una mano, mientras con la otra le levantaba el vestido y le metía mano a base de bien, metiéndole los dedos en su coño y sacándolos para ponerlos empapados en la boca de ella.
- ¿te gusta?, ¿verdad puta?, me encanta, nunca lo había probado. No se dice jugos, se dice leche, ¿entiendes? A partir de ahora, todo es leche, la tuya, la mía y la de cualquiera ¿estamos?
- Si, cariño, leche, me encanta nunca lo había hecho. Hay muchas cosas, demasiadas que no has hecho, parece mentira en una mujer divina como tú, pero las harás todas, no te preocupes, yo te enseñaré, le decía Alex mientras le iba sacando el vestido, abrazándola y morreándola a fondo, mientras le daba golpes en los pechos y le retorcía los pezones: Dios, dijo Irene, me voy a correr; estas palabras provocaron que Alex, se detuviera en seco diciéndole: ni se te ocurra, aguántate. Si, mi amor, pero me cuesta mucho.
- Cuando Alex terminó de desnudarla (hay que reconocer que, aunque operado, tienes muy buen cuerpo), la agarró del pelo y le dijo: chupa, que tienes que entrenarte bien, para más adelante. ¿qué pasaría por la mente de Alex? Pensé. Irene comenzó a chupar la polla de Alex, frenéticamente, acariciando sus pelotas, chupándolas y tomando un ritmo brutal que, cuando creímos que Alex se iba a correr, comenzamos a montar escandalera, pasando por delante de la cuadra, viendo a Irene en pelotas y con el pelo revuelto, sola, pues Alex se puso en un rincón, como ocultándose para no ser visto.
- Yo: vaya Irene, ¿Qué?¿pasándolo bien?, anda, disfruta que a tu edad hay que disfrutar.
Irene intentó taparse, con sus manos y nosotros tres nos fuimos riendo fuertemente.
Alex, se reunió con nosotros en la parte del gimnasio, donde habíamos estado los dos solos; cuando llegó estábamos partiéndonos de risa, por la forma en que le cortamos el rollo a Irene
- Alex: ¿habéis visto qué pasada?
- Andrés: estaba más caliente que una gata en celo
- Manuel: era como una potranca desbocada, qué burrada
- Yo: has estado genial, pero, dije agarrándole los huevos, si no lo corto, te hubieras corrido en su boca y no tenías permiso
- Todos: Jo, ya salió la propietaria del rebaño
- Yo: así es la dueña de todos vosotros, mi rebaño
- Alex dijo: he tenido una idea, a ver si podemos hacerla, así de paso hacemos una obra de caridad, si no se corre, puede ser grave, está infartada casi. ¿el qué? Preguntamos. Cariño: ¿por casualidad no tendrás la tarjeta del taxista del otro día? No, creo que la dejé en la cartera. Mierda dijo Alex. Prendaaaa, todos. A ver dejarme pensar, ya lo tengo, unos de los vigilantes, esperarme, tengo una idea, ya vengo, no me perdáis de vista
Alex se marchó dentro y de nuevo atrajo a Irene, a la zona de cuadras de nuevo ¿Cómo se le ocurra, lo capo, pensé), escuchamos que le decía: joder que putada, no creo que me hayan visto, a ti, si te han visto, pero no creo a mí, me hayan visto; si se enteran mis padres el pollo qué se puede liar sería tremendo, tanto para ti, como para mí, ¿mierda? No te preocupes mi niño, a ti imposible, te escondiste rápido y además la monja, ni se atrevería por pudor a decir nada a nadie, ni siquiera a mí, ni se acordará, iba como una cuba, tranquilo. Lo que me sabe mal es que te has quedado con las ganas y eso me preocupa y a mí, del susto no se me levantará hasta dentro de unos días, pero tenemos que encontrar una solución para qué tengas dentro un buen rabo y te desahogues
- Irene: ¿Qué hacemos entonces? (la muy zorra, solo pensaba en tener un rabo dentro)
- Alex: espera. Ya vengo. Sobornaremos a uno de los de seguridad. ¿tienes pasta?
- Irene: si, no mucha unos dos mil euros (Irene estaba acostumbrada a llevar siempre, mínimo dos mil euros en efectivo, siempre me pregunté por qué)
- Alex: dame mil, serán suficientes, para pagar al de seguridad
- Irene: toma, mi niño (se creyó la preocupación de Alex por ella totalmente)
Alex se fue hacia la garita y habló con los dos guardias de seguridad, que iban a iniciar la ronda por todas las instalaciones, que son muy grandes y se tarda como una hora en recorrerlas todas (luego nos lo contó)
- Alex: Buenas tíos, hace frío, ¿Qué de ronda? Vaya putada
- Guardias: si la verdad es que es una faena, encima, en la zona de los caballos, algunos se alteran por el ruido, pero que le vamos a hacer
- Alex: os quiero proponer algo, pero en el más absoluto secreto, nada ilegal por supuesto y os ganáis 500 pavos para los dos, por pasar además un buen rato y disfrutar
- Guardias: ¿Qué hay qué hacer?
- Alex: mi madre tiene una de sus calenturas y anda desbocada, cuando se pone así, luego no hay quien la aguante. Os propongo que os la folléis, bien follada y la calméis con unos buenos pollazos ¿os parece bien?
- Guardias: anda chaval, eso no te lo crees ni tú
- Alex: joder que es cierto, mira tomar los 500 pavos y si no es cierto os los quedáis igual, venir que ella misma os lo confirmara (madre mía, que peligro y poder de convicción tiene Alex, dijeron Andrés y Manuel, que control y dominio de las situaciones, este chico es único y excepcional)
Los guardias siguieron a Alex, hasta la misma cuadra de antes y allí estaba Irene, fumando un cigarrillo.
- Alex: hola mamá, mira estos dos chicos, les he explicado tu necesidad y se han prestado a ayudarte y complacerte follándote
- Irene: acariciándose el cabello: genial hijo mío, tú si me comprendes, (casi a punto de tener un orgasmo de lo excitada que estaba)
- Alex: ¿veis? Como no mentía, hala os dejo tranquilos, pero antes las condiciones:
- De esto ni una palabra a nadie, ni se os ocurra presumir de ello, porque la cagaréis bien cagada y se os puede arruinar la vida
- Hacerle y que os haga a vosotros lo que os de la gana, sin límite.
- Ni se os ocurra golpearle la cara bajo ningún concepto, el resto lo qué queráis, le encanta todo lo duro
- ¿está claro todo?
- Guardias: cristalino
- Alex: pues venga, yo me largo, chao mamá disfruta, me voy con papá a entretenerlo.
Nos quedamos los cuatro de tal forma, que estábamos como en primera fila del espectáculo, los guardias le quitaron el vestido, mientras se la morreaban a conciencia y le metían mano. Uno de ellos comenzó a morderle el pecho, con dureza e Irene comenzó a gozar, mientras el otro, le puso su polla en la boca a la que se agarró Irene como una posesa, chupando y relamiendo, como si se acabara el mundo, el que la estaba mordiendo los pechos la puso en cuatro e introdujo su polla en el culo de Irene con dureza y comenzó, por parte de Irene una acentuación de sus movimientos, acompasándose con los de uno y del otro guardia. El guardia al que se la chupaba, se puso debajo de ella y se la metió en el coño, de forma que, en ese momento, Irene aprendió “el doblete”, cuanto más la insultaban: “vaya perra que estás hecha, tanta pijería y dinero y el problema es qué, el cornudo no te tiene satisfecha”, “menos mal que tu hijo es sensato y te cuida bien, zorra”. “ya sabes que aquí nos tienes para follarte solo nosotros cuando lo necesitas perra”, estas palabras, acompañadas de los fuertes azotes por parte del que estaba dándole por detrás y los pellizcos y tirones y azotes en los pechos por parte del otro, provocaban una mayor aceleración por parte de Irene, pidiendo más y más, “folladme cabrones, me muero de gusto”, “romperme el culo”, pegarme, hacerme lo qué queráis, soy toda vuestra, quiero que me folléis siempre, le diré a mi hijo que os llame para qué me folléis, ¡Dios, que gusto!
Yo: la verdad, para ser sincera y decirlo todo, confieso que me excité tanto que mientras gozábamos el espectáculo, Alex y yo nos estábamos metiendo mano y para complacer a mi chico me agaché y se la chupé apasionadamente, mientras él, me acariciaba con mucha dulzura y ternura, lo que todavía, me excitó más y me corrí abundantemente, cuando se corrió él, inundó mi boca de su leche, saboreándola y bebiéndomela toda sin dejar caer una gota; mientras, vi de reojo que nuestros amigos los demonios, habían seguido nuestro ejemplo y estaban también por la labor, fue fantástico.
Cuando los guardias terminaron de complacer a Irene, se marcharon dándole las gracias, y alabándola, diciéndole que era un sueño de mujer, que le dijera a su hijo que les avisara cuando quisiera
Alex: salió detrás de ellos y les dijo:
- Alex: perdonar, pero he visto que tardabais mucho, esto es que, me la habéis dejado a gusto y satisfecha, tomad 500 pavos más, por las molestias y gracias de nuevo
- Guardias: chaval: te juro, que verlo para creerlo, nos habíamos fijado en tu madre al igual que otros pibones que vienen por aquí, pero ni por asomo de follarnos a ninguna, muchísimas gracias chaval. Cualquier cosa que necesites, si tienes algún problema con alguien, aquí nos tienes que te ayudaremos totalmente gratis por supuesto.
- Alex: pues mirar, favor por favor, a parte de ella, que por cierto os diré la verdad, no es mi madre, es una amiga de mi madre, mi madre, si se entera me pega de ostias, hasta el carnet de identidad,esta es de esas pijas a las que solo se las follan los entrenadores y guaperas pijos, conozco amigas suyas, que van del mismo palo, si me dais vuestro teléfonos, cuando os necesite para contentar alguna, os aviso a uno de vosotros o a los dos, cuando ya estén mejor entrenadas como esta y os ganáis una pasta gansa de sobresueldo. De momento, no se lo comentéis a nadie, tenemos que ser muy discretos, ¿Ok?
- Guardias: de puta madre chaval cuenta con nosotros para lo que haga falta, grábate nuestros teléfonos y muchas gracias
Increíble lo que había conseguido Alex, nos reunimos los cuatro de nuevo en las terrazas y al rato apareció Irene, totalmente arreglada, como si no hubiese pasado nada e incluso se nos acercó a saludar, dándole las gracias a Alex, por la conversación del otro día en el Jardín de la Abadesa; tengo que reconocer que se comportó como una señora. Todos comprendimos que el agradecimiento era por otro motivo. Jaja
Casi terminando la fiesta, ya nos despedimos cerca de las dos y media de la madrugada, mi padre ya hacía rato que se había marchado, me había avisado qué se iba. Los padres de Alex, me dijeron, que si quería, para no irme sola en el coche a estas horas, podía acompañarme Alex hasta casa, lo cual les agradecí. Salimos un coche detrás de otro, comportándonos correctamente
Al llegar a casa, su padre, tomó la rampa superior y yo la inferior, pues las plazas están en diferente planta. Ahí aprovechamos para besarnos y desearnos buenas noches.