Lily – Primera Vez

Capítulo 1

El Inge llegó a la quinta y entró a su otra casa, para no perder tiempo llamó de inmediato al fijo de la casa de Lily, se moría por verla, tenía qué aprovechar lo alborotadas qué ella traía las hormonas por sus 4 meses de embarazo, le contestaron y respondieron con la confianza qué le tenían, después de todo Lily solía ir a su casa.

• Inge: “Hola, está Lily?, podría venir a ayudarme a acomodar unas cosas?”
• Fam: “Sí claro, ya te la mando… Lilyyyyy”

El Inge colgó y dejó la puerta entreabierta, impaciente, unos minutos después vio una bella silueta atravesar la puerta, vestía un jean azul pegadito, zapatillas blancas y un top naranja qué marcaba aún más el espectacular escote de la chiquilla.

• Lily: “Hooolaaaa qué quieres?”

Dijo la bella visitante, con ese tonito engreído de las chibolas de hoy, recién había cumplido 18 añitos, era 16 años menor qué el, pero ya tenía su recorrido y el Inge se moría por comérsela. La hizo pasar, dio un vistazo al pasadizo a ver si alguien la había visto entrar, no había nadie, cerró la puerta y al voltear ella ya estaba sentada en la banca de madera, se acercó a ella y le dio un beso en los labios, ella impaciente dijo

• Lily: “Y para qué me llamaste?”
• Inge: “Para hacer lo qué no pudimos el otro día”
• Lily: “Y cuánto me vas a dar?”

La chibola era súper fría, lo bueno es qué se conformaba con lo qué le ofrezcas

• Inge: “Te doy 20 y lo hacemos”
• Lily: “Aquí?”
• Inge: “Arriba hay una cama”
• Lily: “Ya, pero rápido, antes qué me llamen”

La escalera al altillo era algo incómoda, así qué el Inge aprovechó de empujarla por la cola para qué Lily suba, estaba nervioso, se moría por comérsela desde qué la conoció, cuando ella solo tenía 14 añitos, aunque desde entonces ya despertaba pasiones y ahora a sus 18, ya tenía su recorrido, justo por eso llevaba 4 meses de embarazo.

El cuarto de arriba era pequeño, pero bien distribuido, un velador, dos sillas, un lavadero pequeño y lo más importante, una cama de plaza y media. Lily curioseaba, pero el Inge no aguantó más y la jaló hacía él, empezó a recorrer su cuerpo mientras la besaba, las hormonas de la chica qué ya estaban alteradas se empezaron a activar y respondía los besos con la misma pasión. El Inge se aferró a los pechos de la chibola, eran increíbles, un rotundo 38D, pero qué en el cuerpo menudo y delgado de Lily resaltaban aún más.

• Lily: “Rápido qué me van a llamar”
• Inge: “Les dije qué quería qué me ayudes a ordenar unas cosas”
• Lily: “Si, pero igual, apúrate”

La chiquilla hablaba como toda una pro, el Inge quería saborearla más, pero pensó qué ya habría tiempo para eso, ahora lo importante era poseerla, hacerla suya por primera vez. El Inge le quitó la blusa y el brassiere para poder disfrutar sus pechos, lo tenían loco, encima con el embarazo se estaban poniendo aún más grandes, esto ya no era un 38D, estaban más cerca de un 38E, empezó a besarlos y chuparlos.

• Lily: “mmfff… apurate… me van a llamar…”
• Inge: “Tranquila Lily, ayúdame a sacarlo”

Lily se sentó en el borde de la cama y le abrió el pantalón al Inge, con gran habilidad le bajó el boxer y empezó a acariciarle los testículos, era muy buena con las manos, luego le cogió el pene, moviéndolo arriba y abajo, al poco tiempo ya se lo había puesto bien duro. Como siempre ella se detenía a mirarlo, le encantaba mirar el pene de su pareja, sentir y ver cómo palpitaba, como se ponía más largo o grueso con sus caricias, hasta se relamía pero no quería chuparlo, el Inge le insistía pero nada, aunque si le había ordeñado el pene antes y a pesar de ser diestra tenía gran habilidad para hacer pajas con la izquierda.

• Lily: “Ya??? Ya está”
• Inge: “Sigue un poco más Lily”

Al Inge le encantaban las pajas qué Lily le hacía, ella era muy hábil manipulando su cosota, pero era mejor darle trámite mientras se podía, así qué se quitó el pantalón y el boxer, mientras veía como Lily se quitaba el jean, en cuanto ella se agachó para sacarse el pantalón él la cogió por detrás apretandola contra la pared, ella aún llevaba puesto su calzoncito blanco, pero él aprovechó para poner su pene sobre la cola de Lily

• Lily: “De una vez… antes qué me llamen”
• Inge: “Qué rica cola tienes Lily”

De pronto se escuchó la voz de un niño afuera del cuarto.

• Niño: “Lilyyyyy… Lilyyyy”
• Lily: “Ya ves… y ahora??”
• Inge: “Si vas, regresas luego?”
• Lily: “No, ya no me dejarán salir”
• Niño: “Lilyyyyy… Lilyyyy”
• Inge: “Entonces no le respondas, le diré que fuimos a comprar a la ferretería”
• Niño: “Lilyyyyy… Lilyyyy”

El niño llamó un par de veces más y se fue; el Inge tomó a Lily en brazos y la llevó a la cama, se trepó encima de ella y le quitó el calzoncito blanco… al fin tenía frente a él la deseada cuevita de Lily, separó las piernas de la chibola tomando cada pierna con uno de sus brazos y las abrió de lado a lado, parecía una pavita de navidad esperando ser rellenada, entonces el Inge se aplicó lubricante en el pene y acercó la punta a la entrada de la vagina de la chiquilla.

• Lily: “No tienes condom?”
• Inge: “Para qué? Más embarazada no vas a quedar no?”
• Lily: “Oook…”

El Inge presionó la punta de su pene en la entrada de la cuevita de Lily, ella a pesar de su corta edad ya había tenido relaciones con varios chicos, sin embargo algo la tenía inquieta desde qué aceptó hacerlo con el Inge, recordó cuando años atrás llegó con un jalado en matemáticas en su libreta y le dijeron

• Fam: “Desde el martes irás con el Inge, ya hablé para qué te enseñe matemáticas”
• Lily: “Nooo, qué aburrido”
• Fam: “No vas a jalar el año, así qué irás con él”
• Lily: “Pero…”
• Fam: “Nada, él tiene paciencia y sabe, sino preguntale a tu tía Naysa”

En la noche Lily fue al cuarto de su tía Naysa a preguntarle sobre las clases

• Lily: “A ti el Inge te enseñó mates??”
• Naysa: “Uhhh… hace tiempo, por qué?”
• Lily: “Tengo qué ir con él desde el martes”
• Naysa: “Es chevere, si te ve bien arregladita te tratará mejor”
• Lily: “Tu ibas asi?”
• Naysa: “jajaaja, yo era su engreida”
• Lily: “¿Tenía muchos alumnos?”
• Naysa: “Unos cuantos, pero por lo general solo estaba yo”
• Lily: “Y qué hacían?”
• Naysa: “ahhhh… varias cosas”
• Lily: “¿Es renegón o duro?”
• Naysa: “Bien duro”
• Lily: “Asi??”
• Naysa: “Naaa en cuanto te vea será un dulce contigo, tu eres una coqueta, no te conoceré”
• Lily: “Oyeeee… ni qué fuera para coquetearle, además es familia, no?”
• Naysa: “Y desde cuando te ha importado eso?”
• Lily: “No sé qué te habrán contado, esos son unos mentirosos, fanfarrones”
• Naysa: “Si, no?”
• Lily: “Bueno, pero con lo del Inge aprobaste mate?”
• Naysa: “Si, eso si”
• Lily: “Pero fue muy duro?”
• Naysa: “Y grueeeso”
• Lily: “Qué???”
• Naysa: “Qué qué grueso qué tengas qué ir a estudiar y ya vete qué tengo qué levantarme temprano”
• Lily: “Ok, ok”

De pronto Lily sintió qué la cabeza del pene del Inge forzaba por entrar en ella y entendió lo qué Naysa le quiso decir

• Lily: “mmmm ffff”
• Inge: “Estás bien?
• Lily: “mmffff… no me di cuenta qué la tenías tan gruesa… mmmffff…”
• Inge: “Cómo qué no si la has palpado varias veces”
• Lily: “Si… pero…”

El Inge tenía razón, ella recordó las primeras veces qué fue a sus “clases”, al inicio él se veía nervioso, pero buscaba estar cerca de ella y tocarla disimuladamente, ella empezó a jugar con eso y a veces apoyaba sus pechos en el brazo del Inge, con tal de lograr qué él la ayude con las tareas; y como ella es más bajita “por comodidad” él empezó a sentarla en una de sus piernas, para qué ella vea mejor el cuaderno, ahí aprovechaba de sostenerla por la cintura y casualmente subir su mano hasta ponerla debajo de sus pechazos, ella no se hacía problema por eso. Luego de qué aprobara mates siguió yendo a casa del Inge, con la excusa de adelantar clase, pero en verdad era para aprovechar su PC con internet, qué era caro en ese entonces. Un día el Inge le mostró su recién comprada cámara digital, así que se tomaron fotos, primero abrazados con ella sentada en su pierna, luego dándose un piquito y finalmente con un beso en toda regla, desde ahí las caricias del Inge subieron de intensidad, cuando ella llegaba le daba un piquito y aprovechaba de tocarle los pechos, mientras ella usaba la PC él le acariciaba las piernas y la cola, todo siempre por encima de la ropa; hasta qué un día Lily llegó furiosa a casa del Inge, habían visto a su pareja con una chica, ella fue donde el Inge a ver si contactaba con el chico por Messenger, pero nunca apareció, molesta se paró para ir a buscarlo, cuando el Inge la detuvo en la puerta

• Lily: “¡Chau, ya me voy!”
• Inge: “¿Tan rápido? Quédate otro ratito”
• Lily: “No, no, no, tengo qué buscar a alguien”
• Inge: “Viste mi nuevo celular? Por qué no pruebas a llamarlo?”
• Lily: “mmm.. A ver, presta”
• Inge: “Ven, vamos al mueble”
• Lily: “Ooook”

Mientras Lily discutía y reclamaba al tipo por la supuesta infidelidad, el Inge masajeaba los pechos de lily y aprovechando lo molesta qué está estaba, le subió la chompa roja, retiró su brassiere blanco y pudo por fin palpar directamente su tremenda delantera, luego Lily se las volvió a guardar un par de veces, pero el Inge nuevamente las liberó y hasta pudo chuparselas, todo mientras ella seguía reclamando una infidelidad, por teléfono.

Desde entonces todo aumentó, ella iba a usar su PC o celular, y él aprovechaba de recorrer todo su cuerpo, hasta qué un día él le hizo una sesión de fotos, mientras ella hablaba por celular, él le descubrió los senos, la puso en diferentes poses y le tomaba fotos, hasta le bajó el jean, la hizo agacharse para tomarle fotos asi e incluso la puso de perrito sobre el mueble, ese día Lily ya estaba caliente, el estar posando así mientras hablaba por teléfono la habían encendido, pero igual siempre se hacía la difícil, la qué no quería, pero de pronto empezó a sentir como el Inge le apoyaba el pene en la cola y se calentó, ella no hubiese tenido problemas con entregarse ahí mismo al Inge, pero le gustaba hacerse la dificil, asi lo hizo hasta qué escuchó sonar el zipper del pantalón del Inge, este le volvió a apoyar el pene en la cola, pero de pronto tomó la mano derecha de ella desde atrás y la acercó hacía su pene, aún con boxer, ella la retiró con fuerza, pero él insistió y está vez ella cogió por primera vez el pene del Inge, se sentía duro y algo gruesito, se tuvo qué ir rápido ese día; pero unos días después él puso su pene frente a ella mientras Lily chateaba, ella se quedó mirando el grueso pene del Inge, le encantaba mirar penes tanto como tocarlos, era algo qué pocos sabían, lo cogió y le hizo su primera paja, terminando en un pañuelo; luego de eso se sucedieron otras muchas, ya no en la sala con pañuelitos, sino que se metían juntos al baño para qué ella pudiera hacerlo correrse con más calma, Lily era buenísima haciendo pajas, cosa qué el Inge agradecía, por ahí él empezó a ofrecerle “propinas” por cada paja qué ella le hacía, hasta qué un dia le dijo

• Inge: “Y cuanto quieres si lo hacemos?”
• Lily: “Oyeeee qué te pasaaaa”
• Inge: “Dime, cuanto quieres?”
• Lily: “No, ya dije qué no, o me voy, ah”

Varias veces insistió el Inge, pero Lily por algo qué no sabía explicar, no aceptaba eso qué ya había hecho con otros sin qué le den nada a cambio. Hasta qué un día por un descuido quedó embarazada. Cuando el Inge se enteró pensó qué no volvería a verla, ya ni pajas habrían, pero de sorpresa ella le escribió al chat

• Lily: “Hola en que andas hoy a qué hora vienes necesito plata”
• Inge: “En un rato, pero hay visitas en mi casa”
• Lily: “Ven a la otra casa.
• Inge: “Ahh ok puede ser allá”
• Lily: “Mejor allá pero asegurame pues si o no ?? a las 7.00 te parece”
• Inge: “7.30 antes no creo”
• Lily: “Ok, entonces ya pero necesito 30 tienes o naa”
• Inge: “20”
• Lily: “Y si lo hacemos ??? ummmm………..”
• Inge: “Ahí vemos”
• Lily: “No, dime pues para no ir x las puras”
• Inge: “Ok, nos vemos en la plaza cerca al puente a las 7.30”
• Lily: “Dime entonces que??”
• Inge: “7.30 te veo allá”
• Lily: “Ok, ok”

El Inge llegó presuroso y la esperó casi una hora en una banca de la plaza, pero ella nunca apareció. Por un problema en su casa no la dejaron salir y no tuvo ni cómo avisarle al Inge, él creyó qué era otro capricho de ella y tuvo qué ir a mandarse un par de pajas con las fotos de Lily. No volvieron a tener contacto, hasta este sábado cuando él la vió desde lejos entrar a la quinta, así qué el Inge rápidamente se fue a su otra casa, en la quinta, llamó para qué lo ayude y así terminaron en la cama.

En cuanto Lily empezó a sentir como el pene del Inge separaba sus labios vaginales comprendió lo qué la inquietaba, lo que Naysa le había dicho desde el inicio y ella no supo entender, aunque debió hacerlo luego de tantas pajas qué le había hecho al Inge.

• Naysa: “Bien duro y grueeeso”

Eso le había dicho Naysa y ahora ella misma lo estaba comprobando, entonces Naysa ya lo había hecho con el Inge? Con razón se llevaban tan bien, eso qué Naysa tenía el mismo carácter de “M” qué Lily, “Mmffff… me va a partir en dos” pensaba, mientras sentía como el pene del Inge entraba centímetro a centímetro en su vagina, ya lo había hecho varias veces, pero nunca con uno tan grueso, “uffff …. me voy a volver locaaa” se decía para sí misma. Ella lo había tocado, le había hecho pajas, pero nunca había pensado en cómo sería tener algo de ese grosor dentro de ella.

Al fin el Inge sintió como su pene entraba en Lily, su vagina era estrecha, por qué ella era delgada y ciertamente más pequeña qué él, ni con Laurita sintió el placer qué le daba hacer suya a Lily, por fin la chibolaza del barrio, la más rica, la más deseada por todos, estaba siendo suya.

• Lily: “Ahhhmmm… mmmm”
• Inge: “Qué rica qué estás Lily”

De pronto Lily se sorprendió por qué las puntas de sus pies se doblaron hacía arriba, eso le pasaba cuando se excitaba demasiado, pero por lo general era luego de estar haciéndolo por un rato, no con apenas la cabeza del pene taladrandola

• Lily: “mmmm qué gruesa la tienes… mmfff”
• Inge: “Me encanta tu conchita”
• Lily: “Mmmmfff… aahhh… mmmmmff…”
• Inge: “Siento tu vagina bien apretadita”
• Lily: “mmmfff tu cosa palpita duro… primitoooo”
• Inge: “Te gusta mi pene… primita?”
• Lily: “mmmff… siii… nunca…”
• Inge: “¿Nunca qué?”
• Lily: “mmmm… nunca había sentido uno tan grueso… ahhhh”
• Inge: “¿Has sentido muchos?”
• Lily: “No seee”
• Inge: “Dimeee”
• Lily: “No se… mmmfff”
• Inge: “¿Te gusta?”
• Lily: “mmmfff… siiii…”
• Inge: “¿Te gusta el pene grueso de tu primo?”
• Lily: “Siii… ayyyy… primoooo…”
• Inge: “Al fin eres mía primita ricaaa”
• Lily: “Ayyy… mmffff… mffff… sii… ricooo….”
• Inge: “Quiero hacerte mía todo el dia primita”
• Lily: “Apurateeee… mmfff… me van a llamaaaar… mmfff…”
• Inge: “Ok, primita me vendré rápido por esta vez“
• Lily: “¿Te vas a correr dentro?
• Inge: “Ya estas super embarazada primita, una corrida más qué importa”
• Lily: “Ok… mmff… ok… corrreteeee…”
• Inge: “Ahi va primita… tomaaaa…”
• Lily: “Aahhhhhhh… mmmfff… primoooooooo…”

El Inge botó toda su leche dentro de Lily, mientras ella sentía qué las puntas de sus pies casi se contracturaban hacía arriba por el placer qué sentía. Ambos quedaron sobre la cama con la respiración agitada, pero con la mirada de querer más.

• Inge: “Va… vamos mañana”
• Lily: “Ahhh.. ahhh… a donde?”
• Inge: “A un hotel para hacerlo con calma y luego vamos al KFC, ¿qué dices?
• Lily: “Pero como hago para salir?”
• Inge: “Diré en tu casa qué tengo que hacer un trabajo con unas PCs en miraflores, donde un amigo y qué necesito me ayudes”
• Lily: “A qué hora?
• Inge: “Salimos a las 2.30pm, el viaje hasta allá ida y vuelta en bus son como 2h, más el trabajo, tenemos hasta las 5.30 o 6.00 para nosotros, ok?
• Lily: “Ya… si… primito”
• Inge: “Listo primita, mañana lo hacemos con calma como es debido”

Ambos se vistieron, el Inge la miraba embobado, satisfecho de por fin haber hecho suyo semejante mujerón y feliz de pensar qué al día siguiente la tendría por más tiempo. Lily estaba algo adolorida, pero quería más, nunca había sentido un pene tan grueso dentro de ella y eso combinado con sus hormonas le daban más ganas de volver a hacerlo. Bajaron del cuartito, al despedirse ella le dió un beso en los labios y le dijo

• Lily: “Y lo qué me ibas a dar?”
• Inge: “Cierto, toma”
• Lily: “No dijiste 20? Aquí hay 15”
• Inge: “Mañana te doy todo, está bien primita?”
• Lily: “Ya… primo”

Se dieron otro beso, él aprovechó de estrujarle los pechos por encima de la ropa, abrió la puerta se fijó qué no pasaba nadie y le avisó para qué salga, ella salió rápido hacía el fondo y dobló hacía su casa, le pareció qué ella caminaba raro? O era su imaginación? , el Inge cerró la puerta satisfecho, al fin Lily era suya, ya era su mujer, por fin después de tanto desearla, su primita era suya. Bueno… ambos se decían primos, pero el Inge estaba seguro de que en realidad eran tío y sobrina… como sea ahora su prima/sobrina Lily, ya era al fin, su mujer.

FIN