Mi pareja, su hija y la nuera III

Capítulo 3

Cuando se tumbó en la cama, la cogí y la bese, con delicadeza y a la vez pasión, como dije al principio, me gustaba y es así, por lo que pienso y espero que sea para mucho tiempo.

Abrimos el programa y lo que vimos….

Así terminó el último capítulo …

Cuando las vimos, en la pantalla solo salía la GUARRA de Inés, desnuda sentada en la cama, se la veía satisfecha. Al momento apareció la PUTA de Triana, aun secándose, a esta si se le veía más seria.

-Inés. – ¿Por qué tan seria Triana?, ¿no me digas que no has disfrutado?, eso no es lo que yo, bueno y ellos hemos visto, cuantas veces hemos hablado tú y yo sobre tener una experiencia ¿así?

-Triana. -No es eso cari, es mi madre, me ha resultado muy fuerte, y ¿desde cuándo sabrá lo nuestro?

-Inés. -Y qué más da, que importa ahora, ya la has visto, ¿desde cuándo no la veíamos así?, nunca, ya te lo digo yo, es tan ZORRA como lo somos tú y yo.

-Triana. -Si, pero nosotras habíamos hablado de probar una vez o de vez en cuando, y lo que nos propone Raúl, no es para un rato, es para siempre, aunque podamos cortar cuando queramos, no sé, cari, aún tengo dudas, mi madre…, o si se entera Rocío o lo que es peor, mi hermano, que es muy cerrado, si aún no acepta lo nuestro, cuantas veces me has dicho, que te gustaría irte cuando ha venido mi hermano con su mujer, ni siquiera nos ha invitado a ir a su casa, desde que sabe que yo soy lesbi, bueno, la verdad es que no sé lo que soy, pero sí que te quiero a ti.

-Inés. – Si, pero ellos no marcan nuestras vidas, y tú madre, bueno la ZORRA de tu madre, que mira que esta buena la cabrona, siempre nos ha apoyado, y más de una vez se ha enfrentado al carca de tu hermano. Además te conozco bien ZORRITA, y sé que cuando más te ha gustado es cuando Raúl te ha apretado los pezones, cuando te ha levantado del suelo usando tus pezones, o dime que miento. Eso falta en nuestra relación, yo no sirvo para tratarte así, será porque soy sumisa o porque te quiero, pero yo no puedo hacerte lo que él sí.

-Triana. -Uffff, eso es cierto cari, casi me corro, y mira que me ha dolido, es la primera vez que me causan dolor, los azotes que nos damos nosotras me excitan, pero sabes que siempre te pido más

Mientras ellas seguían con su charla, MI PERRA y yo sin perder detalle de lo que hablaban, de sus dudas, y del masoquismo de la PUTA de Triana, mantuvimos una conversación, que daría un vuelco, a la larga, de la situación.

-PERRA, vamos a poner cámaras en todas las habitaciones, en los baños y hasta en la cocina, quiero controlar todo, así que, si tienes alguna pega, dímelo y me voy por donde he venido.

Lo dije, sabiendo que ella aun con reticencias iba a aceptar, si su hija, por lo oído, era sado o le gustaba el dolor, aunque parezca igual no es lo mismo, MI PERRA, cuanto más humillante sea lo que se le pida, más se excita.

-Merche. -Así será SEÑOR, ¿y en la de mi hijo?, ya ha oído a la PUTA de mi hija, que es un carca, en la de Rocío me da igual, ella, aunque viene bastante, sé que tampoco pondría el grito en el cielo, o eso espero, siempre se ha declarado independiente y liberal, o eso dice, aunque sé que cuando se viene aquí es más porque se ha peleado con el tonto de su pareja, porque mira que es tonto.

-En todas, así vemos a tu otra nuera, que por lo que veo en la foto está bastante bien, aunque yo no soy de rubias.

-Merche. -Lo haré, pero vamos, por lo que se, es de la de luz apagada y misionero, aun no sé cómo se ha quedado embarazada, es como mi hijo, o peor, aún se santigua cuando se dice un taco, y ya ni le cuento si en la tele sale algo de sexo, jajajaja. No quiero pensar en la educación que le van a dar al niño o niña que tengan, esta de dos meses y estoy segura de que ya ni deja que la toque, si es que antes lo dejaba, vamos son tal para cual. El lunes las pondré, mañana llamaré al almacén y pediré que me las preparen, ya veré que les digo, lo bueno de nuestro servicio, es que sabemos, bueno saben dónde disimular las cámaras, para que no se sepan dónde estan escondidas. Conforme salgan estas dos para trabajar, volveré de la oficina y las pondré.

-No PERRA, no hace falta correr tanto, como ellas van a aceptar, te van a ayudar a ponerlas. Eso sí, enséñame cómo funciona bien el sistema, como se puede cambiar la contraseña, porque a partir de ahora solo yo voy a tener acceso.

Nos desatendimos del todo de lo que sucedía en la habitación de su hija y en muy poco tiempo me dio un cursillo, ya que no es complicado y como tenía que cambiar la contraseña de acceso una vez instalara el programa en mi portátil, aunque ella misma pidiéndome permiso, cogió mi móvil, instalo la App y me dio acceso al instante, solo para ponerle la contraseña que yo deseara. Una vez cambie la contraseña, con el móvil, para ver su funcionamiento, volvimos a mirar lo que hacían las otras dos. No podían estar mejor, pues en ese momento estaban en pleno 69, y de vez en cuando solo se les escuchaba ZORRA o GUARRA, la una a la otra. Explotaron las dos a la vez, echándose cada una a un lado de la cama, sin cambiar la postura. En ese momento yo di por terminado el día en esa casa, ya eran las nueve, y yo deseaba que hablaran las tres. Me levanté, y mientras me vestía, le di instrucciones a la PERRA de Merche.

-Si ellas te dicen que van a aceptar, en ese momento, quiero que las uses, piensa que haría yo, además como ellas tienen dildos dobles, utilízalos esta noche, y si aceptan, les dirás que desde esta noche y mientras compráis una cama más grande donde podáis dormir las tres, tú ya dormirás en su habitación y que mientras yo no diga lo contrario, tú decidirás quien duerme contigo y quien en el suelo, pero esta noche quiero que duerma la PUTA de tu hija, es la más sumisa de las tres, le va el dolor, y ya te digo que dormir en el suelo, solo con una almohada y algo para que se tape, no es nada cómodo, quiero que la trates con desprecio, hasta mañana que yo te u os de otras instrucciones.

-Merche. -Lo haré SEÑOR, no sé cómo saldrá, pero yo voy a cumplir su más mínimo deseo.

-Me gustas PERRA, y deseo que esto salga bien, y si no es con ellas, nosotros dos solos. Ahora vamos al salón, llámalas para que me despida.

Salimos los dos, yo ya vestido, y ella desnuda y descalza, y una vez fuera, se fue a la habitación de ellas y sin entrar, las llamó, y les dijo que saliesen, que MI AMO, -me gustó, no dio por hecho que ellas fuesen mis sumisas-, se marchaba ya. Salieron las dos también, y bastante rápido al salón, aunque ellas lo hicieron en camiseta y en bragas, se les notaba. Merche fue a decir algo, pero la miré y le negué con la cabeza, por lo que no les dijo nada de sus vestimenta.

-Bueno chicas, me voy, ya todo depende de vosotras, ya me diréis mañana algo, y si no aceptáis mis condiciones, solo daros las gracias por este rato. Aquí os dejo con MI PERRA.

Ninguna dijo nada, solo un adiós con la voz muy baja al igual que la cabeza.

A continuación, lo que relato, será desde el punto de vista de MI PERRA Merche, tal y como aconteció en el salón, según me conto días después.

-Merche. -A ver niñas, antes de cenar me vais a contar si habéis tomado una decisión, yo ya la he tomado, y es aceptar lo que MI AMO, quiera y espere de mí, así que espero que aceptéis mi decisión, sin poner trabas o problemas, y como ambas trabajáis y tenéis un buen sueldo, en caso de no aceptar, os pediría, que, sin prisa, buscaseis un piso.

-Triana. – ¿Y Rocío qué? mama, ¿a ella también se lo dirías?

-Merche. -Si, aunque como ella no gana como vosotras, y espero que deje de una vez al novio que tiene, la dejare instalarse en el apartamento de la Avda. Madrid, aún no me lo he planteado definitivamente, para las tres sería más fácil que aceptarais, y bueno a tu hermana se lo diré, ya que ella lleva mucho tiempo detrás de que se lo dejé.

-Inés. -Aceptamos, vamos que, si aceptamos, Triana lleva excitada desde que le conté lo que vi en tu habitación, y si la tocas te aseguro que aun esta mojada, para ella el único pero, eres tú, ya le he hecho ver que te ha salido a ti, y que tú eres feliz, cosa que me ha reconocido, porque te veía distinta desde que nos hablabas de él.

-Triana. -Veremos por donde sale todo esto, pero aceptamos.

-Merche. -Pues desde ya, os voy a transmitir las ordenes que me ha dado NUESTRO AMO, para empezar fuera la ropa PUTAS, y a partir de mañana todo será como él dijo, medias, bragas y sujetador, zapatos cómodos, pero con algo de tacón, como yo no tengo, y ya hemos quedado con él, en comprar el sábado, mañana cogeré unas de la PUTA de Triana. -Ambas asintieron, y se quitaron las camisetas y las bragas- Hoy dormiremos las tres en vuestra habitación, la GUARRA de Inés dormirá conmigo, y tú PUTA, por deseo expreso de nuestro AMO, lo harás en el suelo, y ahora PUTA, prepara la cena, mientras la GUARRA de tu novia me come el coño.

No dijo más, se sentó en el sofá y vio cómo se arrodillaba Inés y se acercaba a cuatro patas, no hubo palabras, la cogió del pelo y sin miramientos, pegó su boca al coño. Mientras Triana se fue a la cocina, tremendamente excitada, solo el simple hecho de que su madre le hubiese dicho que iba a dormir en el suelo, la había humedecido aún más. La GUARRA de Inés, se estaba masturbando mientras le comía el coño a su suegra, un coño jugoso, que no paraba de chorrear, y no paro hasta que se corrieron las dos a la vez. Cogiéndola del pelo la levantó y la hizo sentar a su lado, pero Inés que le tenía ganas a su suegra desde hace mucho, se tiró a ella sin importarle el posible castigo, y empezó a morderle los pezones, y meterle los dedos con fuerza en el coño

-Inés. -Me da igual ZORRA, me da igual que me castigue el AMO, pero voy a follarte, que ganas te tenía, agggggg, como estoy, voy a follarte PERRA.

Lo tenía preparado, y alargando la mano al lateral del sillón, cogió un dildo doble, y sin dejar de follar a su suegra, sacó los dedos y le metió el dildo, y sin ni siquiera ajustárselo ella, se metió la otra parte. Era incomodo, así que, cogiéndola del pelo, la hizo ponerse a cuatro patas en el sillón, y se lo volvió a meter. Y empezó a follársela con fuerza…

-Inés. -PUTA, que ganas de tenerte así, uffff, si hasta había pensado que eras asexual, porque mira que te he espiado, ufffff, y nunca te veía, ni rozarte mínimamente una parte de tu cuerpo PERRA, ufffff, voy a reventar tu coño, ufffff como estoy, y mira la PERRA, si es igual que su hijita, agggggg, me corroooooooo.

En ese momento también exploto Merche, que se dejó caer en el sillón, sintiendo como se le salía el dildo de su coño. Inés no sin trabajo se puso de pie, con la respiración agitada, satisfecha, llevaba tanto tiempo deseando a su suegra, que sabiendo ya que era tan ZORRA o más que ella, no pudo aguantarse, aun a sabiendas que eso le podía acarrear problemas. Se dio la vuelta y vio la mesa puesta con comida fría, y a su novia con una mano en la mesa y la otra en su coño, masturbándose, estaba tan caliente que ya se había corrido una vez, y estaba a punto de hacerlo otra vez. Explotó, esta vez tan fuerte que se tuvo que dejar caer en el suelo. Merche recobró el resuello, no se le veía enfadada, al revés se le veía feliz, y mirando a las dos…

-Merche. -Vamos a comer, que tengo hambre, y estoy muy cansada, no creo que pueda hacer más nada hoy, demasiadas cosas después de tantos años, que digo años, creo que me he corrido hoy más que en toda mi vida. Vamos a cenar y a la cama, siéntate a mi lado -lo dijo mirando a Inés-, y tú quédate ahí donde estas, porque mientras el AMO no diga lo contrario, cuando quieras sentarte o dormir, será en el suelo.

Se sentó con Inés a su lado y empezaron a comer, y de vez en cuando, tanto una como otra le iban dando de comer a Triana, al principio se lo daban en la boca, y poco a poco, por puro placer, no sabían porque, pero disfrutaban haciéndolo, le tiraban la comida al suelo y cada vez más lejos de donde se encontraba ella, para ver como a cuatro patas iba a por la comida, al principio usaba las manos, pero ella misma sin que nadie le dijese nada, empezó a comer directamente del suelo. Terminaron de cenar, y se levantaron las dos de la mesa, mirando a Triana, su madre le indicó que ellas se iban a la cama, que recogiera ella, y que cuando acabase se fuese a la cama, bueno a su nueva cama.

Esto fue lo que sucedió, según me contó MI PERRA, bastantes días después, sin que yo le preguntara, la verdad es que no me importaba, por eso yo no pregunté al respecto, aunque estaba seguro de que iban a aceptar, no las consideraba mías, ni siquiera a MI PERRA, tenía que darles tiempo a pensar, y lo mismo veían excesivo entregar sus vidas así a una persona. Yo llegué a casa, me di una ducha, cene algo y me puse a leer un rato, estaba satisfecho, y a la vez deseoso de que saliese bien, aunque no me ha importado nunca viajar, ni vivir fuera largos periodos de tiempo, sí que tenía ganas de encontrar algo estable en Granada. Sobre la una de la noche, y antes de irme a la cama, me dio curiosidad, por ver si ya estaban dormidas, la verdad que no lo hice con otra intención, porque según me dijo mi PERRA, el programa permite grabar 30 días, por lo que los momentos que las cámaras no se activase con el movimiento, este periodo se alargaba, se media por tiempo efectivo de grabación. Me senté delante del portátil e instalé el programa, y una vez dentro me puse a observar la habitación, y las cámaras eran bastantes sensibles, con el movimiento de ellas mismas mientras dormían, las cámaras grababan, y muy bien, por cierto, a pesar de estar a oscuras, se veía muy bien todo el dormitorio. Pude contemplar como la GUARRA de Inés estaba abrazada a MI PERRA, haciendo la cuchara, y lo que más me gustó, es que se veía muy bien como la tenía penetrada, acercando la cámara a esa posición con el zum, se le veía puesto el arnés en su cintura y como el dildo se perdía dentro de MI PERRA. Comprobé como la PUTA de Triana estaba en el suelo, también sin tapar, totalmente desnuda, en su cara se veía satisfacción, felicidad. Por pura curiosidad, quise ver un poco más de lo que pasó allí, y fui retrasando la grabación poco a poco, tampoco quería dar mucha para atrás, ya era tarde, y yo empezaba a las ocho de la mañana a trabajar, ya tendría tiempo al día siguiente de verlas, porque no tenía pensado verlas ya hasta el sábado, así que tendría todo el viernes tarde para ver lo sucedido esa noche, tenía claro que, si aceptaban, les iba a prohibir tocarse o correrse. Y me llevé una sorpresa, una sorpresa que cambiaría mucho el panorama, e hizo que me alegrara de mi curiosidad. Retrasé hasta un poco antes de que se quedaran dormidas, donde aún la GUARRA, se estaba follando a MI PERRA.

-Inés. -Ufffff, PERRA, no me canso de follarte agggggg, y que consté que por respeto a nuestro AMO -en ese momento supe que aceptaban-, no te reviento el culo ZORRA, y aunque tú seas su preferida, que sepas que no voy a parar hasta ser yo, ufffffff.

MI PERRA, no hablaba solo gemía, mientras era follada por su nuera, con las manos agarradas a la almohada. En ese momento me pareció ver algo, y haciendo zum hacia la puerta, lo que vi me dejó a cuadros, además de hacerme una nota mental, para recordarles a mis PERRAS, que tenían que echar la cadena en la puerta. Allí estaba Rocío, no quise investigar desde cuándo, ya era tarde, así que solo me fijé en ese momento, en que tenía una mano metida por sus pantalones, y la otra por debajo de la camiseta, la muy PUTA, se estaba masturbando. En ese momento solo oí decir a la GUARRA de Inés, buenas noches, y que sepas que vas a dormir con el dildo dentro, y que cada vez que me despierte, te voy a follar ZORRA. No dirigí la cámara a ellas, la dejé enfocada a Rocío, y aun cuando ya habían cerrado los ojos, ella siguió masturbándose hasta que mordiéndose los labios se corrió, no hizo ruido, y solo ver como cayó de rodillas y sacaba la mano de su coño y se la llevaba a la boca, era obvio que se había corrido. Se levantó y cerró la puerta, así que yo también di por terminada la noche, mañana seria otro día, pero tenía que preguntarle a MI PUTA, si el programa dejaba editar solo ciertas partes y trasladarlas a otro archivo. Por la mañana, como Inés y Triana, entran a las siete de la mañana, conforme me desperté, tenía dos whatsApp, algo que no me molesta, por las noches quito el sonido al móvil. Estos eran escuetos, supongo que se les pego la sabanas, pero ambos eran el mismo.

“ACEPTAMOS LAS DOS SEÑOR”

Y sobre las nueve de la mañana me llegó el de MI PERRA…

“Solo le escribo porque Usted me lo pidió, ya tenía mi respuesta, acepto SEÑOR, también le quería decir que viese cuando tenga tiempo lo que sucedió anoche, esta mañana, no ha pasado nada, ya que nos hemos quedado dormidas, y creo que sus otras dos PERRAS, han llegado tarde.

No sé si le gustara o se enfadara, no fue todo como Usted dijo, eso sí, Triana durmió en el suelo y le ¡¡¡gusto!!!, lo demás ya decidirá Usted, si nos castiga o premia.

Estoy en mi oficina, ya he pedido que me preparen las cámaras, no he dicho cuántas, solo le he dado ubicaciones y que tenía permiso para ponerlas, para los baños, les he dicho que son solo en la parte común, como si fuera un negocio.

Así que cuando me vaya me las llevaré conmigo y entre sus otras SUMISAS y yo las pondremos, aun no les he dicho nada, porque no les ha dado tiempo ni a desayunar, solo les he dicho que las quiero allí conforme salgan de trabajar, que yo me iba a tomar la tarde libre y que llegaría cuando ellas.

Las tres hemos salido con falda y medias, bueno yo con un vestido, y unas medias de su SUMISA Triana.

Un beso si me lo permite SEÑOR, y decirle que estoy muy mojada”.

En cuanto pude, paré para el desayuno, y aunque lo que menos me gusta en el desayuno es coger el móvil, esta vez lo hice, y grabé tanto a la GUARRA de Inés como a la PUTA de Triana, y cree un grupo de las tres conmigo.

“Hola PERRAS, a partir de ahora toda comunicación será a través de este grupo, porque no habrá secretos, lo que tenga que decir lo diré por aquí, ya sea para las tres o solo para una.

Cada mañana a partir del lunes, me diréis que os vais a poner, o, mejor dicho, cada noche, porque dos de vosotras os levantáis muy temprano y tendréis que esperar mi visto bueno.

En cualquier momento del día, podré comprobar que lleváis lo que me habéis dicho, mediante una foto, que se subirá al grupo.

Desde este momento está prohibido, tocaros, y menos correrse, hoy haréis vida normal, y mañana a las nueve de la mañana pasaré por allí, y empezara vuestra nueva vida.”

Al minuto recibí las tres respuestas, dando su ok a las instrucciones sin poner ni una pega. Ahora tocaba retomar el tema Rocío, así que por privado me dirigí otra vez a MI PERRA.

“Necesito que me digas como editar solo una parte de las grabaciones y llevarlas otro archivo PERRA.

Además por precaución, por si alguna vez hiciese falta para algo me des el teléfono de Rocío y de Miguel, su otro hijo no quería aun levantar la liebre-.”

A los cinco minutos recibí un archivo con las instrucciones para editar las grabaciones, y los dos números de teléfono, sin preguntas, y eso me gustó. Por el momento me despreocupé de todo, y me dediqué a trabajar. A las cinco cuando terminé con el trabajo, me puse manos a la obra, y vi que no era difícil editar y cortar partes de la grabación, así que localicé la parte donde estaba Rocío y la edité, y estuvo más de media hora, aun no sé cómo no se dieron cuenta, pero eso era lo de menos, vio muy bien, como su hermana chupaba el dildo con el que la novia de su hermana se iba a follar a su madre, y como una vez lubricada, estas la mandaron al suelo y le prohibieron tocarse. Pude comprobar, que por lo menos se había corrido tres veces, y con gran esfuerzo para que no la descubrieran, lo que sí descubrí, es que le gustaba chuparse los dedos cuando se corría. Miré la hora y eran más o menos las cinco y media, y yo sabía, ella trabaja en la empresa de la madre, que salía a las seis de la tarde. Le mandé un whatsApp, con el video, suponía y suponía bien que no tenía mi número, y como en la foto de mi perfil no se ve nada, no me preocupaba, Le acompañé un texto…

“Hola, ¿no sabes que espiar está muy mal?, y por lo que he visto, te gustó, no quiero que contestes, te quiero a las seis y media en la Isla del Zaidin, que cojas una mesa y te sientes, hasta que yo llegue, si no estas, este video lo verán todos tus amigos, y quien no son tus amigos, como veras en el no se aprecia a quien estas espiando, aunque tú y yo sabemos muy bien a quien espiabas.”

Solté el móvil, y no lo miré hasta que salí de la ducha y me vestí, y cuando lo hice, vi el mensaje como leído. Vi que ya eran las seis, y como se tarda un rato desde mi casa hasta donde había quedado, y aunque sabía que ella iba a llegar con el tiempo justo, a trabajar no va en coche, y tiene que coger el bus o el metro, yo me fui para el lugar de la cita. No le quise dar tiempo para que se cambiara, o para que se lo pensara. Llegué aparqué y miré el reloj, eran las seis y veinte, me fui hasta la cafetería, no me quería dejar ver mucho, ella ya me conocía. Conforme bajaba, ella estaba cruzando hacia la cafetería. Llevaba una minifalda vaquera, unos leotardos azules, y zapatillas de deporte, por arriba una chaqueta vaquera a juego con la falda, además de una bufanda y guantes. La vi entrar y detrás lo hice yo, vi cómo se quitaba los guantes, la bufanda y se sentaba, no había mucha gente, así que supongo que sabiendo la conversación que íbamos a tener se sentó en unas de las mesas más apartadas. Me senté frente a ella, y no se dio cuenta, tenía la cabeza bajada desabrochándose la chaqueta vaquera, conforme levanto la mirada y me vio…

-Rocío. – ¡¡¡¡TÚ!!!!

-Si yo, lo mismo da ¿no?, yo no he sido el que ha espiado a su madre, hermana y cuñada. Lo malo no es que las espíes, es que disfrutaste espiándolas, no me lo puedes negar. Supongo que no te quedaste a dormir, si no, me hubiese enterado. -Fue a hablar, pero no se lo permití- Escúchame atentamente, que te gustó, no hay duda, a mí no me importa, solo que no quiero peleas, y nos ha venido muy bien que lo sepas, porque te voy a poner al corriente de todo, y cuando acabe me voy, y tú decides, pero tienes tres opciones, la primera es la peor, montas un pollo, y yo publico este video, la segunda, aceptas, te haces la tonta y no haces preguntas cuando veas cosas raras, porque te informo que ellas ahora mismo están desnudas, solo con medias, lencería y zapatos. -fue a hablar, y otra vez le indique con la mano que se callara-, y tres participas y te unes a ellas. Las condiciones no las se todavía, no sé si eres sumisa, lesbiana con novio, o pervertida sexual, porque dominante no creo que seas, según LA PERRA de tu madre, tu novio no te trata muy bien. Ya puedes hablar.

-Rocío. -No me creo nada, y menos que ahora estén las tres desnudas.

-Calla.

Cogí el móvil y escribí un whatsApp al grupo, y como todavía no sabía si estaban instaladas el resto de las cámaras…

“Las tres a vuestro cuarto ya, de rodillas con las manos atrás”

No miré si lo habían leído, me salí y me fui a la App de las cámaras, al abrirla, me di cuenta de que ya estaban instaladas, me salían varias opciones a elegir, así que pinché en su habitación, y como no sabía cómo iba a ir la cosa…

-Les he mandado un whatsApp a las tres, para que se vayan a su cuarto, que es el único sitio donde hay cámaras, -era mentira, y como he dicho antes, no sé por dónde iba a salir todo-.

Le acerqué el móvil y vimos como entraban las tres, y cuando las vi, me excité, las tres iban en lencería, la de MI PERRA, he de decir que era un poco antigua, eso ya lo cambiaria mañana, pero las tres en bragas sujetador, medias y zapatos de tacón, llevaban zapatos de tacón, aunque yo las había dispensado en mi ausencia de llevarlos. La tres se pusieron como yo les dije, y como ya sabían lo de las cámaras, se pusieron frente a una de ellas. La única que hablo fue MI PERRA, diciendo a la cámara, “si necesitaba algo más AMO”. La cara de Rocío era de todos los colores, así que era difícil saber si era de indignación de sorpresa o de excitación. Le quité el móvil y cerrando la APP les escribí un whatsApp.

“Nada más PERRAS, muy guapas las tres, podéis seguir con lo que estuvierais haciendo.”

No miré nada más, solté el móvil y…

-Bien, que te parece lo que has visto, ya sé que ayer estaba mejor, jajajaja, pero no siempre se ve lo que una quiere.

-Rocío. – No sé qué decir Raúl, ahora mismo mi cabeza va a mil, de lo que puedes estar seguro es que no voy a decir nada, cada persona es libre de hacer lo que desee, eso sí, solo verlas me he excitado. Mira Raúl, aunque no me creas, yo no tengo mucha experiencia sexual, aunque mis madre y mi hermana se creen que sí, espero que no te rías de mí, pero lo que tampoco saben es que aun soy virgen, -fui a hablar, y esta vez fue ella la que me pidió que esperase-, por favor no me interrumpas, si no, no voy a ser capaz de soltar todo lo que llevo dentro. Mi novio es un capullo, él dice que no me va a desvirgar hasta que no nos casemos, así que lo único que hago es chupársela, -cuando dijo esto aún se le subieron más lo colores-, pero a mí no me toca, jo es que no estoy bien, -en ese momento se le escaparon unas lágrimas-, yo sé que él se va de putas, si de putas, como anoche, y es que me lo dice, por eso me fui a casa, que es lo que hago siempre, por lo menos allí me siento protegida, y a la vez cobarde de no ser capaz de hablar con ellas, de explicarle lo que me pasa, ellas me ven como una persona independiente, y eso mismo me hace cobarde Raúl, y por eso vuelvo con él, y no soy capaz de dejarlo, porque en lo demás me trata bien, pero yo no soy de piedra joder. Mi experiencia en sexo es solo chupar y masturbarme, y lo que vi anoche, uffff, como te lo explico, ver lo que vi, ver como trataban a mi hermana, ver como Inés se follaba a mi ¡¡¡MADRE!!!, y ver que disfrutaban, porque vaya que disfrutaron. Al principio sentí rabia, luego envidia, te mentiría si no te dijese que las envidie, y luego, luego ya lo has visto, excitación, mucha excitación.

Se calló, y por su expresión corporal vi que se había quitado un peso de encima, por sus palabras, vi que era sumisa, y esa sumisión, equivocada, por cierto, y de esas sí que realmente he visto muchas, hacia que no dejara a su novio.

– ¿A dónde fuiste?

Se lo dije a la vez que con una mano secaba sus lágrimas, notando como se estremeció al sentir mi contacto, y para dejarla hablar simplemente con mis manos cogí las suyas.

-Rocío. -Me fui, cogí el coche, que ha sido donde he dormido, y cuando he visto a Jorge, salir para su trabajo, he subido a mi casa, me he duchado, he llorado, y para no mentirte, me he masturbado, me he vestido y me he ido a trabajar, aunque he evitado ver a mi madre, creo que me hubiese notado algo.

-Ahora qué vas a hacer y no me refiero a tú decisión, me refiero ahora de ahora, ¿vas a casa de tu madre o a tu casa?

-Rocío. -Antes de todo esto, tenía pensado irme a Málaga a casa de mi hermano, no para contar nada, entonces sí que se lía, y aunque no nos llevamos bien, sé que me podré quedar allí, solo porque no soy capaz de mirar a la cara a mi Madre y mi hermana, sin que se me note, y bueno referente a Jorge, tengo que separarme de él.

-Entonces te vienes conmigo, ¿él ya está en casa?

-Rocío. -Hoy viernes, no, hoy aparecerá a las tantas, y borracho, en eso no hay problema, como muchas veces, solo me hará chupársela.

-Venga vamos a tu casa, has una maleta, solo lo indispensable, y nada de pantalones, esos los dejas allí, solo unas faldas y medias, ya iremos otro día a por el resto. Y te vienes a mi casa, esta noche la pasas conmigo, y no es negociable, mañana iremos a casa de MI PERRA, que es tu madre, pero eso ya lo sabes, y hablaremos del tema.

-Rocío. -Gracias Raúl.

-Gracias SEÑOR, ¿queda claro?

-Rocío. -Gracias SEÑOR.

Fue un tiro al aire, pero di de lleno, vaya familia, como el hermano fuese igual, iba a ser una familia muy completa.

-Vámonos.

Me levanté y esperé a que ella lo hiciese, y mientras se ponía la chaqueta y demás, la observé y pensé que no entendía a su novio, aunque por dentro le daba las gracias, de las cuatro era la más guapa y la de mejor cuerpo. Eché a andar y esperé que me siguiera, en ningún momento miré atrás, no me volví hasta llegar a mi coche. Le dije que me diera la dirección de su casa, y no estaba muy lejos, porque vivían en el Serrallo, una urbanización de Granada. Cuando arranque…

-Mastúrbate.

Se sorprendió, pero no dijo nada, metió la mano entre sus leotardos, y empezó a masturbarse, no la miraba, solo la oí gemir, solo quería ver el grado de excitación, el de obediencia ya lo estaba viendo, y su estado de excitación era tal, que no había salido a la autovía todavía, y eso que está al lado, cuando empezó a correrse, su cuerpo temblaba entero. Cuando se calmó, sacó la mano de su coño, no sabía qué hacer con ella, supongo que deseaba chupársela, pero mis intenciones eran otras.

-Méteme la mano en la boca, quiero probar a qué sabes.

Me la acercó a la boca y se la chupé, y uhmmmm, que bien sabía, y eso me hizo cambiar mis planes, no los de que se viniese a la casa. La dejé recuperarse, su respiración era agitada, seguía excitada, y eso era lo que yo quería. Siguiendo sus indicaciones, llegué a la puerta de su casa, sacando del bolsillo de la chaqueta un mando, abrió la puerta de su garaje, ya que esta es un adosado. Entré en la cochera, y bajé a la vez que ella. Rodeé el coche y me acerqué, la cogí del pelo, y acercándola a mí, empecé a comerle la boca, algo que respondió al instante, empezó a meter su lengua en mi boca, con ansias, con desesperación, la separé de mi…

-Llévame a tu habitación.

Me cogió de la mano, y subimos desde la cochera a su cuarto. Me dijo que no tardaba nada en hacer la maleta, no la dejé terminar. La tiré en la cama, haciéndola caer de espaldas.

-Sabes, si no quieres dime que paré, y lo haré, no cambiara nada, pero si no dices nada, te voy a follar, te voy a desvirgar en la cama del cornudo, la vamos a dejar manchada con tu virginidad.

No dijo nada, le bajé los leotardos arrastrando un tanga blanco con ellos, y sin terminar de quitárselos, yo ya estaba que iba a reventar, metí mi cabeza entre sus piernas, leotardos, y coño y apoyando sus piernas, bastante forzadas, por los leotardos, en mi hombros, me solté el pantalón, y tirando de ella hacia el borde de la cama, ya que esta era alta, sin miramientos se la metí. Empecé a follármela, y era cierto, que era virgen, cada vez que se la sacaba para volver a metérsela, salía manchada de sangre, y eso quería, cuando se la sacaba, manchaba la cama.

– ¿Paro?

-Rocío. -Noooo, siga, ufffffff, no paré, agggggg, me corroooooooo, otra vez, agggggg.

Yo estaba también muy excitado, y quería que se corriera otra vez, seguí entrando en ella, hasta que volvió a gemir, a correrse. Yo no aguantaba más y sin mirar las consecuencias, que podría tener, me corrí, me vacié en ella. No quería parar, quería seguir, así que, sacando la cabeza de sus piernas, le quité las zapatillas y terminé de quitarle los leotardos y el tanga.

-De rodillas ZORRA.

Pegó un salto de la cama y sin importarle como estaba mi polla, que estaba manchada de sangre, se la metió en la boca. Era cierto, que lo hacía muy bien, tanto que no tardó en ponérmela dura, en el fondo era lo que yo quería.

-Uffff, sigue ZORRA, no pares, no te toques, no quiero que te corras.

Cogiéndola de la cabeza, empecé a follarla durante un buen rato, a veces la tenía que sacar porque le daban arcadas, ella la volvía a buscar, y cuando vi que me iba a correr, se la saqué, y aunque me miro con extrañeza, cuando vio que cogí su tanga, le salió una sonrisa. Si, me corrí en el tanga, no tanto como me había corrido en su coño, y si, lo suficiente para dejarle un regalo al cornudo de su novio. Dejé que recuperara el aliento, no mucho, la miré, allí estaba de rodillas, con la chaqueta puesta la bufanda y los guantes, la falda enrollada en la cintura. Me separé lo justo…

-Mírame.

Levantó la cabeza, y en ese momento empecé a mearme en ella, la pilló de sorpresa, no dijo nada, solo me miraba, y sonreía. Cuando acabé, le dije que se levantara, se desnudara, y se duchara, y que todo, todo lo que llevaba puesto, lo iba a dejar allí. No tardó en ducharse, salió desnuda y con una sonrisa nada forzada, se la veía totalmente relajada, distinta a como la vi al principio de la tarde. Se fue al armario, cogió una maleta de viaje, y sacó unas dos o tres cosas que desde la silla del dormitorio donde me había sentado a esperar, no podía apreciar, luego se fue a una cómoda y sí que vi que lo que sacó era ropa interior, y de otro puerta varios zapatos y zapatillas.

-Rocío. -Ya está, el lunes vendré a por todo, aunque no se si cuando vea esto mi ex no se si me dejara entrar.

-Tranquila que lo hará, y si no, no pasa nada, tú coge todo lo que no quieras perder que no sea ropa, ya sean recuerdos o joyas, o lo que quieras llevarte.

Le dedicó diez minutos más a recoger objetos y artículos que se quería llevar, y una vez recogidos, se vistió delante de mí, se puso una falda de vuelo negra, una blusa negra, se enfundo unas medias beige, no se puso ropa interior, y se puso unos tenis.

-Hoy pase, ya aprenderás unas normas básicas, ya te informaran mis sumisas.

-Rocío. -Si SEÑOR, es que quiero salir de aquí ya.

Bajamos al coche, salimos de su casa y nos dirigimos a la mía. Me miro…

-Rocío. -Gracias, pase lo que pase gracias……

 

CONTINUARA….

Soy Amo, me encanta la dominación, me gusta tener, someter y humillar a parejas y a quien se quiera iniciar, necesitar un tutor o conocer este estilo de vida.

Mi Skype es ra_ul1967, mi correo ra_ul1967@hotmail.com y mi Telegram @Amo_Leo, hablo y respondo a todo el mundo, siempre que lo haga con respeto.

Nota del autor: Soy cómo escribo, soy exigente, dominante y no suelo dar segundas oportunidades, cuando ordeno algo es para ser obedecido, algo que suelo advertir a quien desea ser adiestrada o entregarse a mí. No trato con hombres solos, aunque no me importa hablar con ellos. Ni miento, ni juego, ni sigo ni persigo a nadie por muy buena que este o por muy sumisa o perra que sea.

No entiendo a quien estando advertida o advertidos en caso de parejas sumisas, se enfadan conmigo y hasta me tratan de mentiroso o manipulador cuando corto con ellos cuando no cumplen.

Seguro que en la red hay quien los o las acepte, yo no.