Capítulo 1

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  • Mi hermana mi Ama I

Hola, me llamo Esther, y os voy a contar un poco de mi vida, de cómo pase de tener una hermana a tener una Ama, como pase de querer a mi hermana a adorar a mi Ama.

Ante todo, me voy a describir, 1.60, media melena y castaño, unos kilos de más, pero bien puestos, pechos grandes para mi gusto, y culo también grande, pero sin exagerar, y mi hermana Fany, dos años menor que yo, 1.71, muy proporcionada, no estaba delgada, pero tampoco gorda, piernas finas y largas, pechos no muy grandes, pero si muy firmes, y un culo, bueno un buen culo, pero no de grande sino de bien hecho.

Mi hermana al contrario que yo, siempre o casi siempre vestía de forma provocativa, o así lo veía yo antes de todo lo que sucedió, la mayoría de veces con falda y ropa ceñida, le encantan los tacones, ya sea en zapato o en botas, aunque su calzado predilecto era este último, las tenia de todas clases y modelos. Por el contrario, yo casi siempre vestía pantalones, nada ajustados o ropa ancha, no me gustaba, ni me gusta que mi cuerpo se marque.

Siempre me he dedicado a mis estudios, y jamás he sabido lo que es una mala nota, vamos ni tan siquiera regular, pero Fany en eso era distinta, no suspendía, pero siempre iba sacando los estudios por los pelos.

Nuestra relación nunca paso de ser hermanas, nada más, ella pasaba de mí, me veía como un bicho raro, pocas veces le vi un gesto de cariño hacia mí, supongo que por ser tan distintas, no nos llevábamos mal, pero tampoco bien.

Un día por casualidad me entere que ella se había quedado embarazada a los 16 años, pero echando mano de algunas amistades y falsificando algún que otro documento, ella abortó sin que mis padres se enteraran, tampoco me hubiese enterado si no llega a ser por un bocazas amigo nuestro que un día lo soltó delante de bastante gente en la cofradía, aunque no se dio cuenta que yo también estaba.

No dije nada, aunque como he dicho antes, nuestra relación no era muy allá que digamos, era mi hermana, y en ningún momento se me paso por la cabeza contárselo a mis padres, por lo que me calle.

Pero al cabo de unas semanas, nos quedamos solas en la casa, mis padres estaban de viaje, y mi hermano también se había ido a pasar el fin de semana con sus amigos.

Ese viernes por la noche, ella como es normal salió, pero yo no, como era costumbre en mí, me quede en casa y sobre las tres de la mañana, me despertó un ruido muy fuerte en el salón, asustada, baje las escaleras despacio y con la luz apagada, y al llegar al final de estas, vi que era mi hermana que venía con una copa de más, así que me enfade y ……

-Esther. – ¿Qué haces Fany, no puedes tener más cuidado?

-Fany. -No pasa nada, solo he tropezado con la puta mesa, vete a la cama y no me jodas más.

Yo no sé qué me paso por la cabeza en ese momento, porque fríamente, no creo que le hubiese soltado lo que le solté en ese momento.

-Esther. – ¿Qué no te joda más?, no creo que yo te joda, porque de joder entiendes mucho, ¿no?, tanto como para abortar, vete a la cama ahora mismo o mañana mismo llamo a papa y mama, y le cuento que abortaste.

Al principio se quedó de piedra, aunque también se le fue la media borrachera de golpe.

Llevaba una minifalda gris, botas negras altas de tacón, una blusa blanca, un polo gris a juego con la minifalda y unos pantys grises.

-Fany. -Como se te ocurra contarle algo te mato.

-Esther. -Menos lobos y tira para la cama ya de una vez, no me pongas a prueba.

Llevaba un pijama de dos piezas de blusa y pantalón corto, ya que, aunque era invierno, en mi casa con la calefacción, hace bastante calor, e iba descalza.

-Fany. – ¿Menos Lobos?, pero que te crees ¡¡¡PUTA!!!, ¿qué porque seas mayor que yo me vas a dar órdenes?

Y terminando de decir esto se acercó a mí y cogiéndome de los pelos me tiró al suelo, y sin soltarme me arrastro un rato por el suelo.

-Fany. – ¿Qué te crees?, tus amenazas me las paso yo por el coño puta.

Estaba aterrada, pero también extrañamente excitada, aunque no sabía que era eso, porque jamás me había tocado nadie, ni siquiera yo, a mis 19 años aún era virgen en todos los sentidos.

-Esther. -Para por favor me haces daño…

-Fany. -Te jodes, puta, ahora te vas a enterar quien es tu hermana, y lo que sabe tu hermana de joder.

-Esther. -Nooooooo, suelta por favorrrrrrrr.

Me arrastro del pelo hasta el sofá, tirándome de el, me hizo levantar, a la vez me hinco la cara en sofá, dejándome con el culo hacia fuera.

Me soltó el pelo…

-Fany. -No te muevas o te vas a enterar hermanita.

Yo estaba aterrada, pero extrañamente excitada, notaba mis braguitas mojadas, y me dolían los pezones de lo duros que se me habían puesto. Jamás había sentido nada así.

-Fany. -Así me gusta ni te muevas, vas a aprender quien es tu hermana.

Terminando la frase, tiro del pantalón del pijama, arrastrando también mis braguitas.

Con la mano abierta empezó a azotarme con todas sus fuerzas.

-Fany. – ¿A quién le vas a contar tu nada eh?, yo por lo menos me follo a quien quiero, cuando quiero, -todo esto se lo decía sin parar de azotarme-, y tú no vas a decir nada ¿a qué no hermanita?

-Esther. -Uhmmmm, no, pero, para ya por favor -entre gimoteos-, ufffffffff uhmmmm, ayyyyy, para, uhmmmm.

-Fany. – ¿Qué pare?, ¿por qué? ¿a ver?

Y dejándome de azotarme llevo su mano a mi coño.

-Fany. -Uhmmmm, pero que es esto, si va a resultar que te gusta que te peguen, jajájajá.

-Esther. -Nooooooo, déjame ya por favor

Pero en ningún momento me moví, no sabía porque, pero no me podía mover, solo sollozar y gemir, me faltaba algo y aunque no era tonta, como nunca había tenido un orgasmo, no me daba cuenta de que era eso lo que me pasaba y lo que me faltaba.

-Fany. – ¿Qué te deje?, pero si estás chorreando, como una cerda.

Diciendo esto metió tres dedos de golpe en mi coño con fuerza y empezó a follarme, tanto que creía que me iba a desvirgar

-Esther. – ¡¡¡Aggggggggggggg, para!!!, ufffffffff, ¿Qué me pasa?, aggggggggggggg, sigue Fany, no pares por favorrrrrrrr, aggggggggggggg, ¿qué me pasa?

-Fany. – ¿Tan tonta eres?, lo que pasa es que te vas a correr ¡¡¡PUTA!!!

-Esther. -Pues eso, aggggggggggggg, me corroooooooo, no pares, ufffffffff, me muero, pero no pares, aggggggggggggg, sigue por favorrrrrrrr.

Con la mano que le quedaba libre empezó a azotarme otra vez, pero eso aun me puso más al borde de mi primer orgasmo.

-Fany. – ¿Quieres que siga puta?

-Esther. -Siiiiiiii, por favorrrrrrrr, no pares.

-Fany. -Si quieres que siga, ¿te convertirás en mi putita, en mi ESCLAVA?

Yo era la primera vez, que oía esa palabra y en ese contexto, pero aún me moje más, en ese momento le hubiese dado la luna si me la hubiese pedido.

-Esther. -Siiiiiiii, ahhhhh, seré lo que quieras, pero no paressssssssss, aggggggggggggg, me corroooooooooooo, ufffffffff, ufffffffff, no paressssssssss, me corroooooooo, ufffffffff.

Me derrumbe sobre el sofá, el corazón me latía a mil, aun tenía espasmos en el coño, parecía que no se acababa nunca.

-Fany. -Recuerda tus palabras, a partir de ahora serás mi Esclava, harás lo que te pida cuando te lo pida y donde te lo pida, ¿entendido?

-Esther. -Lo que quieras Fany, pero ahora déjame -esto lo dije acurrucada-, no me puedo mover, por favor, mañana hablamos.

-Fany. -Que dices puta, eres mía, y ahora me vas a dar placer a mí, puta, a tu DUEÑA.

Esas palabras, aunque aún no sabía muy bien el significado que mi hermana les estaba dando, iban haciendo que me diera cuenta de lo que me iba a pasar a partir de ahora.

-Fany. -Al suelo puta.

Sin saber porque, me levante del sofá y me tire al suelo, ella ocupo mi lugar en el sofá, una vez sentada estiro una de sus piernas hacia mí.

-Fany-Lame mis botas perra.

-Esther: – ¿Qué?, ¿estas loca?

No me dio tiempo a decir nada más, se incorporó un poco y me soltó un puñetazo en la cara, que me hizo mucho daño, tanto que mi labio empezó a sangrar un poco, pero mi coño empezó otra vez a palpitar.

-Fany. – ¡¡¡Que lamas puta!!!, -mientras lo decía me metió la punta de la bota en la boca-, chupa, y ten cuidado de mancharlas o te mando al hospital de una paliza.

Estaba descolocada, pero sus palabras solo hacían que me excitara más. Sacando mi lengua empecé a lamer su bota, primero una y después la otra. Tras cinco largos minutos de tenerme lamiendo sus botas…

-Fany. -Quítamelas puta y lame mis pies.

-Esther. -Si Fany.

Y otra vez no me dio tiempo a más, aunque esta vez fue un bofetón.

-Fany. -A partir de ahora y para siempre Ama o Señora, siempre que estemos solas o con alguien que sepa que tú eres mi ESCLAVA, solo me podrás tutear socialmente, ¿entendido PUTA?

-Esther. -Si mi Ama.

-Fany. -Pues quítame las botas, puta.

La palabra puta y esclava, cada vez que me las decía, hacia que me excitara aún más. Le quite las botas y con ansia me tire a lamerle los pies, aun enfundados en unos pantys grises.

-Fany. -Espera perra.

Se incorporo un poco y metiéndose las manos bajo la falda tiro de los pantys y empezó a quitárselos, tirando también de un tanga negro, se los bajo más o menos hasta las rodillas.

-Fany. -Sigue puta, quítamelas del todo y sigue lamiendo, uhmmmm, como voy a disfrutar contigo, ufffffffff, hubiese querido un esclavo, pero ufffffffff, tú me vas a resultar más rentable.

Con la mirada bajada, y algunas lágrimas sobre mi rostro, aún no entendía como mi hermana me podía hablar y tratar así, pero también terriblemente excitada, el coño no dejaba de humedecérseme cada vez que mi hermana me humillaba, que sensación tan terrible, pero tan hermosa.

-Esther. -Si Ama.

Como si fuera una perrita de verdad, me puse a lamerle los pies, sus dedos, sus tobillos, las plantas de sus pies, la verdad, no podía parar, una parte de mi lloraba, pero la otra parte deseaba no parar. De repente sentí la mano en mi pelo, y tirando fuertemente, tanto que me hizo gritar, llevo mi cabeza entre sus piernas.

-Fany. -Lame puta, necesito correrme, aggggggggggggg, me has encendido, ufff, mi coño esta, aggggggggggggg.

Jamás había tocado un coño que no fuera el mío, y el mío solo para lavarlo, me quede paralizada sin saber cómo actuar.

-Fany. – ¡¡¡A que esperas PUTA!!!

-Esther. – Perdón Ama, -entre sollozos-, no sé qué hacer….

-Fany. -Lame con tu lengua mi coño, métela dentro, ufffffffff, así, ¿ves?, aggggggggggggg, no es tan difícil, ahora un poco más arriba, siiiiiiii, ese botón, aggggggggggggg, eso es el clítoris perra, aggggggggggggg, sigueeeeeee, aggggggggggggg, mordisquéalo, ufffffffff, más de prisa, aggggggggggggg, me corroooooooo, ufffffffff, aggggggggggggg, ufffffffff, me corroooooooo, chupa y trágate todo lo que sale ¡¡¡putaaaaaa!!!

Sentí su corrida en mi boca, y empecé a tragármela, era tal mi excitación que me sobrevino un orgasmo fortísimo y cruelmente placentero.

-Esther. -Aggggggggggggg, Ama, me estoy corriendo, aggggggggggggg, me corro Ama, uhmmmm.

Como no, mi hermana no reacciono como hermana, sino como Ama, y cuando aún estaba convulsionando, con su pierna me tiró al suelo, y hecha una furia, que hasta me dio miedo.

-Fany. – ¡¡¡Que haces puta!!!!, quien mierda te ha dado permiso para que te corras, no eres nadie perra.

Se levanto y cogiéndome del pelo me incorporo y con todas sus fuerzas me dio una bofetada, que me hizo sangrar más.

-Esther. -Lo siento Ama, -llorando-, no lo puedo controlar, no volverá a suceder, perdóneme Ama.

Aun hoy en día, no sé cómo me salía todo así, como acepté y entendí que era esclava, SU ESCLAVA.

-Fany. -Bien puta, aprenderás por la cuenta que te trae a controlarte, ahora recoge todo esto, y a la cama, mañana ya hablaremos.

-Esther. -Gracias Ama, estoy cansada, aunque no se si podré dormir, pero me meteré en la cama.

-Fany. – ¿En la cama?, jajájajá, no puta no, tu dormirás en mi habitación, pero en el suelo, siempre que estemos solas, dormirás en el suelo, en tu sitio.

Al sentir a mi hermana decir esas palabras a mí se me helo la sangre, pero a la vez sentí como me bajaban líquidos por mi coño y muslos.

-Esther. -Lo que Ud., diga Ama, ¿algo más?

-Fany. -No perra, nada más, pero no te laves, te quiero así de guarra, mañana ya te daré más indicaciones de tu nueva VIDA.

Y sin mirar atrás, echó a andar hacia las escaleras y subió a su cuarto. Como un robot, recogí todo, sus pantys y su tanga los lleve al cesto de la ropa, pero antes, y como ya he dicho varias veces, sin entender mis reacciones, cogí su tanga y empecé a lamerlo, tuve que parar, empecé a convulsionar, como si fuese a correrme otra vez, y aunque ya no estaba delante, no me atreví a seguir. Ordené un poco el comedor, cogí sus botas y tal y como me había indicado MI AMA, me fui a su cuarto. Ya estaba dormida, vi que el resto de su ropa estaba tirada, bueno esparcida por toda la habitación, así que solté sus botas y acercándome al lateral de su cama me tumbe en el suelo, menos mal que había alfombra, y creyendo que no me iba a poder quedar dormida, nuevamente me equivoque, me quede frita al instante, con una sonrisa que… Por la mañana, me desperté temprano, como era costumbre en mí, pero mi hermana como era su costumbre, se levantaría tarde, y si lo hacía como era normal en ella, de malhumor y con resaca. Me levante y como no sabía si me podía lavar o ni tan siquiera vestir, y por temor a meter la pata, me quede como estaba, solo con la parte de arriba del pijama y el sujetador, pero me encontraba bien, muy bien, sobre todo excitada, aun sentía mi coño húmedo, creo que lo tuve así toda la noche. Baje a la cocina y me puse a preparar café, mientras se hacía me puse un plumón encima y unas zapatillas y salí hasta la puerta para recoger el pan que diariamente dejaba el panadero en la reja de la calle, conforme volví me quede otra vez descalza y solo vestida de cintura para arriba. Como no esperaba a mi hermana hasta las doce o la una, me relaje, me senté, me prepare mi café y una tostada, eran la nueve de la mañana, craso error, cuando aún no le había dado el primer sorbo al café, levante la mirada y la vi, la vi en el umbral de la puerta, desnuda, PRECIOSA, y con cara de mala leche, tanto que me empezó a temblar la mano y hasta se derramo un poco de café.

-Esther. -Buenos días Fan… perdone, Ama.

-Fany. -Ni buenos días ni nada ¡¡¡PUTA!!!, quien coño te ha dado permiso para desayunar.

Terminando la frase me arreo un bofetón, que hizo que se me cayera la taza, se me saltaran las lágrimas, más por la falta cometida, que por el dolor del bofetón. La taza cayó al suelo, aunque milagrosamente no se rompió, pero el suelo la mesa, mi pijama, todo estaba manchado de café.

-Esther. -Lo siento Ama, por favor perdóneme, aun no se bien que hacer.

-Fany. -Para empezar, limpia todo esto, y prepárame el desayuno PUTA, tenemos muchas cosas que hacer.

Me levante para coger un trapo y la fregona…….

-Fany. – ¿Qué haces puta?, al suelo de rodillas y limpia el café del suelo con la lengua, y el de la mesa también, ¡¡¡vamos!!!

Me quede helada, no lo esperaba, pero parecía que no estaba dispuesta a dejar pasar una, se acercó y cogiéndome del pelo me tiró e hinco mi cabeza al suelo.

-Fany. -Vamos puta a que esperas, ya te dije ayer que tu vida iba a cambiar, ahora no eres nada, PUTA, entérate de una jodida vez, solo vas a ser lo que a mí me salga del coño, y ahora me sale que seas una fregona PUTA.

Llorando, pero casi a punto de correrme, saque la lengua y empecé a limpiar el suelo con la lengua, cuando termine, me incorpore y de rodillas limpie también la mesa. Sentía un asco terrible, pero el miedo a la reacción de mi hermana, hacia que me aguantara.

-Fany. -Así está mejor puta, ahora prepárame el café y una tostada, y tú con lo que has recogido ahora tienes bastante como desayuno para hoy.

Terminando de decir esto cogió mi tostada y la tiro a la basura.

-Esther. -Ahora mismo Ama le preparo el desayuno, ¿Dónde se lo va a tomar?, ¿aquí, o en el salón?

-Fany. -Arriba perra, en mi cuarto y no tardes PUTA.

-Esther. -Ahora mismo se lo llevo.

-Fany. -Por cierto, puta, te quiero desnuda, siempre desnuda.

Sin mirarla, y sin hacer ningún gesto, me saque el pijama, y me quite el sujetador, dejándolos caer en el suelo.

Ella no espero a ver lo que hacía, conforme me lo ordeno se dio la vuelta y se fue, segura de que iba a obedecerla. A los diez minutos aparecí en su cuarto con la bandeja de su desayuno, ella estaba recostada en la cama, esperándome.

-Fany. -Ponlo en la mesa, puta, y ahora mientras desayuno, pon a llenar la bañera, que mientras me bañas te diré lo que será tu vida a partir de ahora.

-Esther. -Si Ama, ahora mismo.

Mientras ella desayunaba, fui a su cuarto de baño, puse la bañera a llenar, le eché gel y unas sales que usábamos en casa desde hacía años, eran sales de la india, que nuestros padres solían traer de allí, ya que mi padre por motivos de trabajo iba mucho. Estaba ensimismada en mis pensamientos, cuando sentí a mi hermana detrás de mí.

-Fany. – ¿Está listo el baño puta?

-Esther. -Si Ama, está listo.

Se metió dentro, y se tumbó, ya que es una bañera grande.

-Fany. -A que esperas puta, empieza a lavarme.

Cogí su esponja y mojándola, empecé a pasársela por todo su cuerpo, incluidas sus tetas, que ya tenían los pezones duros y sobresaliendo del agua.

-Fany. -Escucha perra, porque no te lo voy a repetir, a partir de ahora siempre que estemos solas, lo primero que harás es desnudarte, y a solas me refiero a nuestros padres y hermano, porque a partir de ahora, vendré con quien me apetezca, y si lo traigo aquí es porque sabrá quién eres, así que también estarás desnuda. Siempre me recibirás de rodillas, siempre andarás a cuatro patas. Comerás y beberás en el suelo, dormirás en el suelo junto a mi cama, ya te procurare unos cojines.

-Esther. – ¿Y cuando estén papa y mama?

-Fany. -No me vuelvas a interrumpir puta o te acordaras.

-Esther. -Perdón Ama.

-Fany.-No me hablaras si no es estrictamente necesario, y si lo haces debes de pedir permiso, te encargaras de la limpieza, de mi ropa, de que mi cuarto este ordenado, me ayudaras a bañarme y a vestirme, y cuando estemos todos, el trato será normal, como siempre, pero a partir de ahora, te inventaras lo que sea, pero jamás habré de levantarme para nada, para nada PUTA, ni poner o quitar la mesa, y menos limpiar, si en algún momento lo tengo que hacer, serás castigada, sea o no sea culpa tuya, te azotare, como lo PUTA que eres.

En la calle puedes vestir como quieras, a mí eso me da igual, así como llevar tu vida normal, a una simple llamada mía lo dejaras todo, sea lo que sea, aunque estés en un puto examen, y acudirás a MI, lo más rápido que te sea posible, ah puta, a partir de ahora tu paga pasara a mis bolsillos, e iremos al banco y me pondrás en tu cuenta también, te iré dando para tus gastos cuando lo crea necesario perra.

Todas las noches que estén nuestros padres en la casa, antes de acostarte pasaras por mi dormitorio si es que no estas ya en él, y me preguntaras si necesito algo, me gusta correrme antes de dormir, y tú serás mi consolador.

Por ahora esas son tus tareas puta, ya te las iré ampliando conforme se me vayan ocurriendo.

-Esther. -Si Ama.

-Fany. -Y ahora entra en la bañera puta, que hueles a lo que eres, una puta.

Diciendo este se levantó y se sentó en el filo de la bañera, y como era lo suficientemente ancha, recostó la espalda sobre la pared y abriendo las piernas.

-Fany. -Cómeme el coño puta, cómele el coño a tu Ama.

-Esther. -Si Ama.

Metí la cabeza en su coño y empecé a comérselo y lamérselo, tal y como ella me indico la noche interior.

-Fany. -Aggggggggggggg, guarra, como aprendes, ufff, sigueeeeeee putaaaaaa, aggggggggggggg, que ganas tenia de tener una puta, ufffffffff, pero que seas tú, ufffffffff, eso me calienta más, una perrita y putita en casa, jajájajá, aggggggggggggg, que bien perra, ufffffffff, vas a hacer que me corra pronto perra, aggggggggggggg, me corrooooooooooooooo, aggggggggggggg, ufffffffff.

-Esther. -Uhmmmm, Ama ¿puedo correrme?, ufffffffff, lo necesito, haré lo que me pida, pero déjeme que me corra, ufffffffff.

-Fany. -Ufff, que puta me vas a resultar, te vas a correr sin tocarte, aggggggggggggg, vale, pero sigue lamiendo perra, aggggggggggggg, quiero correrme otra vez.

-Esther. -Aggggggggggggg, Ama, aggggggggggggg, gracias ufffffffff, me corroooo, gracias Ama, -todo esto lo decía entre lamida y lamida-, aggggggggggggg, me corroooooooo.

-Fany. -Sigue puta me voy a correr otra vezzzzzzzzz, aggggggggggggg, perra, aparta que me meo, puta quítate, que me meo.

Y en ese momento hice algo que me marco para siempre ante mi hermana.

-Esther. -En mi boca Ama, aggggggggggggg, en mi boca, meese en mi boca, ufffffffff, me voy a correr otra vez Ama puedooooo, aggggggggggggg.

-Fany. -Guarra, aggggggggggggg, puta y guarra, pues en tu boca puta, ufffffffff, acabas de ampliar tus funciones, aggggggggggggg, me meoooo.

Empezó a mearse, como estaba recostada en la pared, el chorro de su meada salió como si de una fuente brotase, y mirándola a los ojos abrí la boca y me trague toda su meada.

-Esther. -Aggggggggggggg, me corroooooooooooo Ama, uhmmmm, gracias, ufffffffff, aggggggggggggg.

-Fany. -Sigue lamiendo yaaaaa, perraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, quiero correrme perra, aggggggggggggg, ufffffffff, que guarra eres hermanita, jajájajá, aggggggggggggg, me corroooooooo.

Ambas nos quedamos derrengadas, Mi Ama echada en la pared y yo dentro de la bañera. Como pudo se puso de pie.

-Esther. -Termina de ducharme perra, luego lo haces tú, que tenemos que ir a comprar, que esta noche quiero desvirgar a la guarra y puta de mi hermana, jajájajá.

Al sentir a mi hermana lo de desvirgarme, me mee, pero literalmente me mee, y casi me corro otra vez.

-Esther. -Uhmmmm Ama, será una gozada que me haga el amor.

-Fany. -Jajaja, ¿el Amor?, no puta, solo te voy a follar, solo voy a usarte.

Diciendo esto salió de la bañera y se fue a su cuarto, no espero ni a que la secara, me duché rápidamente y fui a mi cuarto a vestirme. Al cabo de media hora ya estaba en el salón esperándola, como me dijo que me podía vestir como quisiera, me puse un vaquero, una camisa blanca y unas bailarinas, pero en mi ropa interior sí que me esmere más y me puse un conjunto que me compre, aunque creía que jamás lo iba a estrenas, lo veía muy sexy, de tanga negra, con ribetes bordados, al igual que el sujetador, aunque nada más ponérmelo ya lo moje, no podía parar de mojar, era increíble pero no se me pasaba la excitación. Quince minutos después apareció ella, ufffffffff, que hermosa, iba como lo que es una diosa, minifalda negra, medias negras también, botas tipo mosquetero, un jersey rojo de cuello alto, y sujetador rojo también de encaje, sin bragas, (esto último lo sé porque a lo largo del día tuve tiempo de descubrirlo).

-Fany. -Vamos PUTA, coge tu tarjeta que vamos de compras

Cuando remarcaba la palabra puta, ufffffffff, casi hacía que me corriera.

-Esther. -Si Ama.

Salimos las dos hacia mi coche y me indico que fuéramos al centro, y allí me dirigí yo. No tardamos más de quince minutos en llegar y aparcar en uno de los parking.

-Esther. -Donde vamos Fany…

No me dio tiempo a terminar, cuando aún dentro del coche me arreo un bofetón.

-Fany. -Te olvidas muy pronto de que solo eres una PUTA, ¿eh?, Ama, o Señora, perra.

-Esther. -Lo siento Ama, es la costumbre, sé que he de aprender.

-Fany. -Vamos PUTA, sal del coche y vamos al sex-shop que hay detrás del Ayuntamiento.

Al sentir esas palabras, me estremecí, sentí miedo, pero también como se mojaba mi coño. Demasiadas sensaciones y todas distintas para alguien como yo que hasta esa noche no sabía lo que era un orgasmo. En el fondo me sentía bien, me sentía feliz, aunque de vez en cuando se me cayera alguna que otra lagrima. Ella caminaba delante de mí, aunque no me había dicho nada, en ningún momento me puse a su lado, simplemente la seguía, y donde antes veía andar a mi hermana, ahora me parecía una diosa, una reina, vamos mi AMA, y me gustaba. Entro en el Sex-shop, como si lo hiciese todos los días, y yo detrás, pero me puse roja como un tomate. Por suerte era una mujer, y eso me tranquilizo, aunque no era nada guapa, o si lo era no se le podía ver, tenía más maquillaje que una muñeca de la Señorita pepis, no era excesivamente gorda, si con unos kilos de más, pero como llevaba una minifalda negra de cuero o algo parecido al cuero, le sentaba como un tiro y la hacía aún más gorda, además remataba el conjunto con una medias de red, una blusa negra transparente, que hacía que se le viera también el sujetador negro y unos zapatos de tacón pero que tacón, por lo menos de 15 cm. con plataforma, vamos horrible todo ella, me refiero al conjunto.

-Dependienta. – ¿Qué desean? ¿Les puedo ayudar?

-Fany. -Hola, pues la verdad es que si, que me puede ayudar, es la primera vez que entro en este sex-shop, y no sé cómo tienen los artículos expuestos

-Dependienta. – ¿Qué es lo que buscáis?, ¿consoladores? o artículos para alguna despedida de soltera?, esos están….

Mi Ama no la dejo terminar.

-Fany. -No quiero nada de esas tonterías, busco un consolador para desvirgar a MI PUTA, además de un collar con su correa, una fusta, algún látigo, y unas esposas.

La dependienta y yo, nos quedamos paradas, pues ninguna no esperábamos que mi hermana fuese tan directa y cortante.

-Dependienta. -Los artículos BDSM, están allí detrás, y también encontraras algún que otro arnés para que te lo fijes a la cintura. ¿Es esta tú sumisa?

-Fany. -No, no es mi sumisa, es mi Esclava y mi Puta, ¿por qué?, ¿algún problema?

-Dependienta. -No, por favor no se moleste, es que estoy acostumbrada a ver a más de una sumisa por aquí y normalmente cuando vienen, vienen vestidas de otra forma.

-Fany. -Jajájajá, si, supongo que sí, pero ella es así de estúpida, en principio no me importa, ya la iré vistiendo según la ocasión.

-Dependienta. -Pues allí tiene de todo lo que necesite.

-Fany. -Vamos PUTA.

Roja como un tomate, con la mirada al suelo y muerta de vergüenza, la seguí.

No tardó mucho en escoger, bueno tampoco es que hubiese mucho, compro un dildo con arnés fijo, unas esposas, una fusta, y un collar con su correa, al final no cogió ninguno de los diversos látigos que allí había.

-Fany. -Vamos PUTA, saca la tarjeta y paga.

Esto lo dijo mientras soltaba toda la compra en el mostrador.

-Dependienta. -Tienes buen gusto, pero al final no has escogido ningún látigo.

-Fany. -No, quiero una de siete colas, pero no lo tenéis.

Al sentir hablar así a mi hermana, vi que no era ninguna inexperta, o eso pensé.

-Dependienta. -No, no solemos tener de ese estilo, por aquí no hay mucha clientela, que practique el sado.

-Fany. -Dígame cuánto es?

-Dependienta. -Pues 320,00 €.-.

-Fany. – ¿No tiene descuento?

-Dependienta. -No, aunque….

-Fany. -Jajajaja, le doy 250,00 € y mi hermana le come el coño.

-Dependienta. -Ufffffffff, tu hermana no me atrae nada, pero tú, ufffffffff, si, si fueras tú sí que te lo descontaría.

-Fany. -Yo no le como el coño a una vieja como tú, cóbrame todo

-Dependienta. -No era eso, perdone, quiero ser yo la que se lo coma.

A cuadros, así me quedé cuanto sentí a la vieja decir eso.

-Ahh, así que tú eres tan PUTA, como la PUTA de mi hermana, está bien, tienes diez minutos, si consigues que me corra en diez minutos te pagare 250,00€, minuto que pase, minuto que te cuesta 20,00€, ¿estamos de acuerdo?

-Dependienta. -Si, un momento.

Diciendo esto salió detrás del mostrador y se fue a la puerta, cerro por dentro y puso un cartel.

“Estoy desayunando vuelvo en 20 minutos”.

Era un cartel preparado, lo que me hacía suponer que no era mucho trabajo el que tenía.

-Dependienta. -Vamos a mi oficina.

Mi Ama y yo la seguimos, entramos en un coqueto despacho, muy bien decorado, tanto que chocaba con el resto de la tienda, incluida la dependienta.

-Fany. -Vamos PUTA, jamás me ha comido el coño una vieja como tú, pero me pone uhmmmm.

Diciendo esto se subió la falda, dejando relucir su coño, pues no llevaba bragas.

La dependienta se hinco de rodillas y poniéndose a cuatro patas…

-Dependienta. -Siéntate en el sillón, estará más cómoda.

Pero mi Ama, no le gusto, porque le pego un pequeño bofetón.

-Fany. -Termina con Señora, no soy tu Ama, ¡¡pero para ti VIEJA!!, soy Señora.

-Dependienta. -Si Señora.

Mi Ama se sentó en el sillón y abriendo las piernas, cogió a la dependienta del pelo y le metió la cara en su coño.

-Fany. -Uhmmmm, así vieja, aggggggggggggg, se nota que no es tu primer coño, aggggggggggggg, como comes, aggggggggggggg, tu PUTA, arrodíllate y cómele el culo a la VIEJA ZORRA, aggggggggggggg.

Casi vomito al oír a mi Ama pedirme eso, pero también tenía el coño totalmente chorreando, pero teniendo miedo a su reacción si me negaba, me tire al suelo y subiéndole la minifalda a la dependienta, no sin trabajo, pues se la tenía que haber puesto con calzador, aparecieron unas bragas grandes y negras.

Con asco, aparte las bragas y abriéndole el culo metí mi nariz y mi lengua, y empecé a lamérselo.

-Fany. -Aggggggggggggg, sigue ufffffffff, que bien lo comes, aggggggggggggg, me voy a correrrrrrr, aggggggggggggg, que ¡¡¡PUTA VIEJA MAS ZORRA!!!, aggggggggggggg me corroooooooooooo.

-Dependienta. -Ufffffffff, como chupa el culo su Esclava, Señora, aggggggggggggg, tengo el coño chorreando, aggggggggggggg, me voy a correrrrrrr, ¿puedo Señora?

-Fany. -Si guarra, córrete, te lo has ganado, Vieja y guarra, jajájajá.

-Dependienta. -Aggggggggggggg, me corroooooooo, aggggggggggggg, ufffffffff, no aguanto más, aggggggggggggg, me corrooooooooooooooo.

Yo estaba chorreando, tenía las bragas y los pantalones chorreando, deseaba correrme, pero no me atrevía a hablar.

-Fany. -Y tu PUTA, ¿Cómo estás?

-Esther. -Mi Ama, chorreando, estoy casi a punto de correrme, aggggggggggggg, y sin tocarme.

-Fany. -Ni se te ocurra PUTA, túmbate boca arriba.

No sabía lo que iba a hacer, pero la obedecí.

-Fany. -Ya no aguantaba más, ufffffffff.

Se abrió de piernas y empezó a mearse en mi cara, abrí la boca y recibí todo lo que pude…

-Fany-Y tu VIEJA a que esperas, meate en ella

La dependienta aun con cara de asombro se abrió de patas y también empezó a mearme, aunque me puso la ropa chorreando.

-Esther. -Me corroooooooo, aggggggggggggg, lo siento Ama, no puedo aggggggggggggg, me corroooooooo.

-Dependienta. -Pero que Puta, se ha corrido ufffffffff, eso no lo había visto nunca.

-Fany. -Está bien, yo me voy, voy a comprar unas cosas más, tu aséate como puedas y para casa, jajajaja, te aconsejo que no te entretengas porque hueles jajajaja.

-Esther. -Si mi Ama.

-Fany. -Y págale a la guarra y vieja esta, yo me voy.

-Dependienta. -Lo dejamos en 200,00€, es el costo.

-Fany. -Está bien, dale tu número de móvil a mi PUTA, lo mismo te llamo algún día.

-Dependienta. -Uhmmmm, me gustaría Señora.

-Fany. -Adiós guarras, ya hablaremos y tu PUTA, rapidito para casa y después de bañarte prepara la comida.

Y sin decir más abrió la puerta y se marchó.

La dependienta me indico donde estaba el baño, como pude me lave un poco, sin levantar la cabeza le pague, y sin decir adiós salí de la tienda corriendo y procurando no pasar junto a nadie, porque olía, ufffffffff, pero que mojada iba…….

CONTIUARA…

Soy Amo, y me encanta la dominación, sobre todo me gusta tener y someter a parejas.

Mi Skype es ra_ul1967, mi correo ra_ul1967@hotmail.com y mi telegram @Amo_Leo, hablo y respondo a todo el mundo, siempre que lo haga con respeto.