Experiencia sexual con mi San Bernardo

Hacía muchos días que había estado teniendo sexo con mi amiga Laura (la de Me Iniciaron) hasta que al segundo mes de nuestra desenfrenada rutina resultó favorecida con un sorteo por un viaje a Matinhos en Brasil, fueron 15 días que no olvidaré por el resto de mis días.

Después de dos días de ausencia de Laura, mi excitación iba en aumento ya que ella me tenía acostumbrada a dos o tres sesiones de sexo al día convirtiéndose en una gran necesidad, ante tanto deseo, empecé a rentar videos de sexo entre mujeres y de machos que se cogían a pequeñas y frágiles mujercitas, esto me excita mucho, (me gusta ver a niñas como yo ser tomadas casi sin permiso y sentir la verga entre sus manos y después que le pongan la cabeza de la verga en la entrada de la vagina y que se la hundan toda tooooda… hasta los testículos y que empiecen a bombéaselas hasta que salga toda la leche, y escurra hasta las nalgas.

Un día en el vídeo club, dando vuelta por la zona delimitada por una «cortina» vi algo que me llamó la atención, era un vídeo en donde la portada me mostraba a una chica debajo de un perro San Bernardo, inmediatamente esto causó una sensación que no había sentido hasta ese momento, una renovada hambre por el sexo…

Me imaginé casi en ese mismo instante una escena bestial, casi de cuento de hada.

Me imaginaba tirada en mi salón principal junto a un can lamiéndome toda. Sabía que los perros lamían rápido porque los había visto tomar cosas.

En ese sueño despierta no distinguí qué raza pero sí me alcanzó para saber que no era una sensación humana.

Desperté de mi sueño cuando la chica del vídeo tocó mi hombro y sonriéndome mirando en mi mano tamaña película, me dio una tarjeta que guardé nerviosamente en mi cartera.

Al llegar a casa busqué sin demoras la tarjeta, me causaba una enorme intriga y excitación.

Miré y tenía un numero de teléfono escrito con una leyenda

«Su Veterinaria». No pensé ni dos segundos, tomé el teléfono y hablé , me atendió una chica diciéndome que era la línea de compras por teléfono, le dije que era un regalo para una amiga, que eligiera al San Bernardo más bonito, y le pusieran un moño, todo con cargo a mi tarjeta y no me importaron esos 300 dólares con vacunas y baño incluido.

A las dos horas sonó el timbre de la puerta, pregunte quien era y me contestaron., De la veterinaria!, el hombre apenas alcanzó a verme, diciéndome que el perro se llamaba «Tobi» firmé el papel y metí a mi nueva mascota.

Estaba loca de excitación, tanto que me arranqué la tanga con la que andaba y quedé sólo con la parte superior del camisón de seda.

Lo miré y era un hermoso San Bernardo, con un gracioso porte, le dije hola ¡Tobi!, le acaricie la cabeza y creo que me tomó cariño inmediatamente, ya que el restregó su cabeza en mi cadera.

Esta situación me calentó de sobremanera y él parecía oler en el aire como estaba yo de excitada, olfateó cerca de mi hasta identificar el lugar donde se originaban tan agradables olores.

Se volvió como loco y empezó a correr de un lado para otro volviendo a oler mi vagina que ya estaba empapada y mis jugos escurrían por mi entrepierna.

Me recosté en el sillón con las piernas abiertas esperando que su instinto funcionara pero grande fue mi desilusión cuando éste se echó a dormitar a mis pies.

Mi enojo tubo que ser apaciguado metiéndome los dedos en mi vagina, con él mirándome fijamente, yo gritaba y gemía como loca pero él sólo me miraba fijamente hasta que exploté sobre ese sillón, mojando su terciopelo rojo.

Me desilusione esa noche por no haber satisfecho mi más salvaje fantasía, pero grandes serían mis sorpresas al día siguiente…

Me levante y me metí a bañar, salí del baño, y entre a mi habitación, en eso, sentí un jadeo detrás mío, me quedé paralizada desnuda en medio de la habitación y de repente recordé quién era, me di vuelta enojada y le dije:

– ¡Tobi!, nunca más me asustes así, eso no pareció molestarlo en lo más mínimo, sino que se acercó a mí meneando la cola y restregando su cabeza contra mi vientre.

Esa situación no me pareció extraña, pero cuando me secaba el pelo frente al espejo de mi habitación sentí que Tobi se metió a olfatear mi trasero como identificando el olor a hembra deseosa de tener sexo.

Sentí su nariz fría recorrer la raya de mis nalgas y me dio un poco de escalofrío pero a la vez me estaba excitando la forma como lo hacia.

Me incline un poco, desnuda como estaba, y me arrodillé sobre el piso, dejándole ver todo mi trasero, su lengua instintivamente fue a parar a los labios de mi vagina, era larga y áspera, yo nunca había sentido una lengua como esta, sus lengüetazos no eran superficiales eran muy profundos y rápidos metía su lengua entre los pelos y mis labios de mi vagina, empezando por mi clítoris y acabando en mi ano, pronto noté que mi vagina estaba secretando muchos jugos, yo gemia. y le pedia mas , susurraba… ¡así!, Tobiii¡¡.. !hazlo¡.. hazló¡ ayy¡ Tobi..¡¡ assii..¡ mas… mass¡¡ asiii¡ ¡hazlooo!! !!tooobii.masss.ayyyyy..¡¡ assiii… mmasss!!.. mmasss..ayyy..¡ humm..ayyy… masss.massss.¡¡ estaba muy caliente su lengua cada vez iba mas y mas profundo, yo, ya deseaba que el se montara en mi.

Tobi, no paraba de lamer, y yo quería que me lo hiciera con su pene, así que me recosté. y cerré las piernas, el se empezó a desesperar note que su pene estaba ya con una parte de fuera y aventaba chisguetitos de un liquido caliente y transparente, lloriqueaba y daba vueltas , yo volví a levantar mis caderas y el otra vez incrustó su hocico en mi panocha por atrás lamiéndola como si fuera un dulce o algo así. ¡¡¡Gau!!! ¡¡¡ayyyy.!!! grité desenfrenada buscando una explicación a tanto placer que me estaba dando este bicho pervertido, no podía contener mis caderas, trataba de que él llegara mejor con su lengua dentro de mí, no parecía saciarlo nada, me lamía con una rapidez impresionante, assii! ¡Toobi.! asiii..! ¡¡¡coometelaaa..!!! ¡¡¡¡cooommmeeeteelaaaa..ay..ayyyy!!!!..¡uhggg! humhm! uhggg! ¡humhmmm! ayyyy..! asiiii..! mmasss!!!. en ese momento me empece a venir sintiendo espasmos en mi ano y mi vagina, palpitaba toda, mass.. tobiii. mmmass. aayyy ¡¡¡ ayy..asiii!!!.. ¡assiiiii!. ¡ayyy!. ¡¡me!! ¡¡¡chorreeeooo..ayyy..!!! ¡¡me!!! ¡¡¡veennggoooo.!!!!!humyaaààà…aiììììyyyy.! ¡¡¡meeee…¡¡¡¡vveeennnn!!!…ggoooo!!!!! ¡¡uhggggg! ¡¡humhummmm!! ¡uggg! uuuhhhaaauuuuuu!!! fueron varios orgasmos seguidos, estaba aturdida , me tenía demasiado excitada, pero no sabia si podría soportar otro más, entonces con mis pocas fuerzas, quise retirar mi trasero de su hocico, pero mala fue mi idea porque él seguía con atención y rapidez mis movimientos, en cuatro patas me moví un poco hacia adelante y esto pareció enardecerlo más, metiendo su lengua mas profundo y con mas rapidez, propinándome nuevamente otro orgasmo…¡noooo!’¡yaaaa..!¡nnnooooo..Tooobiii!!!!¡yyaa!!¡¡¡nnnnoooòò!!!..¡¡¡ppuueeeeddooo!!!..¡yyaa! ¡Toobbii.!! ¡Yaa Toobiii!!. ya no¡¡¡puueeeddooo!!. Apoyé mi cabeza sobre la cama aún en cuatro patas, casi desfalleciendo sin aire, sentía mi panocha empapada, pase mi mano y sentí como escurrían mis jugos por mis muslos, estaba en eso, cuando sentí el peso de su cuerpo sobre de mí.

¡¡¡Me quería coger!!! y yo estaba rendida por mis orgasmos, me quería poner de pie pero era muy pesado para mí, mi panocha estaba tan húmeda que el piso estaba mojado debajo mío, sentía cómo se meneaba tratando de meter su enorme y grueso pene que chocaba contra mis nalgas y otras veces pasaba entre mis piernas tocando mi abdomen, lo sentía gigante, y el seguía encima de mi moviéndose desesperadamente sin lograr su cometido.

Miré hacia atrás y vi cómo estaba él con su lengua de fuera haciendo movimientos como si yo fuese su perrita.

Este pensamiento invadió mi mente en ese instante, y grite de lujuria y excitación, pero mi grito fue apagado por otro que di, cuando Tobi, luego de intentar varias veces, coloco su miembro en la entrada de mi vagina que estaba muy mojada, y de un fuerte empujón, metió su enorme verga hasta el fondo, sintiendo en ese momento, sus mas de veinte centímetros que creo media su miembro hasta su bulbo, y todo estaba ya, adentro de mi vagina.

No!!Tobi!!, nooo!!!Tooobiiii!!!! ¡¡¡no más!!!, ¡¡¡basta!!!,!baasstta!! grité desesperada, ¡¡¡perro malo malo!!!, sentí que su pene me había lastimado, su embestida había tocado lo mas profundo de mi vagina, no ¡Tobi!.. ¡¡¡ya nooo!!!, pero el ya no entendía ,estaba como loco apretándome la cintura con sus patas delanteras, y cuando sintió, que su pene estaba adentro de mi!, comenzó a bombearme rápidamente con mucha desesperación, llegándome nuevamente, hasta lo mas profundo de mi vagina.

Era impresionante, miré a mi costado para ver al espejo de la habitación y pude verme como una perra, jadeando al ritmo de este monstruo canino, después de la impresión, y viendo la escena en el espejo me controle, el dolor cesó, y empecé a disfrutar todo lo que tobi me estaba haciendo.

Mi vagina hacía mucho que no recibía un miembro tan grande, me sentía toda llena, invadida con su enorme verga, bombeándome sin piedad ignorando mis gritos de dolor y placer.

Durante todo el rato que Tobi me estuvo poseyendo, y en su desesperación, se zafo varias veces, se bajaba y me excitaba ver como le colgaba su ¡¡¡vergota!!! era realmente grande., escurriéndole lubricante, me lamía la vagina y se volvía a montar en mi, me volvía a meter de un solo empujón todo su enorme miembro, yo gritaba como una loca cada vez que introducía su ¡vergóòòta! dentro de mi vagina, esto lo hizo varias veces y grite desenfrenada ¡¡¡aayyyTooobbi!!!.. me ¡¡¡lastííímaaas!!!.. ¡¡nnnoooo!!..¡¡maaaasssss!!!.. ¡¡maasss!! ¡¡assssiiii.!! ¡asi!..¡asssssiiii!! ¡noo!.. ¡¡nnooo!!.¡nooo!!¡loooóóó!¡¡¡¡saaquueesss.!!!! ¡nnooo!..uhmmmm.!uug ¡masss!!noooloo¡¡¡¡saaaquueeessss!!!..Toobiiii!!masss!assíííí!!¡¡meteeelaaaa!! ¡mass!…¡¡maaaaasssss!!….¡aayyy¡¡¡ouchhh!.meteeeemmeeeláááá!!!…¡toodaa!!! ¡¡¡¡tooooddaaaa!!! asi..assiii..!asi..aasssíííí !! ¡¡Tobíííííí..!! era una locura, noté que tenía una resistencia impresionante, fueron como unos 20 minutos en los que me movía de un lado a otro de la habitación se zafaba , me lamía, se montaba otra vez , yo sudaba y él no paraba de darme por detrás, y cada que se bajaba y me volvía a montar me echaba un liquido caliente . por eso me sorprendí cuando empezó a detenerse y a lograr movimientos más violentos dentro de mí, tanto que apoyaba las manos en una pared mientras me empujaba hacia ella, me estaba volviendo loca y disfrutaba muchísimo, pero de un momento a otro, sentí cómo se hinchaba su cosa más y más, ¡¡¡no podía soportarlo!!!, sentía una cosa queriéndome entrar y no podía entrar porque estaba muy gruesa, estiré mi mano y sentí que era como una pelota, no llegué a distiguir qué era porque no me dio tiempo a mirarlo, ya que Tobi empujo fuertemente y su verga entró totalmente dentro de mí vagina, abriendola al maximo, arrancándome un desgarrador grito de dolor ¡¡¡¡ahuuuuchh!!!!. ¡¡Ahuuuuchhh….. nnooooo..!! ¡ayyyy nooooo!!…. ¡ayyyyyy.!! ¡¡¡¡me partessss…!!!!! ¡¡meee.. paaarrrtéééssss!!!…!! dueeleee..!! oucchhh!! .. ayyyyy!! ..¡noooo! ….a la vez sentí una fiebre de excitación, su miembro estaba demasiado grande y ya casi no se podía mover dentro de mi vagina, estaba completamente llena, junto a esto sentí como unos chorros chocaban en lo mas profundo de mi, inundándome toda la vagina, fueron como siete volví a venirme junto con el, aaaayyyyyy!!.. nnnoooo!!!… mmmeeee..! vveeenn….ggooooo.!!! yaaa…!! yaaaa.!!! yyaa.!!! yyaa!! yyaaa!! Tooobíííí.!! yáááááá!!, el se quedo quieto y jadeaba ,su vergota empezaba a dar pulsaciones, sentía que mi vagina iba a estallar era doloroso pero tremendamente atrapante, me sentía su perra, estaba en ese pensamiento cuando sentí que él quería bajarse de mí. ,no sabia que hacer. el se bajo y paso su pata trasera encima de mi espalda arañándome y quedamos pegados , empezó a arrastrarme con él mirando para el otro lado, no podía zafarme y mientras, chorros de su semen me llenaban aun más, era caliente y me quemaba por dentro, era algo difícil de describir.

Yo me retorcía y era hermoso como me sentía sometida y humillada. ¿qué hubiese pasado si me hubiera visto alguien? ¿y si llegaba el jardinero? ¿Si mi Laura me viera, me dejaría?… Todas esas interrogantes me hacían sentirme la peor de todas pero a la vez me sentía la más puta y la más sexy.

Lloré como una loca sintiendo cómo acababa dentro de mí y me imaginaba estúpidamente que tendría cachorritos en unos meses. Parecía una niña asustada sin saber lo que sucedería.

De pronto sentí que el muy pervertido pegado a mí, quería continuar cogiéndome y empezó a jalar, se movía hacia delante y cedía me jalaba y retrocedía, yo sentía como le punzaba su ¡¡¡vergota!!!, estaba hasta dentro y el seguía, retrocedía y jalaba más y más rápidamente, era diferente ya que el no estaba encima de mi, me sentía mas cómoda y sentía su enorme verga atrapada dentro de mi vagina con su enorme bola destrozándome interiormente la entrada de mi panocha, hizo esto durante un breve rato hasta que volvió a echarme otros chorros de semen hirviendo tanto que Explote toda, que creo, que de mis tetas tan duras como una piedra salía una especie de liquido transparente y mis pezones parecían medir un centímetro.

Me comencé a asustar cuando noté que no se despegaba, había leído por ahí que ellos se despegaban cuando el macho acababa en la hembra, pero éste ya lo había hecho dos veces, su cola se meneaba en el aire como si estuviera contento de tenerme atada para él.

Yo en cambio caía una y otra vez en nuevos orgasmos resultantes de sus movimientos acompasados dentro de mí.

Luego de una media hora no logró soltarse y se echó conmigo pegada a él en el piso, ladrando de felicidad imagino, mientras me forzaba su cosota a estar con él detrás, lamiéndome el cuello y las orejas como agradeciendo lo lindo que me había cogido y que me estaba cogiendo, parece que las diferentes anatomías habían tomado un rumbo bastante extraño ya no podía zafarme, se imaginan.

El perro echado en el suelo y conmigo entre sus piernas, con un miembro rojo enorme, enormmeeeee, atravesándome toda…. Era algo realmente perverso y excitante, algo no probado por mí nunca y que me estaba volviendo loca…de placer.

Pasaron varios minutos más hasta que empezó a jalar, y noté cómo lo sacaba lentamente al desinflamarse, un poco, el bulbo de su pene, el se paro, dejándome en el suelo con las piernas abiertas chorreando de todo por ellas, mi vagina estaba totalmente abierta creo que me entraba la mano completa y el con su enorme pene rojizo colgando, y pude observar su bulbo como del tamaño de un puño, pensé de que tamaño estaría cuando me tenia pegada y no lo podía sacar, era enormeee realmente enorrrmmmeeee!!!.

Quedé así tirada por una hora más dándome cuenta que eran casi las 2 de la tarde, me incorporé como pude y me di una ducha pensando en los muchos días que quedaban hasta que volviese mi Laura…