relatos eróticos tetazas

3 relatos

La confesión de mi comadre

4,50 (2 votos)
Se separó de mí poniéndose en cuatro patas sobre la alfombra y volteando su cabeza hacia mí me decía, cachame mi amor, méteme tu verga rica y hazme gritar, si quieres que sea una puta lo seré, pero métela de una buena vez.

Esclavos de Lucía II

0,00 (0 votos)
Las erecciones de los 3 eran descomunales, estaban muy excitados, los 3 capullos estaban en su máximo apogeo y derramaban líquidos por el cuerpo de mi mujer y por la cama.

Verónica la tetona: ella era su obsesión

0,00 (0 votos)
Yo tampoco era virgen, ya que me había cogido a mi sirvienta como tres veces antes de que la corrieran (esa es otra historia que luego contare). Total que yo me la estaba dedeando en la cama mientras nos besábamos apasionadamente y nos lamíamos el cuello, ella el pecho y yo sus tetas.