se retiró y fue por una colchoneta, me empezó a besar, me acostó y se puso en medio de mis piernas y empezó a mamar mis tetas, yo ya lo quiera adentro de mí, que me poseyera...
No sé qué me pasó, estaba totalmente entregada a él, pero como dije que no diría no a nada, finalmente me metió su dedo en mi culo. Primero sentí dolor y molestia, se sentía muy raro, pero después empecé a excitarme con ese jueguito que me estaba proponiendo.
Mi cuñado me tenía agarrada fuerte por las caderas y empezó a penetrarme con todas sus ganas. Yo me puse loca y juro que lo sentí todo muy rico.
Mi esposa cortó de golpe con los besos y se arrodilló delante de su macho, él abrió el pantalón y ella metió una mano y sacó una verga que era mas grande que la mía, a pesar que la de él estaba muerta y la mía bien dura, así y todo, me ganaba en tamaño.
Todo comenzó como una fantasía. Finalmente hecha realidad. Nunca pensé que disfrutaría tanto.
De vacaciones con mi familia, cuando menos me lo esperaba, tuve un encuentro de sexo salvaje con un colombiano.
Siempre tuve la fantasía de ver a mi esposa con otro en la cama... y tantas veces lo imaginé, que finalmente mi esposa decidió cumplírmela. No es una infidelidad, son cuernos consentidos.
De vacaciones en un All Inclusive, charla va y charla viene, hablamos con mi compadre de mi fantasía de verlo cogerse a mi esposa... y una cosa llevó a la otra... y en las vacaciones todo puede pasar.
Ese fue el despertar de mi pasión por el sexo anal… Después de esa tremenda cogida. descubrí un mundo nuevo. Un mundo al cual me había negado sin saber muy bien porque durante tantos años… Pero como las mejores cosas en este mundo, yo también descubrí esta por casualidad… Y no pienso desaprovecharla
En este primer relato les contaré como conocí a mi futura esposa y la rica cogida que le dí ese mismo día, ella jura que nunca había hecho eso pero jamás le he creído