Fue entonces cuando me decidí y me acomode se la chupe de a golpe y el jadeaba y me decía acomodate mejor, yo hasta ese momento no habría los ojos para nada solo me acomode en la cama y seguí chupando y acariciando su cuerpo, nunca pensé hacer eso y con mi hermano nunca aun, entonces me alejé de su pichula que por cierto ya estaba bien tiesa media unos 17 cm.
Acompañada por una ajustadísima blusa blanca de algodón, algo transparente, sin sujetador, un escándalo para mis pezones. Casi me corro (es un decir) con tantos piropos. En un momento me crucé en el pasillo con Sergio.
El chico y unos amigos se dieron cuenta de las intenciones lujuriosas que ella llevaba y como su marido se había quedado dormido a causa de su borrachera, decidieron que esa sería la gran noche para desinhibirse.
Me pidió el teléfono, para salir, hasta ese momento no había hablado, fue cuando le dije, vos lo sabes PAPA, al escucharme, me reconoció, creía me iba a pegar, por el contrario, me beso como un amante, nos fuimos a una pieza y esta vez lo cabalgue, otra vez en éxtasis, paso el tiempo mi vagina parecía una doble puerta, para sentir el goce que mi alma pedía, con todo su falo adentro lo besaba y le decía !!bien papi, bien!!