Capítulo 1
- Obligado por la hija de mi jefe I
- Obligado por la hija de mi jefe II
- Obligado por la hija de mi jefe III
- Obligado por la hija de mi jefe IV
Tengo 25 años, estoy comprometido, todo era perfecto, una buena novia y un buen trabajo, el otro dia escogimos piso y ya sabemos la fecha de la boda.
Los problemas empezaron cuando mi jefe, me traslada de departamento, a propósito, soy programador.
Primero estaba contento ya que me asignaban como miembro de un equipo bastante experto y me aumentaban el sueldo, pero por desgracia la encargada de esa zona era Bea, la hija del jefe.
Bea es apenas una adolescente, tiene 20 años, aunque aún no es experta, ya es encargada, simplemente porque su padre es el jefe, bueno vamos a lo que interesa, Bea tiene el pelo rizado rubio, no es muy alta pero tiene una cara maja, su cuerpo tampoco está mal.
La cuestión es que Bea se enamora de mi, aunque yo no muestro interés por ella y menos estando a punto de casarme.
El otro dia nos atrasemos un poco y me pidió que me quedara.
Nos quedemos solos en las oficinas, estábamos juntos en el mismo ordenador, yo estaba terminando unos trabajos, ella aprovecho para situar su mano en mi pierna, yo al principio no hice nada, pero ella fue subiendo lentamente hasta que llegó a la altura de mi miembro, yo no pude evitar la erección, pero le aparté la mano.
-Para!Tenemos trabajo-le dije.
-No importa, podemos terminarlo mañana.-dice ella. -Bea, debes de saber que me voy a casar- le dije -Me da igual, nos e lo contaremos a nadie-dice ella.
-No! No quiere engañar a mi novia, lo siento, seguro que hay muchos otros tipos-le dije a ella no parecía importarle porque me volvió a situar la mano, esta vez fue directamente a tocar la parte de mi miembro, antes de que me apartara me dice:
-Supongo que te gusta tu trabajo.
Yo sabía que no era imprescindible en la empresa y que si Bea quería me podían echar, eso no me lo podía permitir, por eso no retire su mano.
Pero no se conformó con solo tocar por encima del pantalon y empezo a bajarme la cremallera.
-No – le dije
Sin hacer caso me saco mi erecto pene y empezó a pajeamelo durante un rato, yo ya no estaba por el trabajo, estaba deseando irme, si mi novia se enterase, además, yo no me sentia atraido por Bea.
Cuando lo soltó me alivie, pero no duró mucho.Ella llevaba un vestido hasta las rodillas, se lo levantó y se quitó las bragas.
-Quiero que me comas el coño- me dijo
-Eso no lo haré, le diré a tu padre todo.-le dije.
-A quien piensas k creerá??-me dijo – si me lo comes te dejare tranquilo.
No tenia nada que hacer, a mi me daba algo de asco, no se lo chupaba ni a mi novia, esas cosas no me gustaban hacerlas.
Me acerque lentamente y situé mi cara en su coño, ella empujo con su mano mi cabeza apretándolo fuertemente contra ella mientras me decia:
-Quiero que saques la lengua cabron o no te dejare que respires.
Tuve que sacar la lengua, me daba angustia y casi no podía coger aire, el muy cerda me mantuvo al menos 10 minutos, al final se corrió.
Cuando terminó se puso las bragas y me dijo que ya podía irme a mi casa, me quede tranquilo, porque yo no tenia intencion de llegar más lejos, prefería el despido, sin dudarlo me fui a mi casa.
Bea se quedó en las oficinas y sonrió mientras miraba hacia la esquina, donde se encontraba una cámara de video.