En clases
Si alguien me preguntase alguna vez si la escuela es más importante que mi vida sexual, le diría con toda tranquilidad que no es que sea más importante, si no que está primero.
Sin embargo, y aun sabiendo eso, ayer en el colegio me pasé todo el tiempo fantaseando con sexo.
Ayer me quedé mirando a mis compañeros de clase como si fuera la primera vez y me di cuenta que hay uno que otro que están de lo más interesante.
El que estaba sentado en el pupitre del frente, por ejemplo, Carlos, de pelo negro, lacio, su cuerpo bien formado por la lucha olímpica.
Si alargaba la mano, podía tocarle el cabello y la nuca. Cerré mis ojos y me lo imaginé parándose frente a mí, tocándome la cara.
Lo estoy viendo ahora mientras se abre los pantalones y me mete su verga dormida en mi boca.
Me gusta chuparla así, cuando todavía no se ha parado del todo y está blandita. Me la meto en la boca y comienzo a mamar.
Siento como va creciendo en mi boca. Carlos me sube la falda hasta dejar gran parte de mis blancos muslos a la vista de todo el que quisiera mirar. Despacio, sin prisas, mete su mano en mis braguitas y me agarra la chochita.
Comienza a frotarme el clítoris. Yo mientras le sigo mamando su verga que cada segundo crece más. Le chupo la puntita y con la lengua le acaricio el agujerito.
Meto uno de sus peludos huevos en mi boca y enredo sus pelos en mis dientes.
Abro bien las piernas y me siento en la orillita de la silla para que me acaricie la chochita mejor.
Nosotros dos haciendo esto, pero veo que la clase sigue normal. La profesora esta de pie explicando algo sobre literatura latinoamericana y el resto de mis compañeros escuchando.
De pronto siento dos manos en mi espalda.
Pero no quiero soltar la verga que tan rico estoy mamando para voltearme a ver quien es.
Siento que esas manos me sacan la blusa de la cintura de la falda y me suelta el sujetador y lo tira al suelo.
Mis senos salen disparados hacia arriba y tiemblan un poco al sentirse libres, pero no por mucho tiempo pues mi nuevo amante comienza a masajearlos, rozando mis pezones con sus dedos.
Yo mientras sigo mamando la verga de Carlos y sintiendo su mano en mi panocha. Ya está por completo parada y brillante con mi saliva.
Entonces Carlos me pone de pie y se sienta él en la silla. Empieza a jalarse su verga haciéndome señas de que lo cabalgue.
Me quito las bragas y me enrolló la faldita en la cintura para sentarme en su verga, ya dura. La agarro con una mano y me voy sentando y me la voy metiendo lentamente.
Siento como va entrando cada centímetro de sus hermosos 20 hasta que me llena por completo y siento que me va a partir en dos.
Empezamos a movernos arriba y abajo, siento su verga que entra y sale de mi panocha. Ahora Luis (mi amante invisible) está frente a mí tiene su verga afuera y se la está sobando.
Yo la agarro y la meto en mi boca. MMMMM tengo la verga de Carlos en mi coño y la de Luis en la boca. Se la mamo bien, la chupo, le paso la lengua.
Lo agarro por las nalgas y meto toda su verga despacio, fallándolo con mi garganta, hasta que siento sus huevos en mi barbilla y sus pelos me hacen cosquillas en la punta de la nariz.
La clase sigue como si nada pasara.
De pronto siento una lengua en mi clítoris. Es Rudy que sentado en el suelo me esta chupando la chocha, el clítoris, mientras todavía tengo la verga de Carlos adentro.
Siento un gusto cabrón con esa lengua moviéndose ahí abajo donde más me gusta mientras me meten una verga como si quisieran matarme.
Luis también esta gozando pues yo le estoy haciendo un buen trabajo con mi boca.
A esta altura ya no cabemos los cuatro en la silla. Nos vamos al fondo del salón.
Mis tres chicos se desnudan y sin mediar palabras, ya cada uno sabe lo que tiene que hacer. Carlos se tira boca arriba en el suelo y yo vuelvo a sentarme encima de su verga.
Apoyo las manos en el suelo y me la clavo en un solo movimiento. Empiezo a mover las caderas como una loca. Luis se arrodilla, me agarra las caderas, me abre las nalgas y comienza a meterme su verga por el culo.
Me la mete completa, sin miramientos y sin preliminares. Grito como loca, pero nadie nos presta atención. Cuando se calma un poco el dolor en mi culo nos acomodamos los tres y comenzamos a movernos.
Entonces Rudy se arrodilla delante de mí para que lo haga venir con mi boca. Me meto su verga en la boca y la chupo.
Siento las manos de Luis que me soban los senos y me pellizca los pezones. Empezamos a movernos más rápido.
Carlos es el que tiene el aparato más grande de los tres y la siento dura en mi chochita. La verga de Luis (todos sus 18 cms) en mi ano me esta haciendo gozar como nunca.
Tengo la polla de Carlos metida hasta el tronco, pues el peso de Luis me hace presión hacia abajo. La tengo tan adentro que nuestras ingles se están tocando y lo estoy mojando todo con mi leche.
Siento que me estoy viniendo y grito y con las ansias le chupo la verga mas duro a Rudy, que lanza un gemido también. Luis es el primero en venirse en mi ano.
Me saca su verga y ayuda a Carlos agarrándome por las caderas y moviéndome.
Más rápido, más rápido. Todavía estoy temblando por el primer orgasmo y siento que me viene otro más.
Carlos me esta metiendo cada vez más rápido y duro su verga.
Suelto la de Rudy un momento y me agarro las nalgas y la abro y aunque parezca imposible, siento la verga mas adentro. Carlos levanta la espalda y yo le pongo las piernas alrededor de su cintura.
Me empieza a chupar los senos. Ya siento que Carlos se esta viniendo.
Va más rápido mas rápido y con un ultimo empujón, se viene. Yo me vengo por segunda vez.
Rudy estaba viéndonos, haciéndosela frente a nosotros. Cuando termina mi orgasmo, Rudy me mete su verga en la boca, para que le termine el trabajo.
Se excito muchísimo viéndonos a Carlos y a mí. Le chupo la verga para que se venga, esta es la leche que me voy a tragar, pues las otras las tengo dentro de mí.
Le chupo los testículos para que se venga rápido, pues ya quiero probarla leche.
Todavía estoy bellaca con la verga de Carlos dentro, ya un poco blandita y él chupándome los senos y sé que la leche me calma un poco. Le chupo la verga con ansias.
Rudy me agarra la cabeza y me mueve a su ritmo.
El todavía no quiere venirse. Yo le digo que por favor, que necesito probar su leche que voy a hacer que se venga bien rico. Lo oigo gemir y me dice que si.
Entusiasmada lo agarro por las nalgas y lo empujo hacia mí.
Me bajo la verga por la garganta y aprieto los labios y sigo moviendo la cabeza le acaricio los huevos con las manos.
Rudy se pone tenso y grita y comienzo a sentir que la garganta se me llena de leche, por poco me ahogo de tanta leche.
No dejo de chuparle mientras se esta viniendo, pues no quiero desperdiciar mi leche y me la trago toda.
Todavía tenia la verga de Carlos metida, ya completamente flácida.
Entonces me levanto, me arreglo la falda y la blusa, ellos se ponen la ropa y nos vamos a sentar como si nada hubiera pasado.
La clase siguió, pero no puedo decir como terminó la clase, pues mi cabeza (mis tetas, mi culo, mi boca y mi chochita) estaba en otro sitio completamente diferente.