Mi primera infidelidad consumada con mi macho III

Capítulo 3

Ese mismo día de mi revelación como una nueva mujer, dispuesta a complacer a mis hombres en el trabajo se dió también lo que más deseaba desde casi haber llegado a el corporativo de mi trabajo:

-Ofrecerse a un macho para que me cogiera y sentir otra verga diferente penetrarme desde que me había casado.-

Llevaba ya 6 hombres que me habían pedido fotos con ellos y les había dado también una mamáda hasta dejarlos venirse en mi boca ahí mismo en mi oficina y 4 amigos también que había masturbado en sus coches hasta que se vinieran.

La excitación de poder ser descubierta por alguien más mientras les daba oral en mi oficina me tenía muy caliente también

Hace 6 meses cuando me casé no hubiera podido imaginarme haciendo esto, pero la verdad, no me arrepentía en lo más mínimo

Me dí cuenta que me gustaba mucho tomarme fotos y subirlas para que me vieran los demás, seguro varios de ellos ya se habían masturbado viéndolas y eso me generaba un placer indescriptible

También me di cuenta de algo que ya presentía desde hace mucho:

Soy adicta.

Soy adicta al semen: desde la primera vez en mi vida que lo probé en mis días de universidad, me puso como loca el olor, la textura, el sabor…todo lo que implicaba recibir de un macho esa ofrenda a mi cuerpo me hizo volverme una verdadera hembra adicta.

Muchas amigas me dicen que cuando conocen a un hombre lo primero que se imaginan es como serán socialmente, si serán fieles etc.

Yo me imaginaba cuando conocía a algún chico como sería su pene, cuánto semen les saldría y cuál sería el sabor de su néctar

A pesar de venir de una familia muy recatada y conservadora, mi instinto sexual era muy fuerte, varias veces mi papá estuvo a punto de descubrirme mientras me masturbaba por la noche porque era muy escandalosa al venirme

Solo mi novio, -hoy día mi esposo-, detectó perfectamente la clase de mujer caliente que era a pesar de vestir casi como una monja jajajaja

Regresando de comer, tiempo que mis amigas del trabajo no desaprovecharon para decirme que estaba creando todo un escándalo en la oficina porque todo mundo estaba hablando de cómo había cambiado de forma de vestir y ser desde que entré a trabajar con ellos

Divertida, yo sólo me limitaba a decirles que en realidad siempre había sido así, pero era mi marido quien me animaba a mostrarme más atrevida y yo estaba de acuerdo ya finalmente.

Esperaba todavía ansiosa y excitada la visita de Israel, quién era el motivo real de porqué empecé a cambiar mi forma de vestir.

Me gustó desde que me lo presentaron poco después de llegar al corporativo y de inmediato hicimos química.

Siempre nos buscábamos para ir a comer o cuando teníamos algún evento del trabajo para ir juntos

Él sabía que era casada pero no por eso dejaba de halagarme siempre con cumplidos que fueron subiendo de tono cuando empecé a mandar fotos atrevidas al grupo privado de WhatsApp

Un día estando detrás mío en el elevador del trabajo, se acercó y me puso su verga en las nalgas mientras yo volteaba sorprendida y excitada a lo que él me tomó de la cintura y me dijo al oído:

“Ya se que eres una caliente y aunque estés casada te voy a dar lo tuyo un día de estos”

Apretando mis nalgas contra su falo, volteé a verlo y le pregunté:

Es una amenaza o una promesa?

Riendo, salí del elevador seguida de quién acababa de decidir, sería el primer hombre a quien me entregaría después de casada.

Hoy, después de varios hombres más que me pidieron fotos después de comer, llegó Israel casi a la hora de salida y me dijo:

Ya vi que te estás volviendo muy popular aquí, pero yo vengo por lo mío.

Sonriendo satisfecha de su llegada, me puse de pié y moviendo las caderas ofreciéndome descaradamente a él, le dije:

“Aquí está todo esto para ti amor”

Israel avanzó rápidamente hasta donde estaba yo esperándolo y me tomó de la cintura en un abrazo que correspondi de manera inmediata

Sus manos rápidamente se posaron debajo de la minifalda y me tomó de las nalgas apretandolas con lujuria

me besó intensamente, cosa que correspondi frotando mis caderas contra su verga y le dí mi lengua extasiada de sentirme su hembra.

Le pasé mis manos por su cuello y nos trenzamos en un beso francés intenso que solo los amantes suelen darse.

Justo cuando solté un gemido de placer al sentir sus manos acariciando y apretando mis nalgas abriendolas para llegar a mi ano, escuché un toquido en mi puerta y separándolos un momento vi que era mi asistente, una jovencita que acaba de entrar a hacer sus prácticas con nosotros.

Estaba toda apenada de habernos encontrado de esa forma a mi amigo y a mi.

“Este, dice la jefa que si le puedes dar los reportes de la semana pasada”

Me separé de Israel un momento y tomándolos de mi escritorio se los di regresando a estar con Israel.

-Gracias, dijo mi asistente toda ruborizada y salió de nuevo dejándonos abrazados de nuevo.

Después de darnos la lengua por un buen rato de nuevo y dejar que Israel me acaricia a placer las nalgas y el culo, me dijo al oído:

“Vámonos a coger a un motel Mariela, no sabes cómo te he deseado desde que te conocí”

Vamos!, le dije separándome un momento, lanzándole una mirada llena de lujuria, y apagando la computadora sabedora de lo que venía

Salimos abrazados de mi oficina y quienes nos vieron entendieron que íbamos rumbo a algún lugar más íntimo por la forma de vernos mientras caminábamos a la puerta de la oficina

Al llegar a su auto, Israel se abalanzó sobre mí y empezó a acariciarme mientras nos besábamos con lujuria.

-Bye Chava!

Escuchamos mientras pasaba un auto junto al de Israel.

Ya nos vieron! Alcancé a decir debajo de Israel mientras las otras mujeres compañeras de oficina pasaban en el auto contiguo y se despedían.

¡Vámonos ya amor!, ¡ quiero sentirte dentro de mi!

Le dije a mi macho urgida de poder consumar el coito con este hombre que había despertado mis instintos carnales de sobremanera desde que nos conocimos

En lo que salimos rumbo al lugar elegido por él, saqué mi teléfono y le envié a mi marido un par de fotos de las sesiones que sostuve más temprano con mis nuevos candidatos a tener sexo extramarital

En la primera foto estaba plantada de frente con un amigo detrás que me tenía los pezones apretados con los dedos mientras yo divertida sonreía al teléfono de mi amigo.

En la segunda, estaba sentada en el sofá con las piernas bien abiertas dejando ver toda mi intimidad mientras me pellizcaba los pezones a través de la blusa

Casi de inmediato recibí un comentario de mi marido:

Que caliente mujer me tocó por esposa!, me encanta que seas así, veo que te recibieron bien en la oficina.

De inmediato le escribí también diciendo que había recibido la venida de más de 10 hombres a lo largo del día en mi boca y que me había fascinado hacerlo

-Tienes fotos de eso?

Preguntó de inmediato mi marido

No, solo los dejé tomarme fotos como las que te acabo de mandar, obvio, cada quién se quedó con ellas, ahora ya sabes, todos ellos tienen fotos mías semidesnuda, te excita?

-Me excita saber que prácticamente en este periodo tan corto de tiempo que llevamos casados te hayas transformado en lo que tú y yo ya sabíamos vas a ser:

“Una casada caliente dispuesta a complacer a los hombres que la deseen».

-Ahora, veamos hasta dónde es capaz de llegar mi inocente y adorada esposita, ok?

Sonriendo le escribí:

Por lo pronto, no me esperes temprano, voy rumbo a un motel a entregarme a un compañero del trabajo que me traía ganas desde hace tiempo.

No te preocupes, te llevo o te mando fotos o video, estos sí, explícitos de mi acto sexual con él ok?

-Que bárbara eres Mariela, por lo visto serás imparable, ya sabes, solo dame detalles e imágenes de lo que haces con ellos ok?

¡Por supuesto, lo haré!

Le dije terminado la conversación para poderme concentrar en mi macho tan deseado.

Llegamos al motel y entramos a la habitación de inmediato.

Dejando mi bolso en la cama giré hacia mi macho y le pregunté inocentemente:

Y ahora? ¿Qué pasará?

El fue a sentarse en un sillón que había en la habitación y me dijo en voz autoritaria:

-Ahora vas a ser mía cabrona! Bailame primero, ofrecete como la hembra caliente que eres!

Bastó que me dijera eso para detonarme y empecé a bailarle como una stripper, me tenía completamente a su disposición este hombre que me gustaba tanto.

Él, lentamente como si fuera una película, sacó su celular y empezó a tomarme fotos mientras yo me desnudaba para mí macho, cuando quedé solo con las zapatillas puestas, se enderezó y exclamó excitado:

-Mariela, pero que tienes ahí?

Excitado de verdad al verme completamente desnuda por primera vez.

Instintivamente me cubrí la velluda vagina

¡No, no te cubras!, al contrario, déjame ver esa belleza que me encantó!

Animada por sus palabras, retiré las manos que cubrían mi raja velluda y seguí ofreciéndome a mi hombre

Sí, tengo la vagina muy, pero muy velluda, mi propio esposo cuando me la vió la primera vez se sorprendió porque de verdad es una mata que cubre en forma de triángulo perfectamente mi intimidad.

Terminé de bailar y le dije:

“Ahora tú, quiero verte mi amor”

Israel dejó el teléfono de lado y se acercó a mí, yo me puse de rodillas junto a la cama y le bajé el cierre desesperada ya por verlo y tocarlo.

Lo que ví a continuación y toqué con mis manos desesperadas ya, fue lujuria en su máxima expresión.

El pene más grande y grueso que había visto en mi vida estaba erecto frente a mi a cms. de mi boca.

Y no tenía circuncisión, justo como me gustan, me encantan todos los penes, pero los que no tienen circuncisión son mis favoritos.

Justo cuando tomé su verga con ambas manos y estaba a punto de empezar a mamarlo sentí una cachetada tremenda que casi me hace perder el equilibrio, levanté las cara para decirle algo pero me recetó otra del otro lado de mi cara.

Eso desató mi lujuria como nunca nadie, ni mi marido, había logrado antes.

-Cállate puta y comienza a mamarla!

Me ordenó Israel y yo como poseída empecé a darle la mamáda de su vida, entré gemidos míos disfrutando ese pedazo de carne que adoraba ya, me enderece un poco y le pregunté excitada:

¿Cuántas mujeres de la oficina te las han mamado ya?

-Porqué preguntas Mariela? Algunas ya lo han hecho, quieres saber si eres la mejor?

La mirada que me dió Israel me dejó helada.

Era una mirada de lujuria y locura, como no había visto a alguien verme antes, iba a decir algo cuando se agachó un poco y tomó mis pezones con ambas manos, los empezó a apretar durísimo y yo en un acto reflejo traté de separarme.

Sin soltarme los pezones, Israel preguntó lleno de deseo y lujuria:

“A dónde vas Mariela, no te gusta esto?

El intenso dolor que sentí al principio dió paso a un placer que desconocía, sin darme cuenta me acerqué de nuevo a él y seguí mamándola mientras el seguía apretándome los pezones, lágrimas de dolor y placer empezaron a salir de mis ojos

Pero por nada del mundo lo iba a dejar ir, quería tanto complacerlo que decidí en ese momento que me dejaría hacer lo que quisiera mientras siguiera cogiéndome con frecuencia

Mis manos se posaron sobre las suyas acariciándolas mientras él seguía dándole ese dolor delicioso de sentirme a su merced

Seguimos así un buen rato disfrutándolos hasta que lo sentí empezar a endurecerse más aún en preámbulos la venida que más ansiaba, llorando abiertamente gemi de placer rogándole se viniera ya.

Su verga empezó a disparar chisguetes generosos de semen caliente en mi boca, yo desesperada tragaba todo lo que podía pero a pesar de eso, alguna parte se derramaba por las comisuras de mis labios.

Cuando terminó de venirse Israel, quedé sentada junto a la cama desnuda con semen escurriendo de mis labios y él rápidamente me tomó varias fotos así

Me dijo que la imagen que le daba era de una hembra satisfecha de haber tenido relaciones sexuales

Y vaya que lo estaba, me lancé rápidamente de nuevo a lamerle de nuevo esa verga que me tenía hipnotizada y después de un rato me jaló del pelo y me dijo:

-”Ahora voy yo, me llevó a la cama y mientras me acostaba para recibirlo boca arriba me empezó a tomar un vídeo.”

-Que quieres Mariela? Dímelo!

Acostada como estaba abrí mis piernas lo más que pude y me abrí la velluda vagina y dije casi gritando:

“méteme la verga ya que no puedo más, métemela por favor!”

Israel terminó el vídeo y se acercó a mí diciendo:

-”Se lo voy a enviar a mis amigos del trabajo y personales, quiero que sepan que eres una puta”

Mientras decía esto se fue acomodando encima mío y yo desesperada tomé su pene con las mano para introducirlo en mi raja pero solo dejaba que entrara la cabecita

Casi llorando de desesperación lo escuché decirme mientras me tomaba ambas manos y las ponía arriba de mi cabeza:

“-Me gustas mucho Mariela, más que ninguna otra mujer, (sentí su verga entrar profundo y retirarse de inmediato de mi vagina), quiero que seas mi hembra, mi mujer y estés siempre dispuesta a hacer lo que te pida yo, te voy a llevar a reuniones y te voy a presentar como mi hembra, que a pesar de estar casada, se somete a mis perversiones y te voy a ofrecer con algunos amigos para que vayas a coger con ellos, si aceptas, no podrás dejar de ser mi mujer hasta que yo lo decida, qué dices?”

Mientras me decía todo esto, Israel empezó a cogerme con furia, diría yo que hasta cierto punto, con violencia.

Mis caderas subían al ritmo de su pelvis, hacíamos perfecto par en lo sexual, él me tenía agarrada firmemente de las nalgas y me penetraba profundo cada segundo.

Me dio 3 orgasmos que sentí dentro de la vagina como nunca, estaba temblando de placer, del placer que estábamos teniendo los dos cogiendo como una pareja hecha para esto

Justo cuando sentí que se iba a empezar a venir dentro de mí se detuvo y se salió

No, no te salgas, le rogaba yo con voz entrecortada, ven amor, métemela de nuevo

Sonriendo casi diabólicamente, se volvió a acomodar entre mis piernas y metió la mitad de su verga de nuevo en mi vagina que estaba ya empapada.

Sí, sí amor, métemela, dame como tú quieras, si quieres que sea tu hembra lo seré, cuantas veces quieras ir a una reunión solo dime y no te quedaré mal, seré tu hembra caliente, dedicada al placer tuyo y de quien quieras que me coja también, quiero ser tu mujer!

Dije sintiéndolo llenarme de su semen la vagina por primera vez, el placer era tan intenso de sentirlo derramarse dentro de mi, que cruzó mi mente fugazmente la idea de separarme de mi esposo, a tal grado me tenía dominada este macho que había llegado a mi vida a terminar de despertar ese lado oscuro de lujuria que todos tenemos.

Nos desensartamos como dos perros que acaban de tener sexo, casi de manera reticente

Me saco la verga Israel de lo que iba a ser su hogar por mucho tiempo: mi vagina

Tomando un cigarro, lo encendió y me dio uno también, parecíamos una pareja de años por lo complementados que resultamos ser en el terreno sexual

“-Pero una cosa Mariela, no se te ocurra separarte de tu esposo, esto es gran parte de lo que va a ser tu atractivo cuando empiecen a saber los demás que ya eres mi hembra, que a pesar de estar recién casada, eres tan caliente que aceptas ser mi puta disponible para coger cuando yo quiera”.

Así será mi macho querido, no dejaré duda con los demás de que soy propiedad tuya sexualmente a pesar de estar casada.

Mientras decía esto, me acerqué a mi bolsa y saqué el teléfono para tomarme una selfie con él.

Quería que todo mundo supiera que ya me había entregado a él y que ya me había metido la verga viniendose junto conmigo

Me subí en él está vez y me ensarte su falo mientras tomaba varias fotos donde nos veíamos desnudos y yo bien clavada por la verga de quién iba a ser un hombre que iba a cambiar mi vida.

Poco sabía yo de lo pervertido que era Israel y de lo que me iba tocar vivir estando como su hembra

Mientras sentía su verga dentro y nos movíamos como pareja de baile por la sincronía le pregunté:

¿A quién le enviaste el vídeo?

A todos nuestros amigos mutuos del trabajo, hombres y mujeres, así que a partir de mañana te van a ver diferente porqué ya sabrán que eres mi hembra.

Primero sentí algo de pena, pero al seguir cogiendo con él y sentir como nos veníamos de n

uevo juntos, me alegré de que los demás vieran que ya había escogido a mi macho en el trabajo.

Le mandé a mi esposo algunas fotos de esta mi primera infidelidad y le pedí a mi nuevo macho me pasará el vídeo que me tomó para enviárselo también a mi marido.