Juego de adultos
Hola, mi nombre es Juan y les quiero contar una historia que sucedió el año pasado…
En el verano Argentino nos fuimos de vacaciones mi esposa Marcela y yo por unas semanas a Brasil y es acá donde todo empezó, yo siempre tuve la fantasía de ver a Marcela con otro hombre, pero siempre fue un juego, una fantasía, cuando hacemos el amor a mi me calienta jugar a que ella es cogida por algún hombre, hacemos participar un buen consolador y ella en el momento de mayor calentura pidiendo por favor que la penetre, yo la incito a que pida que se la coja un extraño, ella en un principio se niega pero con tanta calentura pide a gritos cosas como «quiero una buena pija, cualquier pija, que alguien me la ponga» ahí es donde entra a jugar el consolador que la coge y yo observo o tratándola como una buena puta le pido que me la chupe y le digo cosas como «te gusta que te cojan, putita, te gusta tener una pija bien grande en tu concha y otra en la boca, putita» acabando los dos los dos con este juego.
Una vez terminado el juego yo la jorobo con el tema de hacer un trío o alguna picardía, pero ello me dice que estoy loco o que soy un degenerado
Volviendo al tema de Brasil, la segunda o tercera noche después de una buena cena regada con bastante vino decidimos ir a una disco, estábamos los dos bastante alegrones y cachondos por el efecto del alcohol.
Será por casualidad o el destino pero apenas ingresamos a la disco yo me voy para el baño y quedamos en encontrarnos en la barra.
Cuando estoy llegando a la barra veo a Marcela que esta siendo seducida por un hombre, yo sin que ella me viera me demoro un rato y observo que pasa.
Este hombre no paraba de hablarle cerca del oído tocándole los pelos a Marcela, ella solo escuchaba y trataba de poner un poco de distancia sin sacárselo de encima.
Yo me acerco lentamente a la barra y cuando ella me ve se separa de este hombre y viene hacia mí, le pregunto que pasa y me cuenta que el flaco se llama Pablo, que también es de Argentina, pero de otra localidad que la nuestra, y quería invitarla a tomar algo y bailar.
En ese preciso instante se me ocurre un juego, era la oportunidad de llevar mi fantasía un poquito mas lejos, pero solo un poquito, entonces le propongo que acepte, que le diga que yo solo soy un amigo, que se deje seducir y con un nudo en él estomago le dije que si las cosas se daban se podían besar, pero solo besarse.
Ella no quería, pero la convencí argumentando que solo era un juego, que nadie nos conocía y bla bla bla.
Quedamos de acuerdo que en una hora mas o menos nos encontrábamos en las puertas de los baños para ver como iba todo.
La dejo sola en la barra y con un gran dolor en el estomago me ubico en un lugar donde puedo observar todo lo que pasa.
A los pocos segundos se acerca Pablo (Alto, cuerpo normal, digamos que aceptable) se ponen a hablar, piden unos tragos, se ríen, parece que Marcela (morocha, 1,67, buen culo y piernas, tetas pequeñas y mucha sexualidad) está disfrutando de la compañía.
Yo sigo observando estoy nervioso y excitado a la vez, me gusta el papel de espiar a mi propia esposa.
Se alejan de la barra hacia la pista, la música es movida, bailan, se comentan cosas al oído, puedo ver que ella se siente cómoda, la conozco, empieza a disfrutar del juego.
Luego de bailar un rato piden unos tragos y se ubican en un lugar más tranquilo, yo sigo espiando, ella ya esta bastante borrachita, mas desinhibida.
Pablo ya esta mas lanzado, la toma de la cintura, juega con sus pelos, cada vez se acerca mas… de pronto le encaja un beso, Marcela se sorprende, pero no se resiste, a mí el corazón se me para, no solo el corazón, estoy excitado y nervioso.
Ellos siguen, cada vez los besos son más intensos, se aprietan los cuerpos, él la lleva contra un rincón y la aprieta contra la pared.
Las manos de él le recorren la espalda, el culo, ella se deja hacer. Los cuerpos se mueven pareciera que sé la esta cogiendo con la ropa puesta.
Esto es increíble, mi mujer a unos cuantos pasos míos con otro hombre apretándose como dos pendejos.
Esto duró un buen rato hasta que ella se separa, le dijo algo al oído y se fue como para el baño, la cruzó, venía excitada y me pide que nos fuéramos.
Nos subimos al auto, le pregunto como le fue y me contesta abriéndose las piernas y pidiendo que la tocara. La toco, hace mucho que no le sentía la concha tan mojada, estaba empapada.
Me dice, «cógeme, cógeme ahora mismo, ese guacho de Pablo me dejo a mil, como me besaba, me apoyaba toda su pija en mi rajita, me amasaba el culo, llego a meterme mano por debajo de la falda, tenia la pija dura, se la sentía a través de los pantalones, por favor cógeme no aguanto mas quiero tu pija ya!!!!!»
Cogimos ahí mismo en el auto como dos desaforados, no nos importaba nada.
Tuvimos unos orgasmos gloriosos.
En el hotel la seguimos, sin duda el juego la había excitado.
Al otro día decidimos seguir, nos tomamos unos tragos y nos dirigimos a la misma disco. Marcela estaba echa una diosa, discreta por fuera (un vestido ajustado al cuerpo, no demasiado corta) pero una putita por dentro (conjunto negro, medias y liguero).
La consigna era la misma, no llegar a mayores.
Entramos por separados, ella se fue directo a la zona de la barra y yo me ubique en un lugar donde podía observara.
Al ratito se pone a charlar con un hombre algo menor que ella, alto, buen mozo, de gran porte. Se tomaron algunos tragos y se pusieron a bailar.
Pasaron unos diez minutos y ya estaban besándose, de pronto él la toma de la mano y se la lleva a un lugar más tranquilo, resguardado y oscuro.
Se sientan en unos sillones y empiezan un show increíble, yo no lo podía creer la estaba matando, metía mano por todos lados.
Yo mucho no podía ver pero notaba como Marcela se le subía arriba de el y se frotaba toda contra la verga del flaco.
Siguieron un rato hasta que ella se disculpa y encaró para el baño, el se quedo sentado, tranquilo como esperando.
Nos encontramos, yo la llevo para otro de los sillones, la beso, ella esta super caliente y tuvimos el siguiente dialogo:
Marcela: «este flaco es un zafado, sino fuera por que no me deje me habría cogido ahí mismo»
Yo: «pero te tiene bastante caliente»
M: «caliente, estoy que exploto»
Le meto una mano debajo del vestido y la empiezo a acariciar, tenia la concha empapada, caliente. La bombacha mojada y pegajosa. Mientras la acariciaba le digo:
«contame»
M: » se llama Nico, nos sentamos, empezó a besarme por todos lados, boca, cuello, orejas, mientras con sus manos me tocaba las piernas, en un momento no aguante mas y le guíe su mano hacia mi conchita. Eso lo puso a mil!!!!! Agarro mi mano y se la llevo hacia su verga, se la empecé a frotar por encima del pantalón, la tenia enorme parecía que iba a reventar el pantalón, mientras tanto él seguía jugando con mi rajita, llego a meterme un par de dedos. No aguantaba mas y le desabroche el pantalón y le deje la verga al desnudo. Que verga!!!! Se la toque un buen rato hasta que él me subió arriba, me empecé a frotar con su verga. Nos hicimos una paja terrible, solamente entre la verga y mi rajita estaba la tela de mi bombachita. El no paraba de decirme cosas chanchas al oído y de moverse. Hasta que no aguanto mas y exploto sobre mi bombacha y mis piernas»
Disimuladamente le saco la bombachita, Marcela estaba que no daba mas, tenia esa típica mirada que despide sexo.
La bombachita estaba empapada entre los jugos de ella y el semen de él. Pasé el dedo por la tela juntando un poco de semen y mirándola se lo pase por la boca….
Yo: «te gusta la lechita de Nico, putita»
M: «me encanta, por favor basta!!!! No doy mas!!! Quiero leche, que alguien me coja. Estoy demasiado caliente, vámonos de acá.»
Yo: «queres leche, queres pija, pedisela a Nico»
M: «estas loco!!! Queres que vuelva con Nico??? No se lo que puede pasar»
Nos dimos un gran beso y se fue con Nico.
Yo estaba que reventaba, inconsciente, el juego se estaba yendo muy lejos.
Estaba entregando a mi esposa, que no se aguantaba la calentura, al primer flaco que se nos cruzó.
Pero la calentura que tenia era demasiado.
Me volví a ubicar en un lugar donde podía espiar.
Ella empieza a frotarlo, le pasa las manos por la verga, se besan.
Marcela estaba como sacada, se le sube arriba y empieza un movimiento lujurioso, estaba sin bombacha, yo no podía ver exactamente lo que pasaba, pero me imaginaba lo peor (o lo mejor), mi verga necesitaba acción, la calentura ya era insostenible.
Ellos siguieron con sus movimientos por un buen rato, como 15 – 20 minutos, Nico la agarraba del culo por arriba del vestido y la movía. Se la estaba cogiendo??? Se calmaron y Marcela se acomodó un poco el vestido, se despidió y vino a buscarme, me agarro de la mano sin que pueda oponerme me pidió que nos fuéramos. Ya en el auto me empieza a besar, seguía excitada, se levanta el vestido y puedo ver toda su conchita bañada.
Yo: «contame»
M: «queres que te cuente? Tócame la rajita»
Se la toco, estaba completamente empapada, caliente. Tenia chorreada toda la entrepierna, paso los dedos por mi boca, tenia gusto a semen. Esto me puso mas a mil, ella lo noto
M: «te gusta la conchita toda usada»
Yo: «me encanta»
M: «fui con Nico como me pediste, me senté junto a él, empezamos a besarnos, yo estaba demasiado caliente así que enseguida empecé a sobarle la pija, de a poco le desabroche el pantalón y se la saque. Increíble la tenia al palo nuevamente, estaba toda mojada y llena de semen de la acabada anterior, no daba para que se la mamara, pero me moría de ganas. Poco a poco se la limpie con mis dedos y mis dedos los limpie con mi boca. Me trague toda su lechita!!!! O lo que pude. Nico no daba mas, se puso súper caliente y cuando metió la mano y se dio cuenta que no llevaba bombachita se puso peor. Me agarro con fuerza y me subió sobre su pija. Primero solo me la apoyo sobre mi rajita. Se sentía hermosa, caliente, inmensa. Me dijo que si la quería adentro me la metiera yo misma, no lo dude ni un segundo. Se la agarre, me la acomode en la entrada de mi agujerito y me la clave de una, que preciosura de pija. Nos movimos un rato hasta que no aguante mas y me acabe mientras Nico me llenaba toda la concha de leche. Me dejo hecha mierda con toda la concha inundada y ardiendo de la cogida.
Chúpame toda!!!!!!!!!!!!!!!!!!
La sigo besando, le levanto mas el vestido dejándola casi desnuda, bajo hasta su entrepierna, no podía creer lo que vi, toda su concha acabada, un hilo de semen salía de su concha hasta el agujero del culo, no aguante mas y empecé a chuparla toda, se la deje limpita, tragándome todos sus jugos y la leche de Nico.
M: «me acabo otra vez, seguí limpiando toda la lechita que Nico me regaló, me encanta ser tan puta, quiero mas pija!!!!!!!!!»
Me baje el pantalón y se la metí de una, estaba hermosa, toda jugosa y caliente, en dos minutos explotamos en unos orgasmos terribles.
Nos arreglamos y nos fuimos al hotel. Estábamos contentos sin culpas, aviamos dado un gran paso en nuestra relación.