PRÓLOGO
Mi nombre es Mercedes acabo de cumplir 32 años, soy periodista especializada en Política y Sociedad, trabajo desde hace 5 años para un periódico de Madrid.
Soy morena, ojos verdes, 1,74 de estatura y unas medidas de las que realmente estoy sumamente orgullosa, 102 – 64 – 98, culo respingón, piernas largas y muy bien torneadas. Tengo un carácter muy alegre y jovial aunque a primera vista parezca un poco seria y más bien seca, esto es debido básicamente a que procuro mantener alejados a todos los moscones que revolotean constantemente a mí alrededor.
Suelo vestir de una forma elegante pero formal, normalmente trajes sastre de chaqueta y falda los cuales aunque de una forma muy seria suelen destacar mis curvas de una forma esplendorosa, sobre todo mis piernas y culo, los hombres y más de una mujer suelen girar la cabeza para seguir con sus ojos el cimbrear de mis caderas.
Como periodista dicen que soy sumamente inteligente, domino a la perfección cuatro Idiomas, Inglés, Francés, Alemán e Italiano, en mis reportajes suelo ser sagaz e incisiva, escribo sobre los acontecimientos más predominantes que se puedan producir en cualquier parte del mundo sobre política y sociedad, me encanta viajar y mi maleta esta siempre preparada.
Estoy soltera y vivo en un céntrico apartamento de Madrid, aunque soy tremendamente fogosa no tengo ataduras con nadie, tengo un montón de amigos y cuando me apetece hacer el amor solo tengo que llamar a alguno de ellos, todos están siempre dispuestos a satisfacer mis necesidades sexuales y todos conocen mi ley «Nada de ataduras» Al principio siempre aparecía alguno que intentaba establecer relaciones estables, a ese automáticamente le eliminaba de mi agenda personal.
CAPITULO I (RICARDO)
Suena el teléfono, es Pedro el Director, me ruega me acerque a su despacho (Por mi trabajo yo dispongo de despacho propio y dependo exclusivamente de él) Llamo a su puerta, Pedro me pide que entre y me ruega tome asiento. Pedro es una persona muy afable y amable por naturaleza, no obstante también puede llegar a ser muy duro, él y yo siempre nos hemos llevado muy bien, cada uno en su trabajo y jamás se ha mezclado esa relación, a pesar de haber coincidido ambos en multitud de fiestas y celebraciones, jamás nuestra relación paso de la de buenos compañeros de trabajo y realmente eso nos satisface plenamente a ambos, es de destacar también que Pedro está felizmente casado con Elisa y por lo que demuestran continuamente, ambos se quieren y compenetran de maravilla, por otro lado a Elisa y a mí nos une una buena amistad, quizá debida a la relación de mutuo respeto que nos profesamos su marido y yo.
Luego de haberme sentado, Pedro me pone un café y sospecho que algo duro me va a pedir, jamás invita a nadie si no es para y a continuación proponerle un trabajo fuera de lo normal. Yo jamás pregunto, espero siempre los acontecimientos, Pedro se me quedó mirando un rato muy serio, de pronto lanzó una sonrisa esplendorosa y a mí se me pusieron los pelos de punta, el trabajo iba a ser muy duro, de pronto soltó la artillería…
¿Qué tal un viajecito a África Mercedes?
¿A África? ¿Estas soñando?
No, no sueño, acabo de hablar por teléfono con el Secretario General de asuntos exteriores del gobierno Keniata y entre lo que me relató y la petición que me hizo me dejó alucinado, después de meditarlo un buen rato he pensado en hablar contigo y que tu obres en consecuencia.
Bien, tú dirás.
¡Escucha! Hace cuestión de una hora me llamó un tal Gerome Mombata que parece ser el Secretario General del Ministerio de Asuntos Exteriores de Kenia, como te dije antes me dejó alucinado, me dijo que Kenia solicitó ayuda económica a una serie de países entre ellos el nuestro, con el fin de allanar los caminos a dichas ayudas, organizó una especie de Safari para unos cuantos representantes de los Ministerios de Asuntos Exteriores y también Economía y Finanzas de España, Francia, Italia, Alemania y Reino Unido, de estos países le confirmaron la asistencia por parte de España:
Antonio Garrido de exteriores acompañado de su esposa Ana.
Manuel Blanco de Economía y Hacienda su esposa Isabel y su hija mayor Cristina (21 Años)
Por Francia:
Armand Lévi de Exteriores con su esposa Janine.
Pierre Vareille de Economía y Finanzas y su esposa Véronique
Por Italia:
Marco Vitali con su esposa Sofia por Exteriores.
Antonino Baldini de Asuntos Económicos y su esposa Raquel.
Por Alemania:
Frank Arneke de Exteriores y su esposa Kathrin.
Heineke Arnold de Economía y su esposa Pamela.
Por el Reino Unido:
Guy Adams de Exteriores con su esposa Cindy y su hija Céline (19 Años)
Philippe Asbert de Economía con su esposa Suzanne.
Me contó que después de investigarlos a todos detenidamente la mayor parte de ellos si no todos han participado en ORGIAS y ahí es donde entras tú, él pretende que hagas un reportaje completo del SAFARI pero discretamente a ser posible hagas un reportaje de las POSIBLES ORGIAS que entre ellos puedan organizar.
¿Qué tengo que hacer, he de participar yo en ellas?
Pues tú verás, yo te digo las condiciones que he acordado con el Sr. Mombata y después tú me contestas:
1ª) Todos los viajes y desplazamientos son por cuenta del Ministerio de Asuntos Exteriores Keniata.
2ª) Alojamiento en hotel de 5 Estrellas con los representantes de los países visitantes.
3ª) Cinco millones de pesetas diarias.
TUS OBLIGACIONES:
1ª) Realizarás un reportaje completo del SAFARI por ESCRITO para la prensa del país.
2ª) Realizarás un reportaje completo por ESCRITO y sobretodo FOTOGRÁFICO de las posibles ORGIAS.
3ª) Todos estos documentos perfectamente protegidos serán entregados en mano al Sr. Mombata.
– ¡Y bien! ¿Qué te parece?
Desde luego la oferta es muy tentadora, pero no me has dicho la duración del SAFARI.
¡Ah, sí! La duración será de 22 días con estancia en distintos sitios del país siempre con la protección total del Gobierno, hoy estamos a 16/05/01 y el Safari está previsto salvo inconvenientes del 06/06/01 al 28/06/01.
¿Me puedo permitir pensármelo un par de días?
Por supuesto que sí, pero imperativamente pasado mañana por la mañana necesito una respuesta.
Mercedes salió del despacho del Director pensativa y preocupada, el trabajo que le habían propuesto era complicado e incluso podría ser peligroso pero también era la oportunidad de su vida. Mercedes llegó a su despacho, tomó el teléfono marcó un número y al otro lado de la línea sonó una voz masculina…
¡Sí! ¡Diga!
¿Ricardo? Soy Mercedes.
¿Mercedes? ¡Qué milagro! Dime, siempre es una alegría hablar con la chica más guapa de Madrid.
No seas adulador, tengo un problema y seguramente tú podrías solucionarlo.
Si está en mi mano eso está hecho ¿Por qué no comemos juntos y me lo cuentas?
¿A las 13 horas en el sitio de siempre?
De acuerdo, allí nos vemos.
Salí rápidamente de la oficina y me dirigí al Club 31 en la C/Alcalá, un restaurante bastante acogedor donde solía comer con mis amigos, en cuanto entré por la puerta vi a Ricardo que me estaba esperando me dio un ligero beso en los labios y nos sentamos en una mesa apartada, después de hacer el pedido…
Bien, pues tú dirás ¿Qué tripa se te ha roto?
Me le quedé mirando un rato…
Mira Ricardo tú eres con mucho mi mejor amigo y contigo tengo absoluta confianza así que escucha con atención.
Después de haberle relatado toda la conversación que había tenido con mi jefe Pedro, Ricardo me miraba con los ojos abiertos como platos…
¡Dios mío! ¿Pero que pretenden? De ahí se desprende que pretenden hacer chantaje a varios países Europeos, entre ellos el nuestro.
Sí, pero también puede demostrar el grado de corrupción que existe entre algunos de nuestros políticos.
Eso es verdad ¿Tú que piensas hacer? La verdad es que otra oportunidad como esta para sacar un dinero extra no la vas a encontrar.
Si me consigues lo que te voy a pedir acepto el trabajo.
¿Qué necesitas?
Necesito, una gargantilla o algo parecido con una micro cámara acoplada y que se pueda accionar el disparador desde la misma, tú eres fotógrafo profesional, quisiera que me acompañaras pero sin conocernos de nada, te las ingeniaras para hacer cuantas más fotos mejor de las situaciones comprometidas de todo el grupo y revelar las que yo pueda ir haciendo ¿Qué me pedirías?
Primero a ti y segundo el 15\% de lo que cobres, creo que es razonable, de todos modos he de pensarlo.
Para lo primero yo no estoy en venta, en cuanto a lo segundo, acepto no obstante y con respecto a lo primero si cerramos el trato… ¿Porque no me invitas a un café en tu apartamento y pasamos allí la tarde? Así de paso lo piensas.
Okey esta segunda parte me encanta, el trato queda cerrado, tengo que hacer un par de llamadas para que te preparen la gargantilla y nos vamos.
Ricardo hizo un par de llamadas a unos amigos y rápidamente quedó de acuerdo con ellos con respecto a lo que necesitaba, seguidamente nos encaminamos a su apartamento, los dos íbamos excitados y en cuanto penetramos en el ascensor nos abrazamos y besamos furiosamente, cuando entramos en el apartamento ya estaba semi desnuda, menos mal que no nos encontramos a ningún vecino, se armaría un escándalo. Ricardo era de una fogosidad inaudita y yo no lo era menos, los dos nos compenetramos a las mil maravillas y cuando nos lanzamos a una relación sexual somos como dos animales en celo.
Ricardo en cuanto penetró en el apartamento cerró la puerta de un punta pie, yo sin pensarlo dos veces empujé a Ricardo contra la misma y con gran maestría le bajé el pantalón y calzoncillo de un golpe, con mis manos cogí aquel precioso cipote que Ricardo portaba entre las piernas y comencé a pajearlo lentamente mientras nos besábamos con verdadero deleite, nuestras lenguas se enroscaban la una en la otra y nuestras salivas se confundían en una sola, yo siempre tomo la iniciativa y mientras quito la camisa a Ricardo voy dejando un surco de saliva por su pecho, de tetilla en tetilla y de arriba abajo, cuando llego a alcanzar el maravilloso pene que él porta y en su más esplendorosa erección comienzo a pasar mi lengua lentamente y en círculos concéntricos sobre el prepucio, mientras las largas uñas de mi mano derecha arañan suavemente sus testículos mi mano izquierda en la base de aquel formidable tronco (22 por 4,5 Cm.) Acaricia y desplaza suavemente la piel de abajo arriba y viceversa dando simultáneamente pequeños apretoncitos.
No era la primera vez que yo hacía esto a Ricardo pero cada vez que lo hago siempre le sorprendo y él suele aguantar muy poco en un par de minutos su polla se convirtió en una fuente manando semen a borbotones que yo trago con glotonería, (Me encanta el sabor del semen) Seguidamente Ricardo sabía perfectamente lo que tenía que hacer, me conocía perfectamente y savia que yo soy igual a una perra en celo a la cual hay que satisfacer rápidamente, sin movernos del sitio me quitó el sujetador, acarició y besó con pasión mis espléndidos melones, los pezones se me pusieron a reventar y él los chupó con pasión, yo misma me quité la falda y la tiré a patadas y él suavemente bajó y quitó mis braguitas las cuales ya estaban empapadas con mis flujos, Ricardo me recostó sobre el suelo y sus dedos abrieron mi rajita como si fuera una flor, acercó su cara y olió con verdadero deleite el fuerte perfume que de ella se desprendía, seguidamente comenzó a dar lametones profundos mientras con sus manos empujaba mis nalgas hacia arriba para poder ejercer más presión, yo doblé y coloque mis piernas sobre sus hombros para facilitarle la labor, con mis manos cogí su cabeza y la dirigí a donde más me convenía hasta que posicioné su boca sobre mi clítoris entonces se la presioné fuertemente, comencé a dar alaridos de placer y el chupaba y lamía con verdadera maestría hasta que lanzando un grito gutural comencé a correrme, tuve un orgasmo fenomenal. Descansamos un rato sentados en el suelo recostados contra la puerta (Increíble que nadie nos escuchara)
Luego decidimos ir al baño, los dos estábamos asquerosos pringados de semen, flujos, sudor etc. En el baño el amorosamente comenzó por pasar la esponja por mi espalda, al llegar a mi culito comenzó a empalmarse de nuevo y como quien no quiere la cosa metió la cabezota de su polla por medio de mis muslos, yo al notarla me agaché rápidamente y con mis manos se la atrapé, mientras con una mano me apoyaba en el borde de la bañera con la otra dirigí aquel formidable trozo de carne y músculo al centro de la entrada de mi conducto vaginal que comenzó a tragarle el cipote como si de una planta carnívora se tratara él se cogió de mis tetas y comenzó a bombear suavemente, su polla se deslizaba con una suavidad increíble no obstante notaba como si le dieran suaves lametones, yo soy una maestra del sexo y con mis músculos vaginales puedo hacer maravillas, Ricardo no era manco y su polla sabía tocar las notas más finas dentro de un conducto vaginal, follamos con verdadero deleite disfrutando plenamente de la penetración sin importar en absoluto la incomodidad del lugar, al cabo de unos minutos ambos simultáneamente comenzamos a gemir y a tensarnos, el orgasmo se acercaba lento pero intenso al igual que una ola que según se acerca a la orilla va creciendo en volumen y velocidad este llegó en toda su intensidad tanto que ambos tuvimos que hacer equilibrios para no derrumbarnos dentro de la bañera, dejamos pasar unos segundos para recuperar el resuello y llenos de felicidad terminamos de lavarnos.
Cogidos de la mano nos dirigimos al dormitorio, la tarde acababa de empezar, nos tumbamos sobre la cama jugando como niños pero los juegos paulatinamente fueron aumentando en intensidad, nuestras bocas y cuerpos parecían uno solo, de forma totalmente sincronizada fuimos girándonos sobre nosotros mismos de modo que terminamos en un perfecto 69, Ricardo comenzó a acariciar con sus manos y boca todo el exterior y alrededores de mí área genital en una caricia realmente intensa y enervante, yo no permanecía ociosa mis manos acariciaban dulcemente aquel hermoso pene, mis labios y lengua daban pequeños besitos y lameditas al prepucio que comenzaba a ponerse como una ciruela de gordo, los labios y lengua de Ricardo daban besos y lamidas al interior de mis muslos mientras sus manos acariciaban alternativamente tetas, vientre, coño, no quedaba absolutamente nada que ellas no tocaran o acariciaran, sus labios y lengua fueron subiendo lentamente hacia la fuente del placer de la cual ya manaban abundantes flujos, yo necesitaba mucho más y conocía a Ricardo perfectamente por lo que mis caricias seguían siendo superficiales, Ricardo conocía perfectamente la estrategia a seguir, sus dedos delicadamente abrieron mí rajita, introduciendo primero un dedo y luego otro más, en el interior de mi vagina, mientras sus labios acariciaban superficialmente la zona del clítoris, sin presionar, muy suavemente hasta que este se excitó absolutamente, fue entonces que comenzó a mover los dedos en el interior del conducto vaginal y su boca comenzó a chupar delicadamente mí botoncito, en ese momento introduje totalmente el prepucio de Ricardo en el interior de mi boca y comencé a chupar y a succionar como una corderita mientras mis manos e uñas acariciaban la base del pene y los testículos, esta era la señal para la más esplendorosa de las corridas, ambos comenzamos a soltar simultáneamente nuestros correspondientes líquidos entre gritos y gemidos, el orgasmo de ambos realmente fue muy bien trabajado y alcanzado en su total plenitud, los dos quedamos desmadejados y semi adormilados, plenamente satisfechos.