Capítulo 18
Una tarde, después del trabajo de Alex, nos fuimos a tomar algo al Mut; cuando a poco de habernos sentado, llegó Luz acompañada de una pareja, de más o menos su edad, nos saludaron y se sentaron en una mesa al otro lado. De casualidad, Luz quedó frente por frente con Alex y yo de cara a Mar.
- Alex me comentó: ha mantenido el tipo, pero se la ve como incómoda. ¿y qué esperabas?
- Ha pecado, jajaja.
- Si, cierto, es una pecadora, el cura se escandalizará, jajaja; espera que a ver si la tiento un poco. Alex (ese demonio, que me tiene enamorada), comenzó su actuación, haciéndole ojitos y sacándole la lengua, lo cual la incomodó bastante, pues se le aceleraba la respiración y tragaba saliva, síntomas de excitación; manteniendo ella, la compostura en todo momento. Al cabo de un rato, llegaron Andrés y Manuel, quienes haciendo gala de su maldad; conocían a la pareja que iba con Luz, se levantaron e invitaron a cenar a los tres con nosotros en Roses, a lo que por supuesto accedieron; nos repartimos en diferentes coches, de tal forma que le tocó ir a Alex, con Luz.
De camino a Roses, Luz iba callada conduciendo.
- Alex: ¿cómo te sientes?
- Dios mío, lo del otro día, por favor no se puede repetir, fue algo indigno de mí
- Alex, le puso la mano sobre la falda: no hay nada de indigno, además, estoy seguro, qué la situación, no te ha dejado dormir, más de un día, pensando en ello, mientras le subía despacio la falda, dejando ver sus bien contorneadas piernas.
- Si, cierto, me pusiste en una situación muy embarazosa en la iglesia, imagina que alguien se diera cuenta, suelo tener el control de cualquier situación, pero eso me sobrepasó.
- Alex: te das cuenta (dijo, mientras ya subía descaradamente su mano hacia las ingles de Luz), provocando más aceleración en su respiración, qué solo has nombrado la iglesia y no lo sucedido luego. Luego, por descarte es que te gustó, igual que ahora, que te estoy acariciando. Por cierto, te has afeitado muy bien, me encanta tu coño totalmente afeitado y a cualquiera le encantará comérselo. Tenía una excitación fuera de serie, le introdujo los dedos dentro, los sacó empapados de flujos y se los puso en la boca: chupa, vamos chupa. Estuvo a punto de salirse en una curva en la bajada. Mira que me haces hacer, podemos tener un accidente. Estás divina, pero necesitas, ser un poco más desenfadada, sin perder la elegancia, ni el señorío. De momento, como nadie se dará cuenta, te sacaré las bragas, quiero que te sientas libre y después ya veremos (Alex, le arrancó las bragas de un par de tirones), mientras llegaban a Roses, aprovechó para desabrocharle la blusa y meterle mano a fondo, incluso inclinándose bajo su brazo, para chuparle la teta; tuvo un orgasmo brutal.
- Madre mía ¿pero ¿qué me pasa?
- Pasa zorra, que te acabas de correr, de tener un orgasmo fantástico, que será el primero de muchos. Ahora vamos a cenar y de regreso veremos que hacemos zorra; te quiero ver sonriente y participando de la conversación, ¿de acuerdo zorra?
- Si, lo haré por ti
Cenamos alegremente y riéndonos todos; una vez terminada la cena, me dijo, en un pequeño aparte
- Cómo vamos en tres coches, en cuanto nos despidamos, para ir a regresar, decid vosotros tres que os vais a tomar algo, lo que no sé, es dónde llevarla a zorrear.
- Al bar musical, qué hay más adelante antes del puerto, donde yo tuve el problema, del qué me sacaron los marroquíes.
Dicho y hecho nos, despedimos, de camino a buscar el coche de Luz, un bmw berlina
- Vamos a tomar algo, ¿sabes algún sitio?
- No, no salimos nunca
- Íbamos caminando y: mira entremos ahí hay música, pero espera, ven
Nos fuimos a la zona del parking y:
- Así como vas no te luces, quédate quieta, le desabrochó el vestido y le sacó el sujetador, dejándole tres botones de la blusa sin cerrar
- Por favor, me van a ver los pechos
- ¿y qué? Los tienes preciosos, además todas las mujeres aprovechan el verano para mostrarse, ¿o NO?, luego le levantó la falda y sin darle tiempo a reaccionar, le arrancó las bragas tipo imperio qué llevaba. Así perfecta
- Parezco una cualquiera
- No pareces una cualquiera, eres tú, siéntete liberada y disfruta
- Entrando, Alex le dijo: si se te acerca alguien a conversar, aunque no lo conozcas, conversas, si alguien te toca, no montes ningún escándalo, te dejas tocar y disfruta de que eres una mujer muy deseable, dándole un beso tranquilizador en los labios, pero sobre todo déjate llevar y pásalo bien. Ya verás te gustará, tanto o más que cuando estuviste conmigo
Nosotros tres, les seguíamos a distancia
- Andrés comentó: si no entra en pelotas, es porqué Alex, no se lo ha dicho, esta, hará todo lo qué le diga Alex
- Manuel: la tiene totalmente dominada, menudo poder de persuasión. Este chico en su vida profesional, puede llegar donde quiera, a poco qué estudie y se prepare
- Yo: es un verdadero crack, además os tengo que confesar, que me he enamorado de él
- Los dos: eso ya lo sabíamos y él, nos ha dicho, qué te ama desde pequeño. Estáis hechos el uno para el otro
Cuando entramos, Luz y Alex, estaban en la barra, hablando, pero ella ya había deparada por varios jóvenes y hombres, que no le quitaban los ojos de encima. Dos chicos jóvenes, dieron un paso al frente y se acercaron por detrás de ella. Uno delos chicos, le acarició muy suavemente la pierna, como esperando ver su reacción, a ella le cambió el semblante, pero al igual que en la iglesia, ni se movió, miró a su compañero, sin hablarle le hizo un guiño y ya le puso directamente la mano en el culo, al ver que no había luz roja, siguió metiendo la mano bajo la falda.
- Alex se dio cuenta y le dijo susurrándole: veo que te está gustando, te dejo con ellos, déjales hacer, si sales no te metas en ningún coche qué no sea el tuyo y no arranques, lo que te hagan y les hagas, qué sea dentro de tu coche sin moverlo. Yo estaré muy pendiente y controlando. ¿está claro?
- Si, está claro, respondió, visiblemente excitada.
- Ahora disfruta zorra
Alex, se vino con nosotros tres, desde donde podíamos ver todo, aunque sin escuchar
- Hay que ponerles un micro, sin qué se den cuenta, para estos casos, buscaré uno dijo Manuel riendo
El chico, qué le metía mano le dio la vuelta y conversaba con ella, mientras el otro le tocaba las tetas y susurraba.
Luz, le explicó a Alex, después la conversación
- ¿sabes qué estás muy buena?
- Tienes unas tetas que marean y piden que se las coman
La besaban y metían mano a la desesperada, mientras ella ya estaba comenzando a estar desbocada.
La tomaron de la mano y salieron, por supuesto, nosotros detrás a distancia
Fueron hacia el parking, donde la magrearon totalmente, sacaron sus pollas diciendo: mira qué regalo te traemos (esto lo escuchamos, perfectamente) anda chupa calientapollas, venga chupa. Al principio se resistió un poco, pero acabó metiéndose las pollas de los dos chicos en su boca
- Pero si no lleva bragas, muy guarra, ya iba preparada
- Por favor chicos aquí no, alguien puede vernos, por favor, vamos dentro de mi coche
- Venga vamos que te follaremos tanto, qué volverás a pedir más, puta
Entraron en los asientos de atrás, mientras uno de ellos bajaba los respaldos, para dejar el coche en modo casi cama (momento en el que nosotros nos acercamos con disimulo a observar y grabar con el móvil)
Se enfrascaron en una vorágine de sexo duro, azotándola y sometiéndola brutalmente, sus pechos se pusieron rojos casi a reventar, mientras la follaba uno de ellos, dándole brutales acometidas
- Madre mía, me estás destrozando
- Goza puta, goza
- Me destrozas, pero me gusta, más por favor, más (tuvo un orgasmo de considerable duración) ¡ahhhhhhh!
Cuando el chico se corrió dentro de ella se salió y le dijo:
- Límpiamela puta, pero bien limpia
El otro chico
- Tío espera y dale la vuelta, no voy a meter mi polla y encontrarme tu leche
Le dieron la vuelta y mientras se la seguía limpiando, mejor dicho, chupando, el otro mojo sus dedos en su coño y se los introdujo en el culo, primero uno, dos y tres dedos, provocando que la propia lubricación y excitación de Luz, ayudara a dilatar su agujero
La penetró salvajemente de un solo golpe
- Me has roto, maldito, me has roto
- Calla y disfruta puta zorra
- Comenzó a bombearla duramente y aprisionando sus pechos y tirando de ellos fuertemente. Disfruta re puta.
- Diosssss, me duele, decía con la polla del otro en la boca, no te pares, sigue, sigue, soy vuestra, hacerme lo que queráis, Diosssss. ¡Ahhhhhhh!
Se corrió, en el qué era su mejor orgasmo hasta ahora, y eso que solo llevaba tres.
Los tipos salieron del coche y se largaron diciendo
- Ya sabes donde, encontrarnos si quieres más, chao puta
Nosotros cuatro alucinábamos, sobre cómo se puede disparar una persona de esa forma y el poder de sometimiento qué tenía Alex sobre las personas.
- Voy a verla, dijo Alex
- De eso nada, tú ven aquí, tú no te metes en ese coche, cargado como vas, qué se espere, estaríamos buenos y yo sería tonta
- Le bajé la cremallera a Alex y tomé su polla, rodeándola, con mis dos manos y la chupé desesperada, dejándole claro qué la ración de esa noche era solo para mí, se corrió en mi boca, lo exprimí totalmente y
- Ala, ya puedes ir mi vida. Te amo
- Jajaja, yo te amo más mi cielo
- Andrés y Manuel: brava y bravo
- Alex se fue hacia el coche de luz, quien todavía estaba en shock, procurando reponerse. Venga zorra, que ya has disfrutado, vámonos a Cadaqués
- Arrancó y tomamos el camino de regreso. Madre mía Alex, nunca había perdido el control de esa forma, no me puedo creer, lo que he hecho, con esos dos chicos, que podían haber sido hijos míos. ¡qué vergüenza!
- Déjate de vergüenzas, te ha gustado y excitado, sentirte deseada, ahora te das cuenta de lo qué te has perdido hasta ahora. De ahora en adelante, todavía será mejor, yo te ayudaré, ya lo verás y me darás las gracias zorra. Ahora calla y conduce y mientras, piensa lo qué has llegado a disfrutar, lo que te ha gustado. Esta noche cuando llegues, ya qué estás sola, ni se te ocurra bañarte o ducharte, te metes en la cama tal cual vas, con la leche de ellos en tu cara y tu cuerpo y mientras te metes los dedos en tu coño afeitado y te frotas el clítoris y punto
- Si, lo haré, la verdad es qué ha sido fenomenal, te haré caso
- Me harás caso y me obedecerás siempre a partir de ahora, ¿te enteras?, le dijo Alex, pellizcando su pezón.
- Si, cariño, te obedeceré siempre. Muchas gracias de verdad, por enseñarme
- Llegamos a casa y nos acostamos Alex y yo, hasta que salió el sol, mi madre ni se enteró, pues no sale de su habitación hasta las diez de la mañana, desayuna en la cama y la chica de servicio le sirve el desayuno en ella. Qué felicidad.
