Capítulo 5

Después de escuchar su relato, sobre el encuentro con Jorge, me dice, ahora te toca a ti platicarme sobre tu encuentro con Ana…

“ok, -dije, y empecé a contarle lo que ya les hemos contando de cómo fue esos encuentros con Ana en mi ex oficina, entre muebles y cajas de mudanza,

“yo terminé la apuesta el jueves, así que yo gano,

“eso es trampa, a Ana te la has cogido toda la vida, cuando has querido¡

“como?

“no te atrevas a negarlo, que lo sé bien, para mí, fue la primera vez con Jorge

“los dos convenimos en quienes serían los candidatos, así que yo gano¡

“en eso tienes razón, pero tú la tenías más fácil,

“no lo creo, Jorge siempre había querido cogerte, así que no creo te haya costado trabajo convencerlo.

“está bien tú ganas, cual será mi ofrenda al ganador?

“la tienes fácil, un segundo encuentro con Jorge, pero ahora, quiero que traigas las chiches con una mordida en cada uno de ellos, como muestra de la pasión desenfrenada que le puedes llegar a provocar¡

“ok, yo pongo la fecha, me doy dos semanas de plazo, ahora sí, quieres oler mi panocha?

“claro querida, ya lo estoy deseando.

Empecé a desnudarla, palpando cada rincón de su cuerpo, pero especialmente viendo cada espacio avanzaba desnudando, buscando el más mínimo detalle que delatara lo que había ocurrido en ese cuarto de hotel, me detuve apreciando sus senos y especialmente el área cercana a sus areolas y pezones como lucían turgentes, hinchados, seguramente de tanto que habían sido estrujados, chupados, mamados, me imaginé la boca de Jorge succionando sus pezones, desde lo ancho de las areolas, su bra, olía a sudor, mezcla de ese olor tan suyo, impregnado de su perfume y otro olor más fuerte, de predominio masculino, fui bajando por su vientre, hasta encontrarme su calzón, entonces fui bajando su bikini, con la entrepierna totalmente llena de “humedad” seca, manchas de leche justo en el centro y un poco atrás, metí mi nariz en medio de sus muslos, llenándome de ese aroma tan característico que tiene una panocha que ha sido cogida, que ha sido inundada de leche, una fusión del aroma de María, que tan bien conocía, pero ahora acompañado de un olor a semen, a macho, al abrir sus labios, para observarlos y saborearlos, se veían pequeñas lesiones en su cara interna, hinchados, y desde adentro de su vagina un hilo de esa mezcla que seguía escurriendo y que bajaba desde el borde posterior de su panocha y se escurría hasta llegar a su ano, metí dos dedos en su vagina, lo que la hizo dar un pequeño salto, -“perdón, me duele”- una vez dentro de ella, recogí con la punta de mis dedos lo más que pude de ese coctel y sacándolos suavemente, me los llevé a la boca para degustarlos, y darle a probar también, la giré para colocarla nalgas arriba y separándolas busqué su agujerito, el cual también mostraba las huellas de la invasión recibida, se abría y cerraba al sentir mis dedos acariciando sus márgenes y por ahí, también escurría un hilo blanco y mezclado con un color ligeramente café, lo que por supuesto manifestaba que también en esa cavidad había estado la verga de Jorge, y la había llenado de leche……

Mi verga estaba dura, grande, húmeda, desde la mitad de su relato,

“te dejaron satisfecha, mi puta, o todavía quieres más verga?

“quiero la tuya, quiero sentirte dentro de mí, quiero sentir tu deseo

“cuanto la quieres mi puta, ya has recibido tres diferentes, cuanto quieres mi verga?

“mucho, la necesito dentro de mí, dámela soy tuya, tu puta,

Me puse entre sus muslos y levantándole los pies hasta la altura de mis hombros y separándole los muslos, le puse la cabeza de mi verga en la entrada de su panocha, llenándola de mi saliva, y tomando un frasco de aceite de bebé que siempre tenemos en el buró, la unté desde la punta hasta la base para que las lesiones no le lastimaran, la fui metiendo suave, lento, pero nuestra calentura era tanta que empezamos a movernos más y más rápido, lo que produjo que la mezcla de jugos de María, leche de Jorge y el movimiento de “batir la leche”, se formara una tenue espuma que rodeaba mi verga y sellaba la unión con la pucha de María, hasta que terminamos en un orgasmo simultáneo llenado aún más su panocha de leche, ahora con la mía confundiéndose con la de Jorge y con sus propios jugos, seguimos acariciándonos hasta que la madrugada nos sorprendió, decidimos dormir y nos dimos un gran beso,

“gracias amor, sabes, nunca imaginé que algún día haría el amor con Jorge, ni modo, me lo perdí en su oportunidad, pero ahora ha valido la pena la espera, lo disfruté una barbaridad, pero no lo cambiaría por un solo beso tuyo……… me encantará volverlo a hacer, solo que ahora iré en mi papel de puta, porque solo eso quiero ser para él, una puta con la que pueda coger, perdón, por haber ido ilusionada y soñadora, pero fueron muchos años de su insistencia y mi resistencia a hacerlo, que era una forma de compensarnos, a él y a mí, por las oportunidades perdidas. Seguramente voy a volver a invertir todo ese tiempo, o tal vez más, en prepararme para ir a verlo, pero la excitación y la humedad previa serán por el placer que voy a dar y a obtener de esa cogida, me voy a esmerar no solo en la preparación, sino en la forma en que me lo voy a coger y hacer que me coja, para que no haya duda de que no es amor, que es solo deseo de sentirme puta con él.

“gracias a ti, por compartir tal cual fueron las cosas, es bueno saber que eso te ayudó a cerrar un círculo del pasado y a abrir uno nuevo para el futuro, me gusta que quieras coger y te des la oportunidad de hacerlo, pero me encanta que sigas siendo esa mujer sensible, romántica, apasionada que se entrega al placer, pero que no olvida los sentimientos y que se llena de emoción ante una nueva expectativa, que se ilusiona como adolescente, recordando a un amor de juventud y que es capaz de separar el amor del sexo; estuviste enamorada y no te diste la oportunidad de disfrutar del sexo con él, por todas las razones que hayan existido, me da gusto que lo hayamos podido realizar a través de esta aventura y más por el placer que tuviste

“no hay plazo, pero si reglas para el cobro de la apuesta, la primera ya te la dije, una mordida en cada chiche, la segunda es que me vas a llamar por teléfono desde el sitio donde le esperes, y me vas a avisar, que vas a ir a coger, la tercera, es que, a partir de hoy, no hay sexo entre nosotros, hasta que regreses de ser cogida por Jorge.

“mmmm, no sé si estoy conforme con la tercera, pero está bien, tu ganaste, tú pones las reglas, eso me hará estar más caliente cuando lo vaya a ver,

“cambiando de tema, hoy me llamó Alberto, dice que no le contestas el teléfono, que cuando nos vemos para desayunar..

“el día que decidan, no tengo problema, ahí me avisas para que fin de semana quedas con él

Pasamos el fin de semana con las niñas, en las mil labores que tienen que hacer para preparar su semana, en esos momentos, María estaba pensando en cómo le haría para volver a estar con Jorge, ya que normalmente se hablaban cada 4 o 6 meses y ahora, tenía que hablarle y quedar con él antes de 2 semanas, en esos pensamientos estaba cuando sonó el teléfono y María dio un brinco que tiró lo que traía en las manos,

“que pasó má, dice Mariquita, nada, me sorprendió el timbre,

“bueno?, -dice Mariquita al contestar- ¡Tío Alberto, que gusto oírte, hace mucho que no nos llamas!, —- Si, claro te lo paso, me dio mucho gusto saludarte, pásala bien¡

“pá, te habla el tío Alberto,

Tomé la bocina del teléfono y empieza una conversación igual que las más recientes veces que hemos hablado, quejándose de que no le contesto las llamadas, que lo tengo abandonado, que me quiere mucho, en fin,

“desde cuando estas tomando hermano? No te creo, que sea desde anoche, seguro tienes varios días en el agua, mira, no me gusta que llames cuando estas tomado, cuando estés mejor hablamos, ¿de acuerdo?

Le colgué la bocina, pero me quede preocupado, (Alberto ha sido mi hermano de vida desde hace 25 años, nos queremos y hemos estado juntos en las buenas, en las malas y en las peores, por eso me duele que cuando las cosas van mal, se dedique a tomar a lo loco)

“quien era amor?- dice María desde la cocina-

“Alberto, anda en el agua, sabrá Dios desde cuando

“no te enojes, pero creo no deberías colgarle así, ya sabes cómo es de sensible.

“yo creo, que tu deberías hablar con él, a mí, ya no me escucha,

“déjame intentarlo, sale.

“ok, ahora tendrás un hijo mayor que tú, jajajajaja

Siguió pasando el domingo, sin más contratiempos, el lunes por la mañana todos en el inicio de rutinas, yo a empezar a poner orden en mi nuevo espacio, una oficina pequeña, ubicada en la colonia Condesa, así que estuve entretenido con mi acomodo de muebles, tuve que deshacerme de varios, dado que el espacio nuevo era mucho más reducido que el anterior, en general mi semana transcurrió sin más hechos relevantes que mencionar, puse un anuncio en los comercios de la colonia, buscando una asistente que me ayudara a bajo costo, realicé llamadas a algunos amigos buscando un empleo de medio tiempo que me permitiera atender mi oficina por las tardes y hasta ahí. Por las noches pláticas relacionadas con el día, el lunes me comentó María que había desayunado con Alberto, sin entrar en detalles, en realidad, yo estaba muy molesto con él, por tirarse a la bebida a cada problema que se le presentaba, entonces no le seguí la plática, por lo que no ahondó más, el viernes después de tomarnos una copa de vino y ya en la recámara, le pregunté de sus avances de la semana para cumplir con la apuesta y esto fue lo que me platicó

“cuando se fueron a la escuela las niñas y antes de meterme a bañar, decidí marcar por teléfono con Alberto, ya que me quedé preocupada por la llamada del día anterior.

“bueno, Alberto, como estas?, me comentó Pedro que estabas mal ayer,

“no te preocupes, voy a hacer ejercicio y después ya estaré como nuevo, te invito a almorzar y así podremos platicar un rato, no me digas que no, por favor

Después de cómo lo oíste ayer, no tuve corazón para decirle que no, así que acepté y quedamos de vernos en dos horas en el centro de Coapa, me metí al baño y me vestí con unos jeans y una sudadera, salí de casa y tomando el microbús me dirigí al centro comercial que está en el crucero de Acoxpa y Miramontes, una vez en el restaurante lo vi al fondo, llegando me abrazó y me beso en la mejilla, estaba aún sudoroso, vestía un short de lickra y una camiseta

“no me abraces, estas todo sudado,

“perdón, pero me da mucho gusto verte

“mira nada más como estas, chorreando sudor por todos lados,

“Se levantó y girando sobre su eje me enseñó su cuerpo, el sudor hacía que la lickra de su ropa se pegara a su cuerpo dejando ver lo mucho que ha trabajado en el gimnasio y particularmente se notaba su verga bajo el short y se marcaba claramente su cabeza. En otro momento, no me habría fijado en este detalle, pero, los recientes acontecimientos y mi creciente apetito sexual, hicieron que mi panochita palpitara y se humedeciera, mis pezones bajo la sudadera se pusieron duros, sabes que a él no lo veía como hombre sexualmente hablando, que la noche que recorrimos candidatos para que yo cogiera, el nunca apareció entre los posibles, si bien yo sé que no son “hermanos”, si estoy consciente que se quieren como tales, y eso lo pone en otro escalón, pero no pude evitar la reacción de mi cuerpo.

“Terminamos de desayunar mientras platicábamos que había tenido muchos problemas con su actual pareja y para variar, estaban pensando volver a separarse (tienen una relación de ir y venir), en fin, ese había sido el gran motivo para emborracharse 3 días seguidos, le sugerí algunas cosas y consumimos lo poco que quedaba de café,

“ya me tengo que ir, para estar a tiempo cuando regresen las hijas del colegio,

“vámonos, gracias por venir – pidió la cuenta y nos salimos, cuando le entregaron las llaves de su camioneta, me tomó del brazo para conducirme al sitio del copiloto abriendo la portezuela,

“no te preocupes, me voy en un taxi

“de ninguna manera, no voy a dejar ir a mi “casi cuñada”, así,

Se subió del lado del conductor y empezó a maniobrar, pero en vez de entrar a Miramontes hacia la casa, se metió hacia la colonia:

“me ducho en 5 minutos y vamos.

“Llegamos a una unidad que yo no conocía, nos abrieron la reja y tres andadores después, estábamos frente a una puerta de un condominio horizontal, que más parecía una casa que un departamento. Abrió la puerta, haciéndome pasar

“te dije que me iba en taxi

“ya me ducho y nos vamos, quería que conocieras mi nuevo departamento, para que le digas a Pedro, que me estoy superando, mientras me ducho, conócelo, recórrelo para que lo conozcas bien.

“Él se metió al baño pero dejó la puerta abierta para seguir platicando, escuché como empezaba a correr el agua de la regadera, mientras yo caminaba por el departamento, entré a la recámara principal y vi la puerta del baño abierta, se podía observar a través del cancel de vidrio esmerilado, su silueta desnuda enjabonándose, me senté en un taburete enfrente del espejo, dándole la espalda a la puerta del baño, retocando mi labial.

“listo, -dijo mientras se dejaba de escuchar el agua y corría la puerta del cancel, yo podía escuchar cómo se frotaba el cuerpo con la toalla para quitarse el exceso de agua y se secaba el cuerpo, cuando salió del baño, podía observar su imagen a través del espejo, con el torso desnudo y la toalla atada a la cintura, me di la vuelta para levantarme y salirme y se pudiera vestir, mis ojos tropezaron con la punta de su verga que se asomaba por un borde de la toalla, se podía ver, gorda, gruesa,

“te dejo que te vistas, – y salí lo más rápido que pude de su habitación.

“Cuando salió de la recámara con pantalón sport y playera polo, mi nariz se inundó de una fragancia varonil, suave pero intensa, mi pucha no dejaba de palpitar y la sentía cada vez más húmeda

“vámonos,

“perfecto, vamos.

“En el trayecto a la casa, su plática fue más de los recientes logros que ha tenido es su trabajo y que esto le facilitó la oportunidad de comprar su departamento, que tenía proyectados varios viajes en las próximas semanas, etc, etc, mi pucha dominaba mi cerebro y no conectaba lo que él decía, con posibles respuestas, por fin llegamos a la puerta de la unidad, antes de bajarme de la camioneta, le di un beso en la comisura de los labios

“pórtate bien”- le dije a modo de despedida

“Sin esperar respuesta me dirigí a la reja y me metí, casi corriendo llegué a la casa, donde una vez dentro literalmente de tiré en el sofá de la entrada, con el pulso y la respiración totalmente alteradas. Respiré profundamente hasta que se fueron regularizando, fui al baño y al bajarme las pantaletas estaban no húmedas, estaban mojadas al grado que me las tuve que cambiar, ya no me puse los jeans pues quería que se liberara el calor de mi puchita. Revisé los mensajes del teléfono y tenía en la contestadora tres llamadas perdidas de Jorge, por supuesto que le marqué enseguida, tenía la panocha caliente, húmeda y deseosa, mientras esperaba que me contestara, me empecé a acariciar mi rajita, pensando en la verga que momentos antes acababa de ver y que me había provocado ese estado de excitación y recordando la de Jorge que hacía 3 días había tenido en todos mis agujeritos…

“hola,

“hola mi niña¡, como estas? Qué bueno que me marcas, ya estaba preocupado es raro que los lunes no estés en casa, ¿cómo te fue el viernes en la noche?

“buen día, una por una o te contesto todas juntas? Jijiji

“estoy bien, tuve que salir de urgencia a ver a un hermano de Pedro, que estaba mal, pero ya se quedó mejor, por eso no me encontraste temprano…. Qué más?

“cómo te fue el viernes? ¿No tuviste problemas con Pedro?, no se dio cuenta?

“todo el viernes me fue muy bien, desde temprano en la mañana, me la pase de lo mejor¡¡,

“a si? ¿Y eso porque se si puede saber?

“no te había comentado, te puedo confiar un secreto?,

“por supuesto que sí, sabes que puedes confiar en mi para todo lo que necesites

“pues, tengo una conquista, lo vi el viernes en la mañana y me dejó muy satisfecha¡¡, me dio tanto placer que aún estoy disfrutándolo

“en serio?, ¿de verdad lo disfrutaste?

“no tienes idea, me llenó completamente, literal, ocupó espacios de mí que nunca habían sido llenados¡- mis manos seguían jugando en mi entrepierna a acariciarme y terminé metiendo la mano por debajo de mi calzón que ya empezaba a humedecerse, mientras platicaba con Jorge,

“ya en serio mi niña, no tuviste problemas?

“ninguno¡¡, salvo que mi puchita quedó adolorida de tan rico que me penetró mi nueva conquista¡

“deja que jugar, que estoy trabajando, mi niña y me vas a poner duro

“eso es lo que quiero, me llenó de lechita caliente por todos mis agujeros, y me hizo sentir deseada, me descubrió lo que soy, una puta

“no digas eso, no te llames así, mira que mi verga se está poniendo grande

“ya la quiero volver a tener dentro de mí, para darle una muy buena mamada, y metérmela profundamente en la garganta, -me senté en el sofá al lado del teléfono y me quité el calzón, para poder maniobrar mejor, poder abrir las piernas y acariciarme sin ningún estorbo, seguía produciendo lubricación de lo excitada que me había dejado Alberto y pensar en la rica verga de Jorge, me hacían acariciarme cada vez con más fuerza y más rápido,

“yo también quiero volver a hacer el amor contigo,

“yo no quiero eso, quiero que me cojas como lo puta que soy, que me la metas por cada uno de mis agujeros hasta dejarme más adolorida que el viernes, quiero sentir como tu verga llena mi intestino y se mete más allá de lo que nadie haya estado antes, y gozar y gritar de placer, y que me hagas tuya, quiero que mi culo se dilate y se quede abierto para siempre, empecé a gemir, del placer que me estaba dando con los dedos y de pensar en la verga de Jorge metida en mi culo, mi orgasmo fue intenso, fuerte, no me importó que me escuchará del otro lado de la línea, hasta que la bocina se me cayó de las manos, llegando al suelo

“mi niña estas bien?

“por supuesto, solo que mi amante me acaba de hacer gozar, lo oíste??

“te desconozco mi niña, nunca te portaste ni siquiera algo parecido a esto conmigo,

“te molesta? A partir del viernes todo cambió, y tú eres el culpable, así que dime si te molesta, a mí me gustó que me cambiaras con el placer de sentir tu verga dentro de mí, pero si te molesta, pues ni modo, aquí lo dejamos.

“Colgué la bocina, sabiendo que volvería a marcar, efectivamente segundos después sonó el timbre del teléfono, pero me haría la ofendida y no le contesté, dejé que sonara hasta que se interrumpió la llamada, varias veces más lo intentó, con el mismo resultado. Me volví a cambiar de pantaleta y me dispuse a terminar con el arreglo de la casa y la preparación de la comida.

“Los días pasaron y todas las mañanas al menos intentaba llamarme de 3 a 5 veces, yo sabía que el día que le contestara obtendría de él lo que quería, el viernes al tercer intento, levanté la bocina y con la voz más seria que pude contesté

“si diga?,

“mi niña, que bueno que me contestas

“yo creo que se equivocó de teléfono señor, aquí no hay ninguna niña, solo hay una puta

Volví a colgar el teléfono ….

Una vez más volvió a marcar ….

“si diga?

“no me cuelgues, perdóname, solo escúchame, por favor, si después de esto no quieres volver a hablar conmigo lo entenderé, durante 20 años, nunca me permitiste más allá de una llamada ocasionalmente, si acaso un café cada 2 o 3 años, y si intentaba tocar tu brazo me rechazabas al instante, pensar en besarte si acaso en sueños y el hacerte el amor solo era una fantasía recurrente, el día que me llamaste me sorprendiste cuando aceptaste vernos y más cuando dijiste que dispondrías de toda la mañana o la tarde para mí, no lo podía creer, era un sueño, me imaginé mil escenarios posibles, pensé que habías decidido dejar a Pedro, que algo había cambiado en tu vida y que necesitabas a un viejo amigo, no te niego que llegó a pasar por mi mente que pudiéramos hacer el amor, pero ni en mi más loca fantasía imaginé ni la mitad de lo que vivimos, la forma en que me besaste, como te entregaste al placer y me hiciste gozar sentirme dentro de ti en tu boca y como lo hacías entrar profundamente me brindo un éxtasis de esa mezcla de sentimiento y deseo, conforme avanzó la mañana y nuestros juegos sexuales aumentaron la intensidad estaba viviendo un paraíso, esa forma de cogerme y dejarte coger no se parecían en nada a lo que yo hubiera pensado, planeado o imaginado, no me estoy quejando, ni me arrepiento, fue un disfrute tan intenso que el viernes pasado en la noche, mientras intentaba dormir, no sabía aún si había sido realidad o me encontraba tirado en una cama de hospital y estaba delirando, ese placer negado tantos años, me caía de pronto como una tonelada y no supe cómo manejarlo adecuadamente, entiendo que ya no quieras ser mi niña, pero más de 20 años fue como te traté y como me dejaste hacerlo, nunca he usado ese lenguaje con nadie y me resisto a llamarte puta,

“todos evolucionamos, me costó mucho trabajo, no te lo niego, sin embargo han pasado cosas en mi vida en este año especialmente, que me hicieron cambiar, estuve a punto de pedir el divorcio y sin que Pedro se enterara, el mismo provocó muchos de estos cambios, entiendo que los dos cambiamos y fue para mejorar, tú también debes haber cambiado de lo que fuiste hace 20 años, si en algún momento antes del anterior viernes nos hubiéramos acostado y “hacer el amor” como tú dices o “coger” como te lo digo hoy, lo más seguro es que nuestra “bella amistad” ya se hubiera ido al caño del agua. Nada ocurre por qué si, todo tiene una causa, un tiempo y su mejor momento, el viernes para nosotros fue eso, el mejor momento para estar juntos y “hacer el amor”, déjame decirte que la primera fue un cáliz, una prueba de que podíamos darnos placer, una de las siguientes, alcancé un orgasmo casi celestial, rayando justo en eso, no solo el placer físico sino la unión de nuestras almas, y esa nos la debíamos tú y yo, las últimas acciones, después de dormir, fueron la otra moneda, sexo puro, lleno de deseo, pasión lujuria desbordada, esto no lo hubiéramos hecho en otro momento, esto es lo que quiero, si estás dispuesto a ser mi amante ocasional y darme todo el placer que seas capaz, adelante, si no te convence, entonces recuerda que hace una semana alcanzamos la luz de la unión de nuestras almas y no me vuelvas a llamar, quedará el recuerdo de que logramos lo que muchos años nos negamos, en ese momento te amé con el amor contenido de 20 años, hoy te deseo por el gozo que me diste y que sé que eres capaz de darle a mi cuerpo.

“Se quedó en silencio unos instantes, para retomar diciendo …

“el viernes me sorprendiste, pero hoy me has dejado con la boca abierta, creo que me había quedado atorado en el pasado, y es cierto, yo también no me parezco en nada al joven inexperto y ansioso de hace 20 años, creo que en ese entonces la calentura me hubiera ganado y no hubiéramos disfrutado ninguno de los dos, estoy en proceso de asimilar este cambio, de dejar de verte como “mi niña” y verte como, “mi amante”? “mi puta” ?, como quieres que te vea, ambos calificativos resuenan en mi cabeza, pero eso tiene que ver con el pasado, el viernes de la semana pasada inicio nuestro presente y estoy más que dispuesto a ser tu amante ocasional y darte todo el placer del que soy capaz.

“excelente, “mi amante”, tú serás mi amante de hoy en adelante, aunque ya iniciamos el viernes pasado, y yo seré “tu puta”, gracias por tratar de entenderme y quizá algún día te platique la historia de porque el cambio, solo es necesario hoy que sepas que soy feliz de tenerte junto a mí. ¿Nos oímos la próxima semana? ¿Podrás hacerme un espacio en tu agenda el viernes de la próxima semana, justo dentro de ocho días, quizá no tanto tiempo como la vez anterior, pero si puedes me avisas el lunes?

“por supuesto, gracias por darme otra oportunidad

“dímelo¡

“que quieres que te diga?

“lo sabes, dímelo,

“eres mi puta”

“gracias, bye.

“Colgué el teléfono y estoy a la espera de que el próximo lunes me confirme.

Nos quedamos en la cama, viendo el techo, en mi cabeza daba vueltas el que confesara abiertamente que se había entregado a Jorge por amor, y que le había dado vuelta a la página, todo en el mismo día, definitivamente María había evolucionado, como la oruga que se convierte en mariposa, yo esperaba estar a la altura de ese cambio y poder seguirle el paso al ritmo acelerado que llevaba en esta nueva persona que se estaba convirtiendo.

También me quedé pensando en que hubiera visto a Alberto como hombre, tenía toda la razón, nunca figuró siquiera entre los candidatos para tener sexo y la vida se lo había puesto en la mira, no sé qué vaya a suceder más adelante, lo único que me queda muy claro, es que, si tiene otra oportunidad, no la va a desaprovechar, veremos cómo se comportan las cosas la próxima semana…..

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