Capítulo 20

Ya es hora de dejar de llamarme “xxx”, mi nombre real es Victoria, todo este tiempo desde el primer día con mi caída en plena calle hasta hoy, han pasado seis años, no me he vuelto a casar oficialmente, pero mi madre y mi hermana, conocen de mi relación con Alex; no son tontas y me interrogaron, además, mi madre, por si fuera poco, aunque no nos pilló, se dio cuenta que no dormía en mi cama en Cadaqués. Confesé con la condición de que nunca se enteraría mi padre, ni nadie más y así ha sido hasta hoy y de momento seguirá siendo por el bien de todos. Alex ha terminado la universidad y sale formal y oficialmente con Almudena (quien también se ha licenciado con honores, al igual que Alex en la Universidad de Deusto), en calidad de novios formales, ni que decir hay que las dos familias (yo incluida), están encantadas; él, alto (al final se ha puesto en metro ochenta y cinco), moreno, guaperas, con esa mirada dulce, pero penetrante y a veces intimidadora, ella, alta (un metro setenta y ocho), delgada, con una cara de ángel, parecida salida de un cuadro, un cuerpo escultural y que ha heredado la clase y distinción de Patricia su madre (además tiene al yerno en casa, teniendo conocimiento de que su hija, conoce sus debilidades).

Hemos pasado muchos fines de semana juntos en Bilbao y además les he colaborado en ayudarles en sus materias y por descontado en otras causas…

Ahora, van a comenzar, diferentes Máster de sus especialidades, Alex: acceso a la Judicatura y un Máster en Derecho Marítimo en Boston; Almudena: un Máster en Gran Bretaña, sobre gestión de empresas marítimas.

Reconozco, que hemos influido bastante en la elección de sus máster y en sobremanera Andrés y Manuel, quienes entre sus negocios, tienen una mayoría de acciones en una importante Compañía Naviera internacional; pues tenemos intención de que entren a trabajar en la naviera (yo, ya no estoy en el despacho de mi padre, Andrés y Manuel, hablaron primero con él para hacerme una muy buena oferta profesional y posteriormente, los tres conmigo) desde abajo y si se lo ganan, irán ascendiendo por diferentes puestos, cada vez con más responsabilidad.

Andrés y Manuel, junto con mi padre, me invitaron a comer un día y a partir de ese día mi vida, se reafirmó en un cambio total.

  • Mira hija, te hemos invitado a comer, porque tenemos que comentarte, mejor dicho, Andrés y Manuel tienen que explicarte con detalle algo, de lo cual, yo tengo conocimiento desde hace bastantes años, concretamente desde que acabaste la universidad
  • Papá ¿Qué ocurre? Me estás asustando, pero viniendo de estos dos, además puedo temerme lo peor, si lleváis años confabulando.
  • Mira, guapita de cara, dijo Manuel. Sabes bien que te conocimos desde que naciste, es más te conocemos desde que estabas en la barriga de tu madre.
  • ¿y qué pasa? Dije comenzando a temblar
  • Tranquila dijo Andrés, deja hablar a Manuel y luego nos preguntas lo que quieras y no interrumpas que te conocemos o sea que calladita estás más guapa
  • Mira Vicky (siempre me han llamado así, pero solamente ellos y Alex), eres una rara combinación “rara avis”, mejor dicho, mujer hermosa, elegante, con clase y de refinados modos, sobre todo una muy buena profesional y muy inteligente, combinaciones éstas, prácticamente imposibles de encontrar. Lo dicho “rara avis”
  • Para nosotros siempre has sido nuestra niña, queremos a tu hermana también, pero tú has sido siempre nuestra preferida, recuerdo cuando eras una retaca, que en cuanto nos veías, te lanzabas en nuestros brazos y nos comías a besos, (aún hoy en día me los como a besos). En tu adolescencia, recuerdo perfectamente un enfrentamiento muy serio que tuviste con unas de tus amigas, delante de sus padres, por defender nuestra orientación sexual.
  • Sí, lo recuerdo, nunca más le he vuelto a dirigir la palabra, para mi están muertas
  • Andrés: lo dicho, no puede estar sin meter baza
  • Jajaja (todos)
  • Sigo, siempre te hemos seguido personal y profesionalmente, quitando el tiempo que dejaste de trabajar por culpa del innombrable, eres una más que buena profesional
  • Hemos pedido permiso a tu padre, para hacerte una oferta en dos tiempos, el primer tiempo será a partir de ya y el segundo ya te lo diremos también ahora, pero es independiente de que aceptes o no el primer tiempo, el segundo, ya está decidido y no va a cambiar por nada de nada.
  • Me tenéis en ascuas demonios, me va a dar algo, me sentará mal la comida y será por culpa vuestra
  • Queremos y tu papá está de acuerdo totalmente (mi padre y mi madre los adoran), que, desde hoy mismo, pases a ocupar la vicepresidencia ejecutiva de la naviera
  • Pero…
  • Silencio. Nada, hay que ponerle un esparadrapo o algo, para que no abra el buzón, jajaja
  • Nosotros ya somos mayores y no podemos con tanto trajín de controlar la naviera, asistir a los consejos de administración tanto de esta, como del resto de compañías y vamos a delegar, todas nuestras funciones en ti. Así que solo puedes decir “Si” ¿de acuerdo?
  • Sois los mejores descendientes de Maquiavelo, sois malignos, (me eché a llorar desconsoladamente), chantajistas, sabéis que no puedo negarme y tú, papá ya pasaremos cuentas a solas tú y yo. Acepto
  • Bien, pasemos al segundo tiempo.
  • Esta vez continuó Andrés: bien sabes que nunca hemos tenido hijos y que nuestras familias, siempre renegaron de nosotros, por ser como somos. Así que ya hace bastantes años, tomamos la decisión de nombrarte heredera universal de todos nuestros bienes, así que guapa, serás “rica de cagar”.
  • Ahí ya no pude, contenerme más, me levanté y salí corriendo a llorar sola; al cabo de unos minutos regresé y los abracé y me los comí a besos, me abracé a mi padre
  • Con la voz quebrada. Yo os amo y os quiero a vosotros, siempre habéis sido mis otros papás, nunca he buscado nada de nada
  • Lo saben hija mía y tu madre y yo también lo sabemos, al igual que tú y tu hermana sois nuestras hijas y herederas, para ellos tú eres su hija y heredera
  • Acepto todo con condiciones, si las aceptáis todas sin ninguna exclusión, de acuerdo, si no nada de nada
  • Andrés: ahora es cuando se pone chula y nos jode a todos, ya veréis quien es el que hace los chantajes.
  • Quiero que me monitoreéis, al menos el primer año y tener vuestro asesoramiento siempre
  • Quiero que, si no funciono, me despidáis como a cualquier otro ejecutivo
  • Quiero poder elegir a mis colaboradores más cercanos, a ser posible gente (sin despreciar para nada a nadie de los que han colaborado con vosotros, por supuesto) joven, sin vicios adquiridos
  • Y, por último, esta exigencia va por ti papá. Quiero que tú y mamá, nombréis heredera universal a mi hermana, esta última condición, es innegociable, sin ella no aceptaré
  • De acuerdo con todo, sin excepción dijo Andrés
  • Me encanta lo de la gente joven, dijo Manuel sonriendo malévolamente
  • Hija, dijo mi padre. No solo por lo qué acabas de decir estoy orgulloso de ti. Acepto, aunque sé perfectamente, que tu madre estará de acuerdo, salvo en una cosa y ahí puede ser un problema si no transiges un poco

Tu abuela le dejó la casa de Cadaqués a tu madre, por ser la hija mayor, tu madre te la deja a ti por lo mismo y así ha sido desde siempre y es tradición que no se puede ni debe romper.

  • De acuerdo, pero únicamente en concepto de legítima, si no, no
  • Joder con la niñata, que dura es dijo Andrés
  • Qué se prepare todo el mundo, se quejaban de nosotros, ahora nos van a elevar a los altares por santos, jajaja

Mi padre me dejó un rato a solas con ellos y aprovecharon para decirme

  • Lo de la gente joven, totalmente de acuerdo, hemos adoptado a Alex y a Almudena, formáis un matrimonio de tres qué durará toda la vida, pero debemos encauzarlos a especializaciones de interés para casa, ese es el primer objetivo que tenemos que abordar
  • Me reafirmo, sois peor qué Maquiavelo y el Diablo juntos. Os amooo

Una tarde, pase a buscar a Alex, al salir de su trabajo y nos fuimos a tomar algo al chiringuito La Sal, hablamos, mientras observábamos los postureos de toda la gente, tanto hombres como mujeres, parecía que todos se ponían en el mercado, con el cartel de “en venta”, nunca me había fijado.

En un momento determinado:

  • Tengo que hablar contigo, Vicky
  • Dime cielo
  • No sé cómo comenzar
  • Pues por el principio, dale, aunque imagino el que dirás, pero eres tú quien debe comenzar
  • Joder, bueno voy pallá. (prendaaa, dije yo), desde hace un tiempo, casi desde el comienzo del verano, me estoy llamando y viéndonos en alguna ocasión, con Almudena, la hija de Patricia (Alex, me relató de la “a” a la “z”, todo lo concerniente a Almudena, visiblemente apesadumbrado, sin omitir nada de nada), lo siento de verdad, pero no quería decirte nada, sin estar seguro
  • Respondí: lo sé y lo que no sé, lo suponía, por qué te conozco como si te hubiera parido. No me importa en absoluto y lo apruebo de principio a fin, si bien el fin, no está escrito
  • Has hecho muy bien respetándola y sobre todo sincerándote con ella, siempre me ha parecido una chica muy íntegra y sensata. Me gusta, que le hayas hablado de nosotros y de nuestros sentimientos, pero mucho más su respuesta de un matrimonio de tres, aunque solo te ha faltado, decirle quien es ese amor misterioso.
  • Te diré lo que haremos, como ella está en Begur, llamas a Patricia y le dices, que si puedes invitarlas a ella y a Almudena a cenar, que se vengan a Cadaqués, no te dirá que no, yo reservaré mesa en Casa Anita y pediré que nos den la mesa del interior en el bar, allí estaremos solos; tú las recibes y os vais allí, yo ya estaré dentro, haré la reserva a tu nombre
  • Por supuesto a Patricia le encantó la idea, se vistió como es costumbre en ella, espectacular, que quitaba el hipo de golpe y Almudena también deslumbrando belleza y juventud.
  • Cuando entraron en el restaurante, nos acompañaron a los tres a la zona posterior, donde Juanito, solo da acceso a los clientes y amigos, más íntimos; se sorprendieron al verme allí
  • Alex comentó: como me quedo en casa de Vicky, le he invitado también, para qué así podamos intimar más los cuatro (menuda directa dejó ir el muy puñetero)

Estuvimos comiendo y riendo a base de bien, pero ya en los postres, que son espectaculares y después de lo bebido, Alex entró en detalle.

  • Os quiero decir, algo muy importante para mi vida y para el futuro
  • En primer lugar, Patricia, quiero pedirte formalmente, tu autorización para poder salir y compartir con Almudena, pues llevamos tiempo hablando y conociéndonos y queremos los dos ser novios, antes de que digas nada, te diré qué la he respetado totalmente y ya me entiendes lo que quiero decir con “respetar”
  • ¿Qué puedo decir?, respondió Patricia, enormemente emocionada, ¡sí! Por supuesto que me parece muy bien
  • Gracias mamá
  • Hay más, ha llegado el momento de aclarar varios términos y relaciones.
  • Almudena: mira mamá, Alex y yo, hemos iniciado nuestra relación por el buen camino, sin mentiras, sin engaños y sin ocultarnos nada (Patricia palideció, y yo disfrutaba como una enana, pues sabía de antemano por Alex, lo que iban a decir), así que te seré muy clara. Sé que papá te es infiel, desde hace al menos cuatro años, con una venezolana (Patricia comenzaba a llorar), sé también de tus amantes ocasionales y quienes son, pero además sé perfectamente y que conste que no te lo recrimino para nada, por qué quiero que siga así, de tu relación con Alex.
  • Hija yo…
  • Espera, déjame terminar; no me importa tu relación sexual con Alex, al contrario, me parece bien, él me ha explicado con todo detalle vuestras andanzas y quiero ser partícipe de ellas cuando lo creáis conveniente. Te quiero mamá, estoy orgullosa de que te hayas liberado, por el momento no salgas del armario, hasta que se lo hagas pagar a papá, no te merece y tú te mereces disfrutar plenamente (yo alucinaba con el sentido común de esa niña, parecía tanto a mí, que, por un momento, pensé que era yo la que hablaba)
  • No sabes cómo te agradezco, lo que acabas de decir, te quiero mucho hija mía
  • Yo: todos felices y comieron perdices, pero….
  • Alex: perdona cielo, continuo yo si me permites por favor.
  • Yo: Por supuesto, adelante, jajaja. Ahora viene el remate de esta intensa conversación
  • Patricia y sobre todo Almudena palidecieron, ante lo que podía llegar ahora
  • Alex: Almudena, te dije que, había una persona que ocupaba, gran parte de mi corazón y quizás la más importante para mí, en mi vida.
  • Sí, lo recuerdo
  • Pues bien, esa persona es Vicky y está al corriente de todo absolutamente, aparte de que ella ha dado su conformidad previamente a nuestra relación, tuya y mía; así que cuando tú y yo hablábamos de matrimonio a tres, ella forma parte indisoluble del matrimonio
  • Almudena gritando: ¡LO SABÍA! ¡LO SABÍA!, sabía que solo podías ser tú, me encanta
  • Patricia: alucino, de verdad alucino, madre mía que vergüenza.
  • De vergüenza nada de nada, dije yo, todas queremos y todas necesitamos a Alex, a todas nos encanta dominar y sentirnos dominadas, lo pasaremos en grande y super bien. Además, Patricia, seamos sinceras tú y yo, reconozcamos que no nos hemos, digamos llevado muy bien en los últimos tiempos, pero ahora comienza el camino de una gran amistad y disfrutaremos juntas de ese camino, viendo además a estos dos granujas, ser felices.
  • Venga-venga, vamos a celebrarlo dijo Almudena ¿Qué hacemos ahora?
  • ¿os parece qué vayamos de caza a Roses? Dijo Alex. Os dejo que hoy os dejéis meter mano solamente, pero como no tenemos carnet ni Almudena ni yo, tendrá que ser en algún sitio discreto, pero público, un parque por ejemplo o algo así

Tomamos el coche de Patricia, pues acordamos que se quedarían a dormir en una de las casa de invitados en mi casa, además fue perfecto, porque el marido de Patricia, de nuevo estaba en un torneo de golf (otro igual que Héctor, uno cenas de trabajo y el otro torneos de golf)

Nos fuimos a un bar del paseo marítimo, en una zona alejada del centro, Patricia y yo nos sentamos en una mesa y los chicos en otra diferente, casi al lado. Casi al lado, había dos latinos, tomando cerveza, tendrían encima de la mesa diez o doce botellas ya vacías y yo hice de instructora

  • Patricia, mientras hablamos, haz como yo, desabróchate un poco la blusa y tú me tocas a mí y yo a ti. Nos acariciamos, como si fuéramos lesbianas, nos besaremos y nos tocamos; seguro que nos dicen algo, cuando lo hagan, sígueme la corriente, vamos a disfrutar, pero recuerda que Alex, no nos ha dado permiso para follar.
  • ¡qué nervios Victoria! Nunca he besado a ninguna mujer
  • Para mí también será la primera vez, pero tengo ganas de probarlo, solo de pensar que me toques ya estoy mojada
  • Yo también estoy empapada, no sé si aguantaré sin correrme ahora mismo

Yo tomé la iniciativa y le planté un morreo a Patricia, que no se cortó un pelo y me correspondió con otro, metiéndome la mano y agarrando mi pecho fuertemente

  • Qué gozada, como besas
  • Tú también zorra, dije yo

Los tipos de la mesa de al lado alucinaban de ver a dos pibones como nosotras, besándose y metiéndose mano

  • Oíd guapas, si necesitáis ayuda avisar, jajaja, tenemos algo mejor para que disfrutéis más
  • Eso habría que verlo, seguro que mucha boquita y poca polla
  • Mirad, dijeron sacando sus pollas, de tamaño normal, tirando a pequeñas, pero eso sí, en posición de firmes ya
  • No están mal dijo Patricia
  • Las hay mejores, dije yo, ya totalmente excitada, pero en el frasco pequeño, está el mejor perfume. Ven que me ponga un poco de perfume
  • Vamos a otro sitio dijeron, ahí están esa pareja y nos verán
  • Deja que miren y aprendan los dos

Allí mismo en la terraza, me acerqué a la mesa de ellos y comencé dándole unos besos y lengüetazos a la polla de uno; Patricia me imitó haciendo lo mismo, pero comiéndole la polla al otro antes que yo.

  • Comed putas, a ver si aprendéis a dejar de ser bolleras, un buen rabo es lo que os hace falta, os vais a tragar toda nuestra leche putas, mientras nos pellizcaban los pechos y metían sus dedos en nuestros coños. Se corrieron casi al mismo tiempo y por supuesto, no dejamos que se perdiera ni una sola gota, teniendo nosotras dos un orgasmo sensacional cada una; terminamos dándonos un morreo Patricia y yo, aún con la leche de los dos en nuestras bocas, lo que acentuó nuestra excitación
  • Muchas gracias por llevarnos al camino de la verdad muchachos; tomad (les dimos quinientos euros a cada uno, cada una al suyo), por las molestias
  • Volved cuando queráis que hay pa más

Nos levantamos y nos fuimos hacia el coche, pero la cara de sorpresa fue mayúscula, cuando vieron que la pareja del lado, nos seguía y se metió en el coche con nosotras

  • ¿os habéis dado cuenta la cara que han puesto cuando hemos subido nosotros al coche? De película cómica jajaja

Continuamos nuestro viaje hasta Cadaqués riéndonos profundamente y a carcajada limpia.

Cuando llegamos acompañé a Patricia y Almudena, a una de las casas de invitados, nos despedimos hasta el día siguiente con un beso entre los cuatro habiendo disfrutado enormemente de la experiencia.

Alex y yo nos marchamos a su habitación donde después de lavarme bien la boca, le planté, un beso de los que hacen época.

  • ¿no pensarás que me voy a ir a dormir con esta calentura?, le dije
  • Para nada, no me he metido a participar porque estaba Almudena y he tenido que contenerme. Si no llega estar, te aseguro que os la hubiera metido a las dos, bastante trabajo que he tenido en sujetar a Almudena, porque estaba de un caliente, que esta noche no va a poder dormir.

Alex me tomó en sus brazos acariciándome delicadamente, como yo a él y nos fundimos uno dentro del otro en una espiral de pasión y de amor, me penetro directamente por detrás, consiguiendo que llegara a un orgasmo magistral, se vino dentro de mí llenándome con toda su leche bien caliente y cerrando las piernas presión sobre polla de tal forma que no pudiera salir.

Me dormí con la polla de Alex dentro de mi culo, sintiéndome la mujer más feliz del mundo, por poder combinar el amor, con los más oscuros deseos del ser humano.