Buenas, un gusto me llamo Sarah y pues este es mi primer relato, la verdad es que hasta el día de hoy me da mucho placer y morbo contarlo.

Bueno, yo soy una chica relativamente alta (mido 1,69) tengo 22 años actualmente y pues esto paso el año pasado, a inicios de noviembre yo llegué del trabajo a mi casa obviamente y tengo la costumbre de no saludar y tener mis audífonos en alto volumen, mientras caminaba hacia mi habitación pase justamente por la habitación de invitados cuando por el rabillo del ojo alcance a ver qué había alguien ahí dentro, tras devolverme a mirar lo que vi fue a mi primo mayor (el de 25 años) montando a su novia, justamente por cómo estaba la cama acomodada alcanzaba a ver cómo la verga de mi primo entraba y salía del coño de su novia, yo me quedé paralizada unos segundos antes de pausar mi música y al hacerlo se escuchaba con mucha fuerza jadeos y gemidos de parte de ambos, además de que la novia de mi primo gemía con dolor cuando él intentaba metérsela toda, en fin, tras ver eso yo rápidamente aunque en silencio me fui a mi habitación, bastante sonrojada y algo agitada.

Desde ahí no podía ver a mi primo sin imaginarme lo que le hacía a su novia hasta que una noche con algo de insomnio pues, me puse a ver algo de porno, mientras me masturbaba de vez en cuando recordaba la verga de mi primo y me ponía a babear, lo cual se me hizo raro, aunque al final si termine de masturbarme esa noche.

Los días pasaron y casi a inicios de diciembre el viaje que siempre hacíamos por esas fechas se acercaba, normalmente íbamos a una zona donde hacía mucho calor y este año no fue la excepción, tras llegar a donde nos íbamos a quedar los días pasaban normales dentro de lo que cabe, aunque en la tardes y parte de la noche la casa que rentamos estaba solo para mi primo y para mí, ya que todos nuestros demás familiares se iban a hacer otras cosas (cabe aclarar que justamente ese viaje fue el único donde no fue la novia de mi primo) de los 8 días que íbamos a estar ahí 5 cada vez que nos íbamos a la piscina no podía dejar de ver de forma discriminada la verga de mi primo y cuando estábamos por dormir yo me la pasaba imaginando cómo se sentiría que el me estuviese follando como lo hacía con su novia, hasta que una mañana me decidí a que quería tener sexo con el o al menos insinuármele, aunque la verdad eso fue nuevo para mi, como sea la única idea que se me ocurrió fue que como él se la pasaba casi siempre en una habitación yo iba a simular que me equivocaba de habitación tras salir de bañarme, fui, me bañé normal y espere pacientemente que él saliera de la habitación para ir a buscar comida o ir al baño para yo colarme, tuve que esperar unos 10 minutos para eso, aunque cuando justamente el salió yo me metí en su cuarto y empecé a simular que estaba secando, cuando detrás mío escuchó un «SARAH!» Gritando fuertemente, yo me voltee a verlo y simulé cubrirme mientras le tire una almohada diciéndole que era un pervertido, él empezó a decirme que qué hacía en su habitación y todo eso, medio empezamos a discutir los dos, hasta que mientras estábamos en los gritos el me tira a la cama y me mantiene quieta debajo de él, yo me puse roja y lo mire de forma suplicante mientras que veía como el empezaba a mirar mi cuerpo desnudo, yo de forma muy pobre intenté apartarlo hasta que nos quedamos mirando nuestras respiraciones se agitaron para después yo acercar mi rostro al de él besándolo de lengua, el se quedó quieto unos segundos para después corresponder mi beso mientras me tocaba las tetas, no duró el mucho con ropa, tras separarnos del beso el rápido se quitó la poca ropa que tenía y se acomodó encima mío, aunque yo tenía algo de miedo por el hecho de no tener condones eso no fue impedimento para atraparlo entre mis piernas cuando se acomodó, casi por reflejo empezó a meterlo, me mordí el labio para evitar gemir pero lentamente el se metía más y más dentro de mi, comenzó a embestirme lentamente mientras me miraba a los ojos mientras yo, estaba debajo de él dejándome hacer lo que él deseara, cada embestida hacia que no pudiera contenerme durante mucho tiempo antes de empezar a gemirle con fuerza, cuando comencé a gemirle como que se emocionó y empezó a darme más profundo, no podía ver, pero solo con la sensación me llegaban los recuerdos de cuando se cogía a su novia, los minutos pasaban y cuando sentí que él estaba por correrse lo libere de entre mis piernas y el rápidamente lo sacó comenzando a masturbarse echándome su semen en el abdomen, después de eso ahora sí iría a bañarme tras disfrutar del momento, esa misma noche me colé en su habitación y volvimos a hacerlo, y así transcurrieron los demás días que estuvimos de paseo, cuando estábamos completamente solos cogíamos hasta que él se corría varias veces fuera de mi.

Espero les haya gustado, perdón si no está bien narrado, es la primera vez que lo hago.