Mi prima hermana y yo

Mi prima hermana y yo

Soy un chico de 25 años y estoy por terminar una carrera universitaria, cuando la empecé a estudiar me traslade a vivir a la casa de mi abuela en la cual vivía una tía y tenia dos hijos mi prima y un primo, para ese entonces ella tenia 12 años y yo 17, era una niña media gordita y a su edad se le notaban ya los cambios que se daban por su entrada a la pubertad, tenia unos pequeños senos y unas nalgas ya bien formados.

Sucede que luego de 6 años de vivir yo allí mi tía decide mudarse de casa juntamente con mis primos, yo quedo como loco ya que durante ese tiempo habíamos entablado con mi prima una relación como de hermanos ya que yo le ayudaba con sus deberes, salíamos a pasear, en fin hasta conversábamos de los novios que ella había tenido y de cómo había sido su primer beso, en fin cosas así.

Hace como unos cinco meses mi prima tuvo problemas con el nuevo marido de mi tía y decide regresar a vivir a la casa de mi abuela ya que esta era bastante grande y mi abuela que la crío desde pequeña la decide acoger en una de las habitaciones de la casa, para ese entonces ella ya tenia 19 años.

Esta habitación estaba desocupada y la ocupaba yo ya que ahí tenia un computador, le ayude a acomodar sus cosas en fin coloque la cama de ella de frente al computador con el fin de poder contemplarla cuando yo hacia mis trabajos.

Al convivir de nuevo con mi prima despertó en mi el deseo de culiarme a mi prima, no pasaba un día en que no me la imaginase desnuda y yo desnudo con ella haciéndole el amor, cuando ella no estaba le buscaba su ropa interior y para que, solo tenia tangas y eran diminutas, me la imaginaba como se las colocaba y como estas se le introducían en la raja de su culo, incluso me masturbaba teniendo en mi mano sus diminutas tangas y derramaba mi semen en estas.

Empecé también a buscarle en la ropa que se quitaba, lo que me fascinaba era coger sus brassieres y sus tangas que recién se las había quitado e instintivamente las olía, me gustaba oler las manchas dejadas por sus secreciones vaginales.

Habíamos llegado a tal grado de confianza con ella que cuando llegaba la noche y yo estaba en su cuarto trabajando en el computador y ella llegaba, se cambiaba de ropa enfrente de mí, claro ella trataba de que no la mirase dándose la vuelta.

Al principio me decía que me saliese de la habitación, pero con el transcurrir de los días lo empezó a hacer delante de mí, incluso algunas veces cuando yo estaba viendo la TV acostado en su cama, llegaba y nos poníamos a conversar, yo le sacaba temas de todo tipo y por lo general llegaba cansada y me nombraba que ya tenia sueño pero yo ni me movía de su cama, claro esto yo lo hacia a propósito aunque yo también estaba cansado, cuando de repente se paro a un costado de la cama y me dijo cierra los ojos que me voy a cambiar y se empezó a desvestir, no lo podía creer, como estaba de espaldas a mi no veía que yo no había cerrado mis ojos, estaba ella frente a mi solo con una de sus diminutas tangas y nada más, tenia un culo bien formado y alcanzaba a divisar la redondez perfecta de una de sus tetas, su tanga estaba metida completamente en la raja de su culo tal como me la imaginaba cuando me masturbaba, de repente se metió un dedo entre la tanga y su culo tratando de sacarla un poco del estrecho lugar en donde la tenia metida, pude entonces observar su culo completamente desnudo aunque solo por unos instantes, luego de esto se coloco una especie de bata pero no se la bajo completamente cuando se dio vuelta, la bata le tapaba la cara aproveche viendo que no tenia ni un solo pelo sobre su monte de venus, estaba rasurada la condenada y podía ver sus labios vaginales ya que al tirar de su tanga por detrás había hecho que esta se introduzca por su raja del frente, esto duro unos tres segundos ya que cuando bajo su bata completamente yo cerré mis ojos y me hice el dormido, no saben como estaba yo y mi pené, parecía que iba a reventar, se acostó a mi lado, yo mantuve los ojos cerrados por alrededor de cinco minutos, cuando los abrí ella estaba profundamente dormida, me levante y ni siquiera sintió ya que tiene el sueño muy pesado, me dispuse a seguir haciendo mi trabajo en el computador.

Luego de unos minutos mi mirada se centro en ella sobre la cama ya que había cambiado su posición de sueño, ahora estaba boca abajo, para mi sorpresa esos movimientos habían hecho que su bata se le suba a la cintura y como no estaba tapada con nada la podía observar, me levante y me acerque a su cama, como se imaginaran tenia una vista perfecta, me apetecía mandarle mano, pero no sabia como reaccionaria si se despertaba, al diablo dije y le empecé a tocar sus glúteos con una mano, con la otra había liberado ya mi pené de su encierro pues con el tamaño que había adquirido en realidad me dolía, recorría mi dedo por sobre su tanga hasta llegar a tocar sus labios vaginales, de repente se empezó a agitar su respiración y no era para menos debía haber estado sintiendo sensaciones agradables aunque estuviese dormida, luego se giro quedando acostada de lado recogiendo sus piernas con sus manos ya que la noche estaba bastante fría, la vista era sensacional, podía ver toda su raja del culo y ahora también su vagina, empecé nuevamente a tocarla pero yo ya no podía mas, iba a eyacular, no hice intención de ir al baño, lo hice ahí mismo lanzado goterones de esperma sobre el piso y a un lado de la cama.

En verdad era arriesgado lo que hacia y en verdad no quería ser descubierto, limpie todo lo que había hecho y desperté a mi prima para que se metiese en su cama y se tape con las cobijas, se levanto pero debido a lo dormida que estaba ni siquiera abrió los ojos, levante las cobijas, se acostó y la cobije, le di un beso en la frente y me retire a dormir a mi cuarto no sin antes pegarme una paja sensacional pensando en mi prima.

Al siguiente día ni siquiera se acordaba a que hora me había ido yo a mi cuarto, y eso me tranquilizaba ya que así no recordaría que yo le estaba mandando mano la noche anterior.

Todo marchaba bien hasta que un día mis abuelos se fueron de viaje y quedamos solos en la casa era la oportunidad que estaba esperando y decidí que de esa noche no pasaba, yo como siempre permanecía frente al computador, ella se quito la ropa que llevaba puesta y se quedo solo en tanga y se tapo con una toalla, y entro a la ducha a bañarse.

Yo ya me había quedado caliente y me empecé a masturbar viendo unos videos de sexo que había bajado del Internet, estaba en la cúspide de mi paja cuando ella entra de golpe a la habitación, me quede helado, petrificado y me dijo oye no pensé que pudiera verte haciéndote una paja y en mi cuarto, a lo que le respondí es que no he estado con una mujer desde hace un mes y al verte sacarte la ropa en realidad me quede excitado le dije, le vi que trago saliva y luego paso su lengua por sus labios y tan solo llevaba puesta la toalla en su cuerpo, se sentó en una silla a mi costado ya que el video le llamo la atención y lo seguimos observando, ya la notaba algo excitada y abrí mas videos.

Ya en ambiente me anime a preguntarle si es que alguna vez se había masturbado y me dijo que si que regularmente se lo hacia, pregunte eres virgen y me dijo si, estaba yo con una erección enorme y como no había cerrado mi pantalón mi pené empezó a salir a lo que ella se dio cuenta y me dijo es enorme y en realidad lo era, mi pené tiene 23 cm de largo y por lo menos unos 5 cm de diámetro y tenia una tonalidad morada debido a la excitación, de buenas a primeras me dijo lo puedo tocar a lo que le respondí solo si me dejas tocarte yo también.

Le dije me gustaría que me masturbaras y me dijo esta bien aunque es la primera vez que lo hago a un hombre me dijo, su mano no lo alcanzaba a rodear y empezó un movimiento de arriba abajo y me pregunto si me dolía ya que yo había empezado a gemir del placer generado por el roce de sus manos, luego de unos minutos a ese ritmo de mi glande empezó a salir unas pequeñas emanaciones de esperma y con su otra mano empezó a esparcirla por todo mi glande para esto su toalla se había soltado y caído al suelo, la tenia desnuda junto a mi, lo que aproveche para tocarle sus tetas y recorrer con mi mano sus piernas, ella también se estaba excitando, le dije te gustaría chuparlo y enseguida se abalanzó sobre mi pené poniéndose de rodillas y metiéndoselo en la boca, hacia un gran esfuerzo por respirar ya que debido al tamaño me daba la impresión de que se ahogaba, yo gemía y gritaba de placer y le dije voy a eyacular no se inmuto y recibió mi descarga de semen sin pestañear.

La pobre tosió algunas veces debido a mi gran descarga, al retirar su boca de mi pené salió por la comisura de sus labios algo de semen que volvió a caer sobre mi pené, siguió lamiéndolo como una experta y lo limpio íntegramente, aprovechando esto le dije ahora me toca a mi y la recargue sobre mi besándole sus preciosas tetas y mandándole mano en su vagina, ella empezó a gemir como una loca, la cargue y la lleve hacia la cama, yo me quite toda la ropa y me abalancé sobre su vagina completamente mojada, se retorcía de placer, la coloque sobre mi formando un 69 espectacular, con mi lengua estaba explorando todos sus agujeros, al llegar a sus clítoris enloqueció pasaron como 5 minutos y recibí su descarga de flujos que sabían a néctares en mi boca, ella seguía mamando mi pené, se incorporo y se dio vuelta quedando sentada sobre mi rozando su vulva contra mi pené, nos quedamos observando fijamente a los ojos y le dije en realidad eres virgen, por que me lo preguntas eh, es que parece que fueras una experta en el tema le dije, a lo que me respondió, es que en la casa de mi mami habían algunas películas porno y cuando me quedaba sola aprovechaba para verlas y me masturbaba, le hice una pregunta más, y dije quieres llegar hasta las ultimas consecuencias?.

Ni siquiera me respondió se levanto un poco y tomo mi pené con una de sus manos colocándolo a la entrada de su vagina y me dijo pero muy despacio, ya sabes mi condición soy virgen y nunca me imagine que el que me robaría la virginidad fueras tu refiriéndose a mí, yo ya no aguantaba mas y quería sentirme dentro de ella, se fue sentando en mi pené poco a poco y yo sentí que le dolía, cuando llegue a su himen se quedo quieta y despidiendo unas lagrimas por sus mejillas me dijo en realidad duele eh, a lo que le respondí que solo la primera vez y solo durante la penetración, le dije que luego sentiría un placer que nunca lo había sentido en su vida, ni siquiera cuando te masturbas sola, la tome por las caderas y de un solo tirón la hale hacia mi penetrándola por completo, despidió un gran grito que las lagrimas le salieron y cayeron en mi cara, quiso levantarse cosa que se lo impedí, me dijo me duele suéltame y se quiso levantar cosa que no se lo iba a permitir y le dije, solo será por un momento, le dije que se moviera de arriba hacia abajo, empezó con unos movimientos lentos y parecía que mi pené iba a reventar debido a lo apretada que estaba, continuamos así muy despacio por unos 10 minutos.

Dejo de llorar y ahora gemía de placer, yo la besaba, le hacia caricias con mis manos en su ano, trataba de hacerla sentir bien, hasta que me sentí unas pequeñas contracciones en su vagina, y empecé a sentirme húmedo en mi pelvis, había tenido su segundo orgasmo en lo que iba de la noche, se levanto y se acostó, nos seguimos besando apasionadamente, y le dije ahora el que te va a cabalgar soy yo, me arrodille en la cama en medio de sus piernas y me coloque encima de ella, tome sus piernas sobre mis hombros, busque la entrada a su vagina y se la metí nuevamente y empecé unos mete y saca intercalando entre rápidos y lentos, ella se limitaba a cerrar los ojos cada vez que se la metía, ahora gritaba pero solo de placer, no podía imaginarme tenerte así le dije, yo tampoco me dijo, pero de ahora en adelante me tendrás así cuando tu quieras me dijo, en eso sentí que gritaba como una loca, iba a tener otro orgasmo ya que emanaba una gran cantidad de fluidos de su vulva, le dije espera, tengámoslo juntos, me dijo ok, y es que yo ya estaba por eyacular también, nuestros cuerpos se movían al mismo ritmo y la respiración era agitada en los dos, solo sentí que cuando ella tuvo su orgasmo yo tenia el mío a la vez, ambos sentíamos las contracciones de nuestros sexos, fue hermoso me dijo, quedamos realmente agotados, pero no todo había terminado ahí, me pregunto que si alguna vez había tenido sexo anal con alguna chica, y le dije que si que si lo había hecho, y le dije además que era igual de delicioso que lo que habíamos acabado de hacer, su pregunta me volvió a poner a punto , le dije quiero que te pongas en cuatro ya que me lo preguntas te lo voy a enseñar y ella se asusto al principio, con recelo lo hizo y me abalancé con mi lengua sobre su culo, empecé a culiarmela con la lengua, le metí un dedo, luego dos, me dijo sabes me da miedo, le respondí tranquila y déjate llevar, cuando estuvo su esfínter bien dilatado me incorpore y mojando la punta de mi pené con los jugos de su vagina, lo coloque en su agujero y empuje muy suavemente ella empezó a gritar como una loca, habiendo entrado ya mi glande en su culo, me dijo sácalo que no va ha poder entrar y queriendo arrepentirse me dijo que ya estaba cansada, lo saque pero a estas alturas no me iba a quedar así, entonces le dije tienes vaselina y de su velador la saco y me la dio, coloque vaselina en su agujero y un poco también en mi pené, yo estaba a mil solo quería penetrarla, lo intentamos nuevamente pero ahora ya no me importaba si le doliese o no, lo coloque en su agujero, la tome de las caderas y empuje, debido a la vaselina este entro sin complicación pero el dolor que ella esta sintiendo solo me excitaba más y más, empecé a meter dos dedos en su vagina al tiempo que me movía dentro de su culo, quería que sienta que la estaba penetrando por sus dos agujeros, fue tal su excitación que se vino dos veces más, sus ojos se encontraban en blanco, yo veía a mi pené entrar y salir de su estrecho agujero y estaba completamente morado, a punto de eyacular le dije que si quería que le diera mi leche en su culo o en su boca, me dijo la quiero toda en el culo, pasaron unos minutos y ella volvía a estallar de placer al tiempo que yo eyaculaba dentro de ella, me retire y pude observar su agujero del culo que había quedado grande debido al tamaño de mi pené, poco a poco se fue cerrando, finalmente nos besamos, y se quedo dormida junto a mi.

Luego de esto yo pensaba por fin lo había conseguido, me había tirado a mi prima.

Al siguiente día despertamos iguales, desnudos y me dio un gran beso, se levanto, y me dijo que se iba a bañar, la seguí y me metí a la ducha con ella, la jabone por todas sus partes, la empecé a besar en su vulva hasta que tuvo su primer orgasmo de la mañana, luego me incorpore y sin pedírselo se arrodillo y me lo chupo hasta eyacular en su cara, la levante y la incline hacia delante estando ella de pie, lo coloque en la entrada de su vagina y se lo metí de un solo tajo, la sujete de los brazos y la jalaba hacia mi, sentía como mis testículos golpeaban contra su culo, no tardo en tener su segundo orgasmo de la mañana, la solté y se desvaneció cayendo de rodillas al piso brindándome su hermoso culo, yo no había eyaculado aun así que le dije te voy a repetir la dosis de anoche.

Debido a que estábamos bajo el agua y al estar embarrado de sus jugos me arrodille y se lo empecé a meter por el culo, entro sin dificultad, le hice que su cabeza tope al piso de la ducha y empecé a moverme como un loco dentro de su culo, no tardo en otro orgasmo, y derrame mi semen sobre su espalda, la pobre ya no daba más y yo tampoco debido al esfuerzo realizado la noche anterior y en lo que iba de la mañana, nos incorporamos, nos dimos un gran beso y nos acabamos de bañar, yo quería seguir pero las obligaciones de mi trabajo pospusieron la sesión de sexo para la noche, luego preparo un desayuno continental para los dos, según dijo para que recuperásemos las energías que habíamos gastado, ya conversando me dijo que ella también se masturbaba pensando en mi y que no sabia como decírmelo, que por eso de un tiempo acá a ella no le importaba que la viera cuando se cambiaba de ropa, en fin acordamos no decírselo a nadie, era nuestro pequeño secreto.

Mis abuelos regresaron a los tres días, durante los cuales la pasamos culiando de día y noche.

Hasta ahora lo seguimos haciendo en su cuarto o en el mío, ya que mis abuelos tienen el sueño muy pesado, pero eso se los contare en otra ocasión.