Capítulo 6
Inocente a los 18 VI
Vuelvo a ver aquel hombre y me enseña su lengua moviéndola rápidamente, me cambio de silla de modo que quede a la vista de el, lo miro y abro mis piernas y el abre los ojos y los clava en el movimiento que estoy haciendo, volteo a ver a Clara y Luis si no me ven, ellos están metidos bailando, busco a Pepe y no se ve, dirijo nuevamente la mirada al regordete, me sigue viendo, me toco mi chocho y dirijo mis dedos a mi boca, el regordete cierra los ojos y se chupa los labios, ahora no soy la única que esta ardiendo, ya encendí a aquel hombre y de el depende lo que haga conmigo, vuelvo a mi lugar cuando llega Pepe, tomo un trago, Pepe se acerca a mi oído y me dice:
-¡lo disfrutaste!??
– disfrute que?
– el baile
creí que me preguntaría que me hizo en la cocina, me atrevo a preguntarle:
– platícame donde estuviste en la cena!!
– como?
– no te hagas que me hiciste en la cena por debajo de la mesa!!
– te gusto?
– claro con que me lo hiciste??
– mejor no te digo!!, mejor te lo hago nuevamente!!
– cuando?
– hoy mismo cuando lleguemos a la casa tu vas a mi habitación!!
Estoy emocionada, que será?, veo que el regordete dejo de bailar, se acerca a la mesa y me invita a bailar, como se atreve sabiendo que estoy acompañada, me dice Pepe ¡anda baila!!, le doy la mano a este hombre y me conduce, sin detenerse me lleva al otro lado de la pista, se empieza a mover, sin poder evitarlo miro su bulto, cuando lo veo a los ojos sonríe, se chupa los labios, también lo hago yo, de pronto la música cambia a una suave, se acerca y me abraza, si fuera otra tal vez me daría asco pero la calentura me hace olvidar este detalle, aunque esta gordo no se ve mal, no esta panzón como el ayudante del cura, ese si me da asco, siento que sus manos son grandes, su boca también, me une a su cuerpo, me deja sentir aquel vergón que se ha de cargar el condenado, por poco me asfixia, siento su lengua en mi oído y oh es delicioso, su lengua es gruesa, rasposa, me chupa mi oído y me siento transportada, sus manos pasan a mis nalgas y se mueven suavemente, entre tanta gente espero no se note cuando mete su mano por debajo de mi pequeña falda, la luz es mas tenue, eso nos ayuda, cierro los ojos, no me importaría que alguien nos vea, me soba las nalgas y un dedo toca mi ano, lo acaricia y trata de meterlo, el desgraciado tiene los brazos y los dedos tan gruesos y tan largos!!, ha introducido su dedo en mi ano, aahh que delicia… siento su otra mano que se mete por delante, hace a un lado mi tanga y empieza a sobar mi chocho, sus dedos son tan gruesosss… mmmm.. mete uno… dos dedos en mi vagina y empieza a perforarme bruscamente… cruzo mis brazos totalmente a su cuello, los movimientos levantan mi pies del suelo por la furia de los envites de sus dedos, el condenado me esta cogiendo a gusto por mis dos orificios con sus gruesos dedos tan deliciosos… su boca sigue comiéndome los oídos, solo oigo el chasquido de su saliva y sus labios taladrándome mis tímpanos… los espasmos comienzan a convulsionar mi cuerpo que casi no toca el suelo.. poco a poco se detiene y me dice groseramente:
– mi verga babea por coger tu puta vagina y tu exquisito culo… metértela con todo y huevos…
– porque no lo haces yaaahhh…
– te llevare a tu mesa, te levantas y entras al baño de hombres… te espero en el ultimo cubículo para cogerte por todos tus hoyos…
Me arreglo la tanga y mi falda, me toma de la mano y suavemente me conduce a la mesa, solo esta Pepe, me dice ¡donde estabas que no te veía!?, solo alcance a darle señas en donde, le pregunte que si aun tardaríamos mucho para irnos, me dijo que si, ya que este tipo de música dilata algo de tiempo y que sus padres disfrutan bailarla, en ese momento veo a Clara y a Luis disfrutar de su abrazo en el suave vaivén de la música, le digo que me diga donde esta el tocador porque tengo ganas de ir, me enseña y camino hacia esa dirección con las piernas temblorosas por el orgasmo tan repentino que me hizo sentir ese hombre, que al parecer tiene todo grueso, sus dedos aunque son ásperos me transporta al infierno, su boca tan grande… sus labios son gruesos también, que hará con mi chocho el desgraciado…
Disimulo que estoy borracha y entro al baño de hombres dirigiéndome hasta el ultimo cubículo, lo abro y ahí esta sentado ese hombre regordete sobándose su gruesa verga, esta demasiado gruesa y no creo que me entre, abre los ojos y me estira su mano, le doy la mía y me jala suavemente hacia adentro, cierra la puerta y bruscamente me quita mi ropa, desnuda empieza a tocarme salvajemente, me chupa mis tetas y muerde suavemente mis pezones, que rica sensación, empieza ya a masacrar mi chocho con su mano sin dejar de mamar mis tetas, me abre las piernas y lo hago a mas no poder, ahora toca mi culo y sin darme tiempo mete dos dedos en mi ano tan lubricado que ya esta, me jala hacia el acomodándome encima de su gruesa verga, intenta meterla pero es tan gruesa que me lastima, me empuja y el se levanta, va tras mío, me pone de espaldas con las piernas abiertas encima del inodoro, mis tetas tocan el frio tanque de agua cuando me agacha… el desgraciado me empieza a mamar mi vagina, succiona los labios divinamente… aah… ohh.. mmm… siento los espasmos… su boca cubre totalmente mi chocho… su lengua me raspa la vaginaaahh… mmm… me estoy viniendo con solo esa mamadaaaahhh… que rico… trata de meter nuevamente su verga y esta de una estocada entra, siento que los ojos se me salen… aun así mi calentura es mas grande que el dolor que me esta produciendo aquella brusquedad… mas tarde me voltea se sienta nuevamente en el inodoro y como un títere me coge de la cadera y me sube y me levanta de su verga tan descomunal, siento que me esta reventando por dentro… me arranca uno a uno los orgasmos… oohh… aaahhh… cuando siento como su verga se convulsiona dentro de mi y el lanza un pequeño aullido… el desgraciado se esta viniendo… pasado un buen tiempo me levanta, me da papel y me dice que en donde me puede encontrar ya que aun falto mucho por cogerme… lastima que no me se la dirección de la casa de Clara, le digo que mejor el me diga como yo lo busco, saca una tarjeta y me la entrega, es judicial y su nombre es Ricardo, me visto y nos despedimos con un gran beso…