Un nuevo placer

Me llamo Hernán, tengo 22 años y soy de Argentina. Mido 1.81 mts, tengo el pelo rubio oscuro y ojos color miel, muchos dicen que tengo buen cuerpo(Flaco, abdominales y un poco de músculos) y una hermosa pija de 19.7 centímetros.

Soy bi y disfruto del sexo con ambos sexos. Bueno, siempre sentí una gran atracción hacia las mujeres, pero durante la adolescencia empecé a tener deseos con hombres y siempre voy a recordar la primera vez que me acosté con uno.

Todo empezó cuando tenía 17 años, para esa época yo ya había tenido relaciones con mujeres, pero no con hombres. Todos los días iba al colegio, donde estaba cursando 5to año de secundaria y por suerte el último.

Desde el primer día de ese año sentía que un compañero con el que nunca me llevé bien, pero tampoco mal me miraba de una manera diferente. El se llamaba Ignacio y lo conocía desde hace 5 años y cursamos toda la secundaria juntos.

Pasaron 4 meses y yo sentía él me seguía mirando y encima hablaba más conmigo y se acercaba mucho más a mí que esto últimos años.

Fue entonces cuando decidí hablar con él. Le dije de ir el domingo a un bar donde nos encontrábamos siempre y él aceptó gustoso.

Llegó el domingo y a eso de las 3 de la tarde me encontré con él y empezamos a hablar de muchos temas, hasta que yo empecé a hablar de que raro lo nuestro que casi nunca nos hablábamos y ahora somos re amigos, entonces por fin le pude sacar lo que quería y fue ahí cuando me dijo que sentía algo por mí y que no era amistad solamente.

Yo le pregunté que a que se refería y el me dijo que desde el año pasado el estaba loco por mi y no sabía que hacer para acercarse, entonces le dije de que estaba bien, que nunca iba a pasar nada entre nosotros, seríamos siendo amigos, pero que no sería todo igual.

El me contestó que no quería que pase nada malo que aunque sea pruebe el estar con un hombre haber si me gustaba, pero yo le dije que no, el siguió insistiendo y me decía que como faltaba poco para que terminásemos el colegio, vallamos a la universidad y si me iba a Canadá y que probablemente nunca más nos veríamos.

Entonces yo le dije que no y que basta y me fui.

El lunes el no fue al colegio, a la tarde lo llamé para pedirle disculpas y estaba deprimido y me colgó.

Fue ahí cuando me puse a pensar en Ignacio, que no era feo, medía 1.77, tenia el pelo oscuro, ojos celestes, era flaco tenía un cuerpo lindo y además era muy bueno, entonces decidí aceptar.

El Martes faltó, pero el miércoles fue y le dije que quería hablar con él, me dijo que no y yo insistí hasta que dijo que sí.

Tuvimos un par de horas libres ya que por suerte la profesora estaba internada y no había suplente por el momento.

Fuimos al patio y ahí le hablé y le pedí perdón por lo que le había dicho y que estaba dispuesto a ser algo más que amigos, entonces me dijo que me abrazaría y me besaría en el medio del patio sino fuese porque después lo matarían a golpes, de repente se me ocurrió una brillante idea.

Subimos al un lugar donde los de la fotocopiadora tienen todo el papel y sabía que nadie nos vería ya que ellos sacan el papel bien temprano.

Entramos, estaba medio oscuro, cerré la puerta y nos empezamos a acariciar y a besar.

Nuestras lenguas se enroscaron en un apasionado beso y cuando sacó su lengua de mi boca dijo que no tenía la más mínima idea de lo que el había estado esperando este momento.

Me sacó la remera y dijo que me relaje, entonces le pregunte que si el ya lo había hecho con un hombre y me dijo que solo sexo oral ya que estaba esperando a que sea el primero en empomarlo, él me preguntó a yo lo había hecho con un hombre y le dije que no.

Me bajó el pantalón y el bóxer, se metió mi pija en la boca y empezó a endurecerse hasta alcanzar su esplendor.

Al rato me corrí y el se lo tragó todo, decidí devolverle el favor y le saqué la remera, le bajé los pantalones, el slip y le empecé a chupar esos 18cm que estaban al mango.

Yo le pregunte que si lo hacía ya que era la primer vez que lo hacía y me dijo que no me preocupara que ya le estaba otorgando demasiado placer, unos segundos después se corrió y me dijo que si quería me trague su semen, me lo tragué y tenía un sabor salado, no estaba mal.

Se puso en cuatro patas y me dijo que no podía aguantar más sin que se la meta, entonces agarre mi fierro más que caliente y se la metí despacito ya que estaba muy cerrado, entonces la volví a sacar, le chupé el ojete y se la volví a meter, mientras se la metía el lloraba y el me dijo que siga, al rato estaba gimiendo como una perra mientras yo no podía creer lo bien que se sentía penetrar a otro boy.

Me corrí en sus entrañas, saqué mi pija y la metí en su boca.

El la chupaba como un helado y después me pidió que se la vuelva a meter, entonces accedí. Lo puse en cuatro de nuevo y se la encajé, lo embestí rápido y me corrí enseguida, el me la volvió a chupar y me la dejó limpita.

Justo sonó el timbre y nos vestimos rápido así nadie sospechaba. Me acosté una vez más con el en su casa una vez que sus padres no estaban y quedamos en que seríamos amigos ya que no podíamos seguir más con lo nuestro.

La última vez que lo vi fue hace 2 años en el subte y desde ahí nunca más.