Capítulo 9
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón I
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón II
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón III
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón IV
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón V
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón VI
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón VII
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón VIII
- Dos tías puritanas y un sobrino cabrón IX – Final
Todo esto me tenía encendido, y dándole un tirón de pelo a Pili…
-Y tú ya estas tardando en tirar para mi cuarto, deja a estas dos.
Ninguna de las dos prestaban atención, mi tía Viky ya llevaba un rato gimiendo. Salí de tal forma, tan excitado que en medio del pasillo, volví a coger del pelo a Pili y rasgándole el vestido, la giré y haciéndola cogerse a mi cuello, la hice rodear mi cintura con sus piernas y pegándola a la pared la penetré…
Así terminó el último capítulo…
-Pili. -Aggggg, siiiii, ufffffff, emputéceme, se mi macho, préñame, agggggg, fuerte, más fuerte cabrón.
Sus palabras me encendían, lo que me hacía entrar y salir con una rudeza, que a la fuerza iba a dejarle marcas en la espalda. De fondo sentía los gemidos de mi tía…
-Siiiii, voy a preñarte, te voy a convertir en mi PUTA…
-Pili. -Agggggg, lo que quierassss, me corrooooo, tu perra, tu puta, lo que quieras, siiiii, me corrooooo.
Sentí que me iba a correr y busqué su boca, que mordí, saboreé a la vez que me vaciaba dentro de su coño. Se abrazó más fuerte a mí, apoyando su cabeza en mi hombro. Sin soltarla, con mi polla aun dentro de su chorreante coño, me dirigí a mi cuarto. Al ir a dejarla en la cama, me di cuenta que se había quedado profundamente dormida. La arropé con mimo y pegándome a ella, me quedé dormido al instante.
-Pili. -Raúl, Raúl, perdona que te despierte, pero tu teléfono ya ha sonado dos veces.
Abrí los ojos, siendo lo primero que vi su sonrisa…
– ¿Qué hora es?
-Pili. -Las diez y media pasadas…
Se dio cuenta que me quedé mirándola fijamente, ya que ella ya estaba vestida…
-Pili. -Nos hemos levantado muy temprano y ya estamos listas para salir, Trini ha pedido cita en su esteticien, para las tres.
Desperezándome y sin hacer caso al móvil…
– ¿Las tres?
-Pili. -Jajajaja, yo me he quedado igual que tú, pero Trini ha dicho que una señorita no puede tener vello, y ha pedido cita también para Nacha.
-Me alegro, ¿Dónde están?
-Pili. -En la cocina con Marga.
Me fije en que su vestuario había vuelto a ser el recatado de siempre…
-Espero que la próxima vez que te vea no vayas así.
-Pili. -Te lo prometo, pero algo que me tenía que poner…
Salté de la cama y desnudo como estaba y mostrando mi empalme matutino, me hizo reír al ver cómo se le fueron los ojos a mi polla…
-Jajajaja, tranquila que luego será tuya, -se puso roja- vamos a la cocina.
Le di un pequeño azote en su precioso culo y la seguí…
-Buenos días…
Las tres que estaban sentadas, pegaron un salto, poniéndose de pie y contestándome a la vez “buenos días”
Me gustó ver a Nacha en vaqueros y con una camiseta, rematando con los zapatos de tacón y ligeramente maquillada. Mientras que Marga, ya tenía asumido que su ropa de trabajo era en lencería, delantal y cofia. Por el contrario Trini, estaba espectacular, con un vestido rojo, que después supe que llevaba años sin usar, medias negras y zapatos de tacón rojos.
-Trini. -Espero que no te moleste que me lleve a mi nieta -era la primera vez que la llamaba así- y que le haya pedido cita en mi esteticien a la vez que a Pili. Cuando salgamos a no ser que nos digas lo contrario me las voy a llevar de compras.
-Al contrario, me alegra verte así.
Por mis tías ni pregunté, sabía perfectamente donde estaban.
-Marga. – ¿Quieres un café?
-Si. Vosotras ya os podéis ir, y antes dejarle a Marga el teléfono de alguna, y que os dé el mío, – yo no se lo había dado, sabía perfectamente que alguna de mis tías si lo había hecho- y cuando terminéis, me llamáis.
Dejé a Marga preparándome el café, y me fui a ver mi teléfono, viendo que tenía un par de llamadas del trabajo y una de mi tía Viky. Me volví a la cocina, me senté a tomar el café y mientras llamaba al trabajo…
– ¿A qué esperas VACA?
Lo entendió perfectamente y con una gran sonrisa se metió bajo la mesa y sin usar las manos, llevó su boca a mi polla. No tardé en colgar con la empresa, teniendo que aplazar a mi tía Viky, ya que era tal el placer que me estaba dando Marga, que me llevó a echar mi cabeza hacia atrás, cerrar los ojos y con mis manos marcarle el ritmo. No recuerdo el rato que estuve disfrutando de su mamada, lo que si recuerdo es el grito que di al correrme en su boca…
-Agggggggggg, siiiiiiii, que rápido aprendes… agggggg, tragaaaaa VACA.
Al sentir mi corrida, intentó retirarse, algo que no consiguió, al tenerla fuertemente agarrada de su cabeza, que no solté hasta sentir sus arcadas…
-Marga. -Aggggg, gracias, gracias, creía que me ahogaba, pero…
-Pero hasta te has corrido, jajajaja.
No contestó, no hizo falta, solo ver como bajo su mirada, que seguí hasta descubrir una enorme mancha en el suelo, la muy guarra había tenido un squirt, al sentirse casi ahogada.
-Marga. -Voy a limpiar esto…
-Déjalo por ahora, ¿sabes tu respuesta? ¿o necesitas más días? -asintió- siéntate a mi lado y cuéntame.
Se levantó, le costó un poco, tanto rato bajo la mesa y en la misma postura, la había entumecido.
-Marga. -No lo tenía claro, sinceramente y al darme la oportunidad de seguir como hasta ahora, estaba decidida a no salir de mi casa, pero fue entrar en mi casa, ver a mis dos hijos y a mi marido, en el salón sin hacer nada, la casa patas arriba, y que nada más entrar, lo primero que me exigieron fue la cena, ni un saludo, ni nada. A la noche intenté acercarme a mi marido, la verdad es que solo acordarme de todo lo vivido aquí, estaba excitadísima -hizo una pequeña pausa, dejando a relucir dos pequeñas lágrimas en sus ojos- y el muy cabrón me dice que estaba cansado, jo, si está en el paro. Se dio la vuelta y no tardó en roncar. Así que esta mañana he cogido algunos recuerdos, y les he dejado una nota, diciéndoles que ahí se quedan…
-Me alegro Marga, aunque supongo que intentaran hacerte volver…
-Marga. -No sé qué decirte, ninguno me ha llamado o escrito, no sé si es que no se lo han creído o es que simplemente pasan de mí.
-Da igual, sea lo que sea, luego hablaremos con mis tías para buscar un o una abogada y mañana mismo le pides el divorcio.
Sin decir nada, se pegó a mí y casi me ahoga del abrazo que me dio y con timidez, como pidiendo permiso, rozó mis labios que no dude en abrir, lo que le sacó una enorme sonrisa y durante un rato nos estuvimos morreando…
-Marga. -Gracias Raúl. Voy a seguir con las tareas.
-Si, en eso nada va a cambiar, tu jornada es la misma, por lo que tu vestuario seguirá siendo igual. El resto del tiempo serás una más, de todas formas ya iremos dándole forma a todo esto.
La dejé con su faena y me fui a mi cuarto a darme una ducha y a salir de compras. Busqué en internet un sex shop, que estuviese bien valorado y no muy lejos, aun no conocía muy bien Barcelona. Decidí ir en metro, ya que estaba junto a una parada y sin tener que hacer trasbordo. No tenía muy claro que iba a comprar salvo un arnés con dildos de distintos tamaños. En mi pensamiento iba el desflorar a Nacha, aunque una vez dentro mi imaginación voló un poco, y compré tres, así como varios dildos de distintos tamaños, y tres huevos con control mediante una App. Al ir a pagar pasé por la sesión de BDSM, llamándome la atención los collares, pensando rápidamente en tres, por lo que rápidamente adquirí uno para cada una de las que pensé, junto a sus cadenas respectivas. Cuando terminé y cargado con las bolsas y con el agradecimiento de la muchacha que me atendió, y siendo casi la hora de comer, fui a escribirle a mi tía Viky, por si estaba en clase, pero salió mi chulería y sin importarme si estaba en clase o no, la llamé. Iba a colgar, al dar varios tonos, cuando contestó muy bajito…
-Viky. -Hola sobri, perdona estoy en clase, ¿me llamas en 5 minutos?
-Me importa una mierda, si cuelgas te dejo a palo seco un mes.
Sentí sus tacones y una puerta abrirse y cerrarse…
-Viky. -Noooo, ufffff, como me pone cuando me chuleas, ya estoy mojada.
-Voy para la facultad, lo que tarde en coger el taxi, espérame en tu despacho con la puerta sin cerrojo y desnuda.
Esperaba que pusiese el grito en el cielo, o que intentara hacerme desistir, para nada…
-Viky. -Ahí estaré SEÑOR.
Colgué sin despedirme, no tardando en coger el taxi y en quince minutos plantarme allí. En ningún momento me preocupé si en ese tiempo alguien la había pillado. Entré sin llamar…
-Así me gusta PUTA.
Allí estaba, de rodillas, con sus piernas abiertas todo lo que podía, había colocado sus manos en la nuca. La verdad es que estaba impresionante, sus enormes tetas, enfundadas en un sujetador de encaje de color rosa chicle, a juego con las braguitas y con las medias. Conforme me iba acercando, me fui desabrochando los pantalones y sacando mi polla, que ya estaba segregando liquido preseminal. Además ver su cara de vicio de golfa, casi me lleva a correrme. La cogí del pelo levantándole la mirada, le escupí en su boca que ya me esperaba abierta, para seguidamente metérsela y con fuerza, con ganas, con brusquedad, me la follé. No sé si fue suerte, o que allí nadie se acercaba sin tener cita, el caso es que tampoco me preocupé de ponerle el cerrojo a la puerta. Me salí de su boca y moviendo una de las sillas, terminé de bajarme los pantalones y sentándome…
-Fóllame GUARRA, fóllate a tu chulo que es tu sobrino, jajajaja.
Con la cara llena de sus propias babas, se levantó se abrió de piernas todo lo que pudo y apartándose la braga, se insertó mi polla de un solo golpe.
-Viky. -Me corrooooooo, cabrón, ufffffff, lo decía todo lo bajo que podía y pegando su boca a mi oreja, que empezó a morder y a besar.
De rato en rato, le separaba la cabeza y le escupía, y eso la encendía más. Se llegó a correr tres veces antes de que yo lo hiciera, siendo la última a la misma vez que me vaciaba en su interior.
-Siiiii, ufffffff, me gusta mezclar nuestras corridas, GUARRA, ufffffff, PUTA.
Nos quedamos un rato abrazados, recuperando la normalidad. Tuve que ayudarla a ponerse de pie y tenerla un rato agarrada mientras sus piernas le empezaron a responder…
-Viky. -Te quiero cabrón, ufffffff, me tienes que… ¿Nos vamos a comer?, ya no tengo que volver.
-Y yo a ti, tita, ¿vas a obedecerme siempre?
Se extraño mucho por mi pregunta…
-Viky. -Sabes que sí, no sé porque me lo preguntas.
-Porque quiero verte follar con otros, como una vulgar PUTA.
-Viky. – ¿No es eso lo que hacen las putas para sus chulos? ¿Y tú no eres mi chulo? No me dejes y seré tuya para siempre.
No se molestó en lavarse, solo se puso el vestido.
-Viky. -Me gusta oler a PUTA, tu PUTA. ¿nos vamos?
Para que mentir, me tenía sorprendido…
-Llama a las Serratilla -el apellido por el que se las conocía a la familia de Trini- y si aún no han comido, pregúntales por donde están y comemos juntos.
Con una sonrisa perversa y enganchándose de mi brazo, nos paseamos por los pasillos y por los jardines del campus hasta la salida. Mientras ella hablaba con Pili, yo iba pensando en cómo prostituirla, se me había metido en la cabeza hacerlo.
-Viky. -Ya he quedado con ellas, vamos a coger un taxi.
A veces la mente es tan compleja que hasta para mí, que suelo ser bastante frio, algunos lo llamarían chulería, nos cuesta entender porque reaccionamos o decidimos, algo como lo que yo decidí en cuanto vi al taxista.
-Súbete delante tita.
Me miro con extrañeza y más al ver la pinta del taxista, no era para nada sucia, pero si desaliñada. Iba en chándal, algo que aun sigo sin entender, cuando se está de cara al público, y con algo, no mucho, de sobre peso. Se subió junto al taxista que iba a protestar, hasta que vio a semejante mujer. Se limitó a preguntar el destino.
-Viky. -Carrer València, al restaurante Nectarí, ya verás te va a gustar. Ellas ya están allí.
A Viky no la podía ver al estar detrás de ella, pero al taxista sí, que no paraba de mirar las piernas de mi tía. Lo solté a bocajarro…
-Si no nos cobras la carrera, mi tía te la chupa y puedes correrte en su boca.
-Viky. – ¡¡¡Qué!!!
-Tú te callas PUTA.
-Taxista. -Estamos llegando, tendría que ser ya, allí no hay sitio…
-Me dejas a mí y la llevas donde quieras, pero tienes media hora para que este de vuelta, o llamaré a la policía.
-Taxista. -No hará falta, acepto.
-Trata bien a mi PUTA, es su primera vez.
Me bajé del taxi, haciéndome reír al no saber cuál de los dos estaba más alucinado, si el taxista o mi tía. No había cerrado la puerta cuando se me acercó una feliz y cambiada Pili, a la que no reconocí hasta que estaba junto a mí. Fue a hablarme, cuando vio como el taxista arrancaba con Viky.
-Ufffff, no te había conocido. Tranquila va a pagar la carrera, jajajaja.
El cambio era radical, un vestido animal print, medias transparentes con costura trasera y zapatos de tacón también animal print del mismo tono que el vestido. Me miró con cara de no entender…
-Pili. -Trini y Nacha ya están dentro, mi suegra esta desconocida, esta faceta suya no la conocía…
Sin dejarla terminar, la besé con ganas, mandar a mi tía a chupársela al taxista me tenía excitadísimo. Entramos en el restaurante que luego supe que tenía una o dos estrellas Michelin. Al verme Nacha y su abuela se levantaron, y si su madre había cambiado, lo de Nacha era increíble. Nadie que no la conociera podría decir que era hombre. Peinada, maquillada y vestida con un gusto exquisito. A ella la besé en las mejillas y a su abuela le estampé un beso en sus preciosos labios.
-Vaya cambio, ¿te gusta?
Nos sentamos…
-Nacha. -Me encanta, vaya abuela que tengo.
Nos reímos los cuatro, y eso me encantó, ver la cara de felicidad de las tres casi me desarma…
-Trini. -Pensaba que también venía Viky.
-Ya ha empezado a trabajar para mí, algo que pronto harás tú. -Se quedó intrigada- ve pidiendo, lo dejo en tus manos, ella no creo que tarde mucho.
Nacha estaba en su mundo feliz, no sé cuántos selfis se hizo, mientras que su madre me miraba entre nerviosa e intranquila. Esperé a que se retirara el metre…
-Trini. -Espero que te guste, he pedido un menú degustación. -Dudó pero menos de lo que yo esperaba- Te molesta si te pregunto ¿qué trabajo es?
-No me molesta, ha ido a chupársela al taxista, por no cobrarnos la carrera. -Se hizo un silencio sepulcral, hasta Nacha guardo el móvil- no os voy a obligar a nada, pero la que quiera estar conmigo o hace lo que me salga de los cojones a mí o la puerta está abierta…
Sorprendiéndonos, primero por ser tan rápida al contestar y segundo por feminizar su voz.
-Nacha. -Como si me mandas a hacer la calle, mi madre y mi abuela pueden hacer lo que quieran, pero yo soy tuya.
Iban a hablar las dos, cuando vimos a un camarero acompañar a una radiante, traía una sonrisa de oreja a oreja, Viky. Esperó a que se retirara el camarero.
-Viky. – -Roja como un tomate, pero sin perder la sonrisa- Ufffffff, ha sido alucinante, me he corrido sin tocarme.
Nadie, ni yo por supuesto, esperábamos semejante comentario.
-Jajajaja, sabía que te iba a gustar tita -mentira, al revés esperaba disgusto por su parte- ¿Ha tardado mucho?
-Viky. -Ufffff, no, pero vaya pollon que gasta el taxista. Me ha dejado su número de teléfono por si lo necesitamos, bueno por si lo necesitas, le he dejado claro que a parte de mi sobrino eres mi chulo y que si quiere repetir solo puede hablarlo contigo.
-Ya veremos, por ahora guárdalo.
Se quedó en el aire la respuesta de suegra y nuera, no por ellas, sino por mí, que las quería nerviosas, como así fue. Cambie radicalmente de tema y el resto de la comida hablamos de lo que se habían hecho las tres y de lo que habían comprado. Eso sí tras todo lo que nos contaron y después de ver la desorbitada cuenta del restaurante, supe que la vieja estaba forrada.
-Trini. -Cuando quieras nos vamos, tendremos que coger dos taxis.
Aunque lo pensé, preferí coger dos taxis cualquiera, por ahora no era prudente que el taxista supiese donde vivíamos y menos conocer a nadie más. Al salir del restaurante cogimos dos taxis, gustándome mucho que sin decir nada, nos dejaran solos a Pili y a mí en uno de los taxi. En menos de quince minutos llegamos al piso, haciéndonos reír, incluida Trini, la cara del portero al vernos a todos, pero en especial a Nacha, aunque pienso que no la reconoció, la verdad es que pasaba por un bombón de mujer. Entramos cargados de bolsas y haciendo ruido, por lo que no sentimos lo que estaba pasando en la cocina hasta que entramos y nos encontramos a Marga sobre la mesa, totalmente abierta de patas y a mi tía Belén de rodillas, solo con las medias puestas, sus tetas rozándole el ombligo, comiéndole el coño.
-Marga. -Siiiii, sigue GUARRA, ufffffff, que desperdicio de años, ufffff, si hubiese sabido antes lo que te gusta un coño, lo dócil que eres, no paresssss, me corrooooooo, otra vezzzz.
Les indiqué a todas que guardaran silencio y que se fueran desnudando. Casi me corro al ver a Trini y Pili, pero sobre a todo a Pili, con un conjunto de seda negro de braga y sujetador. Marga seguía con los ojos cerrados y mi tía se limitaba a lamer los jugos de esta, todos los que resbalaban por sus gorditos muslos. No sabía cómo iba actuar, pero se lo merecía así que…
-Son tuyas Tita.
Al oírme Marga apartó a mi tía dándole una patada, a la vez que con trabajo se bajó de la mesa, donde volvió a caer, al recibir una bofetada de Viky…
-Viky. – ¿A esto os dedicáis?, vaya dos CERDAS, y tú ni te muevas.
Me excitaba, ver esa actitud en mi tía, y más cuando sin miramiento, le metió el tacón de su zapato en el coño a su hermana.
-Viky. -A que esperas GORDA, baja de la mesa y lame mi otro zapato.
Dejándolas, pero sin perder detalle, me volví a Nacha…
– ¿Abuela o Madre?
Tanto una como la otra se miraron extrañadas, pero excitadas, mientras que Nacha me entendió a la primera y con una desmesurada alegría…
-Nacha. -Me gustaría que fuese mi madre.
-Vamos a la salita.
Dejamos a las tres en la cocina, y entramos en la salita. Previamente cogí una de las bolsas.
-Prepárale el culo a tu nieta.
Pili al oírme y verme sacar el arnés y un dildo mediano, lo entendió todo y por la cara que puso no le gustó.
-Pili. – ¿Estas segura hija?
-Nacha. -Tú me diste la vida, y quiero que tú me hagas mujer.
La abuela era toda una guarra, ya había apartado la braguita del culito de su nieta y estaba de rodillas y abriéndole los cachetes se esmeró a lubricárselo. Le escupía, se lo restregaba, se lo lamía.
-Tranquila, Pili, mira cómo está la pollita de la niña, jajajaja.
Era cierto, aunque también lo era que te tenías que fijar mucho.
-Pili. – ¿Cómo se pone? -Se había quedado más tranquila- nunca había visto…
-Jajajaja, ya te ayudo.
Lo monté y mientras la abuela seguía a lo suyo, le quité sus bragas, quedándome maravillado de su coño, limpio y brillante, estaba excitada, como también la delataban sus preciosos pechos, que iban a romper el sujetador. Al ser un dildo doble, se le escapó un gemido al metérselo en el coño. La besé con mimo, estaba excitada, eso no lo podía negar, pero también nerviosa. La acompañé hasta que la coloqué detrás y cogiendo el dildo, lo puse en el culo de Nacha. Al ver Trini que la aparté y para facilitar la penetración, llevó su boca al dildo y lo lubricó, chupándolo y lamiéndolo. Le gustaba, su cara de guarra no lo podía disimular.
-Nacha. -De golpe mama.
Al ver que dudaba puse mis manos en su culo, y la empujé. A pesar de la lubricación, el grito fue aterrador, tanto que su madre hizo intención de salirse, algo que impedí. Aparecieron las tres restantes por la puerta, con cara de preocupación. No tardaron en cambiar su cara…
-Viky. -Uffff, ¿Hay más?
La entendí a la primera y con una sonrisa asentí.
-Muévete mama, fóllate a tu hija, fóllameeeee.
Su abuela que seguía de rodillas empezó a lamer el dildo y el culo de su nieta, mientras una de sus manos se perdió en la braguita, para cogerle su pollita. La excitación le ganó al pudor. Empezó suave, pero al ver como su hija gemía y no de dolor precisamente, aceleró con ganas. Estaba tan pendiente del desvirgamiento de Nacha, que hasta que no sentí gritar y gemir a Belén, no me fije en ellas, y allí estaba, con sus manos en el sofá y el culo siendo follado por su hermana, mientras Marga intentaba follársela a ella, aunque dudé que por la altura lo consiguiera, lo que me dio una idea, y colocándome tras Pili, que con los zapatos puestos, sí que estaba a la altura ideal para mí. Al sentir como le escupía en su culo y como se lo restregaba, se tumbó todo lo que pudo sobre su hija. Su suegra que estuvo al quité dejó el culo de su nieta y se dedicó al de su nuera…
-Trini. – ¿Me dejas?
Asentí, y alargando sus dos manos, cogió mi polla y la puso sobre la entrada del ano…
-Trini. -Cuando quieras…
Ni la dejé terminar, al igual que el día anterior, la embestí con fuerza…
-Pili. -Agggggg, me corrooooo, siiiii, agggggg, córrete con mami cariño…
-Trini. -Tu niña ya es mujer, GUARRA, y ya se ha corrido, pero…
-Calla VIEJA, que se corra en tu boca y compártelo con su madre…
Así lo hizo, a pesar de que la mesa le estorbaba, se las compuso para meterse la pollita de su nieta en la boca. No perdía detalle de lo que pasaba. Viky se había descalzado, lo que dejó su culo que ya estaba siendo follado a la altura perfecta de Marga. Durante un gran rato, solo se sentían gemidos y palabrotas, hasta que Trini, con la boca llena de la leche de su nieto, que al ser tan abundante mucha resbalaba por su boca y cuello, se levantó y cogiendo a su nuera del pelo, levantó su cabeza y se morreó con ella, a la vez que le pasaba la leche de Nacha. Estaba a punto de correrme y quería recompensar a Trini.
-Túmbate boca arriba VIEJA, junto a tu nieta.
Le salió una perversa sonrisa… Me salí del culo de Pili, que le había cogido el gusto y cada vez era más brusca entrando y saliendo del culo de su hija, y apoyando las piernas sobre mis hombros, se la metí en un estrecho pero encharcado coño a Trini.
-Trini. -Agggggg, siiiii, cabrón, fóllate a esta VIEJA GUARRA, siiiii, ufffffff, úsame, se mi chulo, alquílame, agggggg, me corrooooo, haz de mí lo que quierassss siiiii, soy tu PUTA y de quien tú quieras….
Sus palabras contagiaron a su nuera…
-Pili. -Aggggg, y conmigo, agggggg, préñame, lo que quieras, lo que deseesssss, ponme a hacer la calle, somos tuyas, tus guarrassssss, me corrooooooo.
-Lo sé, agggggg, me gusta tu coño, que GUARRA eres, agggggg, seguro que hay muchos jovencitos deseando pagar por follarse a una VIEJA de la alta sociedad. Me corrooooo.
Me quedé un rato dentro de ella, mientras que Viky, Marga y Belén estaban en el suelo, morreándose entre ellas. Pili se salió de un abiertísimo y sangrante culo de su hijo, que no pudiéndose sostener, se dejó caer al suelo, siendo seguido por su madre que abrazándola empezó primero a darle besitos muy maternales, terminando en un morreo en toda regla. Me salí de una desmadejada y feliz Trini, que sacando fuerzas de flaqueza, se tiró al suelo…
-Trini. -Por favor, por favor, hacedlo, hacedlo…
La entendimos perfectamente, Pili separándose de su hija, se acercó a mí y cogiendo mi flácida polla, apuntó a la cara, a la boca de su madre, donde yo dejándome llevar me meé. Hay no acabaron las sorpresas, porque Nacha al no poderse levantar se arrastró hasta que pegó su boca a la de su abuela, no tardando en recibir la meada de su madre.
-Trini. -Siiiii, me corrooooo, más, más.
Al oírla las tres que quedaban fueron pasando una tras otra y se mearon en abuela y nieta. Satisfecho, terminé de desnudarme y me senté en el sofá.
-Ayudadlas, e ir todas a lavaros y cambiaros, en media hora os quiero aquí.
Era toda una puta. Cogió a su nieta de la mano…
-Trini. -Tú y yo nos vamos a casa, si no, no nos va a dar tiempo cariño, -Sin vestirse cogió unas cuantas bolsas y tirando de su nieta se fue, no sin antes…- Tus cosas las dejó aquí, supongo que como mujer de nuestro chulo, vivirás aquí.
Al final el único que no opinó sobre eso fui yo, aunque estaba totalmente de acuerdo. Todas fueron saliendo de la salita, menos ella que se quedó esperando mi respuesta.
-Ya has oído a tu suegra, lleva las cosas a mi cuarto que a partir de ahora será el tuyo.
Con una sonrisa que le iluminó toda la cara, me besó…
-Pili. -Gracias, gracias.
Cogió sus bolsas, que eran muchas y salió disparada a su nuevo dormitorio. Me quedé en el sofá, cansado, feliz, y ya con las ideas claras, pero las quería tener a todas juntas…
Fue algo más de media hora lo que tardaron, algo lógico por otra parte. Mereció la pena…
-Sentaros todas, voy a marcar vuestro día a día, no es negociable, la que no esté de acuerdo ahí está la puerta. Lo primero es que mandes a tomar por culo a tu marido, visto lo visto, no creo que le disgusté y no creo que monte un escándalo.
-Trini. -Está loco por que se lo dé, eso no va a ser un problema.
-Perfecto, yo voy a dejar el trabajo, para eso estáis vosotras. -ni un pero, ni una pega, al revés- voy a empezar por ti Nacha.
-Nacha. -Soy tuya…
-Vas a dejar los estudios, ya veré como, pero vas a trabajar de puta de lujo, al igual que tu abuela y mi tía Viky, solo que mi tía trabajara de puta solo los fines de semana y las vacaciones.
-Viky. -Uhmmmm, ya estoy chorreando…
-Y ahora vosotras dos. Primero os vais a poner en forma, no mucho, me gustan las CERDAS como vosotras. Tú seguirás con tu trabajo de lunes a viernes, hasta que llegue mi tía del suyo, donde cambiara el uniforme contigo, tú serás la señora y ella la criada.
Las dos sonrieron y cogiéndose de las manos se besaron. No me equivoqué.
-Pili. – ¿Y yo?
-Eres la señora de la casa, controlaras a las demás, y en cuanto sepa cómo, llevaras su agenda.
A partir de ese día todo cambió…
Pili, fue mi pareja hasta que dio a luz a un precioso hijo. Cuando ya no necesito darle de mamar, ella y por petición propia participó en el negocio, pasando a ser una más de mis putas de lujo y de las que más ingresos generaba.
Trini se divorció sin problemas y sin escándalo. Me dio poder sobre toda su fortuna, que era mucha. Creamos una sociedad y vendimos su piso, comprando un chalet de lujo a las afueras de Barcelona convirtiéndolo en el lugar de encuentro. Durante varios años estuvo muy solicitada, hasta hubo épocas en las que se tiraba semanas de viaje con algún niñato o niñata rica. Nunca aceptó a nadie mayor de 30 años, eso sí. Sin dolor y sin exhibición se dejaba hacer de todo. A fecha de hoy, donde por edad y achaques ya esta retirada, de vez en cuando nos juntamos todos y nos meamos en ella.
Viky, al igual que Trini, pero solo tres fines de semana al mes, el otro fin de semana lo dedicaba a su chulo, es decir yo y al saber idiomas, muchos de esos fines de semana quedaba con ricachones alemanes o ingleses, no era por casualidad, simplemente no aceptaba de otros países. Durante la semana, tras las clases usaba tanto a su hermana como a Marga a su antojo, al igual que creyendo que no lo sabía se follaba al taxista, la muy guarra se enamoró del pollon que según ella tenía. También y debido a su trabajo, pero esporádicamente, captaba a alguna que otra estudiante, con la condición de que primero tenían que pasar por mi polla. Cuando Pili quiso ocupar el puesto de su madre, me buscó a otra profesora, también de buena familia, que a fecha de hoy es mi mujer y madre de mi niña.
Marga y Belén, ambas cambiaron su físico, pero no mucho, me gustaba y me sigue gustando follármelas como las cerdas que son. Con el tiempo las casé, con su consentimiento, celebrando la boda en el chalet, invitando a bastantes de nuestros selectos y selectas clientes menores de 30 años, bajo un precio por supuesto, y dándoles libertad para hacerle de todo a las novias, por supuesto nada de dolor. Eso sí, no se las veces que se las follaron por sus tres agujeros, hubo momentos que había cola. Algunos de nuestros clientes iban con máscara, y a los que les daba igual, sobre todo porque confiaban en nuestra discreción, sin ningún tipo de máscara. Por cierto ese día y por petición expresa de ella, en un rincón del chalet atamos a Trini, que fue usada de wáter por todo el y la que quiso.
He dejado para el final a Nacha, para nuestra sorpresa, ella tenía más clientas que clientes, es más hubo días que su madre la subastó a la mejor postora. Al final la vendimos, con su aprobación por supuesto, a una niñata podrida de pasta, que la hizo pasar por su institutriz, ya que acababa de cumplir los 18 años y en contra de lo que piensan, él se convirtió en su dueño. A fecha de hoy, de vez en cuando nos visitan, y conforme entra por la puerta ella es mía, soy yo el que la folla, sobre todo porque quiere, según sus palabras, “que la preñe el chulo de su dueño” y en eso estoy actualmente, duermo con la puta de mi profe que es mi mujer, y me corro en el coño de una jovencita para preñarla. Eso sí me he convertido en todo un padrazo, y como el negocio está en buenas manos, paso más tiempo con mis dos niños que con ellas, bueno es un decir, también cada cierto tiempo, me voy con alguna de viaje.
Y hasta aquí esta historia donde la misma chulería que me llevó a un divorcio, fue la que me convirtió en dueño y señor de un pequeño pero familiar harem.
FIN
Mi correo ra_ul1967@hotmail.com y mi Telegram @Amo_Leo, hablo y respondo a todo el mundo, siempre que lo haga con respeto.
Nota del autor: Soy cómo escribo, soy exigente, dominante y no suelo dar segundas oportunidades, cuando ordeno algo es para ser obedecido, algo que suelo advertir a quien desea ser adiestrada o entregarse a mí. No trato con hombres solos, aunque no me importa hablar con ellos. Ni miento, ni juego, ni sigo ni persigo a nadie por muy buena que este o por muy sumisa o perra que sea.
No entiendo a quien estando advertida o advertidos en caso de parejas sumisas, se enfadan conmigo y hasta me tratan de mentiroso o manipulador cuando cortó con ellos cuando no cumplen.
Seguro que en la red hay quien los o las acepte, yo no.