Las cenas cargadas de conversaciones sexuales tenían que acabar así
Aquel viernes era como otro cualquiera, nada hacia pensar en lo que la noche nos depararía.
Habíamos quedado para cenar a las diez de la noche, en un nuevo restaurante de la ciudad, mi mujer Verónica y yo los pasamos a recoger con nuestro coche y fuimos a cenar.
En la cena debido al vino y a los chupitos, acabamos hablando de lo de siempre la cama, Andrea que era amiga de mi mujer tenia un cuerpo normalita pero desprendía ese deseo sexual que desprenden algunas mujeres, Jorge su marido era un chico normal aunque su mujer siempre alardeaba de que estaba bien armado.
Al salir del restaurante era pronto para ir a bailar y decidimos pasar por casa ya que teníamos unos gramos de coca y nos apetecían unas rayas.
Subimos y puse unos cubatas algo de música pusimos la tele y estaban dando una película erótica, eso hizo que yo me empezara a calentar, no se como pero empecé a acariciar a mi mujer por debajo del vestido sin que ellos se dieran cuenta descubriendo que estaba encharcada.
Un cubata trajo otro y otro y la conversación sobre sexo animada por la película empezó a subir estando los cuatro sentados en sofá y con solo la luz del televisor, empecé a besar a mi mujer y a acariciar sus piernas, como estaba al lado de Andrea cada vez que acariciaba el culo de mi mujer rozaba el suyo, me di cuenta de que ellos estaban liados ella no paraba de acariciarle el paquete que de verdad que se notaba una buena herramienta.
Yo mientras ya le había levantado el vestido a mi mujer y acariciarle su coño, mientras Andrea habría sus piernas para que ala vez que acariciaba a mi mujer ella notara mi mano a todo esto Andrea tenía la polla de su marido en la boca, subía y bajaba por esa polla eso a mi me ponía cada vez mas cachondo mi mujer se giro y al ver la polla de Jorge se le noto que quería unirse a la mamada, solo la mire y ella supo que tenia mi aprobación, como Jorge tenia los ojos cerrados, al notar dos bocas en su polla se levanto de un susto, pero les dejo hacer, mientras yo tenia el culo de las dos delante, les levante el vestido, y empecé a chupar sus coños por igual.
Andrea se giró y empezó a chuparme la polla al ver a mi mujer con Jorge no pude aguantar y me corrí enseguida, pero cogí a Andrea y empecé a comerle el coño lo que hizo que enseguida estuviera otra vez listo.
Mi mujer no aguantaba y se subió encima de Jorge, empezó a meterse la polla primero poco a poco y después cada vez más rápido yo sabia que no tardaría en correrse, mientras Andrea había tenido un orgasmo y se me puso a cuatro patas quería que la follara y no perderse detalle de lo que la hacían a su marido, corriéndose y dejándome lleno de sus jugo a lo que aproveche para ponerme detrás de mi mujer que iba camino del segundo orgasmo encima de la polla de Jorge, despacio la eche para adelante y le puse la polla en la entrada del culo no tardo nada en ir para dentro lo que nos hizo tener un orgasmo a los tres que se tuvo que oír en todo Sabadell.
Después nos despedimos sabiendo que aquello era el principio de algo que ya no habría vuelta atrás.