Mi pobre novia es engañada por unos compañeros de trabajo y penetrada repetidas veces aprovechándose de su inocencia.
Yo creía que había experimentado casi todo, en cuanto a sexo se refiere, y en anteriores ocasiones mis compañeros, me la habían mamado, pero como lo hizo el gordo, nadie. Tan fue así, que aunque no soy de las que lleva cuenta de sus orgasmos durante una relación, creo que debí alcanzar cerca de cien orgasmos, o más, por lo menos.
Modestamente tengo con qué hacerlo, unos pechos no muy grandes, pero si bien paraditos, una cola hermosa, y una figura pareja fruto de muchas horas de gimnasio, pelo largo rubio y lacio y carita de nena según me dice la gente que conozco.