Como me gusta tener una mujer caliente.
Me enloquece despertar ese instinto salvaje que vive en ellas.
Me encanta pervertir, hacerlas hacer todas las fantasías que se me vienen a la mente para calentarme.
Me éxito cuando la veo sedienta, insatisfecha, necesitada.
Cuando esta húmeda y palpitante, cuando sus labios están mojados y se siente ansiosa.
Disfruto cuando deja salir a la más puta que lleva dentro, a la que se deja y que goza siendo un objeto.
Apasionada por coger, acepta ofrecerse de la forma que le digas.
No hace falta más trámite que desearlo para metérsela, siempre bien dispuesta a regalarse. No le tiene miedo al sexo y le gusta jugar.
Le gusta el premio por haber hecho bien los deberes y siempre está preparada para rendir otro examen.
Calentar, dejarse manosear, andar semi-desnuda, excitar, coger, salir de levante, son algunas de las pruebas en este desafío.
Compartirse es una de las reglas, por lo qué acostarse es una movida más, puede ser con un hombre o con otra mujer.
Puede ser gratis o cobrando. Preferentemente de noche, sin ropa interior, absolutamente provocativa e insaciable.
Puta, muy puta, mi putita. No hay frenos para el deseo, el cuerpo pide más y la excitación siempre va en aumento.
Sexo, sexo caliente, desesperado, hambriento, lujurioso, sexo por el sexo.
Animase, atreverse, desnuda con más de un hombre dispuesta a agotarlos para después recibir todo lo que yo le pueda dar. Mi amor te quiero así tan puta, como verdaderamente sos.
Me encanta que te miren las tetas puta divina, que me cuentes lo puta que sos. Toda depilada, llena de fantasías eróticas, mini falda, tacos altos y una blusa de seda que deja ver los pezones, lista para la próxima prenda te espero.
Puede ser mi mujer, mi novia o mi amante, solo tiene que saber que así me muero por cogérmela.