Se subió sobre mí, como hacía habitualmente cuando me cabalgaba, solo que esta vez mi polla no apuntaba a su sedoso coño oriental, sino a su cerradito y virginal culo, y poniendo en juego todo su sacrificado espíritu se empalo toda mi polla en el culo mientras yo acariciaba sus diminutas tetitas y las lagrimas de esfuerzo y dolor
La vida de nuestro protagonista continua... segundo curso del instituto y más.
Volver a casa de mis padres durante el verano fue como ir a la cárcel, sin Valle, Reme y el sumiso Marcos ofreciéndome su culo para que lo rompiera me vi condenado a una rutina de pajas que calmaran mi calentura.
La tercera noche después de los tragos de rigor junto al fuego nos metimos en la tienda, Marcos era un insaciable tragador de leche, me masturbo, me la chupo y se trago mi primera y abundante corrida mientras se la meneaba y (esto era nuevo para mi) se metía dos dedos en el culo, siguió chupando después de mi corrida hasta que me empalme de nuevo, después se puso de lado dándome la espalda y apunto mi polla en la entrada de su culo, se la fui clavando poco a poco pero sin miramientos
Se la saque asustado, su culo estaba mas abierto ahora y ella tenia lagrimas en la cara, armándose de valor se puso de nuevo a cuatro patas y me pidió que lo intentara de nuevo pero que lo hiciera lentamente y con cuidado, le metí el capullo y me pidió que estuviera quieto, poco a poco comencé a metérsela mas y ella a mover sus nalgas, después de diez minutos y mucho esfuerzo todo mi troncho estaba dentro del culo de Mary