Nos levantamos y para evitar la aglomeración salimos antes de que encendieran la luz, saliendo del cine me percaté que me estaba escurriendo fluido entre las piernas, la tanga estaba mojada de lo que había absorbido; llegamos al auto y me limpié las piernas.
Nunca imagine que me iba a sentir tan atraido por mi propia hija. Ni que la guarra de ella iba a ser tan puta.
Esa noche Aurora entró a su recámara a dormir, se cambió de ropa y se acostó; de rato llegó su mamá y le pidió que durmiera con ella, contestando Aurora, que mañana porque estaba cómoda en su cama; la mamá se retiró cerrando la puerta.
Ella me estaba masturbando; para este tiempo la cabeza del pene se descubría sin problema, y sentía delicioso; el ardor y las incomodidades eran más fuertes; parecía como si quisiera hacer pipí y no pudiera aguantarme más por lo intenso; momentos antes de eyacular sentí un ardor fuerte en mi abdomen y pene
Con lo que ellas me estaban haciendo yo sentía que explotaba en orgasmos uno tras otro y arrojando líquido; mi tía tomó con su dedo de mi líquido y lo untó en su clítoris para masturbarse; la amiga se acercó a Laura y también se empezó a masturbar mientras me acariciaba los testículos.