Todo comenzó cuando a los 15 años vi a mi hermana Erika, un año menor que yo, por una rendija de la puerta del baño, pues creía que yo ya dormía y no la cerró, como se duchaba.

No tenía un cuerpo 10, pero tenía unas tetitas redondas, con unos pezoncitos rosaditos. Desde ese instante pensé mucho en ella a la hora de mis masturbaciones.

Un par de meses después, ya en verano, nos fuimos a la playa con mi tía, mi primo, de 8 años, mi hermana, mi prima Desirée de 13, hija de otra tía y yo.

Mi prima se quitó la parte de arriba del bikini y dejó asomar lo que en poco tiempo serian unos grandes y bonitos pechos.

Mi hermana mucho más vergonzosa, no quiso quitárselo.

La imagen de mi prima se me quedo grabada y no podía dejar de pensar en ella, hasta que tres o cuatro días después, la vi en su habitación viendo una peli subidita de tono y con la mano entre las piernas.

Me puse a cien. Unos segundos después se subió la camiseta del pijama y dejo ver sus senos, un poco más grandes que las de mi prima, pero mucho más pequeños que los de esta un tiempo después. Empezó a respirar rápido y a gemir. Había llegado al orgasmo.

Todo esto me puso como una moto.

Corrí al baño y me hice una paja descomunal. Estas visiones me habían marcado y sacaron al viciosillo que llevaba dentro.

Estuve una temporada más tranquila, el final del verano llegaba y con ello la vuelta a las clases y con ello la calma.

El viciosillo de dentro de mi parecía dormido.

Al cabo de un año al empezar el verano, recibo una agradable visita.

Es mi prima Desirée, que viene con una propuesta de inmejorables condiciones. Su padre se va de camping a Barcelona, y ella no quiere marcharse y le hizo una propuesta a su padre (en aquel entonces sus padres estaban separados) de que ella se quedaba con nosotros en su caseta de la playa.

Su padre acepto y cuando oímos la propuesta no nos lo pensamos y nos pusimos a organizarlo todo. Al final se apuntó un amigo común de 18 años que tenía coche y nos fuimos para allá.

Al llegar, después de comer, nos instalamos y como hacía un calor terrible mi hermana decidió irse a la playa y mi amigo Juan decidió acompañarla.

Mi prima Desirée y yo nos quedamos allí. Ella se puso el bikini y yo mi bañador. Cogí la manguera que allí había y cuando menos se lo esperaba empiezo a mojarla.

Debido al agua, su bañador muestra parte de lo que antes escondía. Me fijo bien en su cuerpo y veo que sus pechos ya son mayores que los de mi hermana.

Su talla de sujetador es la 90. ¡¡ Y con solo 14 años!! Esto prometía. Tenía una figura espelta, con un culito redondito y respingón. Al cabo de un largo rato, a media tarde decidimos ducharnos para después preparar la cena. Primero se ducha ella.

La ducha estaba fuera de la caseta, en una esquina escondida, tapada con cortinas por el único lado que no era de pared.

Yo por la parte de atrás consigo espiarla y veo que la muy zorrita se depila su coñito y lo tiene como una tierna jovencita.

Esto me pone a mil. Cuando me ducho me hago una paja de miedo y cuando oigo a mi hermana que llega de la playa me apresuro y acabo de ducharme.

A la mañana siguiente nos levantamos temprano para arreglar la casa e ir a la playa. Después de desayunar hacemos dos grupos uno va a compra y la otra friega los platos. Mi hermana y Juan van a comprar y yo y Desirée nos quedamos a fregar los platos.

Cuando se van a comprar quedan en regresar a la 1 y media del mediodía con lo que tengo3 horas para disfrutar.

Mientras estamos fregando mi prima se excusa de que va al “Baño” pero en realidad se va a su cuarto a cambiarse. Se pone un bikini verde que resalta su cuerpazo. No me doy cuenta cuando algo se me abalanza por detrás.

Es ella. Sin tiempo para reaccionar empieza a acariciarme la espalda y el pecho y mete su mano en mi bañador, acariciando mi hinchado miembro. Me quedo paralizado.

Cuando veo lo que pasa le preguntó qué a que viene esto.

Ella al ver mi cara de sorpresa me dice que entre sus amigas han hablado de sexo y ella era la única que todavía no lo había practicado y que una amiga cuando estaban asolas le había dicho que lo mejor era proponerme a mí que la desvirgara y le enseñara todo acerca del sexo.

Todo lo que había pensado se estaba realizando. Acto seguido se quita el bikini y se pone de rodillas.

Coge mi miembro y empieza a besarlo con suavidad. Me vuelve loco. Empieza el sube baja. Cojo sus pechos entre mis manos, con los pezones durísimos, muy excitado y empiezo a magrearselos. Le digo que se levante, vamos a la habitación de matrimonio y nos acostamos en la cama formando un 69. Tengo su maravilloso y rosado coñito de jovencita sobre mi cara y sin pensarlo me pongo a lamerlo.

Empieza a estremecerse y a mojar su rajita y mi cara.

Tomo sus jugos dulces y amargos a la vez.

Decido pasar a la acción y la pongo sobre la cama con el cojín bajo su vientre para levantarla y le acaricio su rajita con la punta de mi pene.

Resbala y se mete dentro la punta por sus fluidos y de un empujón la acabo de meter, y empiezo con un ritmo de vaivén que la vuelve loco.

Veo como un hilito de sangre resbala junto a mi pene. Es su virginidad, satisfecho por ser su primer hombre aumento el ritmo para disfrutar de un grandioso orgasmo por parte de Desirée y finalmente mío.

Después de unos minutos de relax, mi arma se pone en posición de combate, quiere más guerra y me viene a lamente una gran idea.

Le pregunto a mi primita si tiene alguna crema para las manos y observo en su cara una mirada de malicia. Sale de la habitación y vuelve con un neceser. Lo abre y saca un sobrecito con vaselina.

Me dice que el neceser lo han repartido en el instituto en una charla de los médicos de planificación familiar. La cojo y unto mi pene y con dos dedos unto su estrechito ano.

Cuando observo que dos dedos entran con facilidad le acerco mi pene y poco a poco la introduzco esperando a que se acomode.

Cuando ya la tengo toda dentro empiezo a bombear con una fuerza tremenda y su presto culito agarra mi pene provocando una terrible excitación. ASI, AHHHG, MAS MAS, NO PARES grita mi prima. Poco después explotamos en un gran orgasmo los dos a la vez.

El reloj marca la una de mediodía. Hemos estado más de dos horas. Al cabo de 20 minutos llegan Juan y Erika.

Una vez reunidos Juan y Erika nos preguntan que hemos hecho durante la mañana y los dos como por telepatía, decimos al unísono que hemos ido a la playa. Aunque parecen convencidos a mi hermana se le puede observar un semblante de duda.

Después de comer, decido acostarme un rato y descansar, pues la mañana ha sido muy movidita.

A media tarde despierto con una maravillosa sensación, abro los ojos y veo a mi prima que tiene la mitad de mi rabo en su boca lamiendo con un énfasis inusitado. Cuando me ve me sonríe y me da un beso.

Me dice que Juan y Erika se han ido a la playa y que tenemos un rato libre para disfrutar. Se pone delante de mí y con mi nabo entre sus pechos empieza a subir y bajar haciéndome una cubana sensacional.

Tan joven y tan caliente. Cuando estoy a punto de venirme y sin mediar palabra, se mete mi pene en su boca y se queda con toda mi leche y con una sonrisa me dice que no me mueva, se levanta y sin respiro y con el poco tiempo justo para que mi herramienta se recargue se la introduce en su culito y empieza el mete-saca y con un ritmo frenético consigue una corrida simultanea de cojones.

Cuando nos recuperamos, nos vestimos y nos vamos a buscar a mi hermana y a Juan. Cuando llegamos a la playa, no hay mucha gente, y divisamos en el agua a Juan y a Erika.

Cuando nos ven se acercan a la arena y nos dicen que empecemos a preparar la cena y así podremos ir por la noche a los pubs de la playa a tomar algo y bailar.

Después de cenar, coge Juan el coche y nos vamos a los pubs de la playa. Yo me pongo unos tejanos y una camiseta.

Mi prima se pone una minifalda y un top ajustado y mi hermana se pone una falda por las rodillas y una blusa oscura. Cuando llegamos a los pubs, como no los conocimos entramos en uno en el que sonaba música house. Una vez dentro nos damos cuenta de que esta abarrotado y estamos muy apretados.

A los pocos minutos de estar allí mi hermana por los empujones se distancia de nosotros unos metros y veo que entre tres tíos la rodean y empiezan a manosearla. Uno le mete la mano por debajo de la falda.

Mi hermana lejos de amedrentarse les sigue el juego apretando sus paquetes. Después de unos minutos con este juego mi hermana desaparece con estos tíos.

¡Caray con la nenita! ¡Y parecía recatada! Cuando voy en su busca veo que se van a un lugar apartado cerca de un parque. Aprovechan la falta de luz y desnudan a mi hermana.

Uno de los tipos se sienta en un banco con su pito apuntando al cielo y mi hermana se sienta encima. Se hecha hacia delante y otro de los tíos le perfora el culito.

Cuando siente el enorme falo perforándola intenta gritar, pero el otro de los tipos le tapa la boca con su falo.

Cuando ya se acomoda empieza el sube y baja. ¡Increíble, mi hermana se lo está montando con tres tíos a los que no conoce de nada! Al cabo de unos minutos los tipos empiezan a correrse, pero mi hermana parece no haberse quedado satisfecha.

Cuando se dispone a volver, me doy prisa en escapar e ir corriendo y volver al pub. Cuando llegó allí Juan y Desi me preguntan de dónde vengo y cuando les cuento lo que he visto se quedan de piedra.

Cuando mi hermana llega, con la cara notablemente enrojecida, no habla de lo sucedido y se limita a bailar.

Al rato decidimos marcharnos a la caseta pues ya es tarde.

Una vez en la casa nos vamos todos a cambiarnos. Nos acostamos, pero no podía conciliar el sueño por lo que había visto.

A la media hora más o menos llega a mis oídos un ruido extraño. Decido levantarme a ver qué pasa…