En casa con Sandra
El otro día al llegar a casa me encontré a Sandra, la amiga de mi hermana, en el comedor.
Esta tiene 18 añitos recién cumplidos, es un bomboncito listo para comer.
Un culito respingón, cuerpo estilizado, unos pechos redonditos y puntiagudos.
La verdad es que cuando venía a nuestra piscina a bañarse y la veía en bikini me ponía a cien.
– Hola Sandra, que tal.
* Bien, aquí esperando a Andrea.
– ¿Dónde anda?.
* Ha ido un momento a casa de Ruth, vendrá en una hora, me ha dicho que la esperara aquí por si venía alguien y no tenía llaves para entrar.
– Ah vale.
Yo la dejé viendo la tele y me fui a mi cuarto a cambiarme de ropa. Me desnudé y me puse a buscar unas bermudas para ponerme. En eso estaba yo cuando de repente se abre la puerta y entra Sandra.
* Oye Jose, podrías….. , Perdón, perdón creía que estabas visible.
La vedad es que no, allí estaba yo desnudo y con la tranca al aire. Al ver a Sandra tan cerca y sólo con su bikini y un top que cubría lo justo me comencé a empalmar.
Sandra no dijo nada, solo miraba mi tranca. Los pezones se le comenzaron a poner de punta y las mejillas coloradas, pero no se iba.
– ¿Que pasa Sandra? ¿Nunca has visto un hombre desnudo?.
* Si claro, pero es que …
– ¿Que pasa que te has excitado?
* No, no, que va.
– Entonces porqué tienes los pezones de punta.
* Es que sabes, tu hermana Andrea ya perdió la virginidad y yo no sé cuando …..
– ¿Qué me quieres decir?
* Pues eso, estamos los dos solos, sé que te gusto por la forma que me miras cuando me baño en la piscina y eso, que si tu me hicieses el favor de…
– Ven acércate. Tócala que no muerde. Cógemela con las manos.
* Uff, mira como crece.
– Si acaríciala. Mueve las manos arriba y abajo.
* Que grande se ha puesto.
– Ven arrodíllate, dale besitos.
* Ummm, que caliente está.
– Ahora métetela en la boca y chúpala como si fuese un helado.
Joder, que bien la chupaba la niña, como siguiera así me iba a correr. La detuve y la tumbé en la cama, le quité el top y comencé a chuparle los pezones.
* Agg, que gusto, sigue, sigue.
– Tócate el coñito con las manos, si frótate. Siiii.
Luego bajé las manos y le quité el bañador lentamente y comencé a chuparle encima del coño, luego seguí con los labios mayores, chupándolos, mordiéndolos con cuidado hasta que llego el momento y me dediqué a sus labios menores, comencé a chupar lentamente para pasarme a su clítoris, que parecía un pezoncito duro.
* ahhh, siiiii, me corro, que gusto.
– Toma lengua… si que coñito tan delicioso tienes.
* Sigue sigue.
Como se retorcía, acababa de tener su primer orgasmo. Los ojos se le quedaron en blanco mientras seguía retorciéndose.
* Ah sido fantástico.
– Pues ahora viene lo mejor, te la voy a meter toda, voy a llenarte el coño de polla.
* Si venga métela que me muero de ganas.
– Espera que busque condones.
* No, no, sin condón, no te preocupes, tomo la píldora des de hace tiempo, una es previsora.
– ¿Seguro?.
* Si no te preocupes.
– Pues vamos allá. Acércate que te ponga la almohada bajo el culo para que té entre mejor y te roce mas la parte alta de la vagina. Así te entrará mejor y té dará mas gusto.
* Si, pero métela ya que me muero de ganas.
– Venga, la puntita, despacito.
Que maravilla ver como se iba enterrando mi polla en su coño. Que coño tan prieto y cerradito. Empecé a meter y sacar la puntita mientras ella se moría de gusto.
Cuando ya estuvo bien lubricada empujé y le rompí himen para entrar hasta el fondo y comenzar a meter y sacar toda mi polla en su coño.
* Siiiiii, Siiiii, que gusto joder esto es fantástico, sigue, sigue.
– Joder niña que coño mas precioso tienes, como me aprieta la polla.
* Siii, siii la siento entrar, la siento abrirme, joder que gusto.
– Ven gírate que te la voy a meter desde atrás.
* Si, si métemela.
– Joder que espectáculo, me encanta verte el culito mientras te entra.
* Y a mi sentirla dentro, empuja empuja.
– Affff, me voy a correr, gírate que te la tire en la boca.
* Si, en la boca.
– Toma mi lechita, toma.
* Ummm que rica, mira como me la trago.
– Joder niña, eres una viciosilla.
* Si, ya lo sé, quiero disfrutar todo lo que pueda del sexo.
– Pues siempre que quiera una polla lista puedes utilizar la mía.
* Si ya veo como recobra vigor, así que no perdamos mas tiempo y sigamos, tengo que recuperar todo el tiempo perdido, y tu me vas a ayudar. Así que por donde seguimos ahora.
– Bueno, para empezar chupa un poco que se ponga a tono, que me tengo que follar esas teticas tan ricas que tienes.
* Ya sé que te encantan mis teticas, de hecho cuando me bañaba en la piscina y tenia que salir lo hacia cara hacia tu ventana porque sabía que estabas mirando, me encantaba exhibirme para ti.
En eso estábamos cuando de repente se abre la puerta de golpe y aparece mi hermana Andrea.
# Pero serás cochino Jose, y tu que Sandra, no te puedo dejar un momento a solas, a la mínima te tiras a mi hermano.
* Lo siento, es que estaba caliente y la ocasión no se podía desperdiciar.
– Andrea, esto no es lo que parece, esto…
# No si lo que me fastidia es que no me invitéis.
Andrea se quito el bañador que traía de golpe, apartó a Sandra y se tiró sobre mi polla como una posesa. Yo me quedé sin palabras y la deje hacer, no sabía que decir, y lo mejor es que esa morbosa situación me ponía mas caliente.
Mientras Andrea seguía con mi polla yo me dediqué al coñito de Sandra. Asta que las puse una encima de la otra y comencé a follarme a las dos alternadamente. Metía en Sandra, sacaba y metía en Andrea.
* Joder que rabo tiene tu hermano, y tu sin decirme nada.
# Si, si, tu bien que te has aprovechado de él.
* Veas, lo pillé en pelotas y no podía dejarlo escapar.
# Pues a partir de ahora tendrás que pedirme permiso pues va a ser mío.
En eso estaba con Andrea cabalgándome y chupando el coño de Sandra cuando …..
– Venga chicas no se peleen que hay rabo de sobra para las dos. Y dejen de hablar que me voy a correr.
En eso se giran las dos juntando las bocas para recibir mi cremoso regalo.
– Siiiiii tomen mi leche.
* Danos leche.
# Venga dispara.
Les cubrí las bocas y la cara de leche, pero ellas no se lo pensaron en limpiarse con las lenguas y jugar con mi semen en sus bocas.
* Jose no se te ocurra desperdiciar nunca mas tu leche, por aquí tienes dos perritas en celo cuando quieras.
# Eso, eso, y una de ellas en casa.
– Vale, oído cocina. Dejen de hablar y chupen, que hay que levantar mi polla para una nueva arremetida.
* Yo prime…
# De eso nada primera yo que para algo es mi hermano.
– Venga, no se peleen, si hay rabo de sobra para las dos
#* Siiiiiiiii, Siiiiiii.
La verdad es que es un día que no podré olvidar.
Dos guarrillas sólo para mí.
Lo que tendré que probar un día de estos es sus lindos culitos, pero eso será otra historia.