En la casa

Esto sucedió hace tiempo, tendría yo unos 17 años recién; un domingo cuando mi mama se fue con su amiga Olga para no se que evento.

Si mal no recuerdo, era un babyshower.

Me quede con mi hermana (la cual es mi gemela) atendiendo la tienda que en ese entonces tenían mis papas. Nos encontrábamos esperando a mi mama pues ya iban a ser las 6 pm y nada que llegaba.

Mi hermana tenia un saco rosado con un pantalón verde bombacho de varios bolsillos yo tenia un jean ajustado y un saquito azul, ella estaba sentada cerca de la puerta que da a nuestra casa y yo estaba en el mostrador.

Estábamos comentando del retraso de mi mama, cuando de pronto entraron 3 hombres altos, nada fuera de lo común.

Uno de ellos nos dijo que si vendíamos vaselina, yo me agache a sacarla de la vitrina cuando escuche que bajaron la reja del local, mi hermana intento correr hacia adentro buscando la puerta de la sala pero uno de los hombres la alcanzo y la detuvo, sosteniéndola con un brazo y tapándole la boca con el otro; yo al estar agachada no pude reaccionar, uno de ellos me tiro de un brazo y me tapo la boca, y entre los dos me llevaron dentro de la casa.

Ahí ya se encontraba mi hermana sentada sobre la sala y llorando.

Estábamos asustadas, pensamos que nos iban a robar y quizá matarnos para no dejar testigos, cuando uno de ellos dijo por cual empezamos o las dos al mismo tiempo, y otro contesto pues como son gemelas es mejor que pierdan la virginidad al tiempo, cuando yo escuché esto me aterrorice igual que mi hermana, nuestros cuerpos templaban y nos pusimos a llorar como bebes, tan solo teníamos 17 años y nunca antes habíamos estado con un hombre.

De la tienda se trajeron cinta adhesiva, con la que nos ataron las manos a la espalda y nos amordazaron.

Uno de los hombres se paro delante mío y se bajo la bragueta del pantalón y por el lado de su calzoncillo se saco su miembro grande y grueso me dijo que con eso mi iba a perforar.

Cerré mis ojos, todos llenos de lagrimas, cuando sentí que me empujaba sobre la sala, sentí que me desabrocharon el pantalón y me lo jalaban con fuerza para quitármelo.

Yo no quería abrir los ojos, por que ya sabia lo que me esperaba, pero me acorde de mi hermana y la busque con la mirada y se encontraba en el suelo, también le habían bajado el pantalón y le habían abierto su blusa, ella se retorcía en el suelo, pero uno de los tipos la sostenía de las manos mientras el otro acariciaba sus piernas.

Deje de verla, pues sentí que me manoseaban por encima de mis calzones, y el tipo que me tenia dominada subió mis piernas (el estaba de rodillas, frente a mi) y las puso sobre sus hombros. Poco podía hacer yo para evitarlo, pues estaba atada de mis manos.

Se acomodo su pija frente a mi concha y note que me corría el calzón para dejarla al descubierto y le pregunto al que estaba sobre mi hermana que si estaba listo para contar hasta tres.

No se en que momento conto pero empecé a sentir un dolor espantoso que pegue un gemido largo y lamentoso, al igual que mi hermana pues nos estaban ensartando a las dos.

Yo sentía como si me estuvieran metiendo un hierro hirviendo, me pegaba unas embestidas que me hacían palidecer, y brincaba cada que volvía a arremeter contra mi concha, tenia ganas de morder al desgraciado.

Se separo por un instante, me observo y dijo «uy, sangro! desvirgue a la putita!» y empezó a bombearme de nuevo a toda maquina, con coraje diría yo.

Me sentía desmayar, el dolor era insoportable, cuando sentí que se le hinchaba su verga y me hizo tratar de zafarme, pues sentía algo caliente que se derramaba dentro de mi, supe que se había corrido, que ya había sido toda suya no tenia animo de voltear a ver a mi hermana; pero pude escuchar un leve y corto grito de ella, y luego como si fuera a vomitar, pues a ella no solamente la habían ensartado, si no que le estaban haciendo chupar la verga del tercer tipo, el cual se la dejaba ir completa, causándole arcadas a mi hermana.

Seguramente se dio cuenta que mi violador ya había terminado y se vino hacia mi, me dio la vuelta me coloco boca bajo, de rodillas apoyada en la sala, yo no entendía que pasaba pero cuando sentí que me bajaron completamente mis calzones y me escupía en mi ano me imagine lo peor.

Sentí que acomodo la punta de su verga en mi huequito y me la empujo hasta el fondo, con fuerza.

Fue tanto mi dolor y tan fuerte su embestida, que rompí la cinta que me amordazaba y grite. Mi grito hubiera sido larguísimo, sino hubiera sido que uno de ellos me tapo la cara con uno de los almohadones de la sala para evitar que se oyera mi grito.

Me sentí asfixiar y creí que me moria cuando me desmaye.

Ya no supe que mas paso, solo se que al despertar tenia en mis labios residuos de semen, me ardía el culo y mi concha tenia una fea mezcla de sangre y semen.

Mi hermana se encontraba desnuda y acurrucada llorando en una esquina de la sala, lloramos casi una hora, después de eso, nos vestimos y nos fuimos a nuestras recamaras, llorando y humilladas.

Mi mama llego tarde y no entro a nuestra pieza, nosotras nunca le contamos lo que ocurrió esa tarde.