Puta pendejera
Esta historia es real, sucedió hace siete años atrás, cuando tenia 16, como bien decía mi hermano era una puta pendejera o como decía mi ex-novio el causante de este relato, «mis ojos azules reflejan la calentura»
Me presento, mi nombre real es Jocelyn, fui una putita adolescente, actualmente tengo 23 años, mido 1.65, peso 60 kilos, mis medidas son 97-61-92, ojos azules, piel blanca a morena, pelo crespo rubia, estado civil casada sin hijos, desde cuando conocí a mi marido he sido fiel, no quiere decir que siempre lo seré, he tenido múltiples oportunidades de tener sexo con otros hombres, como estoy segura que si caigo una vez volveré a ser la misma putita adolescente, prefiero abstenerme de hacer alguna cosa, salvo que sea realmente algo interesante.
Debo decir que empecé a tener relaciones sexuales a partir de los 13 años, cuando una noche de verano en la playa junto a dos amigas fuimos a la disco, las tres ese día demostrábamos mas edad de la que realmente teníamos, debido a los vestidos ceñidos al cuerpo y el pintado de nuestra cara.
En la disco conocimos a unos extranjeros demasiados atractivos, eran cinco chicos, que tenían en promedio 27 años, cerca de las tres de la mañana los chicos nos propusieron hacer una fiestita entre los ochos, personalmente no tenia idea que significaba eso, por lo cual había dicho que si pero una de mis amigas me explicó lo que significaba, después de saber, dije: no, ellos siguieron insistiendo en que fuéramos a hacer algo entre todo pero como éramos menores de edad, la mayor tenia 14 años, no queríamos problemas, les dijimos que éramos menores de edad, no tenemos la edad que ustedes piensan además nunca hemos tenido sexo.
Para ellos, al principio escuchar eso fue como un balde de agua fría pero uno de ellos, nos dijo que si íbamos nos pagaban, al principio mis amigas y yo nos miramos y nos reímos, pero cuando nos dijeron la cantidad de dinero, nuestras caras cambiaron de expresión, cuando empezó a hablar de monto, nunca pensé que nuestros cuerpo valieran tanto, al final pagaron por cada una de nosotras US$ 1.600 aproximadamente, después supimos que los chicos eran hijitos de papito y que el dinero les salía hasta por lo poros.
Para asegurarnos del pago pedimos el dinero por adelantado, lo fuimos a dejar a casa de una de mis amigas, luego de ese pequeño tramite, les fuimos a entregar nuestra virginidad a esos cinco hombres (las tres éramos vírgenes), cuando llegamos al departamento que arrendaban, nos dimos cuenta de lo que hace el dinero, el departamento era mas grande que mi casa y super cómodo.
Pusieron música sirvieron unos tragos, además de colocar una película porno en una pantalla gigante que tenían, todo empezó a adquirir un aire mágico, el licor hizo el efecto indicado, nos desinhibió a cada una de nosotras, el baile y el toqueteo nos empezó a excitar, de pronto me veo que estaba en ropa interior al igual que mis amigas, nunca las había visto así, se veían hermosas con esas tangas tan pequeñas semitransparentes, las que delataban sus coños con poco pelos, cuando nos vimos la cara nos pusimos rojas por vernos así pero nos echamos a reír mientas ellos empezaban a sacarse la ropa, los hombres cuando dejaron sus torsos al descubierto mmmmmmmmm, eran mas bonitos de lo que pensábamos pero cuando quedaron desnudos nuestros ojos casi se salen, uuuuuuuuuuf que vergas, nunca había visto hasta ese momento una verga menos cinco, nos sacamos el brassier, quedamos en bragas o tangas, de pronto nos acercamos a ellos, les empezamos acariciar sus cuerpos mientras ellos hacían lo mismo con nosotras, yo no era la mejor del grupo pero no andaba mal, cuando empezaron a jugar con mi pechos uuuuuuuuuuuuuuuf que rico lo que hacían, me lo apretaron suavemente y me tiraban mientras otro por atrás empezó a pasar sus lengua por mi espalda hasta llegar a mi culo, ahí casi me derrumbo, nos empezaron a tratar de putitas, viles rameras y otras palabras fuertes, hasta ese momento esas palabras no me eran familiares pero cuando supe que querían decir, me di cuenta que eso habíamos sido «unas viles rameras», pero no importa, lo pasamos bien y nos pagaron por nuestra virginidad, al final las tres fuimos visitadas por todos nuestros orificios mas de una vez, el premio mayor fue cuando a cada una, nos tocó estar con los cinco a la vez, yo fui la segunda, lo que sentí con cinco vergas a mi disposición es algo que nunca he podido describir, lo único que recuerdo que no sabia si gritar, llorar, reír, gozar, aparte que no había tiempo para eso.
Lo contado hasta ahora no era lo que les iba a relatar, es una pequeña introducción, lo que voy a contar ahora, es el motivo del relato, antes de cualquiera comentario, quiero primero prevenirme y decir que si me dicen que soy una puta o una vulgar ramera u otra cosa, es algo que me merezco porque lo que hice no tiene nombre.
Como dije al principio cuando tenia 16 años, tenia un novio con el cual mantenía una bonita relación, nuestras relaciones sexuales eran espectaculares, casi todos los días las manteníamos, el tenía en ese entonces 17.
Mi ex tenía bronca con un chico de su misma edad, cada vez que se veían se amenazaban, era una cuestión de feeling entre ellos, como es lógico en este caso yo estaba a favor de mi ex pero un día todo cambio, una amiga me invito a una fiesta, yo no pude ir con mi ex porque tuvo que salir de la ciudad por varios días, no tenia idea que esta chica conocía a este enemigo de mi ex, cuando llego, veo que estaba él, me dio una rabia tremenda que solo quería irme, pero por respeto a mi amiga no lo hice.
Ese día vestía una tenida azul a excepción de mi ropa interior que era blanca y pequeña, mi braga o tanga que era casi un hilo dental, se diferenciaba del hilo dental solo porque era un poco mas ancho en la parte de atrás, se notaba su pequeñez a través del pantalón tanto por delante como por atrás, ese día vestía pantalón elástico, una blusa, chaleco y zapatos, todo de color celeste, mi amiga me digo que me veía demasiado agresiva para ir a su fiesta así, le dije que no era para tanto pero ella tenia razón en la forma que me miraban los chicos parecieran que me desnudaban con sus ojos, dirigiendo sus miradas a mi entrepierna o mi culo, a mas de uno le escuche decir «mira la putita de la Jocelyn, se le ve todo su calzoncito o tanguita» o «la Jocelyn debe ser una verdadera ramera en la cama para vestirse así apuesto que alguien esta noche se lo va a poner» además de otros comentarios mas suaves y fuertes, en un principio me habían molestado esos comentarios pero como tenia mas rabia con el enemigo de mi ex porque su presencia, no les hice caso a los chicos.
Había conversado con todo los chicas y chicos e incluso había bailado con casi todos ellos, con el único que no había hecho contacto era con él, el enemigo de mi ex y que por supuesto era enemigo de mí, debo reconocer que el chico no estaba nada de mal, tenia buen físico, una cara de varonil y una mirada penetrante que a cualquiera chica le hacia tiritar las bragas.
Como había bailado mucho, lo que me había originado una calor tremenda en mi cuerpo, decidí salir a tomar un poco de aire, a los pocos minutos de estar tomando aire, se acerca él, me dice «uf que calor hace a dentro», lo miro, le dijo tu quien eres, el me dice tu sabes, le digo: que te crees, nada me dice, solo te estaba diciendo el calor que hace adentro si te moleste disculpa, le dije tu sabes que me molestas, que me eres repúgnate, ordinario, rasca y asqueroso, pensé que me iba a tratar mal pero era demasiado inteligente para hacer eso, me empezó a dominar con sus repuestas, a tal punto que después el dominante era él.
A medida que íbamos conversando, las malas vibras se fueron convirtiendo en buenas, prueba de ello que a no muy lejos de andar ya nos estábamos riéndonos y contándonos chistes, llevamos mas de una hora conversando cuando me propone ir a bailar con él, le digo hemos estado conversando mas de una hora, creo que podemos seguir conversando y bailando.
La música estaba movida y super entretenida para mover el cuerpo, justo cuando nos vamos a poner a bailar colocan un lento, me miró a los ojos, dijo: bailamos o esperamos, si bailemos le dije, puse mis brazos alrededor de su cuello, los de él se fueron a mi cadera, empezamos a bailar un poco separado pero a medida que avanzaba el tema nos fuimos acercando mas y mas, la conversación amena y jocosa que teníamos mientras bailábamos nos fue desinhibiéndonos, sin darme cuenta, estaba su cuerpo pegado al mío o viceversa, seguimos bailando el segundo y tercer tema pegados, de pronto siento su pene crecer entre los dos, lo aprieto un poco mas para sentirlo mejor como crece, me gustaba esa sensación de cómo le crecía, ese sentir tuvo su efecto en mi, me empezó a excitar e imaginaba su pene agradándose dentro de mi intimidad, le pregunte que le pasaba, nada responde, le bajo la cabeza, le dijo en su oído, te pregunto porque siento una cosita rica que crece entre los dos, él me dice es por ti, por tu cuerpo, tu aroma, tu ropa, tu belleza, no te gusta ser la provocadora del crecimiento de mi cosita, nada le dijo, hubo un silencio entre los dos, luego de unos segundos siento que me aprieta, me empieza a besar en mi cuello y oreja, yo no decía nada, me gustaba como lo hacia, siento como va recorriendo desde mi cuello y oreja hasta mi boca mmmmmmmm que bien lo hace, me decía para mí, cuando llegan sus labios a los míos lo recibo con ansias de sentir la unión de nuestras bocas, nos empezamos a besar, el bajo sus manos a mis nalgas y las apretó llevándome a su masculinidad, el placer que sentí en ese instante era indescriptible, no se cuanto tiempo estuvimos besándonos, las luces apagadas eran nuestro mayor cómplice, nos detuvimos segundo antes que la música se acabara, mientras nos besábamos él no dejo de tocarme mis nalgas, las apretaba o me levantaba con ellas, sentía toda su masculinidad cada vez que me hacia acercarme a su cuerpo, cada vez me fui entregando mas a ese hombre, lo apretaba mas y mas, en cada beso o apretón lo besaba mas efusivamente, me había excitado como pocas veces.
Cuando se acabo la música, me toma de la mano, me saca de la fiesta, me lleva a un lugar oscuro y nos volvimos a besar ahora su manos descaradamente jugaba con todo mi cuerpo, apretaba mis pechos, mi culo, mi cara, yo no hacia nada para que se detuviera, hacia lo mismo que él, lo tocaba todo pero mis toques iban dirigido mas a su sexo que cualquier otra parte de su cuerpo, no me acordé que era el enemigo de mi ex, estábamos tan excitados los dos que le dijo hazme tuya please, hazme tuya, ahora, por favor, me separa y me dices vamos a un motel, le dijo si somos menores de edad, no te preocupes me responde yo conozco un amigo que nos dejara pasar.
Ya eran cerca de las tres de la mañana, excitada pierdo el control de mi cuerpo y mente, no tenia control de mis actos, me dice despídete y me esperas en la esquina, le dije ok, me despedí, lo espere en la esquina, tuve cerca de diez minutos esperándolo, parecía una puta esperando cliente, con el tiempo me di cuenta que esa noche me había comportado peor que una de ellas.
No sabia que el andaba en auto, veo venir un choche se detiene detrás de mi, en la calle oscura, sin darme cuenta se acerca por atrás, me toma, me asuste luego me dice tranquila amor, me doy vuelta y lo beso, me toma en su brazos y me lleva al coche, me para en la puerta y me apoya en ella, nos besamos, nos acariciamos como locos, solo quería sentir su verga dentro de mi, le digo que hagamos el amor ahí mismo que estoy loquita por sentirlo dentro de mi, lo deseaba desesperadamente, le haría el amor ahí mismo una y otra vez, me detiene, abre la puerta del auto, me ordena subir.
Me siento con la piernas abiertas, cuando el sube, mmmmmmmmm me gusta esa pose me dice, luego pasa su mano por entre mis piernas fue tan rico sentirlo que le detuve la mano en mi coño para que me apretara mas fuerte, él estaba tan excitado como yo pero sabia controlarse, me dice tranquila mi putita, me saca la mano, enciende el auto, me besa y me dice en voz baja en el oído, sácate el pantalón, oír eso fue un elemento mas de excitación, mientras me saco el pantalón, el parte hacia el motel, una vez sin el pantalón coloco mi cola en la punta del asiento cerca de la mango de la caja de cambio, mi pierna izquierda la cruzo hacia el asiento de atrás y le dijo ya, su cara de satisfacción fue tremenda tanto o mas que la mía, mmmmmmmmmmm que linda te vez con esa tanguita, tan pequeñita y transparente, me pasa la mano en mis entrepiernas, uuuuuuuuuf gimo por su caricia en mi coño y le digo papito mira como me tienes, es genial como este hombre me estaba teniendo con cada caricia me hacia gemir y hervir mi cuerpo a mil, que mojaditas estas amor, parece una putita me dice, le digo tu eres el culpable que esta putita este así, mientras paso mi manos mi coño y luego llevo unos dedos a la boca para saborear mis jugos que salían a través de la tanga y excitarlo más, me mira, me dice eres una gran putita, me dio dos palmadas en mi coño que tocaron justo en mi clítoris, el cual estaba duro e inflamado, esas palmadas me hicieron cerrar las piernas y doblarme de puro placer.
Estabamos cerca del motel, me dice: vamos a dejar el auto acá, nos vamos a ir caminando, le digo déjame colocarme el pantalón, no me dice, quiero que vayas así, es mas excitante, le digo estas loco, déjame ponerme el pantalón, me dice confía en mi, yo sé lo que hago, aparcamos el auto, bajamos y nos dirigimos al motel yo iba, vestida del tronco hacia arriba, de la cintura hacia abajo iba solo en la diminuta tanga y zapatos, me toma de la mano, me pide el pantalón y nos dirigimos al motel, al llegar esta su amigo, solo en sala de atención, al vernos se sorprende por mi vestimenta, mientras bromea con mi amante, yo estaba roja de vergüenza pero mi excitación era mayor a mi vergüenza.
Después de bromear un rato le pasa la llave a mi amante, antes de irnos a la habitación, algo le dice a mi amante que este se acerca, me pasa la mano en mi coño y le dice si esta mojado mira, este hombre otra vez se acerca a su oído y le dice algo a mi amante, pero este no me dice nada, solo supe al final que le había dicho, cuando salimos del motel, que su amigo había pedido hacer una pequeña orgía entre los tres, si lo hubiera sabido en ese momento le hubiese respondido que si estaba demasiada caliente para no aceptar una proposición de ese tipo.
Cuando nos dirigimos a la habitación ese hombre me miraba el culo de una manera, mi amante se aprovecho de eso, y me empezó a pasar su mano descaradamente en él además tiraba de mi tanga hacia arriba, cuyo efectos provocaron volver a mojarme como antes que entráramos al motel.
Una vez en la pieza, se tira el sofá que había en la habitación y me dice ya putita haceme un baile erótico, coloco música y le empieza a bailar como una chica bailarina, lo hago suavemente, saco mis prendas una por una hasta quedar desnuda, mi excitación se reflejaba en cada poro de mi cuerpo, yo solo deseaba sentir su pene rompiendo todo mi interior, una vez que estaba totalmente desnuda el me dice camina como una perrita en celo hacia mi, me pongo en cuatro y camino como me indica, el juego cada vez me excitaba mas, me dice desnúdame putita, me iba a poner de pie cuando me dice: hazlo como la perra que eres, primero le quito le saco la chaqueta, sigo con la camisa, mmmmmmmmm tenia buena espalda y buen pecho, le beso sus tetillas mmmmmmmm que rico como se mueve, eso me excito mas, bajo con mi lengua por su ombligo hasta llegar a su pantalón, me acomodo bien, le saco los zapatos, las calcetas, saco su pantalón y por ultimo su calzoncillo, mmmmmmmmmmmm casi me desmayo, este hombre no puede tener tanta verga a su edad, fácilmente debe medir mas de 20 cms su grosor y firmeza me provocaban mas y mas, una vez los dos desnudos, me dice ya perrita, ahora hazle lo mejor que saben hacer las rameras como tu, sin mas ordenes tomo su pene y literalmente se lo devoro, lo chupaba, besaba, lo apretaba, el solo gemía y me trataba como una puta, me fascinaba cuando me echaba sus huevos a la boca, los sentía grandes y los pelos me daban un placer único, abre estado unos 20 minutos mamando esa fuente de placer que me dice ya abre toda tu boca de putilla apenas hago caso, lanza su primer chorro mmmmmmmmmmmmmm que placer mas grande, un cantidad leche impresionante salió al igual que el segundo y tercero, después empezó a bajar hasta que dar solo en impulsos, yo estaba feliz con su leche, después que se la limpie bien, me pone en el sofá y me come mi coño mmmmmmmmmm este hombre si que sabia comerse un coño y a su corta edad sabia lo que hacia, me comió mi coñito durante unos 15 minutos, cuando me vine lo hice en su boca mmmmmmmmmmm que orgasmo mas maravilloso me hizo tener.
Apenas termine de venirme me dice ven putita ven a sentarte en tu juguete que te hará la puta mas feliz mmmmmmmmmm, se acomoda en el sofá, cuando ya esta listo me dice ya perrita, me acerco mientras el toma su pene y lo pone en 90 grado, estoy sobre el y empiezo a bajar mmmmmmmmmmmm que grande la cabeza que tiene, siento como me abre y como entra uuuuuuuuuuuuuuf mientras el amasaba mis pechos, me siento en todo su pene, lo sentía enorme y largo, estaba llena y abierta, quedamos frente a frente, me mira a los ojos y me dice «tu si que eres una puta», luego empieza con el vaivén, mas loco que había tenido hasta entonces, mientras yo bajaba el subía, lo cual me hacia incrustar su pene dentro de mi, yo estaba feliz, no se cuanto tiempo estuvimos así, yo me vine mas de dos veces, mientras me tenia así, no dejaba de decirme lo garra y puta que era, me apretaba, mordía y besaba los pechos, después de mi tercer o cuarto orgasmo me pone a lo perrito y me la clava, mientras no dejaba de dar palmadas en mis nalgas provocando dolor y placer, estuvimos así por largo rato hasta que el acabó dentro de mi, no se cuanto orgasmos tuve, el hombre manejaba su aparato como nadie, tuve que pedirle que acabara porque yo ya no podía mas, uuuuuuuuuuf cuando acabo su chorros fueron tan potentes como cuando se lo mame, se vacío completamente dentro de mi mmmmmmmm el orgasmo que tuve con solo su corrida me parecía crear vacíos que me hacían doblarme de gusto, después que termino de acabar su pene seguía rígido, lo empezó a mover dentro de mi, provocándome otra oleada de placer menos mas que cada vez que hacia eso empezó a perder su rigidez al final quede muerta en la cama y como el me dijo: «Así me gusta dejar a las perras de mis enemigos, como unas simples y asquerosas putas» no le dije nada, entendí que era una puta, pero el gozo nadie me lo quita .
Al motel entramos cerca de las 4 salimos a las 10 de la mañana, me abra dado duro hasta cerca de las 8.
Me fue a dejar a la casa, mientras me llevaba me pregunto que iba hacer en la tarde, le dije que nada, me pregunto si me gustaría tener una tarde de sexo, no sabia que responderle, con la ración que me había dado no quería mas por ahora, le dije que bueno, me dice tu sabes donde queda mi casa te espero a las 6. Ok, le dije, a esa hora estaré allá, pero eso merece para un segundo relato y al igual cuando mi ex me pillo sentada en la verga de su mejor amigo, lo único que les contare ahora que me presente a las 6 de la tarde en casa del enemigo de mi ex, vestida con un vestido corto suelto y debajo solo una tanga tan o mas pequeña que la tenia puesta con la tenida azul, la cual no sorprendió a mi amante, porque me dijo que todas las putas visten como yo cuando les gusta la verga.