Cuando regresaba a casa
Volvía de mi trabajo como les dije en anteriores relatos soy paramédico, como mi auto estaba en el mecánico un compañero de trabajo me paso a dejar.
Me dejo en la esquina de mi casa y se fue.
La calle donde vivo es un poco oscura ya que existe una arboleda que se extiende a varias cuadras y las ramas cubren la luz del alumbrado público.
Cuando iba como a media cuadra antes de llegar a mi hogar diviso a una persona que estaba supuestamente orinando en un árbol, le mire y tenia la verga erecta y de considerables dimensiones como de unos 20 centímetros y muy gruesa.
Me miró y dijo ¡¡¡no te gustaría tocar este pedazo de carne!!! y agarrándome de un brazo me atrajo hacia él, mire para todos lados y no se veía un alma, deje mi maletín en el suelo y le agarre la verga para comenzar a masturbarlo suavemente, mientras lo hacia comencé a mirarlo tendría como unos 30 años , algo gordo, sin panza y muy peludo.
Me dijo sabes que un amigo me dejó muy caliente hace un rato (note que estaba ebrio), continuo diciendo; el muy maricón me hizo mamarle la verga prometiendo luego hacérmelo a mí, pero cuando acabo en mi boca, me golpeo y se fue dejándome caliente es por eso que tu me encontraste tratando de satisfacerme solo, pero tu me vas ayudar verdad, te prometo que luego te recompensare, no dije nada solamente le seguí masturbando hasta que me tomo la mano y me dijo ¡¡¡quiero que me la chupes!!!.
Miré para todos lados para verificar que no viniera nadie y me arrodille, abría sido una lastima no tener aquella verga.
Acto seguido se la comencé a chupar y desabroche mi pantalón y me masturbe suavemente, mientras Jaime como dijo llamarse, jadeaba de gusto, era tan grueso su miembro que no me entraba, pero hice el intento hasta meterla casi toda, mi boca casi se me partía.
Al parecer estaba bastante excitado porque agarro mi cabeza y acabo dentro de mi boca, lanzando tanto semen que no pude tragarlo todo y se me escapo un poco por la boca.
Me levante con leche en mi cara y él me la sacó con su lengua y me beso compartiendo su propia leche.
Sabes me dijo soy casado y mi amigo también, eso de chuparnos las vergas fue por curiosidad pero, te digo francamente me gusto y me gustaría hacértelo a ti en agradecimiento.
Me abrazo y luego se arrodillo y me bajó los pantalones junto con los calzoncillos hasta los pies y lentamente fue acercando su boca a mi pene pasando la lengua por el glande para posteriormente introducirlo en su boca, al parecer era su primera vez porque me apretaba con sus dientes, hasta que le dije que tenía que hacerlo suave, hasta que aprendió un poco ya que dejó de apretarme, hasta que en cierto momento me dijo quisiera que metas tu pene en mi culo para experimentar esa sensación, que desde hace mucho deseo.
Me sentía un poco nervioso de que alguien nos viera, pero como estaba «tan caliente», acepte y apoyándose en el árbol que estábamos le dije que se quitara los pantalones para que abriera bien su hoyito, le tuve que ayudar ya que estaba bastante ebrio (curado le decimos en Chile) me arrodille y le mame un rato el culo, mientras él jadeaba, al parecer le estaba gustando, luego alterne metiendo un par de dedos, se sobresalto pero casi al instante empezó a mover el culo en señal de agrado hasta que me dijo ¡¡¡ ya pues mi macho métalo luego que estoy deseando ese pico en mi culo!!!.
Acto seguido le puse la punta y se arqueo en señal de dolor, pero al instante le penetre completamente dando un grito de dolor para luego comenzar a mover su trasero que la verdad me calentó aun más.
En cierto momento estiro más atrás el culo para masturbarse mientras le culiaba salvajemente, él jadeaba de gusto diciendo rompe este poto que ahora es tuyo, no aguante mucha más y se lo hice saber y quise sacarlo para acabar a fuera, pero él con voz entrecortada me dijo ¡¡¡ dame toda tu leche que quiero sentir como quema mis entrañas, y justo en ese momento apretó mi pene su esfínter, esa era la señal que estaba acabando y acelere mi ritmo para llenarlo de mis líquidos calientes.
Rápidamente me subí los pantalones y le ayude a él también porque lo mareado no se le quitaba y menos con lo embriagador del momento.
Nos sentamos en la cuneta de la calle y nos pusimos a fumar un cigarrillo, me dijo que se llamaba Jaime y que era casado y que desde hacia un tiempo que conversaban con un compañero de oficina sobre tener una experiencia gay y que ese día se habían tomado unas copas para darse más valor, pero, que su amigo se arrepintió a la hora de chupárselo a él.
Finalmente me dijo que le había gustado mucho sentir mi verga en su culo y que si podíamos repetirlo otro día y justamente que le estaba diciendo que si, cuando aparece un vehículo y se detiene frente a nosotros y se baja un hombre como de unos 28 años, muy delgado y alto como 1.
85 y saludando le dice a Jaime » disculpa amigo que te haya dejado solo » y le tomó por un brazo y se lo llevó hasta el auto sin dejarlo siquiera despedirse.
Como se darán cuenta esa fue la única vez que le puede enseñar algo a Jaime, pero, cada vez que llego a mi casa voy despacio por mi calle en una de esas me está esperando.