Corrompiendo una familia: Ana y Marcela
Primera Parte: Empieza la Joda
Realmente nunca supe como pero ese Poder estuvo ahí en lo más profundo de mi mente.
Me llama Adrian, hacía cosa de 1 año y medio mas o menos yo vivía en Buenos Aires ahora vivo en Europa tengo un trabajo normal viajo mucho de un lado a otro por razones laborales, eventualmente vuelvo a mi ciudad de la infancia.
Soy un tipo normal mido 1,70 no soy ni gordo ni flaco mas bien musculoso, tengo ojos marrones, pelo negro y piel blanca…osea común.
Hace 2 años volvía de una de mis búsquedas de trabajo cansado de un dia (más)de no conseguir trabajo. Seguramente se preguntaran como puede ser que no consiga trabajo si tengo poderes mentales, bueno la verdad es que no los tenía muy refinados en ese momento y no se porque trabaja de a ratos…hay temporadas en las que puedo caer desmaya tratando de dar la menor orden a una mente… osea cosa de no fiarse. El entrevistador puede estar preguntado » tiene algún impedimento de salud para estas tareas» y al mismo tiempo que le trato de meter la orden CONTRATAME… no solo no conseguí meterla sino que los ojos se me ponen en blanco, me desmayo y me sale sangre por la nariz.
Bueno volvamos a la historia… ese día de verano no había probado los poderes así que no sabía cómo andaban.
En la estación me encontré con la hermana de un amigo, Marcela, que antes lo veía bastante y ahora cada muerte de obispo. Siempre fue muy linda con un culo que muchas mujeres envidiarian por su perfección, pechos medianos, ojos marrones, piel blanca y pelo castaño claro.
La saludé subimos al tren ella se sentó del lado de la ventana, yo del pasillo.
-¿Como esta la familia?
-Bien…Bien ahi andamos- Estaba medio cortante, pero le segui hablando.
– Tu hermano está saliendo con… ¿como se llama? Maria ¿no?
– Si,Si-
Que Cortada de mierda antes no era así… porque no sos más amistosa.
Al instante empezó a preguntarme por mi familia amigos, etc. mientras hablaba me di cuenta de que hoy estaba en un dia bueno y me entraron las ganas de sacarle provecho a la situación.
Rápidamente me acordé de las amigas todas bastante lindas de buenas curvas como ella pero un poco asquerosas…
Empecé a maquinar cómo sería… quería que fuera un juego.
Sentía que estaba en una buena época para usar mi poder, lo presentía.
Inmediatamente empecé a sondear su mente, estaba pensando en lo que haría mañana.
«mañana tengo que quedarme en casa por suerte así puedo descansar un rato de los exámenes».
Exelente pense yo sabía que los padres trabajaban y el hermano estaba de vacaciones, ella sabía que no lo veía hacía bastante tiempo a Martin (el hermano) asi que decidi dejar una par de órdenes y bajarme para no darle tiempo a que me diga que Martín estaba de vacaciones, sino no tendría excusa para aparecer por la casa mañana.
Dije que me olvide una carpeta en el centro y me baje en la primera estación a la que llegamos.
Antes de irme le deje la orden de que me tuviera la misma confianza que a su mejor amiga, que se sintiera cómoda y segura en mi presencia, y que se empezara a interesar sexualmente en mi.
Por supuesto estas órdenes hay que reforzarlas, pero por ahora me iba a servir…
Al dia siguiente tome el tren llegue a la casa, con la excusa de devolverle un CD del hermano que estaba vegetando en mi casa.
Toque timbre y unos largos segundos después abrió.
-¡Ay! mi hermano no está, se fue de vacaciones a la costa con los amigos – dijo Marcela.
-Uy que mal suerte que no vine nada más que para esto…-
«¿vino a verme a mi?,…. NO, no seas tonta Marcela» Pensó
-…tenía que ir lo de Cristian y dije ya que paso le dejo el Compac…bla,bla,bla-
Había funcionado bastante bien, mejor de lo que esperaba.
-¿No me podrias dar un vaso de agua?
– Si pasa-
Pase a la cocina bastante linda la habían remodelado hacia poco tiempo, la recordaba de otra forma.
Abrió la heladera y se agacho para buscar un jarra que al final estaba en el estante superior, se estaba mostrando, me hice el estupido por unos minutos y despues comence a atacar.
Lo mejor de todo es que no me tenia que esforzar demasiado sabía que era mía.
Eso le quitaba un poco la emoción.
Ella se apoyó en la mesada mientras tomaba un vaso de agua.
«Este tipo es un estúpido, estoy acá y no me dice nada…bueno tampoco es un boliche» pensó ella
-Y como andan tus asuntos-le pregunté
– Todo bien, tranquila-dijo.
Me apoye en la mesada y empecé a hablar más cerca.
Exitate un poco le ordene.
Después de unos segundos se empezó a revolver un poco inquieta.
Mientras hablaba me acerqué deje de hablar me acerque, ella me miraba entre asustada y exitada.
La bese, al instante ella respondió con una lengua inquieta y pasión.
Empecé a acariciarle la preciosa y redonda cola, acto seguido subi una mano a los pezones que ya estaban duros y erguidos.
Los Senos no eran grandes, pero tenían una atracción indescriptible.
Comencé a atacarlos sin piedad masajeando, pellizcando.
Ella empezó a gemir.
«No para» penso pero no dijo nada y después no pensó. Cuando estaba por acabar de excitación que tenía la deje.
– Para un poco…tus viejos- Yo sabía perfectamente que no estaban. Lo que queria era dejarla exitada.
-Están trabajando no vuelven hasta el mediodía- Empezó a besarme otra vez.
La hice descansar un poco y seguimos un rato franelanado yo le había sacado la camisa y el corpiño y le chupaba los senos mientras con la mano castigaba su clítoris. Gemía como una loca. Cuando estaba por acabar me detuve.
«¡No me puede dejar así!» pensó
– Me tengo que ir tengo una entrevista en un negocio para un puesto…bla,bla,bla-
Mientras le anotaba el teléfono le dije -llámame hoy a partir de las 7 y arreglamos algo, y (orden mental) «no te masturbes y no le des bola a ningún otro tipo»-, la necesitaba bien exitada para que el trabajo me fuera más interesante.
Me fui a la capital y en un dia consegui un trabajo para el verano con pocas horas en una oficina cerca de la casa de Marcela, cuando terminaba mi turno me daba una vuelta y seguia exitandola sin hacerla acabar, eso la estaba sacando de quicio. Necesitaba sexo urgentemente pero ni siquiera podía masturbarse.
Una semana después tuve piedad de ella.
Llegue a la casa mandé a los viejos a la trastienda del negocio a que cogieran por unas horas.
Un dia con el calor que hacía casi se desmayan por la deshidratación.
Después de eso los mande al cine porque había aire acondicionado, y quizás se los llevaba la policía y me dejaban más tiempo.
Bueno volvamos a ese dia creo que fue un miércoles…
Llegue a la casa mande de paseo a los viejos (mentalmente claro).
Ni bien se fueron se me tiró encima.
Mientras la besaba ella gemía por la excitación que le producía mi lengua, (no voy a mentir a mi tambien me calentaba pero no tanto, me podía descargar de alguna manera, ella no ) finalmente acabó nomás transando conmigo. «mierda la exite demaciado» pensé.
Ella ahora estaba más tranquila pero yo no.
Así que de una mientras la tocaba la tire arriba de la mesa le saque el short y la tanga, la remera y el corpiño se los había sacado al principio como siempre.
Ella pensaba «No no » pero le di la orden mental de callarse.
Empecé a besarla en la boca, en el cuello, ella gemía, después en los senos, los senos se pusieron duros como piedras seguí bajando jugué con mi lengua en su ombligo.
» NO, por favor soy virgen » pensaba mientras gemía.
Me daba cuenta por sus pensamientos que sentía que su cuerpo la controlaba a ella. «Virgen ??? esto es rarisimo » o sea esta mina tenia 17 tuvo vario novios cada uno más oscuro que el otro y con una pinta de Chorro (ratero) que se caían (no soy racista ni nada pero todos eran así ¡en serio!) y todavía era virgen (???) y eso que le metian mano aca y alla, ahora entiendo porque la largaron todos y porque tenía fama de calienta vergas…»
Bueno «pensé «voy a tomar venganza por los compañeros sufrieron dolor de huevo por tu causa puta»
Quería que de ahora en más contará los días para volver a tener una verga dentro por eso decidí ponerme los pilas y darle una sesion de sexo que no olvidara jamas.
Seguí bajando hasta donde comenzaba el prolijo triangulito que era el preámbulo de su sexo. Jugue con los vellos.
Ella gemía y pensaba «No!», pero no decía nada solo gemía.
Se veía su pecho levantarse por el aire que trataba de respirar como si se estuviera ahogando.
Le abrí la piernas al principio me parece que no entendio bien lo que quería hacer y se asusto un poco.
Le comencé a pasar la lengua por los labios y se sobresaltó un poco después despacio y con un poco de dificultad le abrí los labios y comenzó el primer asalto.
Empecé a lamer, meter la lengua por su gruta, trazar círculos en su clítoris.
No podía tomar aire un momento que ya me miraba con cara de «estoy-por acabar-seguí-YA!».
Eso era lo que quería que por ese momento dejará de ser un ser pensante para ser una ninfómana. Entre otra vez y castigue el clítoris sin piedad. Y gritando, convulsionando, haciendo temblar la mesa a cabo (contadas veces alguna mujer gritó mientras acababa conmigo, la verdad tampoco me importaban mucho) largando más líquidos de los de los que la mesa podía contener goteando en el piso.
Estaba exhausta de tanto acabar me acerque a besarla, me dolio la lengua de tanto chupar, y en mi dolorida boca le pace sus propios jugos que probó y trago sin decir una sola palabra.
Ella pensó por un momento que el show había acabado cuando le di mi mano para que se parara. En el mismo instante en que se bajó de la mesa.
La lleve a su habitación (tendría que haberla llevado al cuarto de los viejos tenia mas morbo pero en ese momento lo único que pensaba era en ponerme cómodo y el cuarto de ella estaba más cerca).
-¿Q..Que vas a hacerme?- pregunto sabiendo lo que venía.
No era necesario tener poderes mentales para saber que tenia panico a que la desvirgen.
Así que la tire sobre la cama, me puse un preservativo (antes eran buenos ahora se rompen asi nomas), apunte y empecé a meterla despacio.
Primero le gusto poco, cuando llegue al punto de no-retorno.
Me miró y la mire un segundo baje vista a su sexo me reí por dentro y de un golpe fuerte se la enterré todo.
-AAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!- Grito.
En ese momento de una obra en construcción que estaba enfrente se escucho. – Deje’ e mata’ a ese gato-
No pude más y me empecé a reír a carcajadas, ella se puso roja como un tomate. – Eh, che em vo dale guacha- Casi me cortan en chorro, en ese momento me di cuenta que debería estar gritando como nunca en la vida porque los obreros no nos podían ver dudo que supieran de qué casa era la fiesta.
Pense «por los muchachos de la obra y empecé a bombear rápido».
La sorpresa le había bajado un poco la temperatura pero empece otra vez a excitarla (mentalmente y corporalmente).
Ella tenía los ojos en blanco las gotas de sudor cubrían el espectacular cuerpo de Marcela.
Ella movía la caderas como poseída por un instinto animal.
Cinco minutos después yo acababa, ella al sentir como el preservativo se llenaba de semen tuvo un orgasmo larguísimo echando grandes cantidades de flujo.
Me relaje un poco, ella parecía que no quería más yo no me quería volver a casa con forros, todavía me quedaban dos, saque un poco de semen del forro y se lo di a probar (así se iba acostumbrando) ella al principio lo miro con un poco de asco pero despues limpio mis dedos sin rechistar.
Después de me acomode otra vez entre sus piernas y la segui penetrando.intente sondear su mente pero no había otra cosa más que pensar en mover las caderas para obtener más placer.
Despues de acabar ella se quedo dormida exhausta yo encendí un cigarrillo (que rico es un cigarro despues de coger…) decidí que me interesaban dos tipos de marcela la «Marcela Real» que saldría conmigo (le tome cariño que se le va hacer…) sería un ser humano independiente y la «Marcela esclava que obedeceria todas mis ordenes sin rechistar. Y eventualmente introduciria características de la Marcela esclava a la Marcela Real.
Este era el momento ideal para empezar nunca lo habia echo esto de «hipnotizar» una persona con mis poderes pero no debería ser muy dificil.
-Marcela despertate!-
-¡¿Eh?! ¿Que pasa Adrian llegaron papa y mama?-pregunto
-No nada que ver- Comencé a ver el sector de la conciencia y me di cuenta lo facil que era ponerla en trance, inmediatamente baje el interruptor de su conciencia.
-Marcela podes escucharme-dije
-Si Adrian- dijo lacónicamente de una forma que me produjo una sensación de poder-excitación.
indescriptible.
– Muy bien quiero entres en este estado cada vez que escuche de mi la palabra «Marcela Modo Esclava»
¿Entendiste?-
-Si.
-Muy bien ahora quiero que te despiertes y te sientas descansada, ordena todo, limpia tus flujos de la cocina… ¡Ah! y lava las sábanas están hechas un desastre, DESPERTA-
-mmmmhhh- se desperezó- me siento genial… Voy a limpiar todo esto porque esta echo un desastre y…-
-Marcela Modo Esclava-
Los ojos se le pusieron vidriosos, me miraban pero al mismo tiempo no fijaban la vista en mi.
– Muy bien ahora quiero que mientras limpies pruebes los fluidos de los dos y te parezcan ricos y te exciten por unos momentos. Y de ahora en más para vos cuando este en el modo esclava me vas a tratar de usted y me vas a llamar Amo- (no digan que ustedes en mi lugar no lo harían)
– Si mi Amo.-
-Exelente, Ahora Chupame la pija-
-Si mi Amo-
-Esperá un poco- «Voy a tener que aceitar un poco las respuestas»pense
-Cada vez que te una orden cambia un poco las repuestas…que se yo «Existo para obedecer», «Con placer amo»-
-Si Amo.-
-Bien Ahora Chupame la pija-
-Como ordene Amo-
Realmente no lo hacía nada bien termine usando su cabeza como si usara una vagina, no trago el esperma y le ordene que lo lamiera del piso cosa que hizo de inmediato.
Realmente tenía que educarla, pero eso seria otro dia. La desactive y en unos minutos había por lo menos disimulado el desorden decidí que tendría que hacer algo para poder coger todo el dia sin que me molestaran.
Bueno pero ahora tenía que ir a jugar un partido de cartas con unos amigos y ya me había sacado la calentura le dije que mañana no hiciera planes de 12 a 16 y me fuí.
Segunda Parte: Poniendo movimiento a la Situación
La deje descansar un poco y después durante más o menos una semana seguimos revolcandonos por la casa dia por medio. Ya se le había pasado el dolor y le había agarrado el gustito al sexo.
Durante esa semana comencé al implementar la segunda parte del plan.
Como podrán darse cuenta no maneje las cosas con el morbo con el que tendría que haber manejado la situación, pero es… como les podría decir Marcela era la mujer con la que quise sacarme la calentura y le termine tomando afecto, y en parte me jodia un poco la ¿conciencia? (si tenía alguna).
Bueno me imagino que no les interesan esas cosas pero se que alguien siempre se lo pregunta.
La situación hasta el momento era la siguiente Marcela creía que yo era su novio (a mi me encantaba seguir la farsa en ese momento), en el modo esclava la tenía sometida y experimentaba bastante metiendole ideas subliminales, por ejemplo la hacía mantenerse siempre bien afeitado todo el cuerpo del cuello para abajo.
Le sugerí que cambiara la mayoría de su ropa interior, ahora usaba los más excitantes y costosos conjuntos de lencería.
Había cambiado la medibacha por las medias de liga.
Bueno la casa es así yo estaba yendo a la casa un día cuando mire hacia el negocio de los padres, era una papelera, en el negocio estaban los padres y la empleada, era una mujer de unos 30 años pelirroja (teñida) ojos marrones y bastante generosa en curvas, era la primera vez que la veía.
Los padres me decían que le lleve un paquete que tenia no se que cosa, y yo estaba sondeando la mente de todos ellos.
«Mañana viene un pedido y bla,bla..» el padre, Carlos
«Que ganas que tengo de irme a casa» la empleada, María
«Hoy es nuestro aniversario así que se la voy a chupar como nunca» la madre, Ana.
En ese momento me di cuenta de que mi suegra no estaba nada mal a sus 40 años no tenía arrugas, los hijos que tuvo ni se le notaban en el cuerpo, es más le habían desarrollado los pechos, y los más importante sabía chupar pijas.
Me pareció lo más morboso que la madre le enseñe a la hija a chupar, de paso se unirá a mis jueguitos.
«DUERMAN» Todos se quedaron duros.
-Maria, pone un cartel de cerrado… me fui a comer…, cualquier cosa-
-Sí- dijo monótonamente
-Ahora los tres me siguen a la trastienda-
Me siguieron a paso normal.
La trastienda era un lugar espacioso de unos 10 por 10 metros con cajas aca y alla una pequeña cocina de 2 hornallas, una heladera vieja, una mesa para cuatro personas detrás de una puerta había un cuarto que lo usaban de dormitorio cuando recién se casaron y vivieron en el local hasta poder comprarse una casa.
Tenía una cama de dos plazas que si no me equivocaba era la que usaban cuando los mandaba de paseo.
Me senté en una silla destartalada que estaba en un rincón y pensé durante unos minutos.
-Bien… Ana-
-Si-
-De ahora en más cada vez que yo diga «Ana modo esclava» vas a entrar en este estado en el que vas a obedecer todos mis deseos, vas a ser mi esclava y me llamaras amo-
-Sí Amo-
Una cosa que no explique antes es que Marcela en el modo esclava era muy aburrida entonces lo que hice fue hacerla pensar un poco más, podía dar sugerencia, hablar como una persona normal, pero siempre siendo mi esclava. En el caso de la madre hice lo mismo.
-Muy bien ahora, Carlos y Maria, los dos de ahora en más serán amantes cogerán antes de abrir, durante el almuerzo, después de cerrar y vos Carlos no te apareces en tu casa hasta las 9-
-Si-
Perfecto ahora tenía la casa par coger todo el dia.
-Maria ¿estas casada, tienes novio?-
«Para que carajo pregunto «pensé» eso no cambiaría nada»
-No vivo con mis padres-
-Bien. Los no podran hablar de su relación con otras personas que no sean ustedes, no irán a hoteles ni nada solo la trastienda , y disfrutaran mucho-
-Si-
-Bueno vos Ana no le vas a dar importancia a lo que pase con tu marido-
– Y vos Carlos a lo que pase con tu Mujer, tampoco-
Los lleve otras vez a al negocio, y los desperté. Induje a Ana a que saliera del negocio conmigo para su casa por supuesto no le importó al marido y ella no sabía bien porqué lo hacía.
Ana a pesar de sus 40 años estaba muy buena los pechos y la cola estaban erguidos tenía ojos celestes y se mantiene físicamente muy bien por los aerobics que hacía todas las mañanas.
Antes de llegar a la casa la active otra vez. Y le dije
– De ahora en más cuando estás despierta me obedecerás sin importar la orden que le dé.-
– Si mi Señor-
Entramos y fuimos a la habitacion de Marcela, ella estaba escribiendo algo después supe que era su Diario una Psicóloga le recomendó que tuviera uno para volcar ideas, etc. Yo lo encontré muy interesante después.
– Mamá qué haces acá-dijo con marcada frustración al notar que no podría recibir su cuota de sexo si su madre estaba hay.
– No te preocupes ella viene para la mismo- dije
-¿Qué?- dijo ella pensando que la estaba jodiendo.
Ana sonrió y le dijo – Viene a entrenarte hija así podes servir mejor al Amo-
Con cara de miedo-sorpresa se levantó tirando la silla. -¿¡Qué decís!? ¿¡Que PASA!?
-» Marcela modo esclava «-dije- Basta de Chachara-
Se arrodillo ante mi, puso la cara casi contra el suelo y extendió sus brazos
– Amo, sus ordenes –
– Primero que olvides la conversación de recién-
-Sí mi Señor-
– ¿Desea que le de placer Amo?- preguntó con ojos brillantes
– No hoy solamente vas a ser una observadora-
-Como Ordene Amo- dijo con desilusión
– Hoy vas a aprender a chupar vergas-
– Gracias mi Señor-
Mejoro un poco la expresión.
– Ahora saquense la ropa-
– Obedecemos Amo- dijeron al unísono
Se fueron sacando lentamente como si fueran bailarinas nudistas al compás de una suave música. Las dos estaban preparadas, en modo esclava, para excitarse rápidamente, tener múltiples orgasmos y disfrutar con cualquier contacto corporal.
En ese momento me di cuenta de lo parecidas que eran las dos en cuerpo y curvas.
Eso me puso más al tope, osea quien no va estar tremendamente excitado teniendo a tu merced a madre e hija, las dos con cuerpo para un crimen y que compiten para ver quien es mejor esclava.
– Parence las dos juntas –
Se pararon juntas y Ana miro a el cuerpo de Marcela y me miró con gesto de desaprobación Marcela hizo lo mismo con el cuerpo de su madre.
En es momento sondee sus mentes para ver que pensaban, quería ver el nivel de competencia que había entre ellas.
» Esta bastante bien para su edad, pero tiene los senos un poco caídos el Amo me eligió a mí» pensó marcela. Eso tenía poco de verdad los pechos estaban perfectos en su juventud debían ser un fruto delicioso.
» Le falta desarrollarse el Amo preferira mi cuerpo al suyo» Igual que Marcela, Ana descalificó a su competidora.
A mi me interesaba más que ellas actuaran como compañeras por ahora.
– Amo eligeme a mi para darle placer primero, no a Ana- dijo Marcela.
«Le dijo Ana no mamá… que raro» pense
– No Amo, Marcela no tiene el conocimiento sexual que tengo yo-
-Muy bien basta de cháchara-dije. No quería histeriqueos, ya eran bastante histéricas en el «modo real». Me decidí a cambiar su actitud. En el «modo real» me tenia podrido con sus peleitas de ahora en más se iban a llevar bien. En «modo esclava» me divertía ver como compiten.
-De ahora en más ,fuera de trance, se van a llevar bien, basta de comparaciones, basta de competencia. en el modo esclava van a mantener un poquito de rivalidad de amigas-
Me divertía que mantuvieran cierta competencia por ver quien me servía mejor, pero en la vida real la vida real Marcela y Ana eran insoportables.
Por eso Marcela fue a una psicóloga y le ayudo (poco) con un complejo que tenía, el cual esta bastante explicado en su diario.
– Como deses Amo- Respondieron.
– Muy bien, Ahora Ana enseñale a tu hija como tiene que usar la boca-
– Si mi Señor – dijo con entusiasmo.
– Esperá…vamos a tu habitación a estar más cómodos-
Fuimos a la habitación de Ana y Carlos era amplia, con baño privado y bastantes lujo. Me tire en el medio de la cama y ellas se colocaron al los pies esperando mis órdenes.
– Ana, empeza-
Se acercaron a mi Ana a la derecha para chuparmela y Marcela a la izquierda para no perderse detalle de la operación.
Saco mi miembro y descubrió la cabeza con los labios. Le corrí el pelo, que no era muy largo llegaban hasta los hombros, para tener mejor visión del trabajo. Levantó la cabeza y le dijo a Marcela.
– Tenes que usar los labios, la lengua, el paladar y los dientes solo para hacer cosquillas-
Realmente no me molesto que parara en ese momento, estaba por acabar y no quería. Recién empezaba y chupaba mejor que una profesional a la que le ofrecen un millón de dólares.
-¡Ana!, ¡no descuides al Amo!- dijo Marcela.
– Disculpe mi señor no merezco servirle- dijo Ana arrepentida.
– Esta bien. Te di la orden de explicarle- dije
– Gracias por su piedad Amo- respondió y regreso a la tarea de darme placer, también ellas disfrutaban porque fueron preparadas para gozar como si ellas recibieran.
Retomo la tarea, la recorrió desde la punta a la base y mientras me acariciaba los huevos se la trago toda y comenzó a frotarla contra el paladar.
Después la saco un poco y empezó a recorrer la cabeza con movimientos circulares de la lengua mientras la aprisionaba con los labios y movía su boca hacia adelante y atras.
Marcela tenía los ojos entreabiertos y se masturbaba lentamente. Ana con una mano se tocaba y gemía mientras me sobaba la verga.
Finalmente luego de unos pocos minutos acabe como nunca, al mismo tiempo Ana tuvo un brutal orgasmo, las piernas y las sábanas estaban llenas de sus fluidos.
Ana empezó a tragar y tragar. Nunca tuve una idea clara de cuanto acabe, pero debió ser mucho por lo que duró y el tiempo que Ana estuvo tragando.
– Dejale un poco a Marcela- dije.
Ana se incorpo, respiraba entrecortadamente su cuerpo estaba cubierto de sudor, sus piernas estaban casi totalmente cubiertas de fluidos y de su boca caía un hilito de semen.
Marcela mientras estaba desconectada de la realidad seguia tocandose y no fue hasta que noto la presencia de Ana hasta que estuvo a menos de 30 cm de ella.
– ¿Ana?-dijo sin dejar de tocarse.
Como respuesta Ana acercó su boca a la boca Marcela, ella entendió inmediatamente y pego su boca a la de su madre.
Comenzó a sorber meter su lengua en la cavidad para intentar atrapar todos los líquidos que tragaba rápidamente.
Finalmente se separaron. En ese momento vi la posibilidad de hacerlas tener relaciones lésbicas pero en ese momento tenía otros planes.
– Quiero probarte- le dije a Ana
-¡Gracias Señor!-
Inmediatamente se acomodo sobre la cama, Marcela desde afuera miraba un poco celosa.
Me puse sobre ella y la empale de un solo envión, estaba tan lubricada que la clave hasta en fondo sin problemas, en ese instante tuvo un organsmo (así la habia programado).
Rápidamente empecé a bombear ella sabía mover las caderas para producir más placer. Realmente sabía moverse, en cuestión de minutos comencé a sentir como subía el semen por mi verga ella también,me miro a los ojos se relamió el labio superior y tuvo un orgasmo espectacular al mismo tiempo que yo le llenaba la vagina de semen (jamás pensé que tuviera tanto esperma).
Ana estaba tirada exhausta respirando despacio.
– Bueno Marcela es tu turno-
– ¡ Gracias Amo!- dijo entusiasmada.
– Apoya las manos contra la cómoda-
Obedeció con cara de intriga.
Fui hasta Ana que estaba tirada semi-consciente en posición fetal sobre su cama necesitaba lubricante. Puse mis dedos dentro de ella y al instante se agito en otro orgasmo sin necesidad siquiera de masturbarla.
Marcela seguía la operación atentamente por el espejo de la cómoda. Volvi con Marcela que no se imaginaba lo que le iba a hacerlo, o quizás no quería imaginarse.
– Abrí la piernas- dije.
Separas la piernas inmediatamente. Lentamente metí uno de mis dedos por su agujero. Marcela cerró los ojos y empezó a gemir, le estaba gustando.
Mientras la estaba dilatando Ana se recuperó un poco y se acercó, sabía que necesitaba más lubricante. Esta vez cuando recogí un poco de fluido no tuvo un orgasmo se había calmado bastante.
– Traeme un forro Ana-
– Como ordene Amo-
Fue hasta la mesa de luz de su marido y trajo un forro (por supuesto Carlos no se dio cuenta, en los siguientes días no atendiendo a su señora como debía y si atendió a María la empleada, su amante)
Me puse el preservativo y sin darle tiempo a acostumbrarse se la enterré hasta donde pude y empecé a empujar sin importarme sus gritos mezcla de dolor y placer.
Me imagino que se preguntaran porque use forro para el culo si no lo había usado antes. Bueno la razón es que no quería «sacarla embarrada» si se embarraba que se embarre el forro.
-Aaahhhh!!! A..Amo por favor- Decía Marcela
Yo ni bola, seguí empujando hasta que estuvo toda adentro, pare por un minuto más o menos. Para que se acostumbrara un poco más a tenerla adentro, mientras me excitaba mirándola a ella a través del espejo como su pecho subía y bajaba, su nariz se dilataba y contrae con cada respiración y su boca semi abierta para poder conseguir más aire.
Atrás nuestro Ana miraba con satisfacción y se masturbaba mientras su hija era penetrada por atras.
Empecé a moverme lentamente Marcela tenía la vista perdida y gemía entre dolor y placer.
A una señal mía Ana sacó más fluidos y lubrico mi verga mientras salía del culo (ex-virgen) de Marcela.
Despues de unas cuantas mete-saca Marcela empezó a volver a si y disfrutar de la penetración.
– Sabia que le iba a gustar-dijo Ana con satisfacción- A mi me costo un poco al principio pero la primera vez pero le agarre el gustito rápido-
«Espero que la hija tenga los mismos gustos que la madre» pensé.
Luego de unos minutos Marcela empezó a disfrutar de la enculada.
-¿Ana tenes algun consolador?-pregunte
-Un vibrado mi Señor-respondió
-¿Sabes qué hacer?-
Los ojos le brillaron sonrió y contestó -¡Sí Amo!-
Rápidamente fue a un armario sacó una vieja valija que debe haberle servido en su luna de miel por lo vieja que estaba.
Volvió con un vibrador de unos 25 cm. Conecto un pequeño transformador y este al vibrador. Se acercó y, con lujuria y morbo, lo empezó a introducir en la cueva de su hija.
Marina abrió los ojos y dijo.
-A..Ana que me hacés-dijo entre gemidos un poco asustada.
A todo esto yo había recomendado el ataque al culo de Mariana. Que disfrutaba como loco agarrarla de esa cadera bien formada y empujarla mientras miraba su cara descompuesta primero por el dolor, luego por el placer y como su sexo chorreaba líquidos.
Ana introdujo todo el aparato y lo activó primero a minimo, las piernas de Marcela empezaron a temblar.
Empecé a sobarle los senos pellizcando, masajeando.
Marcela no podía más sus ojos se pusieron en blanco y empezó a moverse como loca mientras, gritando, tenía el orgasmo de su vida.
Yo no pude aguantar y acabar llenando su culo de leche.
A todo esto Ana subió al máximo el vibrador lo que le produjo a Marcela otro Orgasmo de menor intensidad que el anterior que terminó por acabar con sus fuerzas, y cayo al suelo en estado de semi-inconsciencia.
-Ana-
-¿Amo?-
-Quiero que pongas decente a tu hija, dale un baño, limpiale bien los agujeros. Despues limpiate vos-
– Como desee mi señor… permita que le de una sugerencia-
-Hablá-
– Yo estoy en el periodo quiero su autorización para poder tomar un anticonceptivo-
– No hace falta que lo preguntes no quiero que quedes embarazada-
– Gracias Señor…, y Marcela-dijo
– Yo me ocupo-
Después de que se limpiaron y ordenaron vinieron ante mi.
– Hemos terminado Amo-
-Muy bien vístanse…pero antes intercambien ropa interior-
Marcela tenía un conjunto rojo con flores bordadas también en rojo que era muy excitante. Ana en cambio tenía un conjunto de encaje blanco.
A las dos les entraron a la perfección Ana tenía un poco más de pecho y este corpiño le resaltaba más los senos y quedo muy sexi. Marcela usaba el conjunto de encaje que le daba más elegancia.
Yo las prefería más con los conjuntos originales pero seria interesante ver que pasaba cuando cada una se diera cuenta que usaba la ropa de la otra.
Les di órdenes para que despertaran a marcela le hice cree que tuvo una tarde de sexo como siempre y Ana que pasó la tarde en tareas de la casa y durmiendo.
Era divertido ver como Marcela se sentaba despacio sin entender porque le dolía tanto el culo.
Ana miraba y pensaba «Esta chica… Seguro que pasaron la tarde cogiendo como conejos mientras yo dormía….pero que sensación rara siento como si yo tambien hubiera cojido…. es mi imaginación»
Me fui a casa estaba cansado y mañana tenía que ir al trabajo.
Cuando pase por el negocio de los padres había un cartelito en la puerta que decía «YA VUELVO» sonrei y segui caminando disfrutando del viento fresco del atardecer, mañana seria otro dia.
muy largo y super malo malo no super malo puras mentiras nada mas fantacias muy estupidas solo un idiota la puede crer si es mi opinion ok ok y ok