Les voy a contar lo que me aconteció un fin de semana, pues verán que uno de mis primos me dejo a cargo su perro, por que no tenia con nadie mas que dejarlo, y yo de tonta pensando que se trataba de un perro faldero le dije que si, cual seria mi sorpresa al verlo llegar con un fabuloso doberman color negro encendido, que primeramente me dio miedo tener ese perro en casa, pero el me dijo que era muy tranquilo, entonces el se fue no sin antes decirme que lo había llevado antes al veterinario para que lo bañara y lo dejara limpio.

Pues sucedió que como era viernes, salí por la noche con un novio que tenia, yo tenia ganas de tener sexo con el, pero el quiso ir a bailar, entonces fuimos a una disco y la verdad estaba todo bien aburrido, y para colmo se le pasaron las copas y empezó de impertinente, hasta que me canse y le dije que me llevara a mi casa, ya estando en el estacionamiento, le dije que yo tenia pensado que esta noche tuviéramos sexo, a lo que el me respondió que solo pensaba en eso, a lo que le dije que si, entonces el en el asiento del conductor, se desabrocho el pantalón y saco su pene y me dijo: bien si tienes ganas, ahorita te voy a dar, entonces me tomo bruscamente del cuello, y yo opuse resistencia hasta que me bajo e hizo que me metiera su pene en la boca, y me empujaba durísimo hacia abajo, tragándome toda esa tranca, hasta el punto de casi hacerme vomitar, entonces me logre separar de el, me salí del coche y el gritándome que era una puta y que todavía no acababa de comerme su pene, pero afortunadamente paso un taxi que me llevo a la casa, no sin antes gritarle que no quería nada con el mas, me sentí un poco ofendida por el trato que me había dado, aunque me gusta el sexo en toda su extensión, pero siempre y cuando este yo de acuerdo.

Al entrar a la casa me lleve un tremendo susto al ver, al perro, se me había olvidado que estaba ahí, entonces agarre y me metí al baño me di una ducha y me senté en mi sillón favorito a ver la TV, pero en eso el perro se hecho en mis pies, y viendo una película que por cierto un poco mala, pero con algo de dosis de sexo, y con las ganas que había tenido en la tarde, me empecé a humedecer de momento vi al perro y con mi pie le empecé a sobar donde se encuentra su pene, que después de unos minutos dejo escapar una punta roja, y empezaba a crecer, entonces el perro que parecía disfrutarlo, puso su cabeza en mi muslo, y como solo me había puesto en camiseta larga, después de un rato empezó a olerme, entonces se puso de pie y me hurgó a olfateadas mi sexo, y de momento el solito empezó a lamerme mi vagina, tanto me gusto que yo solo me abrí de piernas, y sintiendo esa lengua dura, musculosa y rasposa, que empezaba a lamerme en mi clítoris y terminaba en mi ano, tuve un orgasmo fantástico, el cual hizo que me fuera a acostar tranquila.

Toda la noche soñé que lo hacia con el perro, y me levante un poco excitada, pero lamentablemente los sábados trabajo mediodía y tuve que ir a la oficina, cuando estaba ahí solo recordaba el encuentro de la noche anterior con el perro, y me humedecía, entonces ya a la hora de salida, me fui a casa con la firme decisión de conocer mas a este singular animalito.

Entonces pase a un lugar de comida rápida, y me comí y me fui a mi casa, entonces llegue y ahí estaba el, entonces tome un baño y me fui a mi sillón favorito a ver la TV, entonces el hizo lo mismo que la noche anterior, se hecho a mis pies y yo empecé a sobarle su pene, después de un instante el animalito presento saliendo la punta roja de su pene, entonces me acosté junto de el en la alfombra y ya con mi mano se lo empecé a acariciar, hasta que poco a poco salía y salía algo tan enorme como nunca había visto un pene grueso lleno de venaciones, casi hipnotizante para mi, entonces me acerque a verlo mas detenidamente, hasta que no se que me paso pero de momento ya se la estaba chupando, fui algo tremendo, soltaba líquidos viscosos en mi boca, hasta el punto de que me ahogaban y tenia que escupirlos, pero sin embargo yo seguía sin el menor reparo dándole gusto chupandole la magnifica tranca y así estuve hasta que el perro eyaculo en mi boca, a chorros, fue algo sensacional.

después de esto, me di una nueva ducha y me fui a casa de una amiga donde siempre nos reunimos a platicar y a tomar café, así estuve hasta que me sentí cansada y me disculpe, y me fui a mi casa, llegando hice lo que la noche anterior había hecho, me deje lamer hasta tener un orgasmo placentero y me fui a dormir y como estaba muy cansada me acosté desnuda, y así hasta que me levante en la mañana.

El único problema de vivir sola, es que tengo que limpiar mi casa, y esto lo hago todos los domingos, al despertarme solo me puse una camiseta larga y me puse a hacer el quehacer domestico, si estaba en la cocina el perro me seguía, si estaba en la sala el estaba ahí, pero después entre al baño, y me di cuenta que la bañera en la parte de donde se va el agua estaba muy sucia, así que tome una esponja me recargué sobre ella y empecé a limpiar, me encontraba en cuatro patas limpiando y creo que con el movimiento se me empezó a alzar la camiseta hasta dejar al descubierto mis nalgas, entonces de momento sentí que el perro se abalanzo sobre de mi se me había olvidado que ahí estaba, y empezó a montarme como si yo fuera una perra, pero no llegaba a introducirme su gran pene, entonces empecé a excitarme y con mi manita tome su pene y lo dirigí a la entrada de mi vagina, en este momento creo que el sabia lo que estaba haciendo por que dejo de moverse, pero en cuanto lo solté se abalanzo clavándome esa tremenda estaca, tan deliciosamente lubricada con sus propios líquidos, y que mi vagina la recibió de manera muy grata, lo único que hice fue sostenerle el bulbo de la base del pene, para que no nos quedáramos pegados, y después de un rato el eyaculo dentro de mi y yo le respondí con un magnifico orgasmo, después de eso y con el trabajo de la casa me fui a dormir mi siesta de la tarde.

Al estar dormida soñaba, pero con el bulbo del perro, que me penetraba, entonces de manera casi de espanto desperté toda sudada y súper húmeda, al voltear la vista lo vi echado en la puerta de mi recamara, y recordando aquel sueño, le hable, el se subió a mi cama, en el momento que el estaba parado frente a mi me baje a chuparle su pene hasta que logre que tuviera un tamaño grande entonces, me puse en cuatro y el dirigió su hocico, hacia mi rajita y la empezó a lamer y después de un tiempo me monto, esta vez no dirigí su pene con mi mano, el de un solo golpe me penetro, y baje mi mano, para sentir el tremendo bulbo que se formaba, en su base y dije para sentirlo, entonces me abrí un poco mas de piernas y tomando su bulbo de su base, deje que entrara en mi vagina, de momento sentí un dolor tremendo, sentía que me desgarraba el bulbo del perro cada vez que entraba mas y mas, fue algo largo pero después muy placentero, en eso cuando ya estaba incrustado todo el pene del animal en mi, el solito se giro, y quede como una perra prendida del pene, al terminar de darse la vuelta sus testículos quedaron pegados a mi ano, haciendo de esto un deleite, entonces voltee al espejo y me vi pegada de el, era espectacular verme así, entonces baje mi manita y empecé a darme gusto con mis dedos en mi clítoris, estuvimos pegados casi 25 minutos, en los cuales creo haber tenido 7 u 8 orgasmos, y después de un rato sentí como mi vagina se dilataba, por que en ese preciso momento estaba recibiendo su semen que me lleno toda, y después de un instante el perro se separo de mi, y mi vagina expulso grandes cantidades de semen, fue algo sensacional.

Ya en la noche, llego mi primo me dijo que venia por su perro, y me pregunto que como se había portado, entonces le dije fíjate que ha sido muy buena compañía para mi, y le dije que cuando vuelva a salir de la ciudad, lo lleve al bañar al veterinario y yo con muchísimo gusto se lo cuidaría, el tiempo que el quisiera.