Capítulo 2

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Esta es la tercera parte y final de mi relato con mi hermana, esto pasó ya de las últimas veces que lo hicimos, ya llevábamos casi 3 años cogiendo casi a diario mi hermana se había vuelto mi mujer, mi hembra y lo mejor es que compartíamos la misma habitación y podíamos tener intimidad con facilidad. ella había desarrollado un lindo cuerpo para su edad y se le empezó a formar sus pechos aunque pequeños ya tenía ella comenzó a experimentar con el maquillaje y ropa más femenina, aún no se si esos cambios eran parte o influenciados de la vida sexual que llevábamos, pero me gustaban y resaltaba entre las demás compañeras del colegio, con el tiempo conforme íbamos creciendo yo cambie de escuela y fueron menos las veces que teníamos sexo en parte por estar en diferentes etapas de la vida yo solía poner más atención a la escuela y mi vida social mientras que ella se empezaba a interesar en otros chicos y encajar en un en un círculo social dentro de su escuela, el caso es que casi no pasábamos el tiempo sólos y éramos más distantes aún así las veces que andaba caliente la buscaba para hacerle el amor esto dejo de seguir así un día que ella me dijo que ya no lo podíamos seguir haciendo porque mi mamá había hablado con ella y sospechaba que ya tenía relaciones sexuales por las manchas de semen y fluidos que dejaba en su ropa interior, recuerdo que mi madre me interrogó para preguntar si había visto a mi hermana dentro o fuera de la escuela cerca de algún hombre aun así no le di mucha importancia.

Un día mi mamá salió por la comida al mercado, mi hermana y yo estamos en el cuarto, yo la vi acostada en cama con un chorsito y sus audífonos ya que ella disfrutaba escuchar música, ese chorsito demasiado corto la hacía ver bastante rica ya que se le asomaba sus labios de su vagina, yo me prendí sólo de verla enseguida y sin pensarlo me subí encima de ella, recuerdo que ella me empujaba y me decía que no podíamos que mamá le había dicho que no era correcto que ella hiciera eso con nadie, aun así yo insistia y trataba de quitarle la ropa, después de un rato de insistir y de empujones de parte de ella mi hermana cedió y me dijo que sería la última vez que lo haríamos, abrió las piernas y se hizo su calzon a un lado para que la penetrara yo me desnude por completo recuerdo que estaba super excitado, entonces comencé a penetrarla y a bombearla, después de un rato comencé a hacerlo más rápido y fuerte por lo excitado y rico que sentía entonces comenzó a sonar ese sonido característico como de chancleteo y ella comenzó a mover sus caderas en círculos y me decía al oído así papi, que rico se siente, sigue así bebé, más me gusta tu pene me encanta como lo haces yo recuerdo que siempre me prendía cuando me lo decía, así estuvimos un rato, yo termine descargándome bastante dentro de ella por lo excitado y lo delicioso que había sido, ese día al terminar simplemente me puse mi ropa y me fui a jugar play, la dejé en la cama con todo mi semen en su vagina y las colchas sucias, después de eso no volvimos a hacerlo más, yo lo intenté varias veces más después de ese día pero ella me decía que no la molestara por qué le diría a mi mamá.

Hoy en día tengo 30 años y mi hermana 27, ella ya se casó y se divorció y tiene una hija pequeña, es mamá soltera y ha tenido bastantes novios después de su divorcio con los que no dudó que se ha acostado ya que le gusta salir de viaje y se va con ellos, incluso tuvo una relación abierta después de su divorcio con un maestro de su universidad que le llevaba bastante edad y mi madre discutió con ella por eso ya que le dijo que ella no la había educado así para que anduviera con un hombre casado. ella y yo no volvimos a hablar nada sobre el tema como si nunca hubiera pasado, estos relatos son reales y los comparto en parte para preservarlos. Gracias por leer el relato.