Capítulo 13

-Ana. -Escúchame bien PERRA, porque es lo que serás a partir de hoy, ahora te voy a dar unas instrucciones y quiero que las cumplas a rajatabla, al primer fallo te dejo en evidencia ante amigos y familia, -fue a hablar-, no te he dado permiso, quiero que sepas que hace unos meses descubrí que tu madre es tanto o más sumisa que tú -obvie a su padre, me miro con asombro y algo de incredulidad, pero no se atrevió a hablar), ella no sabe que vienes, a no ser que tú se lo hayas dicho -negó con la cabeza-, aunque no tengo porque darte explicaciones, te diré que jamás he tenido nada con ella, pero sí que la he entregado a un AMO, al que conocerás en el aeropuerto y esto espero de ti…

Así termino el último capítulo…

No quiero que levantes la mirada en ningún momento, ni por asomo te dirijas o hables con tu madre, cuando te subas al coche lo harás junto al AMO de tu madre, te subirás la falda y abrirás las piernas, y solo si él te toca te abrirás la blusa, y por supuesto harás todo, y cuando digo todo es todo, lo que él te pida, mientras estemos en su casa, él será tu AMO, cuando estés en Madrid, ya hablaremos, me he fijado en tu secretaria y está un rato buena, jajajaja.

-Celi. -Perdona AMA, no termino de creerme lo de mi madre.

-Ana. -No tienes por qué creerme, lo vas a ver por ti misma, y…

-Celi. -Si solo lleva un par de días… ¿y mi padre?

-Ana. -No vuelvas a interrumpirme o te doy un bofetón delante de todos, de tu padre no te preocupes por ahora, y ahora déjame descansar, no te quiero oír más…

Se hizo un sepulcral silencio en el coche…

-Ana. -Jajajaja, a ver si ahora que os lo he contado os va a dar el infarto, jajajaja.

-Jajajaja, a mí no pero a estas PERRAS lo mismo si, a Celia no la veo, y a esta se le va a salir el corazón por la boca.

-Ana. -Jajajaja, a esta también, y no creo que solo sea del susto, ¿No te parece injusto que una este vestida y la otra no?

A través del retrovisor, vi la cara de asombro de Celia al oír a su sobrina.

-Ya has oído a AMA ANA, PERRA.

Celia llevaba un vestido, y no dudo, se incorporó un poco y subiéndose el vestido se lo saco por la cabeza.

-Ana. -Uffff, tita, estas un rato buena, jajajaja, casi estoy arrepintiéndome de haberte dejado escapar.

Me hizo sonreír, al igual que a mí le gustaba humillar con sus palabras.

-Ana. – -Llevando una de sus manos al coño de Celia-, Uffff Sire, el coño de esta GUARRA esta…

-Celia. – ¿Puedo hablar AMO?

-Puedes, pero mientras y esto sirve para siempre, este Ama Ana, ella tiene tanto poder como yo sobre ti.

-Celia. -Gracias AMOS, ufffff, lo mismo estoy mal de la cabeza, y si me dan permiso me corro, fui del todo sincera cuando le dije que aunque me costase la relación con mis hijas, no pensaba dar un paso atrás.

-Ana. -No me cabía duda de que ibas a ser feliz tita -me gusto, le habló con cariño y hasta admiración- con él, y te lo mereces.

De reojo miraba a una Celi, algo más relajada, y con ganas de correrse, pero sabía que hasta que su AMA o yo se lo dijésemos no podía hablar, un poco por la situación y un mucho, porque desde que salimos del aeropuerto mi mano no había dejado de acariciar sus piernas, de entrar en un coño que estaba dejando el coche perdido con sus jugos.

-Celia. -Uffff, si AMA, necesito correrme ¿por favorrrrrrrr?

-Hazlo PERRA, que te sienta tu hija.

Vaya si lo hizo, hasta, como luego me confesó Ana, se asustó al ver como se corría su tía.

-Vamos a pasar primero por mi casa Ana, tengo que coger ropa, a por el coche ya vendré o mandaré a alguien mañana.

En el resto del trayecto solo hablamos nosotros, ignorando por completo a madre e hija, a la que había dejado de acariciar, no deseaba que se corriera. Una vez dentro de mi cochera y fuera del coche…

-PERRA, deja la blusa y la falda en el asiento.

-Celi. – ¿Cómo?

Sabiendo lo que sabía por lo narrado por Ana, sin miramientos y con fuerza, le solté un bofetón, dejándome totalmente descolocado…

-Celi. -Me corroooo, agggggg, lo sientoooooo AMOS.

Fue tan intenso que cayo de rodillas.

-Ana. -Ya le dije que a esta PERRA, le pone mucho que la abofeteen y otras cosas muy de su gusto Sire, jajajaja.

Casi me corro con verla, y no era cuestión allí en medio, así que cogiéndola del pelo la levanté y arrastrando de ella con rudeza, llegamos al ascensor, no soltándola hasta entrar en mi apartamento, donde la llevé al sofá tirándola de mala manera.

-Desnúdame PERRA, voy a follarme a tu hija.

Totalmente relajada y sonriendo, me desnudo, demostrándome que ella también quería verlo, no tardo nada en hacerlo, algo que a Ana y a mí nos hizo reír.

-Ana. – -Sentándose frente al sofá-, ven aquí tita, de rodillas junto a mí, vamos a ver como se follan a esta GUARRA.

Celi se había quedado tal y como la tiré, así que cogiéndola del pelo…

-Apoya las manos en el sofá y saca el culo GUARRA.

Abrí más la cremallera de sus bragas, hasta dejar el coño totalmente libre, metiéndosela de golpe, arrancándole un gemido de placer, a la vez que se corría entre alaridos que no entendimos, si no llega a ser porque la tenía agarrada del pelo, se hubiese derrumbado, no tardando en reponerse, yo seguía entrando y saliendo de ella, hasta que me corrí, llevándola a un nuevo orgasmo y como ya la había soltado, esta vez sí, que cayó desmayada en el sofá. Al girarme vi que Ana se había sentado en el suelo apoyando su espalda en el sillón, y se había subido la falda, para facilitar que su tía casi a rastras le comiese el coño.

-Ana. -Acércate Sire.

Sin saber lo que iba a hacer, me acerqué a ella, que soltando la cabeza de Celia, llevo sus manos a mi polla y se la metió en la boca, mirándome directamente a los ojos, y sacándole una sonrisa perversa y sacándosela…

-Ana. -No te sorprendas Sire, no sabes el tiempo que lo he deseado.

Se volvió a meter mi polla en la boca, hasta que vi que me volvía a empalmar, y menos mal que en ese momento su tía le arranco un orgasmo, no me quería entretener. Me separé viendo desilusión y deseo de seguir.

-Habrá tiempo Ana, jajajaja, no creas que no me quedo con las ganas, pero… ¿Por qué ahora?, ¿después de tantos años?

-Ana. -No tengo nada de sumisa y lo sabes Sire, pero a la vez eres el único al que siempre he tratado con respeto, y sabes que hasta con admiración, siempre he deseado estar contigo, pero piensa… es la primera vez que estamos juntos, sin que haya alguien que luego no hablase de más.

Era cierto, si eso lo hubiese hecho delante de otros Dominantes o incluso de sus sumisos, hubiesen pensado que se rebajaba ante otro Dominante.

-Cierto Ana, jajajaja, ¿sabes? confesión por confesión, cuando nos conocimos, casi te uso, sabiendo ya que tú no eras sumisa.

Madre e hija nos miraban, mientras en Celia su mirada era de admiración, en la de Celi, era de no saber dónde meterse.

-Ana. -Jajajaja, al final hasta vamos que tener que premiar a mis tíos.

No se dio cuenta que había metido la pata sin querer, vi cómo le volvía a cambiar la cara a Celi, que al darse cuenta de que la había pillado, se limitó a bajar la cabeza.

-Voy a coger ropa para el finde, el domingo vendré con más tiempo, ya es tarde.

En cinco minutos estábamos saliendo para mi nueva casa, esta vez fue Ana la que sentó a mi lado, dejando atrás a madre e hija, que a pesar de todo lo que acababan de vivir, no se dirigieron la palabra.

-Celia llama y diles que estamos llegando, con tu hija, -me entendió perfectamente, y hasta note agradecimiento-, que nos abran la puerta grande para meter el coche.

Por el retrovisor vi en la cara de Celi, intriga e inquietud, por lo que sintió decir en mi casa a Ana. Al embocar la calle, divise la figura de Noe, que al vernos llegar abrió el portón, esperó a que entráramos y lo cerró.

Llevaba un blusón puesto. Al bajarnos…

-Ana. -Hola Noe, que alegría.

Con descaro la cogió de la nuca y le estampó un morreo, que fue aceptado de muy buen grado por Noe, sobre todo al ver como con una sonrisa en la boca le asentía. Cuando se separó de ella…

-Nena, te presento Celi, la hija de Celia, ¿Dónde están los demás?

Al darse cuenta de que esta tenía que saber más de lo que ella esperaba y por como venían vestidas o mejor dicho medio desnudas…

-Noe. -Los demás están en el porche AMO, pero…

-Tranquila, supongo que están todos vestidos, Ana ya ha metido la pata, jajajaja, vamos dentro.

En ese momento Ana se dio cuenta de que era cierto…

-Ana. -Ups, es verdad Sire, ya me extrañaba a mí que mi primita no nos haya dicho de vestirse.

-Dejad la maletas, vamos dentro.

En el porche estaban sentados Merce y Jaime, una con un blusón como el de su hija y él con un pantalón corto de chándal y una camiseta, no pudiendo evitar sorprenderse al ver aparecer a su mujer en lencería, y aún lo hizo más cuando tras ella apareció su hija igual de vestida que su madre. Reacciono pronto y bien, demostrando una vez más cuan sumiso era, sin esperar nada y sin apartar la vista de su hija, se sacó el pantalón y la camiseta, quedándose solo con las bragas y una incipiente erección. Pasando totalmente de su hija y mientras Noe y Merce se quitaban los blusones…

-Jaime. -AMO, nosotros ya hemos cenado, y le hemos dejado su cena preparada, solo tendré que calentarla.

-Gracias PERRO, que te ayude la CERDA de mi suegra.

Me gustaba ver como con cada palabra mía, Celi no dejaba de sorprenderse.

-Vamos a sentarnos Ana.

Celi se quedó dubitativa, y al ver como su madre se ponía de rodillas junto a mí, la fue a imitar, pero lo fue a hacer junto a Ana.

-Ana. -No primita, o eres tonta o te lo haces, ¡¡¡qué coño te he dicho yo!!!

-Celi. – -Casi con las lágrimas saltadas-, perdón AMA, que aquí solo pertenezco a Sire Leo.

Como en un lado vio a su madre, como pudo se metió entre la silla que ocupaba Noe y la mía. En ese momento aparecieron Merce y Jaime con la cena, que dejaron en la mesa.

-Jaime. – ¿Vino o cerveza AMO?

-A mi vino y ellas no se.

Tanto Ana como Noe -que prefirió esperarme- pidieron vino, volviendo a salir del porche, mientras Merce se puso de rodillas frente a todos, lugar que también ocupó Jaime tras servirnos el vino.

-Ana. -Quiero pedirte un favor, pero para nada lo veas como obligación Sire, y para nada es el que me debes por tener a la GUARRA de mi primita de rodillas, jajajaja.

-Jajajaja, sabes que te temo como una vara verde, solo una condición, quiero saber los dos favores juntos, así que piénsalo.

-Ana. -Jajajaja, no tengo nada que pensar, se perfectamente lo que quiero jajajaja, el primero, quiero experimentar ese pequeño lado sumiso que tengo contigo, me gustaría ser una más este finde, te prometo que aunque no me guste lo que me ordenes, voy a obedecer, jajajaja -se rio al ver mi cara de sorpresa-, y el segundo quiero que me cedas a tu mujer una semana.

Un poco sorprendido aún y sabiendo que no tenía que consultar nada a Noe…

-Concedidos los dos favores PERRA -lo recalque-, no sé qué haces sentada y vestida.

Ahora la sorprendida fue ella, que tardó en reaccionar, y ante el estupor del resto, se levantó, se quitó la falda y la camiseta que llevaba, dejándome claro que ya lo tenía pensado, ella es mucho de tanga y esta vez traía un conjunto verde claro de braga y sujetador, con unas medias claras y sus taconazos negros, retirando la silla se puso de rodillas y como los demás apoyo su culo en los talones.

-Sobre la semana, te tienes que poner de acuerdo con Noe, y en cuanto su trabajo se lo permita, allí estará.

-Noe. -Esta semana que entra sería imposible AMO, pero para la otra, lo puedo organizar, tengo pendientes varias reuniones con clientes y proveedores.

-Jajajaja, vas a tener suerte PERRA.

-Ana. – -Demostrando a todos su saber estar-, ¿Puedo hablar? -asentí-, ufffff, siempre me sorprende AMO, lo bien que educa y guía a sus PERRAS, ya estoy deseando que llegue, yo también trabajo, así que no habrá problemas.

Aparte el vino de Ana, y cogiendo su plato, lo puse en el suelo…

-Come PERRA.

Con una sonrisa y una excitación notable, sus pezones iban a reventar el sujetador, metió la cabeza en el plato.

-Jaime, sirve a las otras dos PERRAS.

Se levantó, sin poder evitar su empalme, cogió dos platos y con sus manos cogió la comida y la repartió en dos platos, y fue a ponerlos en el suelo.

-Solo el de tu mujer, el de tu hija déjalo en la mesa, quiero ver -tenía pensada otra cosa para ella-, como come, las manos en la mesa PERRA, y come.

Solo podía ponerse de una forma y era con el culo expuesto, y aprovechado que no me podía ver, y que Jaime estaba muy cerca de mí, al odio le di indicaciones, que para nada le sorprendieron, sonriendo, se bajó la braga, aunque su polla ya llevaba rato asomando, colocándose detrás de su hija, a la vez que tras indicarle con la mirada a Noe que le agarrara las manos, apoyo sus manos en la cintura y de un golpe se la metió.

-Celi. -Agggggg, quiennnn -al girar la cabeza y ver a su padre-, agggggg, nooooooo, ufffffff.

-Jaime. -Esta ZORRA está chorreando AMO, ufffff.

A la tercera embestida de su padre, se olvidó de todo, y empezó a gemir como lo zorra que era, llegando a correrse tres veces antes de sentir a su padre…

-Jaime. -Uffff AMO, ¿me da permiso para correrme?

-Dentro ¡¡¡ya!!!

Sin aspavientos se corrió en el coño de su hija que al sentir como su padre se corría no pudo evitar hacerlo también, solo que al sentir como su padre se salía de su coño, se dejó caer al suelo y a llorar. Mire a su madre y le dije que la consolara, lo hizo, y no como yo esperaba, se acercó, la cogió con fuerza del pelo, hasta que consiguió ponerla de rodillas, y de golpe le cruzo la cara con dos bofetadas, le escupió y la volvió a tumbar, sin darle tiempo a reaccionar, le puso su coño en la boca, haciendo un 69 perfecto. Tardo un poco en reaccionar, pero al final también devoro el coño de su madre. La excitación era tal, que Noe estaba abierta de patas, con la boca de su madre en el coño, y sabiendo que tenía mi permiso, e imaginando que esta noche no iba a dormir conmigo, la polla de Jaime en su boca. Sonreí al ver cómo me miraba Ana, y siendo el único conocedor de su más íntimo secreto.

-Tú lo has pedido PERRA, de pie y con el culo fuera.

Se levanto de un salto y se colocó tal y como le ordené, no tardando nada en ser penetrada por una durísima polla, cogiéndola por el pelo me la follé con fuerza…

-Puedes correrte cuando quieras, y eso va por los demás.

Note sorpresa en ella, y para nada imaginaba lo que le esperaba, conforme empezó a correrse, aproveche para salirme del coño y de un golpe seco, se la metí en el culo, que gracias a su excitación y a lo lubricada de sus propios jugos que estaba mi polla, entro bastante bien para mí, porque para ella….

-Ana. -Agggggg, cabrón eso noooo, paraaaaaaa.

-Un trato es un trato PERRA, si quieres me salgo, coges tus cosas y te vas.

-Ana. – -Se dio cuenta de su error, por otra parte compresible-, uffff, perdón AMO, ufffffff, algún día tendría que ser, agggggg, sigueeee, ufffff, agggggg, me corroooo.

Lo hizo a la misma vez que yo, porque me vacié en ella, y como quería seguir humillándola, la cogí del pelo, la puse de rodillas y la obligué a limpiármela, algo que hizo hasta con glotonería, la muy GUARRA se volvió a correr.

-PERRA, trae a tu hija junto a su prima.

Menos Ana y su prima, todos sabían que iba a pasar, y de todos la que más lo estaba disfrutando era Celia, que cogiendo a su hija del pelo, la arrastro hasta donde estaba su prima, y la obligo a ponerse de rodillas.

-Miradme PERRAS.

Conforme lo hicieron empecé a mearme en ellas, viendo como Ana aguantó estoicamente, mientras Celi al sentir mi meada, abrió la boca y busco que entrara en ella, haciéndole llegar a un orgasmo que nos asustó a todos, cayó casi desfallecida el suelo, temblando y con sus manos entre sus piernas, hasta que le llegó otro fuerte orgasmo. Al verla así entendí perfectamente lo que en mi casa dijo Ana.

-Vamos a la cama, Celi y Ana se vienen conmigo, sobre el resto tú decides cariño, pero antes que Jaime vaya a por las maletas de estas PERRAS y por mi bolsa, la de su hija que la deje por ahora en el salón, mañana ya veremos, y la de Ana a mi habitación, ah dejad todo esto recogido, mañana es sábado así que no hay prisa por levantarse, que a nadie se le ocurra entrar a mi cuarto a no ser que os llame. Todos asintieron, y mientras me dirigía a mi cuarto seguido de una dolorida pero feliz Ana y una deshecha Celi, sentí a Noe…

-Noe. -Quédate recogiendo con el MARICÓN, Celia y yo nos vamos a dormir, cuando este todo esto limpio, os podéis retirar a dormir juntos, lo que hagáis es cosa vuestra.

Pensé que ella era la que iba a pasar la noche con Jaime, pero eligió a Celia.

Entre en el baño seguido de las primas…

-Dentro, de la ducha ¡¡¡ya!!!

Sin hacer intención de quitarse nada, las dos entraron.

-Besaros PERRAS.

En esos detalles salía la parte dominante de Ana, cogió con fuerza a su prima, y le metió la lengua hasta la campanilla, momento que aproveche para abrir el agua fría, no pudieron evitar sentir escalofríos, pero ambas aguantaron estoicamente. Posiblemente si no hubiese estado Ana, no tendría esa pizca de sadismo, pero quería doblegarla, que dijera basta, ver hasta donde aguantaba… Les permití abrir el agua caliente, algo que ambas con la mirada me agradecieron, me desnudé y entré con ellas, ayudando a Ana a quitarse la braga y el sujetador, y dejándoselo a Celi, solo le quité la braga, me encantaba ver sus perfectos pechos abrazados por ese sujetador que dejaba salir los pezones, duros como piedras. Con la mano la hice ponerse de rodillas, y le introduje mi polla, aun en reposo, en su boca, mientras cogiendo del pelo a Ana, la morreé a la vez que martirizaba sus pezones. Sentir sus gemidos entrecortados mientras saboreaba su boca, y la boca de Celi en mi polla, estaban haciéndome volver a excitar, y no me quería correr en su boca, quería su culo…

-Ufffff, dejad que termine de ducharme PERRAS.

Me ayudo una excitadísima Ana, mientras su prima seguía de rodillas, sin poder evitar que a través de su respiración y de sus duros pezones, se le notara la excitación.

-Os dejo, no tardéis, podéis quitaros las medias y el sujetador también GUARRA, os espero en mi cama.

Secándome me dirigí al dormitorio, sentándome en una de las butacas, no tardando nada en ver aparecer a dos esculturales mujeres, ambas con una sonrisa en la boca, dándome a entender que cualquier barrera moral que le quedase a Celi, había desaparecido.

-De rodillas frente a mí PERRAS, -dejando caer las toallas al suelo, las dos obedecieron-. Estoy muerto, pero no tengo sueño, así que me gustaría saber cómo tu hermana y tú, os convertisteis en sus sumisas.

-Celi. -Creo que mejor que yo -poniéndose roja y bajando la cabeza-, lo contara Ana.

-Ana. -Jajajaja, todo empezó por una tontería, siempre pasaba las vacaciones con ellas y mis tíos, por edad Celi y yo, íbamos a todos sitios juntas, y una noche en las fiestas, Patri nos pilló a ambas con un porro, y no dijo nada, pero como siempre conseguía lo que quería, tenía uno de los primeros móviles con cámara, ya la conocerá AMO, es una pija de cuidado, y nos retrató, jajajaja, esa noche no nos dijo nada, porque llegamos muy pasadas de todo, pero nada más levantarnos, nos enseñó las fotos, y nos amenazó con enseñárselas a sus padres si no hacíamos todo lo que ella quisiese, empezando por hacerlo todo, desde limpiar a hacerle la cama…

– ¿Y no le intentasteis quitar el móvil?

-Ana. -Jajajaja, me tiré a por ella como una leona, pero en esa época era bastante más fuerte y alta que yo, lo que al principio me enfado y me mosqueo, es que esta no hizo nada, solo se quedó quieta. Al principio solo era eso, pero enseguida, empezó a pedirnos que la desnudáramos, que la vistiéramos, dándonos cuenta las dos, que a esta, le gustaba, hasta que al cuarto o quinto día que mis tíos se fueron a pasar el día fuera, nos ordenó que la bañáramos, y mientras yo le dije de todo, aun sabiendo que lo iba a hacer, esta, solo se limitó a decir “lo que desee señora”, y eso…

CONTINUARÁ…

Soy Amo, me encanta la dominación, me gusta tener, someter y humillar a parejas y a quien se quiera iniciar, necesitar un tutor o conocer este estilo de vida.

Mi Skype es ra_ul1967, mi correo ra_ul1967@hotmail.com y mi Telegram @Amo_Leo, hablo y respondo a todo el mundo, siempre que lo haga con respeto.

Continúa la serie