Mi último viaje
Hola a todos, os voy a contar algo que me pasó hace dos fines de semana.
Pero primero tengo que presentarme, me llamo David, tengo 22 años soy de Madrid, estudió en una universidad de Madrid, y trabajó en una multinacional en régimen de part-time. Soy un joven normal, me gusta salir por la noche, me gustan mucho las mujeres, sin ellas que sería de mí, y me gusta el fútbol.
El fin de semana que os cuento, para mí fue más largo de los esperado, pues no tengo aulas al viernes, y ese viernes no tenía que trabajar, solo trabajo de lunes a miércoles y algunos fines de semana.
Por lo que con mis amigos de universidad, nos decidimos ir de viaje a algún sitio.
Mi grupo de amigos es grande pero en ese momento no muchos estaban con la idea de salir a fuera de Madrid, todos me decían lo mismo, no tengo dinero, me lo estoy ahorrando para el verano y cosas de esas.
Mi idea la principio era ir a Asturias como tengo una casa en una aldea cerca de Gijón, nos podríamos quedar ahí los 3 días, unas 6 o 7 personas.
Yo tenia en mí mente convidar Ana, Marta y Luisa que son las mejores tías que conozco en la Univ..
En realidad, solo conozco a Ana y a Marta pero como Luisa es amiga de las dos y es la mejor de las tres quería llevarlas de paseo el fin de semana. Ya había hablado con Ana y con Luis que me gustaría salir de Madrid e ir a Asturias, o a otro sitio, me apetecía quebrar un poco con la rutina. La primera vez que hablé con Ana, ella se puso de acuerdo conmigo en viajar pero no quería ir hacia el norte, prefería ir hasta las playas del sur, pero no volví a hablar con ella del asunto.
Lo cierto es que solo el lunes antes del viaje, decidí hacer los planes, bien hechos. Ya había hablado con todo el mundo, pero solo, Pablo, Luis y Juan me habían dado la confirmación, que quería, pero todos querían ir hacia la playa. Sendo así la hipótesis de ir a Asturias estaba puesta de parte. Y al terminar el lunes, tenía 3 personas que querían ir hacia la playa.
Me acosté esperando por la respuesta que me habían prometido, Marta y Ana para el martes. El martes, no me empezó bien pues Marta me dijo que no podría ir , bla bla bla, bla bla, la parte buena es que Luisa y Ana si querían ir, pero a mi me hacia mas ilusión que fuera Marta, pues es la chica con que mejor me llevo.
Así que de pronto quedé con 5 personas + yo, 6 personas, y como mi coche solo tiene 5 lugares, había que invitar alguien más. Las chicas pensaron en ello y Luisa me dijo que había hablado a más dos amigas suyas, y Ana me había hablado en llevar a una amiga suya de la gimnástica.
El martes por la tarde, por sugestión de Ana reservé dos habitaciones de 4 camas, en un Albergue Juvenil de la costa de andaluz.
El miércoles el viaje ya estaba planeado, yo llevaría mi coche, nos quedaríamos las dos noches en un Albergue Juvenil, y Juan llevaría su coche.
Solo tenía una duda pues no sabia quien eran las otras dos chicas que iban con nosotros, una era amiga de Ana y la otra de Luisa era lo único que yo sabía.
Por fin llegó el viernes, y a las 6 de la mañana ahí estaba yo esperando por todos en el local combinado. Pronto llegó todo el mundo, y pude despejar mis dudas sobre las dos otras chicas, una estaba muy bien, y la otra tampoco estaba mal. La amiga de Ana era sin duda la mejor de las 4, se llamaba Natalia, y la amiga de Luisa se llamaba, Susana.
Al verlas, me alegré; todas venían con ropa veraniega, Ana venía con un vestido de algodón, rosa y con azul a la mixtura, Luisa venia con una blusa beige y unos pantalones blancos muy ceñidos que le llegaban un poco debajo de las rodillas, y que dejaban ver el tanga que llevaba debajo, Natalia venía con una minifalda y un top y Susana venía también con un vestido.
Aun no he describido las chicas, Ana es una chica normal, no muy alta quizás debe tener 1,65 de altura, tiene una cara muy bella, para mí es lo que más se destaca de ella, Natalia es una chica delgadita, rubia, atlética, parece una modelo, tiene el culo bien empinado, y sus pechos aunque no muy grandes se nota que están bien tratados, Luisa es la que tiene mayor pecho, tampoco es muy alta, es pelirroja, Susana es la más alta de las 4 debe tener casi 1,80 pues es casi de mí altura, tiene unas piernas espléndidas, unos gemelos del otro mundo y un color ya de bronceado, que la hacen apetecible.
Deberían ser las 11 y algo cuando llegamos al albergue, estaba bien localizado, en un local agradable, las dos habitaciones quedaban una al lado de la otra como había pedido.
Deshicimos las maletas, y nos fuimos a reconocer el albergue, donde se comía, donde era el salón de la tele, donde eran los baños.
Las duchas del albergue eran colectivas, estilo las de un balneario, ni siquiera tenían separación entre hombres y mujeres. Había una especie de balneario en cada piso, donde teníamos las duchas, y lo necesario al cuidado higiénico pero no había una sola puerta, quedaba al final del pasillo de nuestro piso.
Al entrar teníamos un gran espejo y los lavatorios y a la izquierda teníamos las duchas en total eran 8, eran divididas por una pared de unos 2 m de altura de cubos de vidrio, que aunque no eran transparentes dejaban poco que imaginar, y si uno se elevase un poco casi vía la ducha del lado, en la entrada de cada ducha había una cortina también un poco transparente y unos bancos para poner la ropa, nada más.
Nos cambiamos y nos fuimos para la playa estuvimos unas 2 horas y regresamos al albergue para almorzar, antes de comer nos tomamos una ducha. Nos dirigimos a las duchas y yo como fui de los últimos en llegar me quedé esperando mi turno pues las duchas estaban llenas en ese momento también apareció Natalia.
Pasado unos instantes salieron dos tíos que se estaban duchando en las duchas del fondo, y pasamos nosotros al entrar me desnudé y pude ver como ella se desnudaba eso me produjo una profunda erección, y después mientras me duchaba no tiraba ojo de ellas y pude ver como tenia una pequeña zona negra, por encima de su coñito.
Como yo no había llevado mi shampoo le pedí prestado el suyo y mientras me lo pasaba por encima de la pared pude ver como se encostaba con sus pechos a la pared, eso me volvió a poner a mil y me tuve que masturbar allí, con algún disimulo para que ella no lo notara.
Almorzamos, y nos fuimos a la playa, si por la mañana apenas habíamos estado en unas terrazas en el frente de la playa por la tarde, nos fuimos para aprovechar al máximo el sol.
Al llegar nos quitamos la ropa que llevábamos y nos quedamos en bañador. Los bikinis de las chicas les quedaban de maravilla.
Nosotros los hombres nos fuimos jugar un poco de fútbol mientras que ellas se quedaron tomando el sol.
Pronto aparecieron unos tíos para hacer un partidillo 4 contra 4. Empezamos jugando perdiendo, y las chicas que estaban con ellos se reían de nosotros, pero a los 10 minutos de juego ya habíamos equilibrado el juego, y aunque al final perdimos por unos 3 goles de diferencia jugamos bien.
Al llegar a nuestras cosas pude ver que Susana ya se había quitado la parte de arriba de su bikini, y estaba con sus pechos al aire.
Nos demos un para de chapuzones en el mar, y nos fuimos para casa, al llegar otra vez la rutina del baño. Yo como no quedé para último, pero de esta vez solo estaba Luisa tomando baño y tenia a Pablo y a Luis a sus dos lados. Yo me fui de nuevo a uno de los cantos de las duchas, y pude ver como a mi lado estaba una rubia de escándalo tomando baño.
Por la cortina se podía ver todo su cuerpo desnudo, estaba de espalda a la entrada, lo que yo aproveché para sin hacer el mínimo ruido entre abrir un poco la cortina y mirar su culo de arriba abajo bien despacio, pude ver su culo, que culo más bueno.
Entré en mi ducha con mi palo en máxima rotación, pude ver como ella me miraba desde su ducha. La ducha me refrió un poco los ánimos, pero cuando ella bajó para fregar sus pies, y después se encostó a la mi pared para limpiar sus pies me puse de nuevo a mil y empecé a masturbarme, pude ver como ella me miraba, y al verla mirarme me masturbé cada vez mas rápido, hasta que expulsé toda mi leche, mientras expulsaba mi leche ella había salido de la ducha y yo también me apresuré a salir para ver su cuerpo a vista directa, se limpió con la toalla y se vistió unas braguitas y se puso la toalla alrededor de su cuerpo, y salió de la ducha, yo salí al instante y la vi, que locura de mujer, me crucé con ella y nos cruzamos las miradas, pude ver como me miraba, uf, pero nada más, me fui a mi habitación, no sin antes ver donde era la suya.
Esa noche no pude pensar en otra cosa que no fuera aquella chica que había visto en la ducha, que mujer. Ni siquiera ver cómo se habían puesto esa noche las chicas me tiró de la cabeza aquella mujer. Nos tomamos unas copas y nos fuimos a dormir.
El día siguiente empezó temprano, desayunamos y nos fuimos de nuevo a la playa pero de esta vez cogimos los coches y nos fuimos en busca de una cala alejada de la civilización, al fin de un rato, estábamos en un camino asfaltado pero en no muy buenas condiciones en dirección al mar, llegamos al largo de la playa y vimos que estaban ahí 3 coches todos de matrícula inglesa.
Aparcamos los coches, y salimos a mirar la playa, pudimos ver que en toda la playa que no era tampoco muy grande solo estaban 10 personas no más, dos familias, que debían ser los dueños de los coches y al fondo unos tíos que practicaban surf. Nos instalamos en la playa, cerca de las dos familias de inglesas, tendimos nuestras toallas, nos sentamos, nos despojamos de ropa que llevábamos quedando solo en bañador.
Y las chicas se quitaron todas la parte de arribar del bañador, enseñando sus bellos pechos, cada uno de nosotros se pontificó para poner la crema bronceador a las chicas, y cada uno lo puso a una chica, yo lo puse a Natalia, primero en la espalda, aprovechando por pasar mi mano en su entrepierna y pude notar el calor que emanaba pasado unos minutos ella se volvió del otro lado y yo aproveché para ponerle crema en sus pecho pude ver como sus pezones si ponían cada vez más y más duros y ella pudo ver como mi polla se quedaba cada vez mas dura.
Pero no pasó de ahí. Nos acostamos, todos ellas nos pusieron de esta vez la crema, y pude ver como los hombres de las familias inglesas no tiraban ojo de las chicas.
Eran dos familias, creó, dos mujeres y dos hombres de unos 40 y pocos años con 7 chicos, 2 chicas más mayores de unos 17, 18 años me fijé de pronto en ellas pues también tenían los pechos al aire como sus madres, una de ella una mujer muy bien conservada, y 2 chicos también mayores de unos 18 años y otros dos de unos 15, 14 años, y después estaban los crios de 3 a 7 años, deberían tener. Pasado unos minutos empezamos a jugar fútbol, y al instante los chavales ingleses nos pidieron para jugar.
Empezamos a jugar contra los 4 pero tirando los dos más mayores que jugaban algo los otros dos ni al balón acertaban, y tuvimos que hacer equipos mixtos.
Después de jugar un partidillos vinieron sus padres para jugar, y estuvimos jugando nosotros 4 contra los padres y los chicos mayores, aunque ganamos de fácil el juego fue bonito.
Los padres aprovecharon par entablar conversación y nos invitaron a almorzar con ellos allí en la playa, nos agradó la idea y concordamos, nos presentaron toda su familia, me gustó particularmente Jena la chica mayor tenia 18 añitos pero estaba muy buena y olía muy bien me volvió loco, y nosotros les presentamos las chicas. Hicimos una rueda y comimos lo que nos ofrecieron, era pollo asado con batatas fritas, estaba todo muy bueno.
Mientras comíamos, los chicos mayores no tiraban los ojos de las chicas, como yo no tiraba ojo de Jena, que hizo reír al personal cuando dejó caer un poco de ketchup en su pecho, y mientras se limpiaba sus pezones se erizaron, lo que me provocó una elevación en mi bañador que tuve de disimular.
Al finalizar nos acostamos todos a dormir en nuestras toallas. Yo me dormir una hora o más, y me despertaron los ingleses para jugar más un partidillo de fútbol.
Después nos fuimos todos al agua estuvimos jugando una especie de waterpolo en el agua. Salimos nos secamos, y nos volvimos a ir otra vez al agua ahora ya con las nuestras chicas y con Jena, y su prima, jugamos, nadamos.
Deberían ser unas 6 horas cuando salimos del agua, y mientras me secaba pude ver como se cambiaban los ingleses la Paul el padre de Jena se secaba con la toalla y se quitó su bañador, quedando con el palo al aire, y el resto de la familia imitó a Paul, primero los chicos, sendo que David se desnudó virado para las chicas que quedaron impresionadas por el miembro del chaval.
Yo mientras miraba el espectáculo no quitaba ojo de Elisabeth, la madre de Jena ni de Jena, y mi espera, volvió la pena pues las dos se quitaron el tanguita del bikini viradas para mí, y se fueron hacia el mar para quitar las arenas que tendrían en el coño, pues se lo frotaron en el agua, salieron y se secaron con la misma toalla las dos, dando especial atención a la limpieza de los coñitos y de los pechos.
Todos estábamos alucinados con lo que estábamos viendo, y mirando nuestro espanto, Paul se dirigió a nosotros y nos explicó que ellos solían hacer nudismo y que era normal aquello que estaban haciendo, y se despidió pidiendo disculpas por el incómodo.
Que incómodo me pregunté para mí mismo?!
Nosotros también nos marchamos. Pues ese día yo quería llegar cedo al albergue para ver si encontraba de nuevo la rubia que me tenía loco.
La primera cosa que hice al llegar fue mirar las duchas para ver si ella estaba.
Y después mientras mis compañeros se fueron a ducharse yo me quedé andando en el pasillo, hasta que se abrió la puerta de su habitación y salió una chica pelirroja, falso alarme, pero fue motivo para pegar en mis cosas para la ducha y al instante salió ella de su habitación, la seguí hasta la ducha pero ella volvió hace su habitación a buscar algo, yo no podía volver atrás, y entré en una ducha dejando una libre a mi lado izquierdo, me desnudé, y esperé por ella dejé mi cortina algo entreabierta para que ella me pudiera ver al pasar.
Tardó poco tiempo, en llegar, y pude notar que ella me vio.
Ella entró a su ducha y se desnudó, despacio, gimió al sentir el agua muy caliente, que escenario tenía yo a mi izquierda, no podía perder detalle.
Empezó a fregarse y yo me elevé un poco cuando ella estaba de espaldas hacia mi pero era imposible ver más que su pelo.
Fue entonces cuando le pregunté se tenia shampoo, ella me dijo que si, y me lo pasó, al pasármelo se encostó con su cuerpo a la pared de vidrio, y aquella visión me puso mas caliente aun. Lo utilicé y le devolví el shampoo dándole las gracias.
En ese instante no sabia que hacer más, mi única intención era entrar en la ducha del lado y follarme aquella mujer, empecé a masturbarme pero al contrario del día anterior ahora me viré hacia ella.
Ella al verme se encostó en el vidrio y yo le digo, que para qué ocupar dos duchas cuando estábamos mejor los dos en la misma, ella concordó y me tiré a por ella, entrar en su ducha empezó a hacerme una mamada, pero que mamada, mientras yo le metía mano por todas partes.
Yo me la quería follar allí pero ella me dijo que solo con preservativos, y me dijo que los tenia en su habitación a si que se los fue a buscar me metió un condón en mi verga me la cogió y se la metió en su coño y empecé el mete saca, joder que mujer, pasado un par de minutos yo ya no podía más y le dice que estaba a punto de correrme ella me quitó el preservativo y se metió de nuevo mi polla en su boca, yo poco aguanté y me corrí en su boca ella no dejó salir una gota de mi leche y se la tomo toda. Nos acabamos de duchar, charlamos un rato, intercambiamos teléfonos, y nos despedimos.
El resto de la noche lo pase muy bien, pues nos fuimos de copas y después al llegar al albergue a mí me apetecía caminar por la playa y convencí a Natalia a venir conmigo, llegamos a la playa y caminamos hablando de todo un poco, hasta que yo le empecé a pasar mano por el culo y vi que no tenia nada por debajo del vestido, ella entonces se quitó el vestido, yo me desnudé y empezamos a follar en el medio de la playa.
Ella después me confesó que se había quitado la ropa interior cuando fue al albergue antes de dar el paseo, y me dijo que ya estaba harta de esperar que yo tomara la iniciativa, mi dijo esto mientras estábamos tumbados sobre la arena completamente desnudos, yo con mi verga apuntando al cielo y ella con sus pezones apuntando al cielo, follamos de nuevo, en la playa y más tarde en el agua.
Ahora estoy esperando por mis vacaciones del verano para ir a la playa, me encanta el verano, y la playa. Estoy contando los minutos…