Entonces nos dimos bajo el correr del agua un tremendo beso recontra apasionado, lo que hizo que su joven miembro nuevamente esté parado como un mástil. Hicimos el amor parados, entonces se me ocurrió una idea...
Pero ese abrazo produjo un efecto raro en mí ya que por primera vez en mi vida sentí eso que llaman deseo, al sentir mi pene semidescubierto tan pegado al cuerpo de una mujer que se sentía más con esos jeans ajustadísimos.
Una tarde estaba estudiando cuando escucho un ruido de agua, algo se estará rebalsando, pensé, entonces me acerqué al baño y veo a Gigi que se estaba duchando e intencionalmente había dejado abierta la puerta y todo su cuerpo traslucía por la cortina de la ducha.