El alcalde era un buen tipo. No por nada ganaba las elecciones sistemáticamente desde tiempo inmemorial. Un tipo honesto (robaría solo el 3% del erario público). Tendría unos 65 años y su esposa no llegaría a los 50.
Cuando la ayude a que bajara del cofre de madera nuestros cuerpos se volvieron frotar con fuerza... nuestra caras quedaron muy cerca... la mirada de Dana era un canto a la lujuria... respiraba con dificultad... me tomó de nuevo de la nuca y se fundió conmigo en un beso salvaje, comiéndose con desesperación mi lengua.
Fuimos todos a cenar, y a las 11:00 más o menos, nos decidimos a dar una vuelta por los bares de la zona para tomarnos unas copitas, y así lo hicimos; pero la diversión con las amigas duró poco, porque a las 1:30 tenían que estar en casa para fichar...
Sentada a su lado y entretenida en lo que estaba haciendo no me dí cuenta que mi bata estaba un poco abierta y con el movimiento dejaba ver gran parte de mis tetas. Como estaba desnuda debajo mire hacia mi cintura y ví que la abertura llegaba casi hasta mi sexo... aunque no se lo veía aún.
Él apoyaba una de sus manos en el escote de ella, presionando suavemente sobre uno de sus senos, movía sus dedos pausadamente donde seguramente estaba el pezón de ella, él conocía perfectamente su anatomía y donde debía poner las yemas de sus dedos.
De pronto, al intentar mirar los libros que leían, me di cuenta de que la mayor estaba leyendo un libro erótico, a juzgar por los dibujos alusivos al sexo que había en la tapa. Más tarde, observé cómo se le habían puesto los pezones de sus tetas, que se marcaban a través de su bikini azul.
Entonces apretó el botón que ponía "SSA" (sistema de secado automático) y sintió como un chorro de aire caliente le fue dirigido también al mismo lugar, el tipo no se lo podía creer.
Memorándum recibido por los empleados de una empresa...
La agarraron de un tirón y la apoyaron sobre mis piernas, yo estaba sentado en el sillón y ella estaba en posición perrito con la cabeza sobre mis piernas a 15 centímetros de mi pija, ella me miro a los ojos y no podía evitar ver mi pija, pues estaba enorme y muy cerca de ella, sus ojos estaban llenos de lagrimas, rojos, comenzaron a cogerla entre los 3, pasaban 1 minuto cada uno aproximadamente, la cogían con fuerza
Me les acerque y como un balde de agua fría, por la sorpresa, le comencé a chupar su coño a mi mejor, quien en primera instancia se quedó sorprendida, pero el hecho de tener un pene en su boca y una lengua en su coño continuo sin disimulo sus momentos de placer.
Yo deseaba follarla, era el deseo de todos los hombres de la empresa, así que aprovechando que estaba mamando la polla a Juan me coloqué detrás de ella y se la hundí en su coño.
Y ahí estaba yo en el auto, esperando, como un colegial de secundaria nervioso, la verdad es que no sabía hasta donde podía llegar con ella, Lu me había dado a entender que quería todo conmigo pero yo no estaba seguro, igual y a la hora de la hora me dejaba con un palmo de narices y la verga dura.
Después de pasar el vendaval, de la presentación de su novia. Rut y Mía se hicieron muy buenas amigas. Pero en el fondo Rut envidiaba a la futura esposa de su padre. Debido a el estrecho, laso de amistad que unió a las dos jóvenes. Rut decide ser ella quien organizará la despedida de soltera de Mía.
Y sin mas, empezó a pasar una rasuradora eléctrica por el pecho. Resultaba agradable, así que cerré los ojos y me relajé. La máquina avanzaba a buen ritmo, de modo que enseguida pasó a limpiar el vientre. Luego me pidió que levantara los brazos y se concentró en los sobacos. Antes de que me diera cuenta, ya estaba atacando el vello del pubis.
Ya, como lo ultimo del día, me dijeron que tenia que llevar un ultimo sobre y de ahí me podía ir a mi casa. Era un cliente nuevo que hasta ahora no había ido nunca. Agarre mis cosas y fui para allá.
Las dos iban sobrias y me pidieron si no me importaba dejarlas en su casa ya que sus respectivos, grandes amigos nuestros también, estaban en un estado próximo a la inconsciencia, cantando a voz en grito y abrazados entre si la canción de moda.
Vinculada a un grupo de amigas de colegio me dejé llevar por el enigma y el misterio de una fiesta en la que, sin haberlo siquiera imaginado, tuve mi primera y única experiencia zoofilica electrizante con un Labrador dorado quedando más de treinta minutos literalmente fundida con el can y confundida ahora.
Mi vida seguia transcurriendo igual, con constantes humillaciones y vejaciones, siguieron las temporadas de caza y sufrí la violación de todos los hijoputas que me traia Paco, el tiempo pasaba muy deprisa, tanto que cuando quise darme cuenta mi hijo era casi un hombre con quince años, casi no lo conocí cuando lo ví entrar, se parecia mucho a su padre aunque tenia mis ojos, le quise dar un beso pero apartó su cara, no le culpo para el casi era una desconocida.
De pronto empecé a sentirme inundada por una riada de caliente semen que con la fuerza de un grifo empezó a golpearme en lo más profundo de mí, lo que disparó en mi interior el más brutal orgasmo que jamás había sentido y que seguro nunca sentiré.
Alicia era mi mejor amiga, era muy simpática y una morenaza muy guapa; tenia unas curvas de escándalo, aunque de cara no destacaba. Su fuerte eran sus tetas y su culo. Yo la deseaba y por fin un día se hizo realidad mi sueño, no sin la ayuda de un amigo mio.