Mi vecina me espió
Este relato me acaba de suceder el fin de semana pasado, sucede que ya en ocasiones había descubierto a mi vecina espiando por mi ventana y como francamente eso me excita, el día sábado pensé en darle un premio extra así que abrí de par en par la cortina mientras salía del baño y escogía que ropa me pondría, ese día me visitaría una ex compañera o mejor dicho ex amante de la prepa.
Mientras buscaba en mi armario pude ver con emoción que mi vecina estaba ahí como todos los días observándome, pero ahora no se molesto en esconderse tras su cortina como antes, por el contrario permaneció de pie frente a su ventana, debo decirles que la distancia entre ambas ventanas no superaba los 4 metros y la ventana de mi cuarto es de piso a techo, así que ella podía observarme desnuda por completo.
Después de mucho buscar, opte por ponerme el conjunto de encaje que me había regalado mi hermano, es una tanga de hilo dental y un pequeño triangulo de encaje al frente, el bra es de 1/3 de copa transparente, mi liguero y medias, todo en color lila, me pondría también mi minifalda negra y una blusa moradita. Salí de mi cuarto sin voltear a ver a mi vecina, salí a la tienda a comprar unas sodas y me la encontré en el camino ambas nos saludamos como si no supiéramos nada, me pregunto si tendría fiesta o porque tan arreglada, le dije lo de mi amiga, no pudo disimular una mueca de enfado, se despidió al mismo tiempo que preguntaba a que hora llegaría mi amiga, me despedí y le dije que alrededor de las 16:00 hrs.
Durante buena parte de la mañana sonó el teléfono sin que nadie me contestara, me supuse que era alguien que quería saber si me encontraba en casa, o tal vez alguien me cuidaba de que no me saliera (después supe que era mi vecina)
Mi amiga siempre ha sido muy puntual y exactamente llego a las 16:00 hrs. como habíamos acordado, después de comer mientras platicábamos de que habíamos hecho en 9 meses de no vernos, pasamos a la sala, yo no podía dejar de observarla se veía exquisita, usaba un mallon negro, un top rojo y un saco negro, casi nunca usaba ropa interior y hoy era uno de esos días, le pregunte si quería algo de tomar y me pidió un tequila, seguimos platicando largo rato, yo me encontraba algo intrigada, no sabia si nuestro encuentro seria solo de amigas o retomaríamos nuestros juegos de antes, les contare que aunque llevábamos 1 año 9 meses sin vernos, teníamos poco mas de 2 años sin sexo entre nosotras.
Ya como a eso de las 7 de la noche me pregunto «Aun tienes el gusto porque tu hermano te fotografié desnuda» le conteste que no solo aun tenia el gusto, sino que ahora hasta fotos masturbándome tenia que si las quería ver, ella me respondió que si y subimos a mi recamara que es donde tengo la compu, a los pocos minutos de estar ahí pude observar que mi vecina ya se encontraba en su ventana lista para ver que hacíamos y conocer a mi amiga Vanesa, Vanesa es bajita, delgada de cabello corto, con senos grandes y firmes, y que decir de su vagina es muy peluda y se moja muy fácilmente, si piel es blanca como la leche, en fin es un encanto de mujer.
Vanesa veía mis fotos y una si la sorprendió, estaba yo con un consolador en mi ano y uno mas en mi vagina, me dijo que así nunca lo habíamos hecho juntas, le comente que en este tiempo había aprendido muchas cosas como esa, me pregunto que donde y le confesé que desde hacia ya dos años tenia sexo con mi hermano todos los días y juntos habíamos practicado mucho de lo que veíamos en Internet, así que me sabia muchas cosas nuevas. Les aclaro que en casa solo vivimos mi hermano y yo.
Me pidió que le mostrara mis juguetes, los saque del armario y los tocaba y los tocaba como queriendo que cobraran vida propia, le mostré uno nuevo, era uno doble, es decir tiene cabeza de pené de ambos lados, ella me pregunto que como lo usaba, (siempre fue muy tonta para eso del sexo, y casi siempre yo llevaba la batuta en nuestros encuentros pasados) le dije que en ocasiones me metía una parte en el ano y el otro extremo en la vagina o jugaba en compañía de alguna amiga, esto la dejo sorprendida y me dijo » Aun sigues teniendo sexo con chicas» a lo que respondí «Claro que si siempre lo hago con chicas o con mi hermano», note algo de rubor en sus mejillas al tiempo que me pregunto si no me dolía meterme algo tan grande, le dije que no que mi lubricación era buena y mi vagina aceptaba de todo. Ya no pude aguantar mas y le dije que si quería probar el juguete.
Me dijo que le daba miedo, no le respondí, solo la acosté en mi cama y empecé a rozarla con el juguete sobre su ropa, no tardo mucho en manchar el mallon, recuerdan que les dije que se mojaba muy rápido, le quite es saco y le rozaba su estomago y sus senos, ella no perdió tiempo y me saco la falda y la blusa con una rapidez que me sorprendió, yo le quite el top y mientras chupaba y mordisqueaba sus pezones jugaba con el pené de platico sobre su vagina aun cubierta por el mallon, se saco ella misma el mallon y dejo a mi vista esa preciosa vagina jugosa, ya para estos momentos estaba empapada por la excitación, deje de besar sus senos para pasar a besar su estomago y bajar poco a poco hasta su vagina, que sabor tenia, estaba deliciosamente mojada, le abrí las piernas y le pedí que se relajara para empezar a jugar, lentamente y sin dejar de chupar su clítoris le fui metiendo el juguete hasta la mitad, después de todo la otra mitad me tocaba a mi, cuando estuvo penetrada, me levante y me acomode delante de ella de forma que ese gran pedazo de plástico pudiera penetrarme a mi también, cuando estuvimos penetradas y unidad por ese gran pené, comenzamos a movernos despacio al principio y cada vez mas fuerte hasta que ambas alcanzamos un gran orgasmo juntas, me retire el pené y le pedí que se pusiera a gatas (como perrito) y ahora le chupe su estrecho ano, al menos a mi nunca me dejo penetrarla por ahí, así que debía de aprovechar su momento de excitación, se lo chupe hasta que estaba bien mojado, le introduje un dedo y se lo sacaba y metía lentamente, ella mientras se metía y se sacaba el pené en la vagina, cuando vi que su ano estaba listo, tome el otro extremo de mi juguete y se lo puse en la entrada de su pequeño orifico, al principio no quería pero era mucha su excitación y solo me dijo «despacito, por ahí nunca ha entrado nada» cuando al fin entro gran parte del juguete en ella, estaba como perra moviéndose y gritando, me pedía que lo moviera mas rápido y fuerte, la deje un momento para sacar otro juguete igual y usarlo yo, cuando ambas estábamos penetradas por ambos lados ella movía el juguete que tenia dentro de mi y yo le movía el que la estaba partiendo en dos según ella.
Creo que aparte de mi vecina que no se apartaba de la ventana, todos en el vecindario se enteraron por nuestros gritos de placer, así conseguimos dos orgasmos mas, al terminar permanecimos un ratito acostadas, besándonos tiernamente, ella quería quedarse a dormir pero me dijo que mi hermano no le caía, así que se vistió y se marcho.
Cuando ella se fue, sonó el teléfono y oí una voz muy fingida que me pregunto «Preciosa puta siempre eres así de caliente» yo solo dije si y colgué, la sorpresa fue al otro día, mi vecina no apareció en la ventana como siempre y debo decirles que si la extrañe pero ni modo yo tenia prisa por llegar a la escuela, regrese de la escuela y me la encontré casi en la puerta de mi casa, llevaba una caja como de zapatos envuelta para regalo, se acerco y me dijo » se que hoy es tu cumpleaños y te traje un regalo, se despidió y sin decir mas se fue, yo me metí a la casa y al abrir el regalo casi me desmayo, había un juguete como los míos, unas fotos que ella tomo el día anterior de Vanesa y mías y una tarjetita que decía, «feliz cumpleaños, celebramos juntas, te espero 10:00 PM atte. Sandra».
Fue así como pase mi cumpleaños 23 con una nueva amiga, pero eso se los contare en mi próximo relato al cual titulare «23 años, 23 Horas de placer»