Mi cuñado volvió al living queriéndome explicar algo y cuando vio semejante escena me miro , lo miré y cerré los ojos con una guiñada como para darle el ok de todo lo que estaba pasando.
Fuimos a un bosque muy oscuro un poco alejado del centro de la ciudad donde se suele ir a pasar gratos momentos, nunca mejor apodado aquí como "Villa Cariño".-
Quince minutos de sexo duro con una señora de 50 años que era la madre de mi reciente novia.
La verdad del sexo contado desde una óptica muy especial. En mi cama vale todo, ¿en la tuya?
Me ausenté unos minutos del lugar para buscar la cerveza, y cuando volví, ya noté que tanto mi novia come Héctor estaban un poco nerviosos.
Pero eso no podía quedar allí, me senté nuevamente sobre su pene, y aunque costo un poco mas que la primera vez, logre meter todo ese pedazote de carne e mi culo ya dilatado, abierto y bañado en semen.