Últimos relatos eróticos:

En la tienda de muebles de baño

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Al ver que yo no decía ni hacía nada, viendo que me había quedado paralizado, él empezó a restregarme aquel enorme bulto, viendo que yo me dejaba hacer. Ahora ya no solo era su paquete el que se restregaba a mí, ahora sus manos ya empezaban a meterme mano.

Noche de caza V

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El calentón que tenía ya no sé dónde está. Me he olvidado de todo. Sólo puedo pensar en ese agujero oscuro que tengo ante mí y espera a ser recorrido por mi lengua.

Mi hermana me fascina

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Desde hace tiempo mi hermana menor me fascina, pero nunca pensé en ella como en una mujer hasta que empecé a leer estos relatos, y me di cuenta de que yo no era el único que sentía lo mismo por una de sus hermanas.

Mi desconsuelo

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Tu manera de susurrarme, la profundidad de tu voz, su timbre, tan sugerente, tan cálida y sensual, tremendamente varonil, tanto que hasta leyéndome el más inocente de los cuentos tu voz conseguiría excitarme.

La celebración

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Su cuerpo atractivo y su costumbre de vestir siempre muy provocativa unido a su personalidad alegra y extrovertida, hacían que ella fuera el gancho comercial del negocio, sobre todo por que la mayoría de la clientela eran hombres buscando regalitos para sus parejas y de paso regalarse a ellos mismos la visión de mi mujer.

La esposa de mi cliente

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Ella me miraba fijamente, sin apartar su mirada y eso hacia que mis nervios saliesen mas a flote así como mi lívido que luchaba con mis ojos para no bajar mi mirada en dirección a su escote.

Marina II

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Si bien Marcelo cada día era más ocurrente e inventamos mil maneras de hacer el amor, nunca en verdad me satisfacía. Me calentaba de manera alocada y yo enardecía por tener su miembro dentro de mi vagina lo más urgente

Telenoticias noche

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La mujer de cabello corto caminaba con pasos cortos y rápidos por el pasadizo, fumando nerviosamente aunque no estuviese permitido en aquella santa casa, escasamente rondaba los treinta y escondía sus ojos azules detrás de unas gafas oscuras de moderno diseño.

Bruno, el jovencito seducido

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Me quedé allí mirando, viendo como el más mayor, le daba por el culo al más joven, hasta que pude ver que ellos se dieron cuenta de mi presencia. Dios, me estaba poniendo palote viendo aquel espectáculo, pero al ver que ellos se habían dado cuenta de mi presencia, me aparté un poco, pero sin perder de vista como le estaba dando por el culo el más mayor al más joven.

Te vi de lejos

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Me acerqué a la ventana, estabas de pie, impoluta y brillante, tu sombra sensual me llamaba, sentía tu olor en mi cara, deseaba estar cerca de ti… pero te vi de lejos

Mi angel

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Mi primera clase al comienzo fue un desastre nadie se sentaba ni mucho menos se callaba hasta que llego ángel y se sentó y por supuesto todos los siguieron y fueron a sus lugares fue así como me fueron conociendo como el profesor y empezaron a respetarme, las clases eran fáciles era increíble lo rápido que aprendían.

La peluquera y yo

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Es una mujer muy atractiva, de 35 años muy bien puestos. Su pelo lacio rubio y muy cuidado llega hasta la mitad de su espalda cayendo sobre sus hombros como un manantial dorado, haciendo una cascada peligrosa al momento de rodear sus pechos erectos.

Una buena cogida

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Ese día algo paso en mi cuerpo y en mi mente, diecisiete años, con un cuerpo que frente al espejo y el de otras chicas totalmente desnudo se siente atrayente, (para algunas), es de imaginar que para los hombres debe ser presa a batir, nos terminamos de bañar en el vestuario después de la clase de gimnasia

Con mi padrastro

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Se veía muy borracho, parece que había tomado mucho, para mi suerte para ese tiempo era verano y hacia mucho calor aunque teníamos el aire acondicionado prendido, para mi suerte cuando entro a ver si el estaba en su cuarto,

Noche de caza IV

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Mi coño arregladito, con mis ingles y mi rajita completamente limpias de bello es el centro de atención. Hasta Cristina me está mirando y preguntándome qué hago en ese estado.