Todo eso me calentó más y empecé a gemir y gritar. La verga de Rafael entraba y salía de mi concha mojada, empujaba cada vez más fuerte. Sus manos me sujetaban por los hombros para que yo no pudiera moverme, me empujaban hacia abajo y así recibía todo el impacto cuando me clavaba a fondo.
Te he visto muchas veces dormir, pero hoy cada vez que te miro me pareces aún más guapa, me gustas más, me atraes más, será que debo estar hoy aún más enamorada de ti que ayer, pero seguro menos que mañana.
El otro estaba mirando todo esto, y estuvo a punto de correrse también, entonces me dijo, quiero que me hagas llegar a mi, y sin esperar nada, me metió su palanca a la boca, que ya estaba bien parada de todo lo que veía y de comerse mis senos.
Lleva un sujetador negro que atrapa unos pechos abundantes, una minifalda negra con cremallera en un costado y, como he dicho antes, unas apetitosas medias negras y zapatos de tacón del mismo color.
Le tumbé sobre la cama puse a sus espaldas una almohada y comencé a pajearle, su verga era áspera y no estaba muy dura, pero su cuerpo y su manera de comportarse eran muy excitantes, acariciándome el cuello me iba invitando a que le comiera la polla.
Y se fue abriendo, despacio, y sonreía ahora sabiendo que cada segundo que pasaba iba aumentando mi deseo, ahora era ella la que mandaba sobre mí, la que se tomaba todo su tiempo para calentarme, la que se sabía dueña de la situación.
Atrapo tus pezones entre mis dedos y enseguida se ponen erectos y muy duros, mmm...ahora soy yo quien lo dice separándome un poco de tu boca para poder respirar. Sigo besando y mordisqueando tu cuello y tus hombros mientras aun te cojo los pechos y estoy entretenida en tus grandes pezones, poniéndote con el tacto de mis manos.
Me fui a mi casa, satisfecho por haberlo hecho gozar y por haber probado tan rica verga, iba pensando en lo que habíamos hecho y estaba decidido a chupársela cuantas veces quisiera y donde quisiera, para mi fue algo maravillosos y sabía que lo tendría en la escuela.
Me acuesta en la cama y se monta encima mio, siento el calor y la humedad de su cuquita, en mi pene, ella me besa con fuerza, y decide bajar a mis tetillas, las muerde, y pellizca, se esta vengando de todo lo que le hice, lo cual me encanta, vuelve a besarme, mientras una de sus manos baja a mi pene, lo acaricia mientras me besa por el cuello y la boca.
Sentí algo frío que bajaba por mis pechos, un hielo quizás... sii um se derretía al contacto con mi piel, chupaba las gotas de agua que se deslizaban, yo gemía y gritaba mientras le pedía que siguiera, que bajase hasta mi sexo y disfrutara, que me hiciera disfrutar.
Me corrí abundantemente, a la vez que sentía un mareo que nunca antes había sentido y un cansancio fuera de lo normal... Jessy no dejaba de absorberme los jugos, antes de que mi vista se nublara del todo vi como me soltaba, sus ojos tenían un brillo y una mirada diabólica..
El que en todo momento me había complacido, se levanto, me acomodo boca arriba y separo mis piernas y empezó una deliciosa sesión de lamidas en mi ano, que bueno ya estaba bastante lubricado y distendido, sin embargo me hizo elevar mi excitación todavía mas, luego puso mis piernas en sus hombros y apunto su cabeza a mi centro de placer
Me pidió que se la chupe, que quería acabar en mi boca. Comencé a chupar entonces, y casi sin quererlo mi mano metió nuevamente uno de sus dedos en su culo, él sólo decía "seguí...seguí". y yo seguía.
Al mismo tiempos se corrió. y por tercera vez pude ver como salía chorros de su vagina...y como su culo se tensionaba provocando con esto que sus músculos internos apretaran mi verga era como sentir como una mano si unas mano te apretara la verga, de su chocho no dejaba de salir chorros de sus jugos.. nunca vi a una mujer tener esos orgasmos... hasta que no pudo mas y se dejo caer de espaldas...
La historia que voy a contar, es completamente real y bueno aunque hace tiempo que se esta fraguando ha llegado el momento en que ha pasado lo que se intuía que iba a pasar y por eso he decidido contarlo a todos ustedes en este momento.
Debe ser que cogió fuerza de la otra polla o del hecho de sentirme más poderoso, con aquellas dos herramientas follando a la vez, que pude aguantar sin ningún problema el tiempo que tardo el comenzar a correrse, y menuda corrida.
Resulta que este verano quedamos con mi novia que iría yo a pasar unos días de mis vacaciones a su casa, ya que ella como es médico de urgencias y todavía no le darían todavía sus vacaciones; o sea, que decidí ir yo.
El bajaba su lengua por mi cuello mientras me abría el vestido y sacaba mis tetas del sujetador, las apretaba con fuerza y con su lengua deleitaba mis pezones, ya tiesos y duros, apuntando firmemente hacia su boca pidiendo ser lamidos.
Se levantó bruscamente, me echó boca arriba y puso su pene cerca de mi boca... yo no sé cómo entendí lo que quería... lamí su pene y lo mojé bien... él con la otra mano, sacaba más jugos de dentro mío y los untaba entre mis senos... puso su pene entre ellos y yo lo presioné cerrando mis tetas una contra otra... las cuales lo rodearon fácilmente y cubrieron una buena parte de él...
No me ve los ojos por las gafas de sol, pero veo que me recorre con los suyos insistentemente. Intento parecer natural, y sin variar de postura le digo, claro!, ofreciéndole el bote de aceite.
En cinco minutos estaba desnudo y en la ducha. Me besaba como desesperado, me decía que lo del micro le había encantado y que quería probar qué mas sabía hacer.
No tuve que repetirlo, ella se abalanzó sobre mi vagina y metió su lengua en ella y yo no hice mas que gozar del momento, Berenice me besaba los senos mientras su hermana me cogía, Vianey metió uno de sus dedos en mi sexo mientras me mamaba y eso me puso de a mil, sentía que me desmayaba de tanto placer pero me dediqué a disfrutar del momento.
Se trata de una temática no encontrada en internet. Soy un chico joven al que sólo le interesa el sexo oral con ingestión de fluido incluido, para lo cual somete a una mujer como esclava a satisfacerlo diariamente con dicho procedimiento.
Mientras tanto Carla, que no había quitado la mano de mi sexo, comenzó a moverla lentamente con movimientos circulares, al tiempo que sonreía y me derretía con sus ojos celestes.
Al momento de estar allí dentro estábamos de nuevo besándonos y mordiéndonos nuestras lenguas y yo no pude evitar hacer algo con lo que había soñado tantas veces poner mis manos sobre aquellas dos nalgas que estaban esa noche bajo una faldita no demasiado corta pero bastante ancha sin dejar de besarnos mis manos entraron por debajo de su falda y se posaron de nuevo en su culo apretándola contra mí y haciéndola sentir mi paquete que se había puesto muy duro.
Cuando estuve bien lubricada Carlos me acomodo y comenzó a follarme entraba y salía de mi vagina con fuerza disfrutaba mucho mirando como Nicole era follada al igual que yo y como a Luis Andrea y Laura le mamaban el pene mientras Mónica estaba montada en su cara recibiendo una rica mamada.
Sin hacerme de rogar, saqué la lengua y empecé a lamer aquella húmeda raja de abajo a arriba, incluso alguna que otra vez llegando al agujero de su culo que también lamía, provocando que la chica lanzara profundos gritos de gusto.