Con cierta sorpresa y alguna dosis de pudor, pero sin dudarlo procedí a quitarme la ropa y a colocarme el arnés, apretando las correas sobre mi pecho, glúteos y muslos.
Habíamos quedado con Jesús y Pepa para cenar en un restaurante de la costa.
Les voy a contar una historia que me sucedió hace un par de años. Yo estoy casado hace 4 años y con mi esposa somos muy felices, nos gusta hablar mucho y más cuando se trata de sexo ya que no nos reprimimos nada.
Una pareja sale a cenar a un restaurante poco frecuentado y poco a poco van excitando al camarero que los atiende hasta llegar a invitarle explícitamente a unirse al juego sexual.
Un joven enseña a su mujer a realizar otros juegos eróticos, en los que el sexo anal y los tríos, juegan un papel importante, y muy satisfactorio.
La parejita vuelve a la casa donde sus amigos están también disfrutando en una habitación. Después de la comida se juegan a suertes quien lava los platos. Nuestra protagonista y el novio de su amiga salen a dar un paseo. Al volver, los que quedaron en la casa están follando. Y ellos se suman a la diversión, juntos en el mismo salón.
Unos amigos marchan un fin de semana a una solitaria casa en el campo. Para dejar solos un rato a la pareja, nuestra protagonista y el otro amigo se van al río a bañarse. Pero el agua no refresca ni aplaca su deseo y terminan gozándose en la orilla.
Una amiga del matrimonio provoca un trío no deseado por la esposa. Por causa de los celos mortifica a su marido hasta que éste propone que hagan otro trío pero con un segundo hombre. Con reticencias iniciales ella acepta...
De vacaciones en la playa, dos parejas llegan a un intercambio muy satisfactorio con el morbo añadido de ser familia.
Una pareja se ha puesto de acuerdo para introducir a una tercera persona en su juego amatorio.
Nuestros protagonistas viven una primera experiencia de intercambio en la que disfrutan plenamente del placer del sexo a cuatro, sin complejos, sin celosa, entregados a gozar sin tapujos de los cuerpos de los otros.
Si hay acuerdo en la pareja sobre las experiencias que quieren disfrutar juntos, el incluir a otra persona en su cama puede ser tremendamente placentero...
Después de un viaje de negocios increíble en que la mujer la pasa follando con un buen puñado de hombres, le plantea al marido que desea ser follada en tríos y que él participe o mire, según guste.
Un hombre entra en su dormitorio encontrándose a su esposa medio desnuda, con un amigo y viendo una película porno. Es el principio de una caliente cadena de sorpresas, confesiones y sexo.
Una pareja fantasea con la idea de meter a un tercero en la cama para un juego sexual, pero no terminan de cumplir su idea hasta que él habla con su mejor amigo...
Dos parejas se excitan a tope mientras ven una película porno. Las chicas planean hacer una buena orgía...
Una pareja va de viaje a Cancún para celebrar su aniversario de bodas. Allí encuentran en el hotel a una enigmática y formidable mujer que cautiva completamente al marido. Su esposa arregla un encuentro...
El marido fantasea con que el hombre de una pareja amiga posea a su mujer. Así una tarde de domingo propicia el encuentro del que no pierde detalle.
Una pareja va a pasar unos días a una casa en la playa junto con otra pareja. Lo que era meramente una relación de compañeros de trabajo se va haciendo más íntima. El ambiente se caldea y termina en un tórrido intercambio de parejas.
Una pareja viaja hasta la maravillosa ciudad de Acapulco para encontrarse con un amigo. Primero un paseo por la playa y después la deliciosa unión de los tres cuerpos deseosos de darse placer, con generosidad, sensualmente...