Una pareja de amantes se encuentra en un apartamento disfrutando una tórrida tarde de amor y sexo.
Un joven recibe una felación de su tío después que ambos han visto el pene de uno de los vecinos del pueblo en las duchas de la piscina. El mismo pene que luego recibirá su tía.
Una chica encuentra sus fetiches en la ropa interior y sus zapatos, disfrutando a tope con los de su tía, que al final termina siendo su amante y desvirgando su ano con un consolador.
Relación entre un sobrino y su tío.
Su vida continuó con la misma rutina de siempre. Bueno, exactamente igual no. Ahora se había vuelto más presumida, más coqueta. Sabía que podía gustar. Sabía que había gustado por lo que podía volver a gustar a los hombres.
Maruja era la conserja del instituto del barrio. Era una mujer de cerca de cuarenta años de edad. Con unos hijos adolescentes y con un marido aburrido. Con este panorama sin horizontes su vida era cada vez más amarga.
Un empleado de un estudio de arquitectura es progresivamente sometido y humillado por su jefa.
Terminamos nuestra luna de miel y volvimos a Buenos Aires. Yo recogida y Luis mas cornudo que nunca y sumamente sumiso.
Llega la boda de esta curiosa pareja, donde él es un cornudo feliz y consentido. Desde la noche de bodas a la luna de miel, todo es un río de goces y cuernos.
La protagonista de nuestra historia continúa poniéndole los cuernos a su marido que adora ver cómo la poseen.