Síguenos ahora en Telegram! y también en Twitter!

Efectos de leer los relatos

Efectos de leer los relatos

Ayer, en principio iba a ser un día normal, llegué a casa después de ir al médico con mi hija y de hacer unas compras, me cambié de ropa y me puse cómoda con un pantalòn y camiseta sin sujetador, con la idea de no salir ya.

Y como mi amante, mi amor, mi vida no estaba accesible para estar o hablar conmigo, decidí conectarme a Internet para ver si tenía algún correo de mi chico que me hiciera sentirme junto a él aunque estuviera lejos.

Tenia varios, pero sobre todo me leí y releí dos, dos correos adjuntándome dos relatos subidos de tono que Marcode1 había escrito de nuestras aventuras y que me había remitido una vez que han sido publicados en una página de relatos, pero que a mí, a parte de escandalizarme un poco me ponen a 100, me excitan, me vuelven loca, sobre todo porque es como si él me lo estuviera reviviendo de nuevo porque sé que salen de su corazón y de su cabecita, en fin, que cuando acabe de leerlos estaba tan mojada, excitada, que comencè a tocarme los pezones por encima de la camiseta aunque no tardè en hacerlo directamente, y sentir unos pechos duros, que el deseo que tenia hacia que hasta me dolieran de excitación.

Así que, contándoselo a él que me llamó durante un rato, le dije que iba a masturbarme, haciendo lo que tanto le gusta y excita, meterme en la ducha y controlar y dirigir el chorro del agua a un puntito maravilloso para correrme de una manera tan fantástica que no os lo podéis imaginar, solo cuando lo hagáis y en verdad que a algunas amigas a las que se lo he contado han conseguido esos orgasmos maravillosos y me han llegado a confesar después, de forma totalmente eufóricas y sin sentido, que para que necesitan que las follen si de esa forma están en un éxtasis de placer, lo que para mi, repito no tiene sentido, a él lógicamente le encantó la idea, y cuando colgué, bueno no, antes de colgarle ya se me estaba ocurriendo otra idea más excitante aún y que yo sabía que a él le iba a gustar.

¿Cómo no iba a estar tan excitada?.

Después dé haber leído como dos pollas entraban y salían de mi cuerpo y de cómo las manos de mi amor y alguna otra me tocaban estos pechos que ahora estaban tan duros y ansiosos, de que los chuparan, tocaran y pellizcaran, de cómo esos dedos maravillosos me penetraban y me hacían gozar hasta tal punto que solo de imaginarlo ahora siento que me vuelvo a poner cachonda.

En fin, me baje a controlar donde estaban mis hijas para que no me interrumpieran, me fui a la cocina y cogí un “buen” plátano que casualmente había comprado esa misma tarde, lo envolví en papel de plástico de cocina y me encerré en el cuarto de baño, pensando en mi amor y en todo lo que hace por mí, para mí, para que sea feliz, y en cuanto le quiero, puse una toalla en el suelo del cuarto de baño, otra toalla doblada debajo de la cabeza como almohada, me tumbé y me baje los pantalones y las braguitas hasta los tobillos, aunque a continuación y en un movimiento rápido me los quité completamente, en ese momento estando desnuda, me quedé pensando cuanto le gustaría a mi chico verme de esa manera y observar lo que iba a hacer.

Mientras con una mano me tocaba los pezones, con la otra me metí el plátano en “mi agujerito” que estaba completamente empapado, lo que no me costó ningún trabajo introducirlo hasta bien adentro, lo deje ahí y flexioné las piernas, abandonando los pezoncitos, de forma que mientras mis manos frotaban el puntito y con las piernas flexionadas también movía el plátano dentro de mi rajita, estaba tan excitada que no pude aguantar mucho y enseguida me corrí, aunque como siempre hago con mi chico, lo prolongué un poco para gozar antes de llegar a un orgasmo maravilloso, aunque no me quedo más remedio que morderme los labios para no gritar del placer que estaba experimentando y que no me escucharán mis hijas.

Fue indescriptible, sobre todo sabiendo que él estaba pensando en mí, y que iba a disfrutar cuando se lo contara como estoy haciendo ahora mismo.

Al terminar y estando aún en el cuarto de baño desnuda en el suelo y con mi cuerpo aún excitado, le mandé un mensaje al móvil diciéndole “Orgasmo maravilloso yo mimosa y temblorosa plátano caliente y blando yo sigo queriendo mas quiero que me folles tq”.

Me lo imagine en su reunión, leyendo el mensaje, gustándole, excitándole y deseando terminar cuanto antes, para llamarme si todavía no estaba mi marido en casa y haciendo planes para follarme en la primera oportunidad que apareciera.

¿Qué te ha parecido el relato?


Descubre más desde relatos.cam

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo