Chantaje o placer IV

Capítulo 4

Se puso a chupármela con empeño, hasta que me corrí, me la limpio muy bien, se acurrucó a mi lado.

-Quiero quedarme.

Ni le contesté, me di la vuelta y me eché a dormir.

Así terminó el último capítulo…

Cuando me desperté por la mañana, aún estaba a mi lado, en silencio, y con los ojos muy abiertos. Realmente me levanté cansado, estaba reventado y empalmado, sin avisarle, me subí en lo alto y empecé a follármela, la muy PUTA estaba muy mojada.

-Que PUTA eres, me encanta que estés así para mí.

Se limitó a sonreír.

-No lo puedo evitar, he soñado con todo lo que pasó anoche y nada más abrir los ojos, he tenido un orgasmo.

Mientras la follaba, no hacía nada más que recordarle cual iba a ser a partir de ahora sus obligaciones, le abofeteaba la cara, cosa que aún la encendía más.

Cuando fui a correrme se la saqué, la puse de rodillas, se la metí en la boca.

-Trágate mis dos corridas GUARRA.

Al principio no entendió, pero cuando recibió primero mi leche y después mis meados sí que entendió, a pesar de las arcadas no escupió ni una gota.

-Vístete y vete PUTA, ni se te ocurra limpiarte hasta que no llegues a tu casa.

Me miró con cara rara, no dijo nada, se levantó, se vistió y se dispuso a irse.

– ¿Qué va a pasar ahora?

Me limité a recordarle que a las dos debería de estar en el trabajo de su cuñada, que allí recibiría instrucciones en persona o la llamaría, que tenía que limitarse a obedecer estuviese o no. Me duché y volví a la cama, no tenía sueño, si cansancio y tenía que pensar en Ana y Yolanda, con Lorena lo tenía muy claro, la iba a convertir en mi esclava y si todo salía como esperaba no la volvería a ver hasta la semana siguiente, si algo tiene Toñi, es que es muy buena educadora de perras sumisas, más inclinadas a ser esclavas y servir, que a disfrutar siendo folladas y usadas. Pensando en que hacer me quedé dormido y eso que no tenía sueño, no despertándome hasta la una de la tarde. Me volví a meter en la ducha, me vestí y salí dirección a la óptica, pensando en que ya iría improvisando, sinceramente me gusta más, que planear. Llegué a las dos y cuarto a la óptica, la puerta estaba cerrada, pero estaba seguro de que estaban dentro. Toqué a la cristalera, en seguida apareció Ana, uffffffffffff, de infarto la muy PUTA, se le veía el final de la media con el principio de la falda, algo que a mí me excita y me pone a cien, por muchas veces que me haya corrido, también me di cuenta de que estaba roja como un tomate, como si hubiese discutido con alguien, imaginé con quien y por qué.

Entré, cerró la puerta y bajó la persiana, nos metimos en el despacho donde la usé por primera vez, y vi Yolanda, totalmente distinta, esta es más puta, pero parecía menos al lado de Ana, no tiene el mismo cuerpo, tampoco estaba mal, los mismos botines de la noche anterior, una falda vaquera corta y medias, por la cuenta que le traía claro. También estaba alterada, sin saludar si quiera…

– ¿Qué ha pasado aquí Ana?

En Ana veía una vena dominante, por eso me dirigí a ella. Ana me miró y un poco aturullada…

-Mi cuñada nada más llegar ha empezado a recriminarme que este engañando a su hermano, que eso no se hace, que si tal que si cual…

Me estaba enfadando, en el fondo me gustaba, me daba un motivo para castigarlas y putearlas más.

-No tenías que haberlo consentido, tú eres MI PUTA, pero ella es menos que nada, no sirve ni de GUARRA, no sé porque no le has dado un buen bofetón y la has puesto en su sitio.

No me equivoqué sabía que ella era domina, se volvió y sin más le soltó un bofetón que a los dos, lo reconozco, nos pilló de sorpresa y no se quedó ahi, la cogió del pelo, la tiró al suelo. Me limité a sentarme y observar, quería ver hasta donde era capaz de llegar. Se levantó la falda y no llevaba bragas, cada vez me gustaba más esta ZORRA, le puso el coño en la boca.

-Cómemelo GUARRA, voy a ver si eres tan mala comiendo coños como el cornudo de tu hermano, eso es lo que va a ser a partir de ahora un cornudo, voy a follar con quien mi SEÑOR diga, y tú no eres nada, solo eres basura, para usarte GUARRA más que GUARRA.

Estaba alucinado y contento con no equivocarme en ver que era. La tenía bien cogida de la cabeza y restregándole el coño por la boca, que no paraba y ponía empeño, quería demostrar que era mejor que el cornudo y se lo estaba haciendo muy bien.

-SEÑOR ¿me da permiso para correrme en la boca de la GUARRA?

-Es toda tuya, úsala a tu antojo.

Soltó un grito que hasta se sintió en la calle y empezó a correrse, con tal intensidad que se tuvo que apoyar en la mesa que tenía al lado para no caerse. No tardó en recuperarse, la miró y le soltó otro bofetón.

-Déjame el coño limpio GUARRA.

Resignada y excitada, empezó a limpiárselo con su lengua, Ana siguió sorprendiéndome, sin avisar se meó en la boca de su cuñada, cogiéndola del pelo y escupiéndole en la cara…

-Como se te caiga una sola gota, -algo imposible- la vas a limpiar con la lengua GUARRA.

Era inevitable, no le daba tiempo a tragar y se derramó bastante, la volvió a coger del pelo y le hundió la cara en el suelo obligándola a limpiar el suelo con la lengua. Estaba alucinado y tremendamente excitado, me había sacado la polla, me la estaba acariciando y a punto de correrme de cómo estaba.

-Súbete en mi polla PUTA, deseo follarte.

Se empaló, empezó a subir y bajar y mirando a su cuñada

-Mira cómo me folla mi SEÑOR, mira cómo se va a correr dentro de mí, mira cómo me preña GUARRA, mira como hago aún más cabrón y cornudo a tu hermano. Se lo suplico SEÑOR, córrase dentro, préñame, quiero sentirle dentro.

No lo dude me vacié dentro.

-Quiero preñarte, quiero hacer más cabrón al cornudo, quiero verlo cuidar y alimentar a mi hijo, jajajaja.

Cuando terminé se levantó, se quitó, se acercó a su cuñada que estaba de rodillas mirándonos, con la mano metida en el coño masturbándose y sin más le soltó un bofetón, otro más.

– ¿Qué haces?, una putilla y GUARRA como tú, no es nadie para tocarse sin mi permiso o el de mi SEÑOR,

Cogiéndola del pelo la arrastró hasta donde yo estaba.

-Limpiale la polla a MI SEÑOR, si se queda satisfecho, lo mismo dejo que te corras GUARRA.

Sabía que en eso es la mejor, no me equivoqué, debido a mi excitación no tardé nada en empalmarme.

La cogí de la cabeza con brusquedad y empecé a follarle la boca, sin importarme sus arcadas. Ana se acercó por detrás con una regla y empezó a azotar el culo de su cuñada

-Esto es lo que mereces GUARRA y el cornudo de tu hermano también, si MI SEÑOR me da su permiso, no voy a parar hasta verlo humillado junto a ti.

No pensaba que saliese todo también y menos que Ana se entregase tanto como lo estaba haciendo. De repente y sin avisar Yolanda empezó a correrse, entre los azotes y la mamada que me estaba dando empezó a convulsionar con una corrida fuerte, parecía que no acababa nunca, a Ana le fastidio más e iba a azotarla más fuerte.

-Quien te crees que eres para correrte sin permiso, eres una GUARRA de MIERDA, no tienes derecho a hacerlo, ni yo lo hago sin permiso…

Se estaba descontrolando un poco y aunque llevaba razón, era yo el que llevaba la voz cantante, le paré los pies.

-Para PERRA.

Levanté a su cuñada del suelo y viendo el culo que lo tenía marcado, la apoyé en la mesa y se la metí sin miramientos, de golpe en el culo, sintiendo su grito, la estuve follando por el culo, mientras le tiraba del pelo y le decía que a partir de ahora cuando no estuviese yo, su cuñada era su dueña por y para siempre. Me corrí dentro de su culo y se la saqué de golpe, que la hizo gritar nuevamente, para demostrar quien mandaba.

-De rodillas y límpiame la polla PUTA, comprueba a que sabe el culo de la GUARRA de tu cuñada.

Se arrodillo y mirando fijamente a su cuñada a los ojos empezó a chuparme la polla, a darme lametazos para dejarla limpia muy limpia, lo hizo y muy bien. Di por terminada la limpieza, no quería empalmarme otra vez, tampoco sé si podría, la levanté.

-Me ha gustado lo que has hecho con esta GUARRA, pero es obligación tuya curar las heridas de su culo.

-Ahora mismo SEÑOR, aun debo de aprender muchas cosas de Ud.

Sacó una crema de su bolso y apoyándola en la mesa empezó a untarle la crema y a curarle su dolorido culo. Me di cuenta de que Yolanda estaba excitándose otra vez y que trataba de ocultarlo por miedo a recibir otro castigo. Se lo había ganado.

-Termina de curarla y cómele el coño a la GUARRA de tu cuñada.

Quería comprobar lo que iba a tardar la GUARRA en correrse. A los dos minutos de meterle la lengua en su coño volvió a correrse intensamente, quedándose destrozada en el suelo. La imagen me gustó, Ana de rodillas, la falda enrollada en la cintura, sus bonitas piernas enfundadas en una medias negras con costura atrás, un zapato de tacón alto y los pezones que parecían que se le iban a salir de su camiseta de pija o mejor dicho de PUTA PIJA, Yolanda, desnuda, solo con los botines y las medias, estas llenas de razas y empapadas, tirada en el suelo, recuperándose de la corrida. No esperaba que saliese todo tan bien.

-Arreglaros y recoger todo esto, vienen dos días de fiesta y si el sábado tu compañera se encuentra esto patas arriba, se va a llevar un susto, jajajaja, sí que lo va a oler, huele a PUTA y sexo que tira para atrás.

Lo dije poque sabía que Ana no trabajaba ese día, como todos los años. El contraste era hasta gracioso, Ana parecía una señora, PUTA, pero señora y su cuñada una GUARRA PUTA, porque no la dejé lavarse solo recomponerse la ropa y el pelo totalmente revuelto. Al salir a la calle, que nos vino bien el aire…

-Cuando salgas esta tarde te quiero bien vestida GUARRA y no en plan de PUTA barata cómo has venido esta mañana, no sé si te llamaré, si me apetece usarte quiero que estés dispuesta en todo momento y por supuesto si sales con la PUTA de tu amiga Inma, nada de follar con nadie, ese derecho mientras estés en Granada lo has perdido GUARRA. –Agachando la cabeza-, si SEÑOR, estaré dispuesta para lo que Ud., desee.

-Sé que os vais a Sevilla y no vuelves hasta el viernes por la mañana, no quiero que el cornudo te toque, invéntate lo que quieras pero que no te toque PUTA y quiero tu móvil disponible, a cada mensaje que te envié, tienes dos minutos para contestar, si no a tu regreso lo sentirás en tus carnes, usaras vaqueros sin bragas, quiero que tu coño sienta el roce, te quiero excitada, y ni se te ocurra correrte, confió en ti PUTA, espero que no me defraudes.

-Confié en mi SEÑOR, esta PUTA le pertenece y si quiere no voy a Sevilla y mando al cornudo solo con los amigos.

-No, ve, por ahora está bien, el viernes por la mañana nada más llegar dejas al cornudo y te quiero en mi casa.

-Así será MI AMO.

Se dio la vuelta y en su condición de domina.

-GUARRA, búscate la vida para irte a tu casa, con la pinta que llevas no te quiero a mi lado, jajajaja, solo pensar lo animadas que van a ser a partir de ahora las fiestas familiares, estoy mojada, jajajaja.

Nos dimos la vuelta y echamos andar en dirección al coche de Ana, dejándola allí, no miramos ni una vez para atrás.

En el coche…

-Acércame a casa PUTA.

Me dio las llaves…

– ¿Quiere conducir Usted?

Me pareció raro, cogí las llaves y nos subimos en el coche, y sorpresa, la PUTA antes de sentarse se subió la falda y se sentó sobre su culo

– ¿Le gusta MI SEÑOR?, he leído algo y espero que le guste.

Metí dos dedos en un coño que estaba húmedo, acercándome le comí la boca a lo que respondió con fuerza y pasión. Arranqué el coche y me dirigí a casa, mientras le acariciaba su pierna, me encanta el tacto de las medias en mi mano, más cuando pasabas de la media a la carne, suspiraba y mantenía los ojos cerrados, muy segura de sí misma, cualquiera que se parara al lado de nuestro coche le vería muy bien el coño, mantenía las piernas abiertas, me hubiese gustado, pero no se dio el caso, una vez en casa.

-Me has excitado PUTA, sube conmigo, necesito usarte, follarte.

Se bajó y demostrando su entrega, no se bajó la falda hasta que estuvo fuera del coche, en el ascensor como no podía más le subí el jersey que llevaba y empecé a morderle los pechos con ansia, suspiraba y gemía, menuda PERRA había descubierto. Le quité la chaquetilla y la camiseta, le subí el sujetador y la dejé así en el ascensor. Al entrar en mi piso no podía más y en la entrada la puse de rodillas y se la metí en la boca, empecé a follármela, cuando vi que no iba a tardar en correrme la levanté, la metí en mi cuarto y poniéndola a cuatro patas en la cama se la metí.

-Voy a usarte solo para mi placer PUTA, voy a correrme dentro de ti, ni se te ocurra correrte, te vas a ir así a Sevilla, llena de semen de tu SEÑOR y caliente como la PERRA que eres.

-Lo que Ud., diga AMO, como si quiere que haga al cornudo limpiarme el coño con su semen dentro, es tan inútil que ni se daría cuenta.

-Me corroooo PERRA…

-Préñeme AMO, será un honor estar preñada de usted.

Me salí de ella, se dio la vuelta y me limpio la polla y cuando la dejo limpia, se levantó se recompuso la ropa.

– ¿Necesita algo más de su PUTA?

La besé.

-No PUTA, puedes irte con el cornudo y buen viaje.

CONTINUARÁ…

Soy Amo, me encanta la dominación, me gusta tener, someter y humillar a parejas y a quien se quiera iniciar, necesitar un tutor o conocer este estilo de vida.

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