En mi anterior relato les contaba como fue mi transformación de niño en mujer, ahora, y atendiendo los correos que he recibido, voy a contarles cómo llegué a sentirme mujer.
Desde que tengo uso de razón recuerdo que me atraían mucho las prendas y ropas de mi hermana, ella era un año y poco mayor que yo; cuando ella se iba a casa de alguna amiga a jugar yo me metía en nuestra habitación (compartíamos la misma habitación) y me probaba sus vestiditos por encima de mi ropa, eso era al principio, luego solía ponerme sus zapatos
Yo no quería abrir los ojos, por que ya sabia lo que me esperaba, pero me acorde de mi hermana y la busque con la mirada y se encontraba en el suelo, también le habían bajado el pantalón y le habían abierto su blusa, ella se retorcía en el suelo, pero uno de los tipos la sostenía de las manos mientras el otro acariciaba sus piernas.
No pude hacer nada mas que emitir gemidos de protesta, y como pude, apoye mis pies en sus caderas, y empuje, tratando de sacar su herramienta de mi, pero el cabrón me jalo hacia el con fuerza, y me sostuvo mientras sentía que un liquido caliente me llenaba completamente mi vagina.
Este otro también escogió mi culo para penetrarme. Sentí que se esculpió en el, para lubricarme. Y después lo tenia dentro de mi, entrando y saliendo, como poseso. El si me lastimo. Entraba y salía completamente, sentía sus huevos golpearme en cada ensartada. Me sentí morir, su vaivén me estaba matando. Al cabo de unos segundos, termino, llenándome de leche nuevamente mis entrañas.
Pero el no me escucho, se acerco a mi y me dio un fuerte bofetón, que me tumbo sobre el capo de su carro. Se acerco a mi, sentí su pene presionando mis nalgas, me jalo del cabello y me obligo a levantarme. Me puso su pistola a un lado de mi boca y me ordeno que la chupara. Yo no podía ver, me lo impedían las lagrimas.