Agustín no puede creer que tras 10 años de relación con Estefanía incluyendo 7 de matrimonio, que ambos estén tan enamorados como el primer día. Comparten la pasión por la abogacía y llevan su trabajo con el mismo profesionalismo.

Tanto Agustín (37 años) como Estefanía (35 años) pertenecían al prestigioso bufete de abogados «Estudio Jurídico Cordero y Asociados» legado de la familia de Agustín y encomendado por su padre Franco Cordero. A quien admiraba profundamente, se había convertido en un abogado respetado y temido en los tribunales. Ella, por su parte, destacaba por su ambición desmedida y una destreza innata para el derecho. Ambos eran conscientes de que el bufete, con sus veinte abogados especializados en derecho penal y social, debía su prestigio a la asesoría legal que brindaban a empresas de alto nivel.

Agustín recordaba en su departamento tomando un whisky mientras su esposa Estefanía se duchaba de aquella vez. Que en cuando en las casas de los corderos padres de Agustín este último en sus primeros pasos en la relación con Estefanía la presento y luego de una cena tanto franco como bárbara quedaron maravillados con Estefanía más allá de su belleza, su inteligencia y la gran persona que demostraba ser. Lo gracioso fue que esa noche ella se quedó a dormir en esa casa, y en la habitación de Agustín las sábanas de su cama fueron testigo de la pasión desatada entre ellos. El tema era que tanto franco como bárbara escucharon todo ya que su habitación estaba al lado.

Cuando los primeros rayos de sol se colaron por la ventana del otro día, Agustín y Estefanía se despertaron abrazados, ajenos al pequeño detalle de que su tórrida noche de pasión había tenido un público inesperado. Al levantarse, notaron un silencio extraño en la casa. Al bajar hacia la cocina se encontraron con bárbara preparando el desayuno. Esta mira Estefanía.

¿Bárbara – pudiste descansar algo o no? – dándole la taza a Estefanía

Estefanía – si algo, pudimos dormir – con mucho nerviosismo

Bárbara – no se notó – en ese momento Agustín toma la palabra

Agustín – perdón mama no pudimos contenernos –

Franco – saliste a mi jajaajajj – justo apareció en la cocina

Los 4 terminaron riendo.

La noticia había llegado como un balde de agua fría: el bufete de abogados Cordero, fundado por su padre Franco, estaba al borde de la quiebra. La muerte de su esposa, había dejado a Franco sumido en una profunda tristeza, descuidando el negocio familiar y acumulando deudas.

Agustín, con el peso de la responsabilidad sobre sus hombros, sabía que debía actuar con rapidez. El bufete no era solo un negocio, era el legado de su padre, el sustento de su familia y el símbolo de años de arduo trabajo.

Tras analizar la situación, Agustín llegó a una conclusión: la única forma de salvar el bufete era cerrar un trato con Roberto Lobos (presidente de una de las empresas más importante en el rubro de la construcción) un empresario influyente y con fama de ser un hueso duro de roer. Lobos, era un cliente potencial muy valioso, pero también un negociador implacable que no se andaba con rodeos.

Agustín se preparó para la reunión que logro gracias a Lautaro (un viejo amigo que conoció en la adolescencia) con James González gerente de recursos humanos y que acepto ver el proyecto y entrevistarlo. Sabía que tendría que usar todas sus habilidades de persuasión y negociación para convencerlo de que invertir en el bufete Cordero era una apuesta segura.

Vale comentar que todo esto se realizó de manera exprés en 3 meses

En la reunión, Agustín se presentó en la oficina de James con un plan bien definido. Le expuso la situación del bufete, las deudas, pero también el potencial de crecimiento y la calidad de los profesionales que lo conformaban. Lobo escuchó atentamente, sin mostrar ninguna emoción. Al finalizar la presentación, Lobo soltó una sonrisa y le dijo:

James –Me gusta tu determinación, Agustín. Pero para cerrar este trato, necesito algo más que buenas palabras ya que tenemos a otros interesados. –

Agustín, sin inmutarse, le respondió:

Agustín – Estoy dispuesto a ofrecerte una participación en el bufete y asegurarte un retorno de inversión en un plazo determinado. –

James – bien puede ser que a eso le interese a señor Lobo –

Agustín – además puedo ofrecerle junto a usted y al señor Lobo, una cena bastante divertida –

James – nos estamos entendiendo mejor – riendo – bueno organiza todo y me avisas, desde ya te digo que somos 3 –

Agustín – perfecto déjeme arreglar todo – se dieron las manos y se despidieron

La importancia de que la firma del estudio creciera tanto para Agustín y Estefanía era feroz, pero también alimentaba una atracción irresistible. Por eso era necesario cerrar el trato con james y que este ayude a convencer a Roberto lobo para representar su empresa de forma legal.

En el ámbito de las empresas, es sabido que la mayoría de los puestos ejecutivos están ocupados por hombres. Su gran capacidad económica y la libertad de acción que poseen al pasar largas temporadas fuera de casa los hacen propensos a la promiscuidad y, principalmente, a contratar escorts para amenizar sus encuentros y fiestas.

Tanto él como Estefanía no pretendían cambiar esa realidad. Siempre se necesita de la compañía de esas mujeres, así que se ofreció a ayudar

Él, como principal persona del estudio, necesitaba llevar la negociación de mejor manera, y estaba atento a las necesidades de los hombres que asistían. El junto a Estefanía quería llevar esto a cargo sin necesidad de que se entrometiera Franco ya que si o si necesitaban ese contrato para salvar el bufete ya que si no todo lo construido por su familia y en especial su padre además de puestos de trabajo se terminaba y especialmente el bueno nombre de los corderos. Para esto Agustín debió ser transparente con Estefanía sobre el evento y a pesar de que puede ser extraño.

Esto ya lo han hecho y para evitar inconvenientes y levantar sospechas, contrataron en ese momento a unas acompañantes para pasaran la noche o solo un buen momento con quienes se negociaba, él, aunque nunca tuvo nada con ninguna de ellas, ya que no se sentía con el valor de estar con una escort. Más bien por su fidelidad con Estefanía y por la salud de sus huevos.

En ese caso, acordaron con una chica llamada Cindy, quien se encargó de contactar a una amiga suya del mismo ámbito. Se reunieron en un bar, donde Cindy estuvo con Agustín y su amiga con la otra persona. Luego, fueron a un hotel donde cada uno se dirigió a una habitación. Por supuesto, Agustín y Cindy solo pasaron el rato sin hacer nada, mientras que en la otra habitación se divertían. Afortunadamente, todo salió de la mejor manera.

En esta ocasión, el asunto se complicó, ya que sus competidores de otro estudio trataban de cerrar el contrato y debían actuar rápidamente. Se comunicó con Lautaro, el asistente de Roberto, a quien se acercaron para llevar el proyecto, pero fue James, el jefe de recursos humano con quienes no había tenido el primer contacto para que este lo aprobara. Con un par de cenas más, solo debían organizar una nueva reunión para cerrar todo, una con un final feliz para todos. Estefanía no había participado en estas negociaciones, ya que estaba más atenta al llevar el estudio en las responsabilidades que también llevaba Agustín, mientras que él negociaba (Esto paso de 3 meses a 6).

En esta ocasión él se encargaba de los preparativos para la fiesta, pero debido a complicaciones en su horario, pidió ayuda a su esposa para que realizara los contactos y preparara los detalles, como el hotel, el bar, el catering y, por supuesto, las acompañantes para el final feliz.

Como no había mucho tiempo Estefanía y no encontraron lugares disponibles

Estefanía –Agustín, sé que estás dudando sobre la reunión ya que no encontramos donde hacerlo. Pero creo que esta situación y contra reloj, hacerlo en casa de tus padres es la mejor opción. –

Agustín – estas loca, Estefanía. Llevar putas a la casa de mis viejos me preocupa que se den cuente, porque, aunque parezca una locura debo ser profesional en esto también y no recibirlos en un ambiente familiar. – casi a los gritos que se escucharon en todo el edificio donde viven

Estefanía – bueno tranquilito que estoy tratando de ayudar, es mi trabajo quien también corre riesgo –

Agustín – tenes razón mi vida disculpa, pero es que no se – ya mucho más tranquilo

Estefanía – sé que es difícil, pero lo vamos a lograr – lo abraza y le da un pequeño beso

Agustín – pero te parece hacerlo ahí? –

Estefanía – Al contrario, creo que esto puede jugar a nuestro favor. Mostrarles un ambiente cálido y acogedor (guiña el ojo) puede generar confianza y cercanía, podemos decirle que lo alquilaste así cree que no escatima en gastos –

Agustín – Pero, ¿Qué pasa si algo sale mal? ¿Si la reunión no funciona?, que hacemos con las fotos nuestras y todo lo que nos representa en mi familia ese lugar? –

Estefanía – mi vida, sé que estás nervioso. Pero confío en vos y en tu capacidad para cerrar este trato. Además, ¿Qué es lo peor que puede pasar? Necesito que vos también confíes en mi yo me encargo de que no se note nada familiar, oculto nuestras fotos y la de tus viejos. Y si funciona, habremos salvado el bufete

Agustín – si mi ángel, obvio que confió, pero es arriesgado – piensa un poco con un trago de whisky que se sirve – está bien, si no queda otra –

Estefanía – bien, no te preocupes vos sabes que nos es fácil para mi tampoco tengo que hablar con las chicas, es raro, pero te amo y amo tu familia. Y soy de esta familia y de este estudio, que te quede claro – le guiña el ojo mientras también se sirve un vaso de whisky – y no les diga putas a las chicas –

Agustín – bueno entonces quedamos en esto, y no te preocupes angelito mío no las llamare putas os prometo – levantando la mano como cuando en el colegio se juraba a la bandera.

Estefanía era una mujer de mundo y, aunque no estaba acostumbrada al trato directo con estos temas, tampoco se alteraba ni se comportaba mojigatamente. En muchas ocasiones se habían divertido con las anécdotas y los fiascos que estos asuntos solían traer. Esta vez, Estefanía trataba de lucirse y había ido a limpiar la casa de sus suegros, guardo todo tipo de fotos donde estaban ellos para que no se sintiera ofuscado los invitados con un ámbito familiar, como dando a entender que la casona fue alquilada. También se encargó de la comida, la bebida y, lo que más le costó, las cuatro acompañantes para la fiesta.

El día esperado era un 10 de junio, era un sábado para hacerlo más cómodo. el día anterior Estefanía y Agustín ultimaban detalles del plan en el estudio.

Estefanía –Agus, ¿ya tienes todo listo para la cena? –

Agustín – Si todo. ¿Vos pudiste hablar con Cindy? –

Estefanía – Sí, ya está todo arreglado. Las chicas van estar ahí. –

Agustín – Perfecto. ¿A qué hora? –

Estefanía –Vos no te preocupes vos avísame cuando tienen que llegar y listo. Yo misma las buscó y las llevo a la cena. –

Agustín –  Excelente. ¿algo más? –

Estefanía – No, por el momento todo está cubierto. Voy a estar atenta a cualquier cosa que se te ofrezca durante la cena –

Agustín – Gracias, sos un ángel. Eres la mejor. – dándose un fuerte abrazo en el despacho de Agustín

Estefanía – No hay de qué. Va a salir todo perfecto –

Agustín –Va ser gracias a vos. De ese contrato depende todo lo que mi viejo construyo y mucho puesto de laburo junto con el estudio –.

Estefanía – Lo sé. Tenemos hacer que se firmen ese contrato de mierda. –

Agustín –. Por eso es tan importante que todo salga perfecto. – ¿Y cómo vamos a hacer con lo de la casa de mis padres? –

Estefanía – no se van a dar cuenta de eso amor ya lo resolví –

Agustín –Perfecto. Gracias –

Estefanía – Lo hago por vos, y por nuestro futuro. Y no lo hago sola, lo hacemos juntos –

Agustín – ¿Y qué hay de la chica que me toca a mí? –

Estefanía – Ella estará allí, va a ser Cindy y obvio no le vas a coger –

Agustín – ¿Qué? ¿Por qué no? – de forma graciosa

Estefanía – porque te corto la pija entro y te la rebano – riendo

Agustín – menos mal que ella es de confianza –

Estefanía – lo sé, es necesaria. confiemos en ella también. –

Agustín – no puedo creer que en mi casa va a ver cogedero terrible y yo nada. – riendo

Estefanía – Cuando salga todo bien te voy a dar una buena recompensa –.

Agustín – podría comenzar ahora –. Y comienza a besarse con lengua

Estefanía – no acá no –

Agustín – dale hace lo que sabes hacer con la boca –

Estefanía – si dar buenos argumentos para ganar juicios. ¿a eso te réferis? – de forma sexy

Agustín – no lo otro –

Estefanía – pedimelo –se lo dice en el oído

Agustín – haceme un pete – de la misma manera en el oído de ella

Franco (Entrando) – ¿De qué están hablando? –

Agustín (Nervioso) – De la cena con Señor Lobo, papá. –

Franco – Ah, sí. Es muy importante, Agustín. Tenemos que conseguir que ese contratos se firmen. –

Agustín – Lo sé, papá. Estamos trabajando en ello. –

Franco –Confío en ustedes. Sé que lo lograrán –

Estefanía – Gracias, Franco. No lo defraudaremos –

Franco – Eso espero. El futuro de la firma depende de ustedes, y les agradezco yo tendría que estar en su lugar perdón –. Se pone triste y tanto Agustín como Estefanía lo abraza

Agustín –No te preocupe, papá. Todo saldrá bien, además ya me tengo que hacer cargo un poco de esta herencia. –

Franco – por supuesto que todo es tuyo como también de cada uno y sé que lo vas a lograr por el estudio, por vos y Estefi. Además, por tu madre. –

Agustín – claro viejo además Estefi está conmigo en todo –

Franco – ese fue un logro, conseguir una mujer como ella – tomándole las manos a su nuera

Estefanía – obvio que sí, pero esta es mi familia y estoy dispuesta a todo por lograrlo y lo vamos a lograr – (A Agustín) ¿Ves? Tenemos que hacerlo por Franco, y por el estudio –

Agustín – Lo sé. Lo haremos bien –

Franco – lo dejo y gracias, pero si no se llega, no se preocupe de otra manera –

Estefanía – no hay otra manera esto delo por hecho, lo de la firma le aseguro que lo de por echo –

Franco – tiene razón mi hijo, vos sos un ángel –

Agustín – el lunes vamos a estar festejando el contrato viejo –

Agustín llegó a la casona del campo que era una vieja casa antigua que la han ido modernizando de poco pero sin dejar de lado ese estilo con el tiempo y con el corazón de el latiendo a mil por hora. Estefanía se había encargado de borrar todo rastro familiar, creando un ambiente completamente nuevo y desconocido. Un escalofrío recorrió su espalda al darse cuenta de que este era el lugar donde se definiría el futuro del legado familiar y del estudio.

La tensión se apoderó de él durante todo el día, como un jugador que espera el partido más importante de su vida. Cada minuto que pasaba lo acercaba más al momento crucial. La gloria o el purgatorio lo esperaban al final del camino.

Cuando la noche comenzó a caer, Agustín se preparó para la ocasión. Se duchó y se vistió con un pantalón negro ajustado, zapatos a juego y una remera azul oscura. Su atuendo reflejaba la importancia del evento.

Todo se haría en el mismo escenario. Agustín esperaba a sus invitados con un buen banquete y mucho alcohol La espera se hacía eterno los minutos interminables además había comenzado a llover, mientras observada por el desde el ventanal con una copa de vino.

De repente comienza a sonar su celular. Era una llamada de Lautaro, el atendió casi excitado

Lautaro – hola agus, estamos llegando, me dijiste que era la entrega de rejas verde donde hay dos árboles? –

Agustín – si exacto, de ahí pasas por el sendero que te trae hacia la casa, los portones están abiertos ¿pensaba que no venían? –

Lautaro – imposible, la fiesta no nos la perdemos ni loco amigo –

Agustín – me imagino – de alguna una manera se alivio

Parecía que le dijo 5 horas. Por suerte apareció un mensaje de WhatsApp de su esposa

Estefanía “y cuanto falta, ya llegaron?”

Agustín “estén cerca ya y yo me muero de nervios”

Estefanía “a mi vida estás acostumbrado a todo esto “

Agustín “pero esto es difícil.”

Estefanía “es diferente, pero tómalo como un reto especial”

Agustín “yo se que acuerdo es bueno y que el contrato se va firmar, además cuando lleguen las chicas va querer firmar hasta su sentencia de muerte. Hablando ojala que Cindy este hermosa para mi”

Estefanía “jaajajaj mi abuela esta hermosa para vos”

Agustín “igual quedamos en que ellos iban a elegir. Y la que sobre me la llevo yo”

Estefanía “si eso ya lo arreglé también, pero le tocas un pelo y te corto la chota mi amor”

Agustín “jajajaj bueno estate lista ahí llegan”

Estefanía “éxitos amor”

Agustín “te amo”

De pronto ve unas luces. El momento había llegado, una camioneta Toyota Crown color roja.

Lo estacionaron a unos metros de la casa en una pérgola al lado del auto de Agustín.

Este salió con un paragua. Estos 3 bajaron Lautaro era flaco y alto muy parecido a Batistuta de la misma edad de Agustín (vestido de todo de negro), james es colombiano de unos 50 años con pelo blanco y de buen físico (con un pantalón Marrón y camisa blanca con una camperita). Roberto es un hombre de unos 55 años gordo (vestido de traje azul y camisa celeste además de un pañuelo rojo en cuello)

Agustín – bienvenidos – y le da la mano a cada uno de ellos.

Al saludar a Roberto este que tiene un reloj y un anillo de oro que demostraba que es una persona de altísimo nivel incluso para la familia cordero

al entrar los invitados quedan encantado con el lugar

Roberto – el lugar es realmente hermoso, te felicito por tu elección Agustín ¿te molesta que no te trate de usted? – se notaba que era una persona seguro de si mismo serio pero amable y de ser una persona influenciable hacia los demás incluso con Agustín

Agustín – no para nada, si a usted no le molesta que lo llame por su nombre? –

Roberto – entonces tuteémonos –

Tras una buena investigación lograron descubrir que el señor lobos era fanático de la comida japonesa y oriental.

Lo cual fue el menú de la noche como también el primer triunfo de la noche porque les encanto.

Mientras sr lobo está en el baño Lautaro le comenta que una nueva firma les ofrece un mejor trato pero que a lobos le es indiferente pero que no se preocupe que seguro que firmara con ellos ya que lo noto muy satisfecho en la cena.

Roberto —Excelente velada, Agustín – decía, mientras ser servían una nueva ronda de vino—. Todo parece excelente… Ya lo único que me preocupa es la capacidad financiera del estudio… Tengo mis dudas si será solvente… —

Agustín —Por supuesto, Roberto, no cabe duda… Si podemos ver los balances… —contesto todo lo que me consultaban y, claro, con la firme certeza de que realmente no había problema.

James —No creo que se pueda ver en papeles… — mientras impedía que este abriera la carpeta—. Roberto se refiere a que si la empresa no puede costear una pequeña cena como esta… ¿Qué será de sus finanzas? —

Allí comprendió todo, lo que en verdad querían era que empiece la diversión y ver si realmente el trabajo de todo este tiempo con la excelente fiesta. Todo estaba dicho y Agustín tenía la esperanza de que ya no había inconvenientes para la firma.

Agustín —Por supuesto, James, no te preocupes…Justamente a esta hora ya debían estar aquí los bocaditos que pedimos, dame un segundo y seguro resuelvo el tema —dijo

la lluvia se había intensificado pero Agustín dio a entender que nada impidiera que lleguen las chicas, entonces este fue hacia la cocina y llamó a Estefanía , quien estaba esperando que le dé la orden de comenzar la segunda parte del plan como si fuera una agente de control y seguridad.

Agustín –Estefanía, ¿todo listo para la cena con Roberto Lobos y sus socios? –

Estefanía – Sí, Agustín. Ya confirmé con las chicas. Todo está listo –

Agustín – Perfecto. ¿vienen las cuatro? –

Estefanía – bueno falta una, porque tuvo un inconveniente de último momento. –

Agustín – ¿Cómo que un inconveniente? Necesitamos que estén todas. Roberto Lobos es muy… particular con esas cosas. –

Estefanía – Lo sé, Agustín. Intenté conseguir otra chica, pero con la lluvia y justo sábado a esta hora es imposible –

Agustín – Esto es un problema. ¿Qué vamos a hacer? Roberto no va a estar contento si no están todas las chicas. –

Estefanía –  Lo sé. ¿Qué tal si te llevo a las demás chicas y mientras busco a otra? –

Agustín – No lo sé, Estefanía. Me preocupa que Roberto se dé cuenta de que no son las mismas. Es muy observador. –

Estefanía – Tenemos que intentarlo. No tenemos otra opción. –

Agustín –mejor espera, busca la que falta y yo los entretengo un poco. –.

Estefanía – está bien amor –

Agustín – señores debemos esperar un poco más, pero lo aperitivos están más que confirmados que llegan – efusivo a sus invitados

Roberto – bien lo mejor siempre se hace desear –

Lautaro – seguro que son de alta calidad –

Agustín – si esperamos, no se van a arrepentir –

Roberto – bueno tampoco que se tarden tanto –

Agustín – no por supuesto les sirvo un par de tragos? –

James – eso me interesa –

Agustín se puso a preparar un manhattan para Lobos, como también 2 mojitos para james y Lautaro

La conversación aliviano la espera y las anécdotas del señor lobos sobre su familia sus ambiciones logradas sus formas de amar a las mujeres como si fuera solo un objeto. Frases como “las mujeres son como el tejado si no las colocas bien se van con el viento” produciendo risas de sus “amigos”

Agustín mientras esperaban trato de apurar la firma del contrato, pero james lo paro enseguida

James – espera el trato se cierra cuando la noche se termine ¿Qué pasa con las chicas? el ¿camino se inundó y no pueden llegar? ¿se averió el carro? – de manera soberbia

Agustín – yo solamente quería ya deja todo firmado,para relajarno luego –

Roberto – no te preocupe eso lo decido yo –

Estaban todos sentados en los sillones bebiendo y Lautaro vio que necesitaba acudir en la ayuda de Agustín

Lautaro – Agustín, dijo que nos podíamos quedar a dormir –

Roberto – eso es verdad? – sonriendo

Agustín – por supuesto, quiero que se sientan cómodo –

James – eso suma bastante amigo mío –

Agustín – gracias –

Roberto – escúchame podemos elegir los cuartos –

Agustín – claro, quieren verlos –

Agustín – Estefanía, ¿todo listo para la cena con Roberto Lobos y sus socios? –

Estefanía – Sí, Agustín. Ya confirmé con las chicas. Todo está listo. –

Agustín – Perfecto. ¿Vienen las cuatro? –

Estefanía – Bueno, falta una. Tuvo un inconveniente de último momento. –

Agustín – ¿Cómo que un inconveniente? Necesitamos que estén todas. Roberto Lobos es muy… particular con esas cosas. –

Estefanía – Lo sé, Agustín. Intenté conseguir otra chica, pero con la lluvia y justo sábado a esta hora es imposible. –

Agustín – Esto es un problema. ¿Qué vamos a hacer? Roberto no va a estar contento si no están todas las chicas. –

Estefanía – Lo sé. ¿Qué tal si te llevo a las demás chicas y mientras busco a la que falta? –

Agustín – No lo sé, Estefanía. Me preocupa que Roberto se dé cuenta de que no son las mismas. Es muy observador. –

Estefanía – Tenemos que intentarlo. No tenemos otra opción. –

Agustín – Mejor espera, busca a la que falta y yo los entretengo un poco. –

Estefanía – Está bien, amor. –

Agustín – (Dirigiéndose a sus invitados con entusiasmo) Señores, debemos esperar un poco más, pero los aperitivos están más que confirmados que llegan. –

Roberto – Bien, lo mejor siempre se hace desear. –

Lautaro – Seguro que son de alta calidad. –

Agustín – Si esperamos, no se van a arrepentir. –

Roberto – Bueno, tampoco que se tarden tanto. –

Agustín –  No, por supuesto. ¿Les sirvo un par de tragos? –

James –  Eso me interesa. –

Agustín se puso a preparar un Manhattan para Lobos, como también dos mojitos para James y Lautaro.

La conversación alivió la espera, y las anécdotas del señor Lobos sobre su familia, sus ambiciones logradas y sus formas de «amar» a las mujeres (como si fueran solo un objeto) llenaron el ambiente. Frases como «las mujeres son como el tejado, si no las colocas bien se van con el viento» provocaron risas de sus «amigos».

Agustín, mientras esperaban, trató de apurar la firma del contrato, pero James lo paró enseguida.

James _  Espera, el trato se cierra cuando la noche termine. ¿Qué pasa con las chicas? ¿El camino se inundó y no pueden llegar? ¿Se averió el carro? (Dijo de manera soberbia) _

Agustín _ Yo solamente quería dejar todo firmado para relajarnos luego. _

Roberto _ No te preocupes, eso lo decido yo. _

Estaban todos sentados en los sillones bebiendo, y Lautaro vio que necesitaba acudir en ayuda de Agustín.

Lautaro _ Agustín, ¿dijo que nos podíamos quedar a dormir? _

Roberto _ ¿Eso es verdad? (Sonriendo) _

Agustín _ Por supuesto, quiero que se sientan cómodos. _

James _ Eso suma bastante, amigo mío. _

Agustín _ Gracias. _

Roberto _ Escúchame, ¿podemos elegir los cuartos? _

Agustín _ Claro, ¿quieren verlos? _

Pero antes decidió llamar a Estefanía nuevamente

James _ que pasa con las chicas, al jefe no le gusta esperar, si paso algo dímelo ¿si hay problemas, vamos a un puticlub y listo? _

Agustín _ no te preocupes deben estar llegando, ahí lo confirmo _

Agustín _ Hola Cariño ¿Ya llegan las chicas? _

Estefanía _ No Agus ya estoy desesperada… -contestó muy molesta- ya traté de llamar a otro lugar, pero en este momento no puede venir nadie. _

Agustín _ bueno mándalas por favor… las que estén no hay problema porque Lobos ya está con una cara de orto, y no puedo hacerlo esperar más _

Estefanía _ bueno amor ahora lo hago _

Agustín _ ya llegan chicos se complicó con la lluvia. Pero ya están _

El segundo piso de la residencia dejó a los invitados encantados. La distribución, la decoración y las habitaciones fueron del agrado de todos. La elección de las habitaciones para pasar la noche con las escorts fue unánime. Roberto Lobos justo eligió la habitación donde Agustín y Estefanía tuvieron su primera vez. Agustín, sorprendido al principio, terminó por aceptar la situación con una mezcla de incomodidad y resignación.

La medianoche se acercaba, pero las escorts no llegaban. La impaciencia se palpaba en el ambiente. James, con su habitual pragmatismo, rompió el silencio.

James _ ¿Qué pasa con las chicas? _ preguntó _. Saben que al jefe no le gusta esperar. Si hay algún problema, dímelo. ¿O prefieres que busquemos un puticlub ?

Agustín _ Tranquilo, James _ respondió _ . Seguro que están al llegar. Voy a confirmar.

En ese momento, un coche se detuvo en la entrada. La tensión se disipó y una atmósfera de alivio y anticipación llenó la sala.

Lautaro _ ¡Agustín! _ exclamó Lautaro _. ¿Por qué no preparas unos tragos mientras James y yo recibimos a las chicas?

Agustín – ¡Buena idea! _ aceptó _ Ahora mismo me pongo con ello.

Mientras Lautaro y James salían con paraguas para recibir a las invitadas, Roberto Lobos se acomodó en un sillón, con la música a todo volumen. Las puertas se abrieron y las escorts entraron una a una.

Cindy, morena y voluptuosa, luciendo un vestido negro ajustado que realzaba sus curvas. Luego, Camí, otra morena de figura esbelta, con un vestido mas colorido con . Después, Vanesa, una rubia imponente con una mirada penetrante que recordaba a una vikinga vestida de blanco.

Las tres mujeres se presentaron a los hombres, quienes respondieron con sus nombres y una sonrisa. Finalmente, llegó el turno de la última chica. Con una voz suave y una mirada dulce, se presentó como Ángela. Su belleza era tal que dejó a Roberto Lobos sin aliento.

Esa Ángel era Estefanía que sin encontrar a otra chica se decidió a que tenia que ser quien la suplantara. que justo cuando venia Agustín con los tragos y la vio el mundo se le vino abajo produciendo que la bandera callera estallando los vasos en el suelo

Ángel vestía un vestido rojo cortito y muy entallado a punto de ceder gracias a la figura de ella. todo esto junto a gran maquillaje que la hacia ver mucho mas bonita de lo que es

—¡Por dios, te ayudo! —exclamó Estefanía, o mejor dicho, Ángel, agachándose para recoger los pedazos de vidrio. Agustín la imitó, y juntos comenzaron a limpiar el desastre, ayudados por los demás, excepto Roberto, quien seguía absorto en su conversación con Cindy pero sin dejar de mirar a Estefanía

ambos fueron a la cocina

ya en la misma y con la música a todo volumen en la sala

Agustín –¿Qué carajo estás haciendo, Estefanía? –

Ella, visiblemente nerviosa, respondió:

Estefanía – Ay, mi amor, lo siento muchísimo. No se me ocurrió otra cosa. Lo había pensado cuando Cindy me dijo que la chica faltaba y, al no encontrar a nadie más, no vi otra alternativa. –

Agustín – Entiendo, pero ¿Qué piensas hacer si te tocan o algo así? – un poco más tranquilo – Creo que no debemos correr ese riesgo. –

Estefanía se acercó a él y, acariciándole el pecho, le explicó:

Estefanía – Mi amor, ya todas tienen a sus «acompañantes».  – acercándose a él y acariciando su pecho – Lo pensé bien: Cindy está con Lobos y yo contigo. –

Agustín – ¿Sabes qué habitación eligió Lobos? –

Estefanía –  la de tus viejos –

Agustín – No, la mía. En la que hacíamos el amor cuando éramos novios –

Estefanía – bueno mi amor, todo va a salir bien – insistió, dándole un beso en los labios.

Volvió a preparar los tragos y los llevó a la sala, donde Camila bailaba con James y Vanesa con Lautaro, mientras Cindy estaba con Lobos.

Mientras repartía los tragos, Agustín notó que Roberto no dejaba de mirar a Estefanía.

Agustín –¿Ves cómo te mira? –

Estefanía – Basta, deja de preocuparte – respondió ella.

Siguieron bailando un rato más y luego le pidieron a Agustín otra ronda de tragos. Al regresar, vio que Roberto hablaba con Estefanía mientras tomaba de la mano a Cindy. En otro sector, Lautaro y James se mostraban más cariñosos con sus acompañantes. Agustín repartió los tragos y tomó a Estefanía para volver a la pista.

La música envolvía el ambiente con su sensualidad. Estefanía se movía con un ritmo hipnótico que atraía todas las miradas. Su vestido rojo, ajustado a su cuerpo como una segunda piel, resaltaba cada una de sus curvas.

Ella seguía el ritmo de las demás chicas para disimular que no era una «acompañante».

Roberto, acostumbrado a tener lo que quería, disfrutaba del baile de Cindy, pero deseaba algo más.

Se acercó a Agustín y Estefanía y, con una sonrisa pícara, les propuso:

Lobos – ¿Cambiamos de pareja? –

Agustín titubeó, pero Estefanía aceptó para no quedar mal. Roberto y Estefanía fueron a la pista, mientras Cindy se quedaba con Agustín.

Agustín no dejaba de observar cómo Roberto le tocaba la cintura y el rostro a Estefanía mientras bailaban.

Lobos – Qué buenas estas, sos muy linda –

Estefanía – Muchas gracias – respondía ella –, pero ya tienes a tu acompañante. Cindy también es muy linda. –

Lobos – Claro que sí, pero vos sos más de mi gusto – insistió.

Lobos – Que halagador, pero no quiero problemas entre ustedes. ¿A qué se debe esta reunión? – preguntando porque estaban ahí

Lobos – Es una reunión de trabajo – explicó –. Mi amigo Agustín tiene un estudio donde me ofreció ser la representación legal de mi empresa.

Estefanía – Qué bien, yo de esos no sé nada –

Lobos – Aún no está cerrado, y según termine la noche veremos –

Estefanía – pero a qué se debe eso, no es buena la propuesta – preguntándole a Roberto de forma preocupada.

Lobos – si es buena, pero tengo otra propuesta – añadió – Además sé que el estudio de Agustín está en quiebra y por eso necesitan mi firma.

Estefanía –¿Cómo lo sabes? – preguntó Estefanía, preocupada.

Lobos – Hice mis averiguaciones – respondió Roberto –. Sé que Agustín debe hacer todo para que yo la pase bien. –

En ese momento, Lautaro gritó: «¡Intercambiamos!».

Y así lo hicieron. Estefanía pasó a bailar con James, Camila con Roberto, Cindy con Lautaro y Vanesa con Agustín.

Después de varios intercambios, volvieron a las parejas originales. Estefanía y Agustín se apartaron a un rincón.

Agustín –Entonces, no nos da el 100% de seguridad de que firme –.

Estefanía – Puede encontrar otra propuesta en otro lado y sabe de la situación del estudio –

Agustín – ¿Qué hacemos si quiere estar con vos? – preguntó preocupado

Estefanía –Tendré que decir que sí –

Agustín –No podría soportarlo, mi amor –

Estefanía – ¿Por qué no apuras la firma del contrato? –

Agustín se acercó a Roberto para proponerle firmar el contrato, pero él respondió que aún era temprano. Luego, volvió a sacar a bailar a Estefanía.

Lobos – ¿No les parece que hacemos buena pareja, Ángela y yo? – dijo en medio de la pista, tomándola de la cintura.

Todos respondieron que sí. Volvieron a bailar de manera más atrevida, con Roberto tocando los muslos, la cadera y hasta el culo de Estefanía, diciéndole cosas al oído que enfurecían a Agustín.

Al rato aparecieron y él dijo

¿Lobos – bueno espero que no te moleste la compañía de Cindy amigo?  – le comento a Agustín

Agustín – no para nada –

¿Lobos – genial entonces quedamos así, no hay problema verdad? –

Cindy – no para nada mientras sepa tratar a mi amiga – refiriéndose a Estefanía

Lobos – te puedo asegurar que si puedo –

Agustín vuelve a titubear y Lobos lo interrumpe comentando que va al baño

Entonces él le pide disculpa a Cindy y va a hablar con Estefanía en la cocina

Agustín – y ahora que hacemos? –

Estefanía –  y nada mi amor sabíamos que podía pasar, yo solo quise ser amable no quise entorpecer, y menos provocarlo – resuena los truenos haciendo que la lluvia se transforme en tormenta

Agustín – pero te va a coger –

Estefanía – mi vida te amo – con lágrimas en los ojos – no podemos evitarlo todo sea por el contrato, yo estoy dispuesta a todo. Decidí que quere que haga –

La mente de Agustín era un torbellino de ideas, en sus peores momentos no hubiera pensado siquiera que su esposa tuviera que entregarse a otro hombre para poder encontrar la forma de cerrar un negocio, pero en vista de cómo estaban las cosas algo en su cerebro le decía que era la única opción.

El trabajo de su familia dependía de un hilo y tenía que tomar la decisión de forma difícil

Agustín – si vos estas dispuesta yo te apoyo en todo mi amor – y se besan

Estefanía –  te amo y no lo olvides nunca –

Lobos – interrumpo – entrando en la cocina – no me estés engañando Ángela –

Estefanía – no para nada mi amor solo era un beso que le debía –

Lobos – bueno espero que a mí me des muchos – y le sonríe

Agustín – para que no haya más malos entendidos porque no firmamos –

Lobos – que pesado – de forma graciosa – después del show –

Agustín – show –

Lobos – si Cindy me dijo de un show –

Cindy – si un show no te acordas est… Ángela? – también entrando a la cocina

Estefanía – ah sí un show, es para que la noche sea mejor –

¿Lobos – buenos, pero bailemos unos lentos y después cerramos todo – dice de forma picaresca – les parece? –

Agustín – si por supuesto – lo dice mirando a Estefanía que ella con la cabeza le dice que lo haga

Son las 1.30 de la madrugada y la tormenta refleja la tristeza de Agustín el cual hizo un esfuerzo para que la noche sea perfecta y ahora ve como su amada esposa se está haciendo pasar por prostituta bailando con Roberto Lobos el único que puede salvar el legado de su familia y todo por ese puto contrato. Lo peor es que esto recién empieza

En el salón iluminaba el ambiente mientras sonaba el icónico «Is This Love» de Whitesnake. tema preferido de Estefanía y Agustín

Agustín veía como Roberto y Estefanía movían sus cuerpos al compás de la melodía. Lobos comenzó a explorar esas caderas que lo volvía loco., bajando lentamente. Ella se estremeció, no solo por el roce electrificaste, sino porque a cada instante sentía los ojos de Agustín sobre ellos, incapaz de actuar. Necesitaba que este trato se cerrara y eso lo mantenía atado a la escena, aunque su corazón se retorciera.

Agustín respiraba hondo, su corazón latía con fuerza mientras veía a su esposa entregarse a otro hombre. La necesidad de que Roberto firmara ese contrato lo mantenía inmóvil, pero su orgullo y celos ardían dentro de él. La imagen de ellos bailando, atrapados en un momento que parecía sacado de un sueño, lo consumía.

En un momento Lobos le dijo algo al oído que ella produjo que su cuerpo quedara paralizado y comenzaron a hablan donde en otro lado de la pista improvisada

Cindy – y como la estás pasando bombón? –

Agustín – bien todo bien, perdón por no darte la atención que te mereces, pero también debo atender a lo demás –

Cindy – eso lo sé, pero suéltate un poquito – y le da un pequeño beso en la boca, a lo cual es se ve sorprendido

Agustín – gracias –

Roberto – mira como me tenes – le lleva la mano a la entrepierna de él y la misma nota que su miembro esta duro

Ella retira mano y sonríe

Roberto – no te ofusque por lo dije vos ya sabes cómo comportarte –

Estefanía – si lo sé – un poco más seria

Roberto – voy al baño, ahora vengo – Estefanía le dice si con la cabeza

Se acerca nuevamente a Agustín para hablar y van a un costado

Estefanía – como seguimos? –

Agustín –  no hay nada que pueda hacer –

Estefanía –  entonces me dejas que siga adelante? –

Agustín –  me estas preguntando si te dejo acostarte con Lobos? Si te dejo – con lágrimas en los ojos y esta lo abraza

Estefanía –  te amo no lo olvides, todo lo que pase va ser fingido es solo por nuestro trabajo –

Agustín – lo sé, pero es difícil –

Estefanía – esto quizás nos ayude –

Agustín – en qué? –

Estefanía – en que vamos a ser fuerte, esto lo vamos a superar y ser una pareja más fuerte te lo aseguro –

Agustín – eso espero – ya separado mientras sonaba otro lento

Roberto – seguimos – ya había salido del baño – mi amor – extendiendo el brazo a Estefanía

Estefanía – si por supuesto estaba ultimando detalles del show –

Roberto – a que bien –

En esta ocasión sonaba otro tema romántico alma al aire de Alejandro Sanz

Roberto lobos se pone a decirle cosas al oído que hace que Estefanía se ría y posiciona sus enormes manos en la cola de ella levantando la falda dejando al aire sus nalgas encarceladas en esa tanga negra y aprovecha para darle un beso

Ella a principio se corre, pero él la vuelve a besas en los labios de parte de ella lo siguió de forma, pero él un poco más excitado.

Agustín pregunta de qué se trata ese tal show, Cindy sonriendo le dice que es un striptease, Agustín no lo podía creer que tendría que ver como su mujer se desnuda ante los demás

Estefanía –  bueno chicas vamos a prepararnos para el show – y todos aplauden

Cindy – Agus a donde nos podemos cambiar? –

Agustín – arriba en cualquier habitación – muy nervioso

Cindy – ¡vamos! – y todas las chicas suben, lo cual Agustín aprovecha en pedirle a lobos la firma del contrato

Lobos – si no te preocupes lo vamos a firmar, tu propuesta gano –

Agustín – en serio? –

Lobos – mira – y los 4 caballeros se sientan en los sillones con sus wiskis en la mano – sé que el estudio la está pasando mal y quiero darte una, además esta buena la propuesta, así que despreocúpate que después del show firmamos –

Agustín – gracias señor lobos –

Lobos – na, para vos soy Roberto o Robert –

Agustín – bueno gracias Robert –

James – ahora que linda minita le toco jefe – refiriéndose a Estefanía

Roberto –  era para Agustín, pero mi buen amigo me la cambio – golpeando su espalda

Lautaro – Bien Agus –

Roberto –  además Agustín hiciste mucho gasto así que eso yo lo valoro, la casa, las chicas vale el esfuerzo y te quiero decir que si necesita solventar los gasto o pagar un poco más a las chicas. Me ofrezco a hacerlo –

Agustín –  no es necesario, no te preocupes –

Roberto – bueno porque te digo que a mi chica la voy a destrozar esta noche –

Agustín se quedó helado y pasaron 15 minutos, ya eran las 1:30 de la madrugada y las chicas comienza a bajar

Vanesa estaba vestida con traje de enfermerita sexy, Cindy de mucamita, Camila de policía y Estefanía o mejor dicho Ángela de caperucita roja. Vaya que locura pensó Agustín justo el apellido de Roberto es Lobos y ella vestida de caperucita.

Cindy pide ayuda para poner música lo cual Agustín como dueño de la casa, así que fue y justo estaba Estefanía poniendo música

Estefanía –  y ahora dijo que si –

Agustín – no, va a firmar después de show –

Estefanía –  bueno pero te lo aseguro si o si? –

Agustín – si eso si –

Estefanía – bueno escucha, cuando me toque a mi trata de no mirarme. Haceme caso por favor –

Agustín – sí, pero porque –

James –  queremos show, queremos show, queremos show – reclamaba a los gritos junto con Roberto y Lautaro mientras las chicas bailaban en el medio de los sillones

Estefanía – dale no esperemos más –

Entonces Agustín se va a sentar junto a Roberto lobos en un sillón de tres cuerpos, mientras james está en uno individual a la derecha, de igual manera está sentado Lautaro.

Lo cual nuevamente la música comienza a sonar, en ese momento Agustín con todos los nervios se ponía a pensar que podía suceder ahora en más, pero su cabeza le hizo un flashback de que Estefanía tomo clase de stripdance con Cindy.

Tras colocar la música adecuada, Estefanía se ubicó en medio de las chicas y comenzaron a bailar sensualmente frente a ellos, cada una se contoneaba más y más, mostrando sus encantos a todos. Se podía ver cómo las curvas de Estefanía batallaban mano a mano con las experimentadas chicas que la acompañaban y que seguramente habían hecho muchas veces aquella escena. Por un momento, Agustín se quedó atrapado mirando a Estefanía como podía seguir el ritmo a la perfección.

Una a una las ropas de las chicas iban desapareciendo, Cindy era la que coordinaba todo en aquel escenario, un bello cuerpo se mostraba bajo aquellas pequeñas ropas, más aquella chica sabía aprovechar hasta en el más mínimo movimiento para ensalzar su figura. Todo estaba saliendo de película, pero pese al tremendo show, los ojos de Agustín apenas y podían desviarse de Estefanía, mantenía el ritmo y los movimientos que todas hacían.

Cuando le tocó el turno a Estefanía, se sacó la minifalda; dándose la vuelta ante los caballeros de la sala. ella muy coquetamente miraba intensamente a Roberto para dar un giro y con sus manos colocadas en la cadera moviéndolas de un lado al otro incrustando sus dedos dentro de la pollera para comenzar a bajársela lentamente hasta que cae al suelo y puede mostrar su precioso orto mientras la minifalda queda en sus tobillos.

Los gritos de James y Lautaro no se hicieron esperar, Roberto se mostraba menos inquieto, aunque se tocaba el bulto ya que los tragos hacían que se desinhibiera cada vez más. Ante cada contoneo de las chicas y mucho más con cada prenda perdida, los gritos y silbidos se hacían más sonoros en toda la habitación. Pronto Cindy también perdió su primera prenda, ella escogió quitarse una blusa que, aunque floja dejaba a la imaginación aquellos tesoros que guardaba. Dos tetas preciosas que estaban suspendidas en el aire , dejando la excitación de los hombres al máximo.

Luego puso sus manos en la parte izquierda de su cadera para quitarle el seguro a la pollera escocesa de su vestimenta de colegiala. para que de un tirón se la quite y dando giros moviendo la cola de forma muy sexual. si inclina para muestras sus hermosas nalgas al publico encasilladas en esa tanguita blanca.

Mientras sonaba «Black in Black» de AC/DC, era el turno de Camila y Vanesa. En esta ocasión, bailaron juntas. Estefanía se acercó a Agustín.

Roberto – Mi amor, qué linda que sos.– sentados junto a Agustín en el mismo sillón con Estefanía en el medio estando en ropa interior sobándole la pierna izquierda mientras besaba la oreja de esta

Cindy – vos también sos muy lindo – refiriéndose a Agustín, sentado en el apoya brazo y dándole un pequeño pico, que hizo retorcer a Estefanía de celos.

Agustín correspondió a ese beso mientras se le hacían trizas el corazón. Sin darse cuenta Roberto toma el mentón de Estefanía y la besa en la boca, introduciéndole la lengua, ella trato de retraerse pero sabia que no podía así que también le correspondió.

Agustín se paro como para acaba con todo esto aún viendo como ella le apoyo la mano en la nuca y el en su nalga

James – bien ahí jefe – aplaudiendo como lo tal para que Camila y Vanesa en ropa interior pararan, que junto a Lautaro aplaudían también.

Parece que Roberto y Estefanía eran marido y mujer, entonces Cindy también beso a Agustín y se lo lleva hacia la cocina

Agustín – Es que vos no entendes – dijo, mientras ella lo llevaba-

Las chicas ya estaban en tanga, quitándose el corpiño. Estaban siendo silbadas y aplaudidas por Lautaro y James. recobrando el espectáculo pero esta vez sumaron a Estefanía

Cindy  – si entiendo, se que es tu esposa y que quieren que ese contrato se firme – mirándolo a los ojos – y vos y yo sabemos lo que va a terminar pasando. –

Agustín – pero no se que hacer – casi llorando en la cocina

Cindy – no podes hacer nada, Tu esposa va a coger con Lobos y lo va hacer por vos, por tu familia y por el estudio para que nadie se quede sin trabajo –

Moviendo las caderas de un lado para el otro mientras suena Noviembre Rain de Guns n Roses las chicas (Estefanía, Camila y Vanesa) se propusieron a quitarse los corpiños dejando sus tetas al aire, pero Estefanía se sienta al lado de Lobos tapándoselos, mientras tanto Camila con sus pechos bamboleando se acerca donde esta sentado Lautaro.

Se arrodilla frente a este, comienza a desprenderle el cinturón de su pantalón con cara de gatita y relamiéndose los labios baja el cierre hace un lado sus calzoncillo liberando el miembro para introducirlo en la boca.

Vanesa refregándose las tetas con su manos se acerca donde esta James y este comienza a desabrocharse su pantalón para liberar su verga, ella mordiéndose los labio se arrodilla para chupársela.

Estefanía tragando saliva observaba como sus compañera en los sillones laterales subían y bajaban sus cabezas chupándoles los pitos a los señores sentado, cuando vuelve en si mira y se sorprende mas cuando ve que Roberto lobos quien estaba sentado al lado se medio bajo el pantalón junto a su ropa interior.

El miembro de Roberto era grande y gordo lleno de venas es mucho mas grande que el de Agustín, Lobos se comenzó a hacerse una paja pidiéndole a Estefanía que le mostrara las tetas.

Estefanía lo hizo y recibió que con la mano libre de este acariciaba las tetas, apretándoselas. Este tomo la nuca de ella y la fue llevando hacia la verga de él.

Con la ayuda de la mano de Roberto, esta guiaba el subí y baja de la cabeza de Estafaría, lo cual era costosa la tarea por el grosor del miembro de él.

Roberto – te gusta putita? – pregunto mientras gozaba de la mamada que le estaba propinando

Estefanía – mmmmmm see –

Roberto con la mano derecha corrió hacia un costado la tanguita y le metió 2 dedo en la vagina, penetrándola de manera violenta, y con la izquierda tocaba sus tetas que colgaba sobre el sillón.

Estefanía  – mmmmaaghhh mmamamammhggg – gemía mientras la chupaba

Las otras dos chicas seguían chupándola mientras en la cocina Cyndi y Agustín

Agustín – déjame ir a ver que sucede por favor –

Cindy – será mejor que no – poniéndose en el medio de él y la puerta

Agustín – pero no puedo dejarla sola –

Cindy – si mira vos sabes que es lo que debe estar pasando y tenes que estar tranquilo –

ella lo abraza y este va hasta la sala escapándose. lo cual ve todo lo que sucede quedando paralizado. Cindy lo toma de atrás y lo vuelve a llevar a la cocina.

tras 15 minutos la eyaculaciones de los varones comenzaron. El de Lautaro fue a atreves de una paja donde le tiro todo su semen a las tetas de Camila.

James a la cara de Vanesa, mientras Roberto si decir nada empezó a eyacular dentro de la boca de Estefanía donde quiere salir de ahí pero Roberto sostiene su cabeza para que esta trague un poco.

Esta se paro con un poco de asco se coloco el corpiño

Estefanía – buenos chicas ya li dimos su show, ahora vamos a refrescarnos – y fueron al baño mientras los hombres se acomodan sus pantalones llega Agustín con cara muy seria

Roberto – hey Agus muy buen show amigo – se levanta y lo abraza golpeándole la espalda

Agustín – me alegro mucho – dice

James – pueden ser unos tragos mas? –

Agustín – si por supuesto – tenia ganas de morirse

Mientras Agustín preparaba los tragos, Estefanía se acercó con el pretexto de ayudar a llevar las copas. Al inicio, él no atinó a decir nada, pero ella estaba mucho más enfocada y obviamente sabía qué hacer. Recordándole sus tareas, le pasó la carpeta con los contratos que Roberto Lobos debía firmar. (ella estaba con lo ropa interior roja) Eso lo retornó a la realidad y lo hizo enfocarse en lo importante nuevamente.

– Este es el momento… haz que firme… – le dijo casi en susurros, mientras tomaba su copa y la de Roberto Lobos –Ven junto a nosotros… te espero en el sillón

Estefanía – De acuerdo… voy para allá – dijo mientras terminaba de llenar los últimos vasos al tiempo que Cindy también se acercaba.

Agustín – Yo te ayudo corazón… – le dijo tras ver a su esposa dirigirse donde Roberto Lobos y sentarse en sus piernas mientras él se encargaba del resto de vasos.

No quiso ver más de lo que tenía en frente de sus ojos y se enfocó en repartir el licor con ayuda de Cindy para posteriormente sentarse al frente de donde se encontraban Roberto Lobos y Tatiana; era una escena surrealista. Allí estaba su compañera de vida sentada en las piernas de Roberto Lobos, que sin perder detalle del escote, sobaba el trasero de su esposa, que se dejaba hacer con una sonrisa.

Por otro lado, Cindy había imitado a su esposa y se había sentado en su regazo, haciendo que su mano se posara en su muslo, ante la discreta mirada de su esposa, que pese a la situación, no perdía detalle. Podía observar cómo sus ojos se clavaban en sus manos al tiempo que acariciaban la pierna de Cindy, cómo esta bella chica mordía su oreja mientras se movía sobre sus piernas. Cada detalle representaba un golpe directo a su condición de esposa. Seguramente a ambos se les carcomía el alma, pero aguantaron y siguieron adelante con aquel teatro.

Agustín – Rober… que te parece si firmamos? – dijo entusiasmado .

Roberto  – me parece genial trae ese puto contrato  – mientras todos aplaudía

Al fin firmaron el contrato ante la atenta mirada de Estefanía y Cindy. Su corazón se debatía entre la alegría del objetivo conseguido y el amargo sentir de imaginar cómo iba a terminar aquella noche. Trataba de recuperar su fuerza y seguir adelante ante la atenta mirada de todos, aunque solo su esposa y Cindy conocían su verdad. Una vez que las firmas estuvieron listas, todos levantaron los vasos y cerraron el trato con un brindis general.

Todos gritaban y vitoreaban. A pesar de su desesperación, sintió satisfacción. Se abrazaron hasta que le llegó el turno de estar cerca de Tatiana y celebraron juntos en un abrazo parco.

Estefanía – Por fin mi amor… – le susurró su esposa al oído mientras se abrazaban  –Lo logramos… lo logramos… –.

Agustín – Si mi cielo… lo conseguimos… – dijo muy alegre.

Estefanía – Ahora mi amor se fuerte … muy fuerte… Y no dudes jamás que te amo…»  – dijo mientras se separaba.

Se quedó de pie un minuto hasta que Estefanía y Cindy se separaron, dirigiéndose cada una donde él se encontraba. Estaba claro que algo habían acordado.

De su parte, tenía un plan absurdo: tras la firma, intentaría que todos tomaran todo el licor posible, de manera que fueran a dormir la borrachera y dejaran en paz a las chicas. Pero Roberto Lobos ya no quería beber más. Tras una media hora de algarabía, llegó el momento temido.

Roberto – Nosotros nos vamos a la habitación»  – mientras sujetaba de la mano a su esposa  – «Tenemos mucho que hablar…». –

Lautaro – También nosotros nos vamos… – dijeron mientras sujetaban a la cintura a su chica.

James – Claro… claro… ya es muy tarde»– dijo con Vanesa de la mano –ya hemos festejado bastante… ahora es tiempo de dar una alegría al cuerpo –

Entre despedidas y brindis, se dividieron. Lautaro y James fueron a sus cuartos, mientras que Roberto Lobos y Agustín se quedaron en el salón.

Sabía lo que vendría. Su esposa fue llevada de la mano de Roberto Lobos hacia el mismo cuarto donde por primera vez que la hizo mujer.

Al entrar en la habitación Cindy abraza a Agustín

Cindy – estas mejor? – pregunto preocupada mientras se sienta en la cama de sus padres donde en la habitación de lado

Agustín – no para nada –

Cindy – tranquilízate mi amor, no hay nada que puedas hacer, el se la va a coger y no va a pasar mas nada –

Agustín – pero no debería estar ella ahí –

Cindy – si ya lo se, pero ella decidió sacrificarse –

Agustín – y su le pega o le hace algo –

Cindy – no va a pasar nada, no seas boludo estamos al lado nosotros –

Agustín – y si le gusta –

Cindy – ¿Le va a gustar?… si, que no te preocupes de eso; como mujer te digo que Roberto Lobo se va a coger de lo lindo y seguramente ambos lo van a disfrutar mucho, por lo que no te rompas la cabeza con eso. Mañana será otro día y ella va a volver junto a vos como siempre. Ya déjalo suceder y no te enloquezcas…–

Cindy siguió hablando durante un tiempo más hasta que la angustia de Agustín va cediendo poco a poco. Las imágenes de ellos en el cuarto de al lado le venían como ráfagas de sensuales imágenes, aquello parecía irreal pero al sentir a mi espalda el pecho de Cindy que me había abrazado en un ánimo de consuelo. De pronto tuvo el valor de posar sus manos en sus piernas. Ella vestía con su conjunto de ropa interior blanco.

Cindy – Tranquilo nene… yo sé que queres hacerlo, pero le he prometido a tu mujer que no va a pasar nada entre nosotros… y bueno ella es quien me paga.–

Agustín – Pero si es por dinero…–

Cindy – No, no es por dinero… los vi y siento que lo que están haciendo es muy valiente y los admiro mucho… Y al igual que tu esposa no creo que sea buena idea el que nosotros tengamos sexo en este momento…–

Agustín – Pero… es que ella… no entendes, solo sos una… – se contuvo justo en el momento justo en el que iba a soltar una grosería tan grande como el dolor que sentía, y al final Cindy no se lo merecía.–

Cindy – ¿Qué soy? Una… – sonaba obviamente molesta, pero al final estaba enfadado y no medí mis palabras. – pues si lo soy, acaso no crees que me he dado cuenta; pero primero soy una mujer y también he estado enamorada… o acaso crees que soy extraterrestre y que por… no he conocido lo que es el amor antes… No seas boludo..–

Agustín – perdón no mereces… no tengo… no tenes la culpa de nada de esto, pero es que no me siento bien… Todo esto ha estado sobrepasándome.–

Cindy – Eso es justo el problema Agustín, no estás bien y puede que no tomes las cosas de la mejor forma o peor que no actúes con la suficiente cordura para darte cuenta que las cosas pueden agravarse mucho si no mantienes la calma. –

Agustín – Pero es muy difícil pensar claramente… –

Cindy – Justo por eso es que te detuve, coger ahora eso no es buena idea… eso sería una venganza y una infidelidad cariño… Y mañana es algo de lo que te vas a arrepentir y dañar más tu matrimonio… incluso más que lo que está sucediendo en el cuarto de al lado…–

Agustín – Está bien… ya entendí… déjalo… .. –

Se sentía ya sin fuerza, desecho la idea de tener algo con Cindy ya después de todo lo que le decía, donde era obvio que ella estaba mucho más centrada que el; pero de pronto una nueva estocada se le clavaba en mi pecho, haciendo crujir mi corazón y mi mente.

Sentado en la cama donde todas las tentaciones pudieran ocurrir, pensaba terminar ya con la media botella de licor que aún existía, pero de pronto el silencio se rompió con un ruido muy particular, de pronto pude escuchar el crujir de la cama del cuarto de al lado, seguramente producto del encuentro de las dos personas cogiendo.